Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón


Comparecencias - Otras Comparecencias

Comparecencia de la Federación Aragonesa de Municipios y Provincias al objeto de informar sobre la problemática suscitada en relación con la aplicación de la LOGSE.

Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón n°: 029 de Serie B (IV Legislatura)
Intervinienen: Bricio Manzanares, Luis - Rubio Ferrer, Felix - Caudevilla Arregui, Norberto - Abos Ballarin, Angela - Calvo Pascual, Marta

El señor BRICIO MANZANARES: Los ayuntamientos aragoneses, representados por la Federación Aragonesa de Municipios y Provincias, hemos solicitado, a voluntad propia, esta comparecencia ante la Comisión de Cultura para manifestar a los representantes del pueblo aragonés las inquietudes de los ayuntamientos en lo que respecta a la aplicación de la Ley Orgánica de Ordenación General de Sistema Educativo de nuestra Comunidad Autónoma.
Ante todas esas manifestaciones que han venido ocurriendo todos estos últimos días, de asociaciones de padres y algunos otros colectivos, los ayuntamientos no podíamos ser ajenos a esta problemática y teníamos que manifestar nuestra opinión al respecto.
En primer lugar, habrá que decir que la Ley, esta Ley denominada LOGSE, en absoluto es una mala ley. Nosotros, los ayuntamientos, habiéndola estudiado en profundidad, hemos llegado a la conclusión de que, como ley general, es una buena ley, pero lo que falla en este caso es la aplicación. Se ha venido diciendo que el intentar evitar que los niños vayan a estudiar el primer ciclo de secundaria a los institutos construidos al efecto es desvirtuar el contenido de la Ley, y nada más lejos de la realidad.
Si esta Ley tiene un principio filosófico claro es su propia flexibilidad, flexibilidad que le tiene que permitir adecuarse a las necesidades actuales y a las futuras. Esta flexibilidad tiene que permitir, evidentemente, adecuarla a las condiciones orográficas, climáticas, etcétera, de nuestra propia Comunidad Autónoma, condiciones que, en la Comunidad Autónoma de Aragón y en otras comunidades autónomas, aunque, en especial, en la nuestra, son sobradamente conocidas por todos.
Tengo que decir la Ley Orgánica General del Sistema Educativo es una ley cuya filosofía tenemos que compartir plenamente porque es una filosofía para dar una información suficiente, en calidad y cantidad, para todo el mundo, y esta filosofía hay que contemplarla en el marco de nuestras propias localidades, de nuestros ayuntamientos. Si ha de ser una ley para todos, tiene que ser en nuestras localidades, en el momento en que los niños tengan que desplazarse a otros sitios, estén cercanos o lejanos; si no, esta Ley habrá incumplido su principal objetivo, que es el de la igualdad.
Y, por supuesto, otro principio de la ley es el de la libertad. Permítasenos a los ayuntamientos ejercer este derecho de libertad para que nuestros niños se queden en nuestros pueblos, junto con sus padres, porque suelen ser los niños entre doce y catorce años, que suelen tener padres en torno a los cuarenta años. Es -quiero decirlo bien claro- nuestro único caudal para la permanencia de nuestros pueblos como núcleos de población y para evitar su despoblamiento.
En el momento en que los niños tengan que salir, los padres se van a tener que plantear si es oportuno desplazarse a vivir a esos centros de población en los que se les va a prestar los servicios y si son los padres los que se desplazan a los lugares de trabajo, dejando al niño, exento de riesgos en la carretea, en los centros escolares de primaria o de secundaria en esos núcleos de población. Y esto, a su vez, llevaría consigo la desaparición de los centros escolares de los núcleos pequeños porque, en el momento en que no haya niños, los centros escolares no tienen ningún sentido, a no ser que hagamos escuelas de adultos en todos los núcleos de población.
Por tanto, si los principios filosóficos de la Ley, que compartimos, son los de igualdad y libertad, esas dos razones son suficientes para que nuestros niños permanezcan de los doce a los catorce años.
Quiero decir también que se argumenta muchas veces -no sé si erróneamente, porque criterios hay para muchos gustos, tan científicos unos como los otros- dos tipos de argumentos -valga la redundancia- que para mí son contradictorios tal y como se formulan. En primer lugar, se habla de la socialización, y, en segundo lugar, se habla de la enseñanza práctica de las tecnologías.
En primer lugar, la socialización requiere no solamente el factor del contacto entre individuos de la misma cohorte, sino que también requiere el contacto con diferentes cohortes no ajenas a los núcleos sociales en los cuales el niño se ha desarrollado hasta el momento en que tiene que salir. Por tanto, si la socialización es un proceso continuo, porque lo es, que empieza a desarrollarse, a partir de los seis años, con su entrada en los centros educativos de primaria, y puede concluir en las fechas en que cada uno pueda considerar, habrá alguno que no llegue a socializarse jamás, si no, a lo mejor no existirían ni las cárceles. Pero este proceso dinámico y continuo no tiene por qué hacerse y yo creo que sufre un menoscabo si se hace fuera del núcleo en el que se ha convivido durante los primeros años de la vida.
En el momento en que esa socialización requiere un impulso más fuerte y una rotura de amarras con lo tradicionalmente tenido en casa o en el pueblo, es cuando se empieza a vencer lo que es el condicionamiento social y psicológico de la adolescencia, es decir, a partir de los catorce años, por término medio. Y todos sabemos que no podemos establecer entre catorce y quince años, si la adolescencia termina a esa edad o termina a los dieciocho años, es un proceso que cada individuo vive de una forma muy particular. Pero, bueno, en términos generales y como media, podemos decir que el proceso de romper amarras con la familia, de empezar a ser un individuo per se, de empezar a tener sus propios criterios y a desarrollarlos, empieza a partir de los catorce años. Pero no empieza a los doce. Por lo tanto, si la enseñanza secundaria obligatoria se ha dividido en dos ciclos, consideramos que se ha dividido precisamente por esa razón, si no, sería sólo un ciclo, sería de los doce a los dieciséis años, y no de los doce a los catorce, el primer ciclo, y de los catorce a los dieciséis, el segundo ciclo.
Por tanto, como consideramos que el proceso de socialización requiere el contacto con la familia y con los núcleos más próximos al individuo, siendo conscientes también de que exige que la cohorte sea bastante más amplia y que los niños entablen conocimiento, de unos a otros, con el mayor número de individuos, nosotros vamos a defender aquí, y estamos defendiendo en todos los foros, la construcción, donde no los haya, o la adecuación, donde los haya, de los centros rurales de innovación educativa.
Estos centros rurales creados en la provincia de Teruel han sustituido -valientemente y eficazmente, diría yo- al proceso de socialización que no se puede tener, en la medida en que todos consideramos que debe ser óptima, en los pequeños núcleos de población, y no solamente lo han conseguido ampliamente, sino que creo que mejoran ostensiblemente el proceso de socialización que debería ocurrir en los centros de secundaria, porque la convivencia es intensiva: se hace en régimen de internado, durante mes y medio al año, en períodos de quince días, y, el último período, de una semana al final del curso.
Este proceso de convivencia fortalece los lazos de unión, no solamente entre los escolares, sino entre los pueblos, porque el grado de convivencia que viven los padres, cuando van a visitar a sus hijos, en estos centros rurales de innovación educativa es mucho más fuerte que si no existieran estos centros. Por lo tanto, que no se hable de que va a sufrir alguna penalización el proceso de socialización si los niños no van a los centros de secundaria porque esto es diametralmente erróneo.
Respecto a la problemática que pudiera generar la enseñanza práctica de las tecnologías, la enseñanza práctica de las tecnologías es muchas veces no entendida o no querida entender, ni siquiera por los que se dedican a la enseñanza. La práctica, en teoría, no es un aprendizaje de nuevo, porque esto sí que lo hace la teoría, es un aprendizaje que sedimenta sobre un estrato ya consolidado, que es la enseñanza teórica. Esta enseñanza teórica, evidentemente, se produce con total garantía en los centros de primaria. También hay que decir, por si acaso se me olvida, que la enseñanza secundaria, obligatoria en su primer ciclo, es decir, el primer curso de enseñanza secundaria, baja un escalón con respecto a octavo de EGB en cuestión de contenidos; es decir, que un niño de octavo de EGB va a recibir más contenido que uno de primero de enseñanza secundaria obligatoria. Por tanto, no se nos puede hablar de enseñanzas o de áreas que van a sufrir un menoscabo en la calidad de educación porque esto no es cierto, a no ser que se quiera hablar de que los profesores de primaria no están cualificados para ello, cosa que no comparto ni muchísimo menos.
Pero volvamos de nuevo a lo que es la práctica. Yo tengo entendido que la práctica... Y soy una persona que tiene una amplia experiencia educativa, en el sentido de que me he pegado casi toda mi vida en las aulas, y sé que, en cuanto a talleres, en cuanto a seminarios, en cuanto a laboratorios, no es necesaria la permanencia continua del alumnado en estas aulas de enseñanza teórica; simplemente con que cumplan un objetivo concreto, es decir, unas determinadas horas en este tipo de instalaciones y que estas horas obedezcan a un currículum determinado en la enseñanza práctica de esa teoría, ya aprendida, que viene a representar en la ESO alrededor de setenta u ochenta horas por curso escolar, es suficiente.
En los CRIE -los Centros Rurales de Innovación Educativa, y me gusta decirlo porque hay gente que todavía no sabe lo que significa CRIE»-, en estos centros podrían darse las tecnologías durante dos horas diarias, con lo que, si hacemos la cuenta, en mes y medio nos salen ochenta horas, y con ochenta horas es suficiente, para el primero de enseñanza secundaria obligatoria y para el segundo es suficiente la enseñanza práctica que pueden recibir. Se pueden adecuar perfectamente, técnicamente es aceptable que en los CRIE haya este tipo de instalaciones, de hecho, las hay, y, si no las hay, se pueden crear con un mínimo coste. Por tanto, la enseñanza tecnológica, garantizada también.
¿Qué es, pues, lo que tenemos que garantizar en los escolares de nuestros pueblos para que su calidad de enseñanza sea equiparable a la del medio urbano? Yo, salvo que el profesorado no esté preparado, cosa que discuto, por lo demás, me atrevería incluso a decir que en los pueblos, que en los núcleos rurales, la calidad de enseñanza es superior a la del medio urbano. ¿Y por qué digo esto? Los que somos animales rústicos o rurales sabemos perfectamente que la naturaleza es un aula en sí misma y que la cantidad e impulsos educativos que genera en cada uno de los que allí vivimos es muy superior a la que pueda generar el medio urbano. Solamente voy a hacer hincapié en dos cuestiones que yo creo que son fundamentales. La protección del medio ambiente como enseñanza básica en las escuelas es casi innecesaria en el medio rural, prácticamente obligatoria en el medio urbano. ¿Por qué? Por el contacto con el medio, por ese aprendizaje que le da al alumno, y sabe ese alumno, porque, aparte, sus padres cuidan de que así sea, que es su medio, donde vive y el que tiene que proteger, a no ser que quiera eliminar el propio medio donde sobrevive. Por tanto, si tenemos en cuenta que la naturaleza es un área educativa que se enseña sola en el medio rural, que los procesos económicos del medio rural son también otra escuela, como son el área ganadera o las pequeñas industrias, el medio rural o la agricultura en el medio rural, es suficiente escuela muchas veces para aprender dinámicas de comportamiento que no se pueden generar en las ciudades. Las dinámicas de comportamiento han de ser permanentemente corregidas en el núcleo urbano y casi no necesitan corrección en el medio rural.
Por tanto, si, después de esta explicación de cuáles son nuestras ideas en torno a lo que debe de ser la calidad de enseñanza, no queda bien claro que la calidad de enseñanza queda plenamente garantizada en el medio rural, yo no sé qué más habría que decir.
Quisiera también -y para terminar ya- decir dos cuestiones. Primero, que no vamos a aceptar desde ningún punto de vista que, si, al final y a pesar de todo, nuestros niños tienen que salir de nuestros pueblos, vayan a ninguna casa de cultura habilitada como centro de enseñanza secundaria, por muy bien que se habilite. Si nuestros hijos salen, van a salir con todas las garantías, y, si no, no saldrán, y, si no, no saldrán.
En segundo término, el transporte. Todos conocemos la Ley Villar-Palasí, sabemos cómo se aplicó y sabemos lo que pasó en el período 1983-1984: que, dadas las deficiencias, los problemas que generaba y, por qué no decirlo, la cantidad de niños muertos en accidentes de autocar, se retiró y se desconcentró a los niños -salvo en algunas zonas, como es la provincia de Huesca, en la que siguen concentrados-, se desconcentró, además, alegando que el núcleo familiar era imprescindible para el proceso educativo. ¿Qué pasa, que entonces era imprescindible el núcleo familiar y ahora no? ¿Es volver a retomar otra vez la concentración escolar con los mismos errores?, porque son los mismos errores.
Hemos hablado de calidad de enseñanza, hemos hablado -y podemos seguir hablando- de áreas de enseñanza, y veremos que no sufren ningún menoscabo. Y ahora, como ayuntamientos, si tenemos en cuenta otros factores, aparte del de la despoblación, tenemos en cuenta el factor de culturización que tienen los profesionales o que desarrollan los profesionales de la educación en nuestros pueblos. No olvidemos las actividades extraescolares que en ellos se desarrollan, que, sin escuelas, sería imposible que se desarrollaran.
Este proceso educativo no solamente es para el niño, es también para el adulto. En el momento en que suprimamos las escuelas por falta de niños, porque se habrán ido los niños y, después, los padres, este proceso habrá concluido y nuestros pueblos habrán desaparecido, se diga lo que se diga. Aragón no es Andalucía, aquí los pueblos más grandes, considerados grandes, tienen seiscientos habitantes, estos pueblos en Andalucía son cortijos. Y en Andalucía se podrá aplicar la LOGSE -la LOGSE de esta manera-, en Aragón no se puede aplicar de la forma que se pretende.
Por lo tanto, pedimos a las Cortes aragonesas, como legítimos representantes del pueblo aragonés, que tomen en consideración nuestras posturas y que elaboren el documento que estimen más pertinente, para hacerlo llegar al Ministerio de Educación, con el fin de que se puedan atender nuestras necesidades, que consideramos tremendamente importantes y que, evidentemente, son el futuro de nuestros pueblos. Si los niños se van, nuestros pueblos desaparecen.
Y yo no tengo nada más que decir. Si alguno de mis compañeros quiere intervenir, que lo haga, y, si no, señor Presidente, concluyo.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Muchas gracias, señor Bricio.
Tenemos la mañana a base de batalladores.
El Diputado de la Chunta ha excusado su ausencia -no va a excusar su presencia- por tener que acudir a otros actos.
Señor Rubio, de Izquierda Unida, tiene la palabra.

El señor RUBIO FERRER: Gracias, señor Presidente.
A mí, realmente, lo que me parece más interesante de las comparecencias que vienen realizándose sobre el tema de implantación de la LOGSE es, efectivamente, ir conociendo la opinión de las personas que, en representación de sus diferentes entidades o estamentos, comparecen. Piden ustedes un documento elaborado desde las Cortes de Aragón o desde la institución correspondiente. Yo tengo que decirles, por si no lo sabían, que las Cortes de Aragón, en el mes de octubre, ya aprobaron un documento en la línea de que desde Aragón, y en atención a nuestra situación específica y a toda la problemática suscitada por la implantación de la LOGSE en el ámbito rural, desde Aragón, el Gobierno de Aragón y todas las asociaciones o entidades interesadas (como padres, sindicatos de profesorado, «apas», ayuntamientos, etcétera) pudiéramos, conjuntamente, tener la capacidad suficiente para que, antes de iniciarse el próximo curso, pudiéramos hacer desde Aragón una oferta, una propuesta, que podría ser coincidente o no coincidente con la del Ministerio de Educación y Ciencia, y pudiera debatirse en los términos que se creyeran oportunos.
Ese proceso es un proceso que ya se acordó, como les decía, en el mes de octubre, y sobre el cual yo, concretamente, que fui la persona que defendió esa proposición no de ley, he solicitado al señor Consejero una comparecencia para que nos dé cuenta de cómo lleva los trámites. Porque parecía oportuno, a mí me parecía oportuno, a la vista de la realidad, que desde Aragón pudiéramos tener una capacidad suficiente para plantear cuál es el sistema, cuál es el modelo, cuál es la red de centros, cuáles podrían ser los servicios que desde Aragón se reclamaran para concitar todo este tipo de necesidades a las que ustedes hacían referencia.
Yo, especialmente, voy a lanzarles cuatro o cinco interrogantes sobre la postura que ustedes están defendiendo, para que luego, en el turno de réplica, puedan contestarme, porque estoy interesado en conocer algunas de sus opiniones.
Como me ha ocurrido en otras ocasiones, yo parto de algunos elementos de comprensión evidente hacia lo que ustedes están planteando pero también de disconformidad con algunos otros. Yo creo que las escuelas no se suprimen porque los chicos vayan a otros sitios, sino porque no tenemos chicos: ese es el problema fundamental. Cuando entran uno o dos niños y salen, en octavo, siete, pues, claro, en un proceso muy pequeño, evidentemente, se nos vaciará. Por lo tanto, hay un elemento de desequilibrio territorial, un elemento de carácter económico, de carácter de desarrollo, fundamentalmente, pero es indudable también que hay que tener en cuenta cualquiera de los aspectos que puedan incidir negativamente sobre ese elemento.
Hablan ustedes de la necesidad de que el primer ciclo (doce-catorce) se mantenga en todos los pueblos. Yo quiero que me aclaren, si es posible, a continuación si eso sería con carácter voluntario o con carácter obligatorio, para todos o solamente para algunos, porque, desde el punto de vista de una buena planificación educativa, sí que nos interesaría saber en qué dinámica se entraría, porque quizás lo que podría ocurrir es que, en función de los años, pudiera haber discrepancias en esa planificación.
El Ministerio de Educación y Ciencia ha puesto en marcha en los últimos meses un sistema intermedio, que llama «secciones de secundaria», al que ustedes no han hecho referencia. Me gustaría que comentaran un poco también cómo ven ustedes desde su posición ese planteamiento de las secciones de secundaria.
En algunos momentos, cuando yo he tenido reuniones con las asociaciones de padres rurales, creo que, al elemento de los centros rurales de innovación educativa -que es un elemento que a mí me parece válido también y que yo conozco muy de cerca por diferentes circunstancias, no solamente por provenir de la provincia de Teruel, sino también por profesión-, le han puesto ciertas reticencias también. Lo digo porque a mí me parece un elemento valorable, y, coincidiendo con ustedes, con las asociaciones de padres rurales, en el tema del primer ciclo (doce-catorce), quizás este criterio de flexibilización, el que representan los CRIE, fuese un elemento en estos momentos no consensuado o no completamente con acuerdo en todo el mundo.
Y, por último, yo solamente quería comentarle que, cuando habla del tema de las tecnologías, no sé si lo que ha planteado es modificar el programa de enseñanza o simplemente adaptar y flexibilizar lo que viene allí. Y, por lo tanto, con esas cuatro o cinco cuestiones, yo, de momento, tendría suficiente para aclarar y conocer con más detalle su postura.
Muchas gracias.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Muchas gracias, señor Rubio.
¿Desea responder individualmente a cada compareciente?

El señor BRICIO MANZANARES: Mejor, porque, si no, nos vamos a liar.
Bueno, en primer lugar, voy a contestar al problema que plantea de que las escuelas se cierran por falta de niños. Evidentemente, se cierran por falta de niños. Con los niños que hay hoy en los pueblos, en el momento en que tengan que salir los de séptimo y octavo actuales, son dos niños menos por escuela. Muchas veces es suficiente para cerrarla porque ya no está la ratio que establece el Ministerio para el mantenimiento de la escuela, con lo que obliga a los demás niños a irse a otro centro escolar; eso, en principio. Pero es que el proceso que nosotros vemos más lesivo para los ayuntamientos o los municipios es que, en el momento en que salgan los niños, los padres les seguirán, y los padres son los que generan a los niños, es decir, son los que tienen los niños en los pueblos. Si los padres se van, los niños no se tienen en esos pueblos, se tendrán en otros.
Por lo tanto, se genera un círculo en el que el pueblo aparece en ese centro del círculo como único perjudicado de esa dinámica. Por tanto, no se van a cerrar las escuelas sólo porque los niños se marchen, sino porque detrás se van los padres, y si se va el núcleo, el único elemento dinamizador que tenemos en los pueblos, que es la gente joven, ¡adiós pueblos!
En segundo lugar: si lo planteamos con carácter obligatorio o con carácter voluntario. Yo creo que, a lo largo de la exposición, a veces se deja algún fleco sin contestar. Y es que yo he dejado bien claro que la libertad en esta Ley es parte imprescindible para poder entenderla. Y, haciendo uso de esa libertad, nosotros proponemos a los padres que elijan voluntariamente a qué centro quieren ir: si quieren ir a un centro de secundaria, establecido como centro de secundaria, o bien que sus hijos hagan el primer ciclo de la ESO en el pueblo. Que puedan elegir, en ningún caso deberemos obligarles a que permanezcan en el pueblo.
Respecto a las secciones de secundaria, no he hecho alusión a las secciones de secundaria porque para mí, al igual que para las «apas» rurales, al igual que para la inmensa mayoría de los que estamos en el pueblo, son institutos; sean secciones o no, son núcleos de población a los que van a acudir los niños que no son de ese pueblo más los de ese pueblo. Por lo tanto, nos da igual que sean secciones o institutos. ¿Que esa sección no va a tener lo que tiene un instituto? Eso es evidente, pero puede tenerlo, es simplemente cuestión de aportar los recursos económicos necesarios para que lo tenga.
Por tanto, yo no establezco diferencias entre secciones e institutos, si bien es verdad que las secciones están más próximas al alumnado que los institutos; un ejemplo: Alcorisa y Calanda, de Aguaviva y Más de las Mata, está bastante más cerca que Alcañiz, por referirme a Teruel, pero que no soluciona el problema. A nosotros nos da igual que nuestra gente se marche a vivir a Alcañiz, se marche a Calanda o a Alcorisa, nos da exactamente lo mismo, o a Más de las Matas. Nuestro planteamiento es que nuestro pueblo desaparece, sean secciones o sean institutos.
Respecto a los «críes». No sé la última reunión que se haya tenido con «apas», nosotros tuvimos una el otro día con las «apas» rurales de Huesca y de Teruel, que están totalmente a favor de los CRIE, no cómo están ahora, sino pensando que se pueden potenciar y se pueden adecuar a las necesidades educativas que nos impone la Ley. Por lo tanto, no creo que haya ningún tipo de problemas en lo que son asociaciones de padres, pueden paliarse los que haya con los ayuntamientos, por lo menos por lo que a nosotros respecta.
Y respecto a las tecnologías. Cuando yo hablo de tecnologías, hablo en términos generales, no particulares. Si simplemente miramos las áreas de la ESO, en el primer ciclo hay una lengua, que es la lengua castellana, más la materna, más luego una extranjera, y no dos, porque la segunda lengua extranjera es como optativa y casi siempre va a aplicarse en el segundo ciclo. Aquí pueden empezar el primer ciclo, pero va a ser difícil porque no va a haber profesorado; eso nos tememos, ¿no? Pero, de todas formas, esa lengua extranjera se puede aprender por medios audiovisuales perfectamente, complementados con una presencia física precisamente en esos «críes», y no creo que hubiera ninguna dificultad. La propia Ley establece que, para aquellas personas que no puedan acceder de presencia a los centros educativos, se establecerá un programa de educación a distancia. ¿Por qué no se establece aquí para enseñanza de esa segunda lengua extranjera -para quien la elija, porque es optativa-?
Respecto a la socialización como elemento dinámico que establece la Ley en primer ciclo y segundo de ESO, creo que he contestado ampliamente.
Respecto a la naturaleza y conocimiento del medio, creo que también he contestado ampliamente.
Respecto a la dimensión práctica de laboratorios, de talleres, de seminarios, creo que los «críes» pueden cumplir una función extraordinaria, mucho mejor que esos laboratorios en los institutos de secundaria, mucho mejor. Y no sé si con esto he contestado suficiente. Para terminar con lo que son las áreas de la ESO, en cuanto al instrumento de formación del deporte, hoy en día, en las comarcas aragonesas, todos tenemos un servicio comarcal de deportes; y, haciéndolo un poco más amplio y dotándolo de más medios, yo creo que quedaría ampliamente cubierto este tema.
No creo que me haya dejado más.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Muchas gracias, señor Bricio.
¿Partido Aragonés? Don Norberto Caudevilla, tiene la palabra.

El señor Diputado CAUDEVILLA ARREGUI: Muchas gracias, señor Presidente.
He de reconocer que comparto mucho de lo que he oído, sinceramente, más de lo que pensaba que iba a compartir, y, en este aspecto, con la autoridad que me puede dar el haber sido el primero que en esta cámara -y figura en los diarios de sesiones- habló de estas cuestiones. Cuando era Consejera doña Angela Abós, tuvimos una iniciativa parlamentaria para debatir ya la aplicación de la LOGSE -luego hará un año-, y recuerdo que dije entonces que iba a terminar con cuatro ruegos. Al MEC, al Ministerio de Educación, le decía: «La LOGSE, en el medio rural aragonés, debe tener, por las características geográficas y demográficas, un tratamiento especial: setecientos veintisiete municipios, un millón doscientos mil habitantes, de los cuales seiscientos mil están en Zaragoza, tremendos desequilibrios a lo largo de cuarenta y siete mil kilómetros cuadrados así lo requieren». Es decir, esto no es Murcia o Cádiz, dónde se puede aplicar de maravilla la LOGSE, que, efectivamente, no es nada malo, ahora ya todos, todos, vamos diciendo que tiene unas enormes partes positivas.
Esto es lo que hice en una primera aproximación. Dije: en Aragón va a haber muchos centros que no serán viables desde el punto de vista económico pero que tendrán que serlo porque, si no, Aragón no va a ser posible. Es decir, aquí va a haber muchos centros, no de dos vías, serán de una vía, serán con muy pocos alumnos, y habrá que tenerlos abiertos porque, si no, no va a ser posible, tal como nos decía, no tendremos pueblos con los marcos en que se fija la LOGSE para su aplicación.
Aquí no se van a cumplir, salvo en las capitales de provincia y en los entornos, no se van a cumplir, o en alguna comarca señera, no se van a cumplir casi en ninguna parte. Y, por eso, no vamos a decir que vamos a borrar Aragón del mapa. Y yo, incluso, dije: y no nos dé miedo decir que lo paguen, que lo paguen, porque si aquí pagamos excesos demográficos, y trenes de cercanías, y reconversiones navales, y aeropuertos, y no tenemos de nada de esto, ¿por qué los demás, con nuestro dinero -apunté-, por qué los demás, con nuestro dinero, van a decir que no es rentable un colegio en una zona que es un desierto demográfico? Si no es rentable, que no sea, pero tiene que estar, y digámoslo con voz alta: que lo paguen, nosotros pagamos otras cosas, los aragoneses, hablo como aragonés. Esto lo hice constar.
Una vez dicho esto, dije: que se aplique la LOGSE caso a caso, no sólo comarca a comarca, sino pueblo a pueblo, porque, desde luego, globalmente va a ser muy difícil. Y maticé, y luego me dirigía a los padres y les hacía un ruego: no generalicemos tampoco, tiene que haber casos en los que es posible aplicar la LOGSE, en los que el salir a los doce años va a ser menos traumático, más cómodo y mejor para todos que el empeñarnos en que esté en su escuela, o sea, esto tengámoslo en cuenta también. Que, por cierto, no se me interpretó muy bien cuando lo dije.
Dije también que, a lo que se llama internados, rotundamente, no, quizás por la experiencia de haber tenido tantos años, y, por supuesto, positiva... Yo no entiendo que, a esas edades, puedan marcharse de casa los críos a ningún internado. Los padres tienen a los críos para tenerlos en su casa.
Dije al Gobierno de Aragón que tenía la responsabilidad porque tenía la competencia de Ordenación del Territorio y un convenio firmado con el MEC que le autorizaba a influir en la planificación educativa y, por lo tanto, en el mapa escolar. Y aquí es donde viene el quid de la cuestión. Y yo dije: este mapa escolar es precipitado, este mapa no se ha pensado, y, sobre todo, se ha consultado muy poco, se ha hecho mucho desde despacho y con frías cifras y no se ha ido a los lugares adecuados. Pero esto tampoco tenía que rasgarnos las vestiduras, queda tiempo.
Yo pienso -y enlazo ya con lo que me ha dicho hoy- que el problema que subyace aquí es que hay que sacar a pequeños, que hay que sacar a nuestros hijos a los doce años, de doce a catorce años, fuera. Y estoy de acuerdo con algo que ha dicho: desde luego, para ir a casas de cultura que están peor que la escuela del pueblo que dejan, ¿cómo se justifica? ¡Si ya nos ha dado argumentos en los que, de resentirse la calidad de la enseñanza, nada! Más es, yo aún le brindo alguno -por si no lo tiene, tengo alguno más-, siempre y cuando me admita que no es generalizable, o sea, que va a haber casos en los que se va a poder aplicar. Pero, desde luego, sí que es cierto que se cierren escuelas porque en los pueblos funcionan con ocho alumnos, se van tres de séptimo y octavo, quedan cinco, ¡adiós escuela! Y, desde luego, es cierto, en Aragón se soporta más que se vaya el cura -dijo una vez- y que no sea escándalo, que que se vaya el maestro. Somos muy sensibles a eso los que hemos nacido en los pueblos, los padres, lo primero, enseñar, y marcha el padre detrás si no hay maestro. Es una cultura muy vieja y lo hacemos así.
Se cierran escuelas, se cierran, lo que no se puede es decirlo en abstracto, no se puede deformar, porque yo, la primera vez que lo oí, dije: no es cierto que al aplicar la LOGSE se desertice Aragón, Aragón está desertizado antes de aplicar la LOGSE. ¿Que se cierren escuelas por culpa de los centros de secundaria? No. Pero qué duda cabe de que -y estoy seguro- en Teruel y en Zaragoza, en muchísimas comarcas, vas a contar centros y hay un montón que cierran en el momento en que les quiten séptimo y octavo porque se quedan con cuatro alumnos, no porque haya ningún parámetro raro, no, no, que se quedan con cuatro, o sea, que es cierto.
Luego, yo dije: recorridos muy estudiados, es decir, que se muevan, que se muevan, que en todas partes se mueven, pero bien, ¿eh?, y a ver adónde. O sea, que estoy absolutamente de acuerdo con lo que ha planteado. Y, entonces, ¿qué pasa?, ¿que no hay solución? Yo creo que es un problema de diálogo, y, afortunadamente, hoy ya no hay que mirar a ningún responsable, la culpa... Basta aquí de culpas, miremos al curso que viene.
Organizar unos mapas escolares en una Comunidad como ésta es laborioso, penoso y difícilmente de dar gusto a todos, pero ¡manos a obra! Y, sobre todo, preguntemos mucho a los ayuntamientos, que creo que no se les pregunta, que no cuesta nada, que se hacen muchas encuestas, y no cuesta nada decir: ¿adónde querría usted llevar? Ya sé que en muchos casos habrá interferencias y no es posible, pero si hay una mitad de población que ya se encuentra diciendo «pues mira, a mí, hasta diez minutos no me importa ir al pueblo de al lado», y otros que no, pues ya veremos, estúdiese luego esa posibilidad de «sí» o «no».
En fin, aplíquese la LOGSE en Aragón de forma costosa, penosa y hasta cara económicamente si es que no queda más remedio. ¡Claro que hay que hacerlo así!, hay que hacerla específicamente, y eso que, mientras hablemos de estos problemas, no hablaremos de los contenidos. Cuando hablemos de los contenidos, también diremos que Aragón es específico y que hay que enseñar específicamente. Pero, fíjense, hasta hoy no planteamos ese problema, tengamos contentos a los padres, a los alumnos.
Y es cierto que en muchos casos los CRIE funcionan. Hay gente que puede preferirlo, pues hágase. No se trata de una LOGSE a la carta, se trata de una LOGSE a la carta para una población ínfima y que tiene unos derechos. Y, sobre todo, que, con la LOGSE en la mano, no se pueden justificar muchas cosas; que, ya digo, se pueden oír más argumentos aún de los que se han oído.
Yo no sé si he aportado algo, pero el resumen es: diálogo, paciencia, poca precipitación, menos estadísticas, que si no se aplica la LOGSE en el 90% y se aplica en el 75%, digo, si no se aplica en el 90% de la población o de los municipios y se aplica un 70%, hagamos el 70% bien y dejemos ese 35% que es problemático para estudiarlo, y estúdiese. Hablemos padres, ayuntamientos y todos, la comunidad educativa, toda la implicada, y malo será que en un 99% de los casos no se pueda llegar a acuerdos. Estoy seguro de que se va a poder.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Gracias, señor Caudevilla.
Señor Bricio.

El señor BRICIO MANZANARES: Deseo manifestar que estamos totalmente de acuerdo con lo que usted ha planteado. Por supuesto que la Ley no puede ser generalizable o generalizada en el medio rural, porque hay que atender cada caso en particular, y, evidentemente, habrá núcleos de población en los que no podrán permanecer los niños, eso es evidente, porque haya dos, haya tres, haya cuatro o haya cinco, y porque, de alguna manera, a lo mejor, los padres no quieran estar en esos núcleos de población, que sus hijos estén en las escuelas unitarias, y tengan que irse a un centro de secundaria. Pero, bueno, nosotros estamos siempre a lo que los ayuntamientos nos digan, aquí hemos venido en representación de ellos, y, por tanto, ellos son los que tienen la palabra. La unanimidad es que, de momento, los niños no salgan, y luego estudiar caso por caso.
El primer ciclo de ESO se quiere poner en marcha en septiembre de este mismo año, y lo que queremos nosotros es que se tarde un poco más para estudiar caso a caso; y, evidentemente, tenemos cuatro años para la aplicación de secundaria, según manifiesta la Ley. Por tanto, no tenemos por qué hacerlo el primer año.
Y respecto a que no se ha consultado a los ayuntamientos, pues, bueno, ha sido una de nuestras principales quejas. Los ayuntamientos en esto no hemos tenido ni voz ni voto, por tanto, no hemos podido manifestar si estábamos de acuerdo o no con esta forma de plantear la aplicación de Ley. Nos hemos enterado tarde y mal y se han dado casos, incluso, de que, cuando se ha ido a informar a los ayuntamientos, no se ha notificado al alcalde ni al ayuntamiento, para que estuviera presente, que se iba a informar, ni siquiera eso. Por tanto, ahora nos encontramos con una aplicación lesiva para nuestros intereses.
Esperamos que, de aquí al futuro, se nos informe y se nos tenga en cuenta.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Muchas gracias.
Por el Grupo Socialista, doña Angela Abós tiene la palabra.

La señora Diputada ABOS BALLARIN: Gracias, Presidente.
Bienvenidos los representantes de la Federación Aragonesa de Municipios a estas Cortes para plantear el problema de la implantación de la LOGSE en Aragón.
No es la primera vez que, en este tiempo, debatimos sobre la implantación de la LOGSE, yo creo que ha habido tres situaciones parlamentarias en las cuales hemos hablado de ello por diversas causas y a diversas instancias, y los grupos políticos siempre hemos manifestado nuestra posición al respecto. Y, por eso, consideramos desde nuestro Grupo que es bueno que menudeen, es decir, no por repetidas y no por debatidas ya, hay que dar por hecho que la solución está próxima, que creemos desde nuestro Grupo que no lo está. Y, por eso, vemos que es bueno que comparezcan aquí cuantos colectivos crean que tienen algo que decir y algo que aportar en relación con la problemática que todos compartimos.
Ayer mismo decía yo, en relación con otro debate, que era el de las transferencias universitarias, que había temas en Aragón, como es la implantación de la LOGSE -y lo citaba específicamente-, que tendrían que estar por encima de las tentaciones partidistas; es decir, es tan serio el problema que nos planteamos que, efectivamente, hay que plantear hacer un consenso generalizado y tratarlo como un tema de Estado en Aragón: el tema de la implantación de la LOGSE.
Dicho esto, le diría al señor Bricio que la primera parte de su intervención ha consistido en un análisis de corte más bien pedagógico y paternal, como si fuera padre de chicos, que seguro que lo es; y de corte pedagógico, sobre todo el de corte pedagógico, que en algunas de sus afirmaciones no compartimos pero que podemos debatir ampliamente.
Cuando yo pienso que la FAMP viene aquí y que los ayuntamientos vienen aquí a decir, por principio, que los chicos no salgan, y luego, ya veremos en cada caso, creemos desde nuestro Grupo que tendría que ser al revés: puesto que la Ley está considerada como una ley buena -lo ha dicho expresamente- y beneficiosa -y así es, incuestionablemente, para la población española en general-, en principio, que allí donde puedan, salgan, donde no haya conflicto. Es otro modo de plantear las cosas y creo que podremos coincidir.
En principio, donde todo el mundo lo vea razonable, donde no cueste, donde estén a diez kilómetros llanos, donde no haya por medio hielo, donde no haya por medio enfrentamientos, que en muchos casos funcionan entre las propias localidades, donde no haya todos esos elementos, que salgan, en principio, que salgan. Y que no salgan o que se procure que no salgan en aquellos casos en que, puestos todos los datos encima de la mesa, su salida crea problemas reales.
Porque es que, si no, señores representantes de la FAMP, aun diciendo que la LOGSE es una buena Ley, que comparten su filosofía, que están de acuerdo, si, como postura radical de la Federación, plantean algo radicalmente contrario, que es un muro que decide, en principio, que no salgan, nos parece que parten de una posición, digamos, poco constructiva, por decirlo de alguna manera. Y todos queremos lo mismo, todas las fuerzas de la cámara aspiramos a lo mismo: a llegar a un acuerdo. Porque, en Aragón, la aplicación directa, pura y dura de la LOGSE es conflictiva, lo reconocemos todos, y yo creo que también el Ministerio de Educación lo reconoce.
Miren ustedes, la LODE, que fue la otra Ley, la otra gran ley educativa, y la LOGSE han sido el producto del estudio pormenorizado y sistemático de todos los sistemas educativos de todas las democracias occidentales. Y se puede explicar bien claramente, porque el principio de todo esto fue una conferencia de los ministros y ex ministros de Educación de las democracias occidentales, incluido Estados Unidos, que aportaron su propia experiencia, con territorios parecidos, diferentes, rarísimos: desde escuchar al Ministro belga -que hasta cuarenta años después no han podido constatar en Bélgica qué resultados había dado una modificación del sistema educativo, hasta cuarenta años después- hasta entender que en países montañosos y fríos, como eran algunos de ellos, era difícil llegar con igualdad de oportunidades a todos los territorios. Por lo tanto, la LOGSE es la consecuencia del análisis, pretendiendo evitar los conflictos que han creado.
Y como toda Europa tiene sistemas educativos que han sobrevivido, menos en el Reino Unido, a los distintos gobiernos y a las distintas ideologías, con leves modificaciones, valdría la pena pensar que sus sistemas educativos tienen una tradición y una adecuación que conviene valorar. Sólo en el Reino Unido se hizo una modificación brutal del sistema educativo, y ahora el propio Gobierno conservador está recuperando algunos de los planteamientos que se desecharon en un momento determinado.
Por lo tanto, yo les pediría, como representantes de la FAMP, que, a su vez, piden flexibilidad para la implantación de la LOGSE, una postura más flexible, menos radical en el análisis de la situación para Aragón.
No vamos a entrar en el tema de la socialización, que se socializa igual fuera del núcleo, sólo se le arranca cinco horas, que no es lo mismo que si no vuelve a dormir a casa; depende, según en qué casos. Que con la Ley 70, señor Bricio, se les internaba, que no es lo mismo, se les internaba a los seis años. No estamos hablando de eso, la Ley 70 sí que fue dura, que en la provincia de Huesca se cerraron ciento setenta y tres escuelas, pero se les internaba a los seis años. No hagamos un drama porque, a los doce, el chico, donde no cree problemas, salga cinco horas de casa, que vuelve a dormir a casa, que vuelve por la tarde, que está con su familia, que no se va, aunque ya reconozco que en algunos casos habrá que internar, eso es evidente, y sobre todo para los bachilleratos.
Es verdad que la naturaleza y el medio rural son escuela de vida y es verdad que el transporte tiene que ser mejorado. Todo lo que ustedes dicen en cuanto a la presencia de los profesionales en los pueblos es determinante, y compartimos muchas cosas de las que dicen, pero nos asusta un poco, de cara a ese consenso que necesitamos alcanzar, que la FAMP, como institución, se lo plantee de una forma tan exigente, por decirlo de alguna manera.
Hay que conciliar posturas, tenemos que conciliar posturas, y, de hecho, el Ministerio ya ha cedido, es que ha tenido que venir aquí un ministro y decir: lo que decíamos que era posible, pues ya vemos que no. Recuerden ustedes las declaraciones, al principio del curso, del propio director provincial de Educación diciendo: se implantará y luego habrá que crear secciones, que en este momento ya casi tenemos definidas. Algo valdrán, las secciones ya van a existir, ya es un avance, los CRIE modificados valdrán también, a lo mejor, en su momento, los CRIE valen también como solución, hay que buscar soluciones intermedias y de acercamiento.
Nosotros hemos pedido en estas Cortes la creación de una comisión especial de estudio precisamente para llegar al consenso con todas las fuerzas interesadas, no solamente con las fuerzas políticas aquí presentes, para la implantación de la LOGSE en Aragón.
Y yo sólo quiero hacerles una pregunta de cara a matizar esa posición tan dura que me parece que mantiene la FAMP en este momento como representante de los ayuntamientos, no vaya a ser que haya muchos ayuntamientos que al final digan: oiga, que a mí me va muy bien con esa solución, que yo estoy bien y los padres de este ayuntamiento, también, dejando a los chicos ir y volver. ¿Ha cuantificado la FAMP el número de lugares en los cuales la aplicación de la LOGSE, pura y dura, crearía conflicto? Porque, si sabemos cuántos y dónde, a lo mejor estamos en el camino de encontrar las soluciones.
Pero -con esto termino- se legisla pensando en el bien común, y la aplicación de las leyes, la aplicación concreta, casi siempre trae algún perjuicio o desacuerdo entre los que la reciben, pero la ley, la ley globalmente, es la que prima, y las posturas, las que lo matizan, y no al contrario.
En ese sentido, pues, bueno es que esté aquí la voz de los ayuntamientos para decirnos cómo de grave es el problema.
Muchas gracias, Presidente.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Gracias, señora Angela Abós.
Tiene la palabra el señor Bricio.

El señor BRICIO MANZANARES: Vamos a ver, por contestar a la pregunta que se nos ha formulado, en lo que se refiere a cuantificar los conflictos, nos vemos incapaces de cuantificar o de saber dónde se va a originar el conflicto. Lo que sí sabemos es la cantidad de ayuntamientos, aproximadamente -porque no todos se han manifestado- que no están de acuerdo. Y le puedo decir que, del 99% de los ayuntamientos de núcleos de población menores de mil quinientos habitantes (es decir, elimine usted dónde van secciones de institutos o institutos), ninguno o casi ninguno está de acuerdo con esto: en la mayoría de los ayuntamientos aragoneses.
Le voy a decir una cosa: la propuesta de los ayuntamientos que se hizo en la FAMP fue aprobada por unanimidad de la comisión, en la cual el 60% de los miembros son de ayuntamientos que tienen instituto, y fue aprobada por unanimidad. No obstante, en la última comisión ejecutiva solicité de nuevo el apoyo de toda la comisión, y de nuevo se reiteró este apoyo a esta postura.
Y ¿por qué esta postura tan radical de los ayuntamientos, que llama un poco la atención?, porque los ayuntamientos aragoneses en modo alguno somos radicales, porque conocemos nuestras dificultades y sabemos que se solucionan con el diálogo y que se solucionan intentando encontrar una vía que sea aceptable por todo el mundo. Pues, simplemente, como posición a la postura tan radical que se ha mantenido desde las direcciones provinciales, desde las tres direcciones provinciales y la Delegación del Gobierno en Aragón. La postura fue, radicalmente, tal y como se manifestó, que los niños tendrían que salir y que no había nada que hablar sobre ese tema. Entonces, ante esa posición, los ayuntamientos no podíamos tomar otra, no nos dejaron sino otra salida de la misma radicalidad. Ojalá hubiera habido en esa reunión un principio de acuerdo o un principio, simplemente, para poder sentarnos a hablar posteriormente sobre este tema, sobre los niños de los doce a los catorce años, y no de otros, porque esta es la necesidad más acuciante que tenemos los ayuntamientos.
Evidentemente que los ayuntamientos hablaremos de educación también a partir de ahora. Creo que hemos sido culpables de no haber querido tomar el toro por los cuernos en los temas educativos, pensando que era competencia solamente de la Administración -la Administración central, me refiero-. Y no es cierto, es competencia de todo el mundo, incluidos los ayuntamientos, los padres, la Administración central, la Comunidad Autónoma, sectores sociales, etcétera, etcétera.
Por tanto, nuestra radicalidad está en función de esa radicalidad manifestada por la Administración y variará en el momento en que encontremos una puerta o un agujero por dónde introducirnos para poder hablar de este tema. Hasta ahora, no lo hay.

La señora Diputada ABOS BALLARIN: Que ya ha cedido.

El señor BRICIO MANZANARES: Hombre, ha cedido en la cuestión de lo que son las secciones, que sólo favorece a aquellos pueblos que tienen la sección, que están en Teruel, me parece, porque no tengo los datos. En Teruel hay cuatro secciones, cinco secciones y nueve institutos, el resto, no.
Ojalá la Administración hubiera tenido con nosotros otro comportamiento. A lo mejor no estábamos ni siquiera compareciendo ante ustedes aquí, estaríamos negociando para encontrar una solución lo más pronta posible.

El señor Vicepresidente (ARTIEDA GARCIA): Gracias, señor Bricio.
Tiene la palabra el Grupo Popular.

La señora Diputada CALVO PASCUAL: Gracias, señor Presidente.
En primer lugar, quiero dar la bienvenida, desde este Grupo Parlamentario Popular, a la representación de la FAMP en esta Comisión de Educación y Cultura, y, como no podría ser de otra manera, quiero hacer algunas consideraciones sobre el tema que a todos nos ocupa y nos preocupa.
En un ámbito geográfico social, como es el nuestro, caracterizado, como ya se ha dicho, por una constante despoblación, donde es difícil mantener las escuelas abiertas porque a duras penas se reúne el mínimo de alumnos necesarios para ello, con municipios en ocasiones dispersos y muchas veces lamentablemente comunicados, nos parece francamente desaconsejable trasladar diariamente a los alumnos de doce a catorce años, e incluso llegar a internarlos, porque dicha medida supondría la muerte progresiva de nuestros pueblos, además del problema que supone para los propios alumnos el desplazarse diariamente, tanto por el riesgo como por la pérdida de tiempo.
Porque, aunque se plantea un límite de treinta minutos o de treinta kilómetros, la realidad es que en un mismo autobús se traslada a alumnos de diferentes pueblos, con lo cual el recorrido se amplía, y al margen también del problema que puede suponer la convivencia en un mismo centro de alumnos de tan diferente edad.
Parece ser que, en aras de la tan traída y llevada calidad de la enseñanza, la posible escolarización de los alumnos en un municipio próximo, que la Ley de Ordenación General de Sistema Educativo establece en su artículo 65.2 como una medida de carácter excepcional, pretende aplicarse en nuestra Comunidad Autónoma, y principalmente en la provincia de Teruel, de una forma casi generalizada.
Desde el Grupo Parlamentario Popular consideramos que se debe flexibilizar el proceso de aplicación de la LOGSE en nuestra Comunidad Autónoma, que debe acercarse la LOGSE al medio rural, adaptándola a las peculiaridades de nuestro contexto geográfico, social y demográfico, y así lo reflejábamos y lo poníamos de manifiesto en la enmienda de modificación que se presentó a la proposición no de ley que presentó en su momento Izquierda Unida.
Como ya manifestamos en esta misma Comisión con motivo de la comparecencia de la Federación de las «apas» rurales, creemos necesario un amplio debate en torno a esta cuestión, debate al que ha contribuido su comparecencia en esta casa, y cuyas inquietudes recogemos y compartimos totalmente.
Nada más. Gracias, Presidente.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Gracias.
Señor Bricio.

El señor BRICIO MANZANARES: Cómo es lógico contestar a todos los Grupos, también lo voy a hacer con el Partido Popular, aunque no se me ha manifestado ninguna pregunta en concreto.
Voy a leer textualmente lo que dice la Ley para dejar bien claro que la Ley permite lo que nosotros estamos planteando. La Ley dice: «La Ley contiene suficiente flexibilidad como para aspirar a servir de marco a la educación española, siendo capaz de asimilar las reorientaciones que puedan aconsejar la realidad». Es evidente que la Ley, en su exposición de motivos, manifiesta qué es lo que se puede hacer o cómo se puede desarrollar.
Respecto al transporte, como tema que yo creo que es fundamental -y creo que es la preocupación de la inmensa mayoría de los padres-, la triste experiencia de la Ley Vidal-Palasí -con algunos muertos más en los autobuses escolares y la falta de garantía que hoy, desgraciadamente, tiene este tipo de transporte, porque no olvidemos que no solamente es el factor mecánico el que hay que tener en cuenta, sino el factor humano, que es muy difícil mantener unos cauces de fiabilidad- es lo que nos hace pensar que, cuántas más horas estén en los autobuses nuestros niños, mayores posibilidades tienen de fenecer en un accidente de tráfico. Que no es lo mismo, porque también se ha argumentado con el transporte escolar de las ciudades. El factor de riesgo en las ciudades es infinitamente inferior al de los núcleos de población, no de siniestrabilidad, sino de muerte en accidente, puesto que en las ciudades es casi imposible que se produzca este hecho, mientras que un accidente en el medio rural suele tener como consecuencia la muerte de bastantes niños de esos autobuses.
En cuanto a la posibilidad de que este transporte se realice en condiciones y adecuadamente, yo creo que todas las administraciones públicas somos conscientes de que vamos a hacer todo lo humanamente posible para que esto sea así, pero el riesgo jamás lo podemos eliminar. La única forma de eliminar el riesgo del transporte es no teniendo transporte. Por tanto, si nuestra postura se radicaliza un tanto en este sentido es porque queremos agotar todas las posibilidades para evitar el transporte, y, si no hay remedio, que se trasladen los niños, pero siempre y cuando no haya más remedio.
Nosotros no hacemos un planteamiento de que, a costa de todo, los niños no salgan de los pueblos. Nosotros -y yo creo que en esto hemos sido ejemplares, puesto que otras asociaciones no lo han hecho- hemos hecho un planteamiento en el que, a costa de la calidad educativa, no: la calidad educativa por encima de todo. Pero creo que hemos demostrado -y, si es necesario, traeremos aquí los técnicos suficientes- que esa calidad educativa no se menoscaba con la permanencia de los niños en los núcleos rurales.
Por tanto, si evitamos el factor de riesgo, que es a lo que me refería con respecto al transporte, mayor tranquilidad para los padres; y hablando solamente de transporte y no de permanencia de esos núcleos rurales y de la despoblación a la que he aludido antes.

El señor Presidente (CONTIN PELLICER): Muchas gracias, señor Bricio.
¿Desean abrir un nuevo turno?
No habiendo más asuntos que tratar, agradecemos la comparecencia de los representantes de la Federación Aragonesa de Municipios y Provincias.

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