Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón
Comparecencias - De Consejeros de la DGA - Ante el Pleno
Comparecencia de la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales para informar sobre el plan del Gobierno de Aragón y de las medidas que piensa adoptar para actuar contra la pandemia con garantías legales y constitucionales a partir del 9 de mayo, fecha en la que decae el estado de alarma declarado por el Gobierno de la nación.
Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón n°: 041 de Plenos (X Legislatura)
Intervinienen: Vaquero Periánez, María Del Mar - Pérez Esteban, María Teresa - Sanz Remón, Álvaro - Peirat Meseguer, Esther - Morón Sanjuán, Santiago - Lasobras Pina, Isabel - Cabrera Gil, Itxaso - García González, Beatriz - Villagrasa Villagrasa, Darío
El señor PRESIDENTE: Como viene siendo habitual, las votaciones se harán al final de las jornadas. Con lo cual, continuamos con la comparecencia de la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales, a petición del Grupo Parlamentario Popular, para informar sobre el plan del Gobierno de Aragón y de las medidas que piensa adoptar para actuar contra la pandemia con garantías legales y constitucionales a partir del 9 de mayo, fecha en la que decae el estado de alarma declarado por el Gobierno de la nación.
En primer lugar, señora Vaquero, tiene la palabra en nombre del Partido Popular.
Comparecencia de la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales para informar sobre el plan del Gobierno de Aragón y de las medidas que piensa adoptar para actuar contra la pandemia con garantías legales y constitucionales a partir del 9 de mayo, fecha en la que decae el estado de alarma declarado por el Gobierno de la nación.
La señora diputada VAQUERO PERIÁNEZ: Gracias, señor presidente.
Buenos días, señorías.
Consejera, ¿qué va a pasar a partir del día 9 de mayo en Aragón? ¿Sería usted tan amable de explicar ante esta cámara qué es lo que piensan hacer? ¿Bajo qué amparo legal van ustedes a aplicar medidas que puedan afectar a la limitación de derechos fundamentales de los ciudadanos?
Mire, estos días de atrás hemos oído diferentes mensajes, difusos, equívocos, e incluso con titubeos. A usted le hemos visto ya recientemente en una entrevista en televisión. Ayer dieron ustedes una rueda de prensa antes de esta comparecencia, pero nosotros hemos pensado que es aquí, en las Cortes, con un Diario de Sesiones, donde usted tiene que venir a contar qué va a hacer el Gobierno.
Probablemente usted no se quisiera anticipar a sí misma en un nuevo episodio de vulneración de derechos fundamentales, algo a lo que usted y su Gobierno pues están ya muy acostumbrados y han batido un diabólico récord. Usted, concretamente. Probablemente usted como gobernante aspire o tenga entre sus objetivos el que aquellas decisiones que tomen vulneren derechos fundamentales y sean tumbadas por los tribunales. Le tengo que decir que en eso usted es infalible, es la mejor y es insuperable.
Mire, nosotros pensábamos que esta situación era fruto de ese furor con el que ustedes ejercen la acción del Gobierno, que la ejercen como una apisonadora que pretende inhabilitar a los ciudadanos, devolverles a la infancia y arrinconarles ante una situación de miedo, engañándoles y haciéndoles creer, bajo la excusa de proteger su salud, que solamente pueden elegir entre la vida o la libertad.
Nosotros pensamos que esto es fruto de ese modelo de sociedad fracasada a la que ustedes aspiran y que quieren hacer y que quieren imponer a la sociedad, pero, mire, afortunadamente, cuando pretenden someter a la sociedad a ello siempre hay alguien, unas veces los ciudadanos, otras veces los tribunales, que les llama la atención. Pero no, esto es mucho más. Este Gobierno, la aspiración de este Gobierno autonómico es mucho mayor, tiene aspiración de ser algo más que un Gobierno autonómico, tiene la aspiración de ser un Gobierno independiente, independiente de la ley, independiente de los jueces, y un gobierno contrario a los anhelos y al respeto que los ciudadanos han depositado en las instituciones.
Mire, señora Pérez, esta ley, esta herramienta jurídica que permanentemente han dicho que tiene el Gobierno y que han tratado de pasear por toda España, por todas las comunidades autónomas, a pesar de que ninguna, por algo será, ha adoptado un instrumento similar, es inconstitucional. Esta ley es inconstitucional y esta ley [rumores]… Al tiempo. Todo llegará, señor Guillén. Todo llegará, señor Guillén. Por suerte, la democracia es muy fuerte y ustedes no se van a escapar del control judicial. Todo llegará, señor Guillén.
Como yo le decía, esta ley es inconstitucional y esta ley es el ejemplo del deterioro al que ustedes han llevado a las instituciones o quieren llevar a las instituciones. Es el ejemplo del deterioro de este Gobierno, que, una vez más, como está acostumbrado, falta a sus compromisos. Es el ejemplo del querer esparcir permanentemente las responsabilidades para no asumir ninguna culpa, o, lo que es lo mismo, querer esparcir la culpa para no asumir responsabilidades. Es el ejemplo de la voluntad de deterioro de las instituciones.
Mire, señora Pérez, probablemente, usted hará lo que suele hacer su Gobierno cuando se le piden explicaciones y cuando no quieren darlas. Usted subirá aquí y empezará con la retahíla: el Partido Popular es malo, el Partido Popular crispa, el Partido Popular tiene la culpa de todo; pero ya le digo que esa no es la opinión más extendida estos días, sobre todo si tenemos en cuenta lo que han dicho los ciudadanos en la primera ocasión que han tenido de hablar después de esta crisis sanitaria [aplausos]. Será su opinión, pero no la de los ciudadanos. Afortunadamente, el Partido Popular ni crispa, ni es malo ni tiene la culpa de todo, es la alternativa a un modelo de fracaso, y ya lo dicen los ciudadanos [aplausos].
Pero, mire, está la hemeroteca y por eso es bueno que usted hoy viniera aquí y subiera a esta tribuna y quede reflejado en el Diario de Sesiones. Está la hemeroteca, y mi grupo parlamentario, mi partido, tanto en el Congreso de los Diputados como también ante el Gobierno de la nación, ha estado permanentemente haciendo propuestas. Les ha ofrecido soluciones para llevar a cabo medidas y reformas legislativas que permitieran tomar decisiones para salvar vidas, y así hubiéramos evitado imponer durante meses, durante meses, en una situación excepcional, un estado de alarma y hubiéramos evitado que un Gobierno como este hubiera querido cuestionar el marco legal, institucional y constitucional a través de su ataque hacia el poder judicial y a los jueces.
Hubiéramos propiciado esos cambios legales, pero lo mismo ha ocurrido en Aragón. La misma postura ha tenido el Partido Popular en Aragón y mi grupo parlamentario. Ahí está esa Mesa de la reconstrucción. Ahí están esas numerosas propuestas e iniciativas que los grupos que apoyan al Gobierno reiteradamente han rechazado. Eso sí, tarde y mal muchas de esas propuestas se han reformulado, se han reinventado y se han llevado a un consejo de gobierno para luego aplicarlas tarde y mal. Eso sí, con el correspondiente anuncio.
Insisto, muchas propuestas del Partido Popular, muchas manos tendidas del Grupo Parlamentario Popular, numerosas aportaciones para trabajar codo con codo en la lucha contra esta pandemia. Pero ustedes la lucha contra la pandemia la han tomado de otra manera. La han tomado como una batalla política contra el Partido Popular, como una pelea legal con el poder judicial, y, de alguna manera, tratando también de enfrentarse al conjunto de la sociedad, escondiéndose tras las restricciones, cuando no han sabido garantizar ni su seguridad ni su libertad.
Mire, señora Pérez, la pandemia ha sido una experiencia terrible, una experiencia terrible sobre todo para las víctimas que han perdido su vida, y que hoy aquí hemos vuelto a recordar. Una experiencia terrible para las familias y para todas las personas que han perdido a un ser querido. Y una experiencia terrible para los gobiernos que han tenido que ejercer esa responsabilidad de tomar medidas. Yo eso no se lo niego. Eso no se lo puede negar nadie, pero desde aquí les hemos ofrecido ayuda, les hemos ofrecido medidas para superarla, para afrontarla, para gestionarla y para trabajar conjuntamente en ello, y ustedes no las han aceptado, y le digo una cosa, señora Pérez: mi grupo parlamentario no va a participar, no va a avalar, no va a refrendar ni va a dejar de denunciar la aplicación de esta ley, sobre todo, en lo que se refiere al poder judicial.
Porque le digo una cosa, señora Pérez, le digo una cosa, y es que, desde las instituciones, desde las instituciones, el Partido Popular no está en la institución del Gobierno... Usted dirá que menos mal, menos mal. Pues sí, mire, menos mal porque probablemente le aseguro que usted se hubiera empeñado más con su activismo y hubiera trabajado más desde la oposición que lo que ha hecho desde el Gobierno. Se lo aseguro. [Aplausos].
El Grupo Popular, el Partido Popular no está en la institución del Gobierno, pero sí está en esta institución, sí está en el Parlamento, y le aseguro que, desde aquí, aunque nos quedemos solos, no vamos a contribuir al deterioro al que ustedes quieren llevar a las instituciones.
A ver qué nos cuenta usted, señora Pérez, de esa herramienta jurídica que dice que tienen, una herramienta jurídica cuya aplicación supone claramente la imposición de un estado de alarma larvado, activable automáticamente por una norma que no es suficiente y por claras razones competenciales, formales y sustantivas. Una herramienta que claramente tiene ya, incluso antes de aplicarse, una cuestión de constitucionalidad. Una cuestión de constitucionalidad que aún no ha sido resuelta, pero que ya la tiene. Una treta jurídica porque ustedes no han sabido buscar otra solución ni ofrecer otra garantía a los aragoneses.
Por eso, señora Pérez, después de los mensajes confusos, después de la incertidumbre, después de la inseguridad jurídica que en estos momentos tienen todos los aragoneses por tener un Gobierno que ha sido incapaz de ofrecer soluciones, de ofrecer certidumbre, dígame [corte automático del sonido]… bajo qué amparo legal van a adoptar ustedes medidas que supongan una limitación de los derechos fundamentales de los aragoneses.
Muchas gracias, señor presidente. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Vaquero.
Señora consejera.
La señora consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales (PÉREZ ESTEBAN): Señor presidente, señoras y señores diputados, señorías. Señora Vaquero.
Me van a permitir que inicie con un reconocimiento de corazón, de sentirme orgullosa de este Parlamento, por cierto, del que soy parte, por la iniciativa anterior, por esa ponencia para revisar el modelo de residencias [aplausos], que creo que es un ejemplo, un nuevo ejemplo de compromiso del gobierno de los aragoneses en su máxima representación, que es este parlamento, y sentirme también muy orgullosa por la aprobación de una ley, la única ley, la Ley 3/2020, que nos permite precisamente, en una situación en la que todo el país cambia de situación al decaer ese estado de alarma, nos permite con seguridad y con certeza seguir protegiendo la salud de los aragoneses.
Y, señora Vaquero, fíjese, le vuelvo a decir: es que es muy previsible. Yo decía: quizá lo que le interesa a la señora Vaquero es entrar en el fondo. Si le preocupa la salud de los aragoneses y de las aragonesas, que entiendo que sí, en, bueno, pues cómo vamos a seguir protegiendo precisamente, qué medidas vamos a tomar, qué tipo de aforos… Lo debería de saber porque usted conoce o debería de conocer la ley, pero es tan previsible que ya sabía yo, son tan excesivos, tan intensos, les falta hasta moderación al mostrar sus emociones, y sabía que iba a venir usted aquí llena de esa ilusión, de esa adrenalina por el éxito de Madrid. Oiga, pero nosotros, nosotros no les dijimos nada cuando prácticamente fueron un partido extraparlamentario en las elecciones catalanas. Ni lo vamos a hacer, porque, señora Vaquero, lo que nos ha ocupado al Gobierno de Aragón, en este caso, y tengo que decirle al conjunto de los aragoneses, tanto en las elecciones catalanas como las madrileñas, con el ruido mediático, es trabajar, pillarnos trabajando, trabajando por la salud, en este caso, que es la prioridad de los aragoneses. [Aplausos].
Y, claro, dice entre, entre usted. Es que, señora, dice «hemos hecho propuestas»; pero ¿qué propuestas cogemos? ¿Las de la señora Díaz Ayuso, señora Vaquero? ¿Las de Feijóo? ¿Las de Mañueco? ¿Las de Juanma Moreno, que están diciendo que quieren ese estado de alarma que les da cobertura para seguir estableciendo medidas, porque ellos no tienen una legislación que lo pueda hacer? ¿Qué Partido Popular representa el Partido Popular de Aragón, señor Beamonte? Que sale la señora Vaquero, ella, envalentonada, pero no sé realmente qué Partido Popular representa, señor Beamonte, en Aragón.
Fíjense, insisto, nos sentimos orgullosos y nos sentimos orgullosos de este parlamento. Es que ha estado hablando usted, señora Vaquero, como si fuera una iniciativa de lo [rumores]... Dice usted, señora Vaquero, como si fuera una iniciativa del Gobierno, pero es que lo que vamos a aplicar es el desarrollo de una ley que emana de la voluntad popular representada en este parlamento, un decreto ley que se registró en octubre, señora Vaquero, viendo la necesidad precisamente de una inexistencia de amparo legal a nivel nacional, y tuvimos que, bueno, pues junto con la Ley básica de Sanidad del año ochenta y seis, hicimos un decreto ley en octubre que fue aprobado, por cierto, por seis grupos de este parlamento, con la abstención del Partido Popular y con el voto en contra de Vox, que nos tiene acostumbrados en un negacionismo que a veces es algo esquizofrénico también, y que los grupos que apoyamos al Gobierno, los grupos que apoyamos al Gobierno decidimos, y que también fue apoyado por Ciudadanos, y por Izquierda Unida, tramitarlo como proyecto de ley, precisamente para que se pudieran incorporar aquellas cosas que tanto los partidos políticos como el trámite de audiencia podían incorporar para mejorar esta ley, para que esta ley fuera de todos los aragoneses.
Y le digo, señora Vaquero, usted legitima mucho los discursos. Dice: el Diario de Sesiones, el acta… Está muy bien, pero las leyes realmente son las que hacen posible precisamente el cumplimiento de esos derechos que usted dice. Y esa ley fue aprobada, señora Vaquero, por más del 71% de esta cámara, es decir, por más del 71% de los aragoneses y las aragonesas. Claro, ustedes, cuando no están de acuerdo, lo único que hacen es desgastar y deslegitimar.
Sigo, señora Vaquero. ¿Qué es lo que, en este momento…? Si no cambia nada, va a decaer el estado de alarma el próximo domingo ya para entendernos, y ¿qué es lo que nosotros hemos hecho? Nunca hemos rehusado la responsabilidad que tenemos como Gobierno. Creo que soportamos cualquier comparación, además de someternos al control de la oposición y de este parlamento, cuando había sesiones y cuando no. No hemos rehusado nuestra responsabilidad, no hemos buscado culpables, señora Vaquero. Hace mucho que somos plenamente conscientes de que lo que tenemos que hacer es hacer uso de nuestro autogobierno, de autogestionarnos con las capacidades, los instrumentos que están a nuestro alcance. No estamos buscando culpables para polarizar, para crispar, como hacen otros. Intentamos buscar soluciones en un momento de extraordinaria dificultad en el que la vida está en juego.
Hemos hecho catorce decretos, cuarenta y cinco órdenes relacionadas con el coronavirus, y agradezco aquí, en este momento, el esfuerzo legislativo de los servicios jurídicos y de los servicios en el Departamento de Sanidad, que, desde luego, llevan durante muchísimos meses de manera intensa intentando regular precisamente para proteger la salud.
Castilla y León ha aprobado cincuenta y ocho acuerdos, treinta y dos órdenes, doce resoluciones, doce decretos leyes. Andalucía tiene veintiuna páginas en las que compilan todas las órdenes, todos los decretos que han hecho precisamente para regular. Es lógico que cada comunidad autónoma hayamos tenido que ir adaptándonos a todos los ámbitos en función de la evolución de la pandemia, porque, como ustedes dicen, el café para todos también es injusto. Bueno, pues eso es lo que hemos hecho: proteger la salud y establecer medidas ponderadas precisamente para también contener la economía.
Por cierto, los datos del desempleo de ayer yo creo que son datos que hacen pensar precisamente que no hemos sido tan malos. Un descenso del 3,16% en el paro, bueno, pues yo creo que eso dice que vamos en la dirección de intentar contener la pandemia en esta ola, pero también de intentar que la economía se mantenga. El descenso medio en el país ha sido del 0,99, y en Madrid, por ejemplo, apenas del 0,68.
Tenemos en este momento la legislación ordinaria a nivel estatal: la Ley orgánica de medidas especiales en materia salud pública y la Ley General de Sanidad y la Ley General de Salud Pública del once, las otras son del ochenta y seis, y en el lado autonómico seguimos teniendo la Ley de Salud de 2002, la Ley de Salud Pública del catorce y, en este caso, la Ley 3/2020, de 3 de diciembre, por la que se establece el régimen jurídico de alerta sanitaria para el control de la pandemia, aprobada en esta cámara, en situaciones clarísimas de excepcionalidad. Y que, cuando el Gobierno central declare que se ha acabado la pandemia, esa ley, evidentemente, dejará de tener efecto.
Yo, de verdad, a veces pienso, señora Vaquero, señores del Partido Popular, que sus intervenciones denotan dos cualidades: una, desconfianza: desconfianza en el parlamento, desconfianza en el autogobierno, desconfianza en el Estado descentralizado de las comunidades autónomas, de intentar apurar al máximo posible las capacidades que tenemos para poder regular y mejorar la vida de la gente. Eso es para que se lo hagan ustedes mirar.
Y, en segundo lugar, una cierta sensación de complejo, ¡de complejo! Oiga, que somos la única comunidad autónoma que ha legislado. Que esta mañana escuchaba al presidente de Castilla y León diciendo que no puede establecer ninguna medida porque no tienen ninguna cobertura legal. El señor Feijóo diciendo que hoy va a presentar qué medidas va a hacer porque no tiene ninguna cobertura legal. Igual, el señor Moreno en Andalucía.
Pues que sepan los aragoneses y las aragonesas que en Aragón sí que sabemos lo que podemos hacer gracias a la anticipación y a la aprobación en este parlamento, por el 71% de los grupos [rumores], por el 71% del apoyo político de esta cámara, sabemos lo que tenemos que hacer porque está bien regulado en esa ley.
Oigan, sientan un poco, un poco de orgullo. Podrán compartir más, menos. ¿Nos hemos equivocado? Seguro, señora Vaquero. Usted dice que es inconstitucional. Bueno, hay muchos criterios. Le puedo sacar aquí muchas declaraciones de juristas acreditados, desde luego, yo no lo soy, pero creo que usted tampoco [rumores], en contra y a favor, y cuestionándola, pero exactamente igual, exactamente igual, señora Vaquero, que con la propuesta que ustedes plantean, que es la modificación de la Ley de Sanidad del año ochenta y seis, también dicen que es inconstitucional y que no se puede hacer.
Por lo tanto, señora Vaquero, ¡hombre!, yo ya sé que a ustedes lo único que les interesa es: venga, vamos a utilizar… Por cierto, fíjese también en que ustedes, de alguna manera, bueno, presumen de que se han sentado en la mesa. Yo creo que lo repiten tanto que es que se sentaron por obligación, porque se sintieron absolutamente obligados de no acompañar a Vox en el desplante, ¿no?, para hacer frente a la comunidad autónoma. Insisto, siempre han estado poco orgullosos de las iniciativas, de la capacidad que podemos tener, porque en otros parlamentos autonómicos… Yo he preguntado a mis compañeros: «¿la oposición os ha preguntado qué va a pasar a partir del 9 de mayo?». Oiga, me he encontrado dos parlamentos con dos preguntas orales.
Usted aquí, con una comparecencia para poner en cuestión, porque usted, evidentemente, es del Partido Popular, que representa lo que representa, insisto, el 19% de la cámara, que votaron en contra de esta ley, que en este momento nos da la cobertura y la seguridad para seguir regulando a partir del 9 de mayo, algo que es lo que a ustedes seguramente les molesta. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Pérez.
Señora Vaquero, su turno de réplica.
La señora diputada VAQUERO PERIÁNEZ: Bueno, en los cinco minutos que tengo vamos a ir por partes a ver si le puedo contestar a todo.
Mire, con respecto al ejemplo de lo que es un partido extraparlamentario, no hace falta que usted se vaya a Cataluña; váyase a Teruel y pregúntele a los senadores del Partido Socialista qué es ser un partido extraparlamentario. [Aplausos].
Con respecto a que sigue insistiendo usted en que esta es la única comunidad autónoma que tiene una ley, oiga, pregúntese por qué, pregúntese por qué el resto de comunidades autónomas no han asumido el elaborar lo que es una aberración jurídica: porque el resto de gobiernos autonómicos no han tenido el atrevimiento de ir en contra de la Ley, de ir en contra de lo que es la esencia de la democracia. Y la esencia de la democracia es que el poder judicial lleve a cabo el control de la acción política sin que eso evite tomar decisiones, y ustedes es lo que han hecho.
No es que no nos sintamos orgullosos desde el Partido Popular, es que simplemente jamás, jamás cometeríamos esa aberración jurídica. Porque, sobre todo, nosotros sí que creemos que quien no respeta la ley no defiende la democracia ni defiende la libertad, y se lo he dicho: nosotros no creemos en esos gobiernos, como el suyo, que no saben, y que son incapaces de liderar la sociedad, que son incapaces de defender las instituciones, que son incapaces de proteger a los ciudadanos, a sus derechos fundamentales y a la libertad. Y ustedes se han parapetado en las restricciones, en los cumplimientos y en el miedo a los ciudadanos para ocultar la incapacidad que han demostrado.
Mire, nosotros se lo hemos dicho, hay que mirar también hacia el Gobierno de la nación, un Gobierno de la nación que ha dejado tiradas a las comunidades autónomas en un falso modelo de cogobernanza. Pero ustedes, sabiéndolo, han sido cómplices y no han querido plantarle cara. El señor Lambán siempre defendiendo la Constitución, pero, eso sí, para que la cumplan otros. Él, en cuanto ha podido con esta ley, se salta la reserva de ley orgánica para la limitación de derechos fundamentales. El señor Lambán no ha defendido a los aragoneses ante el Gobierno de España, un Gobierno que ha hecho una dejación de funciones, un Gobierno que se ha dedicado más a conspirar contra gobiernos autonómicos legítimos para montarles mociones de censura en lugar de trabajar para salvar vidas [aplausos]. Eso es a lo que se ha estado dedicando el Gobierno de la nación, y ustedes, ante eso, callados.
Mire, yo le decía que sin respeto a la ley se pierde la libertad y se pierde la democracia. Sin respeto a la ley y a los tribunales, aunque no estemos de acuerdo con ellos, no se defiende la libertad. Esto, señora Pérez, no lo decía Max Weber, que le gusta mucho citarlo. Esto lo decía Felipe González. Pero, además, sin respeto a la ley no hay convivencia, no hay democracia, sino inseguridad, arbitrariedad y quiebra de los principios morales y cívicos de la sociedad. Eso lo decía el rey Felipe VI.
Por lo tanto, señora Pérez, yo le vuelvo a preguntar a usted: ¿qué es lo que van a hacer para defender los derechos fundamentales de los ciudadanos?, ¿qué es lo que van a hacer como alternativa para defender su libertad en lugar de llevarles al miedo de que no hay otra opción para proteger su salud?
Mire, usted recientemente en esa entrevista en su televisión, perdón, en la televisión, decía: pues, bueno, no sabemos, no sabemos qué es lo que va a pasar, habrá un consejo interterritorial y ahí se abordará esa cogobernanza. Hace unos días ustedes todavía no sabían lo que iban a hacer. Es más, hace unos días en este Parlamento, el señor Lambán decía que se avecinaba el fin de la pandemia y que pensaba que no iba a poner más restricciones. Pasaron solamente unas horas y estaban confinando localidades.
Esa es la incertidumbre y la inseguridad jurídica a la que ustedes llevan, y puede seguir presumiendo de una herramienta jurídica, pero no sirve para nada. Los ciudadanos aragoneses todavía no saben qué va a pasar a partir del 9 de mayo. Usted lo ha dicho: por ahora. Ya veremos qué sorpresas nos tienen preparadas.
Usted dice: «nosotros tenemos una legislación autonómica, necesitamos esa cobertura que el Estado no nos daba». Claro, cobertura que el Estado no nos daba y los tribunales tampoco nos lo permitían, decía usted. Claro, como no les gusta el marco institucional, el marco constitucional y el marco legal que hay, yo me [corte automático del sonido]… un ejemplo hacia los aragoneses. ¿Qué ejemplo y qué mensaje está lanzando un Gobierno a los aragoneses que, cuando es incapaz de echarse un problema a las espaldas, de darle una respuesta, cuando es incapaz de resolverlo, en lugar de cumplir la ley, la incumplen? Eso es lo que ustedes están diciendo a los ciudadanos, que cuando se vean incapaces de afrontar un problema, pueden incumplir la ley. Eso es lo que ustedes están trasladando a los aragoneses.
Usted también decía: «en la Comunidad de Navarra me dijo su vicepresidente que confinó Navarra y que lo pidió a los tribunales y se lo concedieron». Claro, lo pidió a los tribunales.
Mire, señora Pérez, y voy terminando, señor presidente: la ley, la democracia y la libertad, a pesar de ustedes, es más fuerte que todos ustedes juntos. Ustedes, se lo asegura este grupo parlamentario, se lo asegura este grupo parlamentario, que, aunque se hayan empeñado en incumplir la ley, en producir la erosión de la democracia con este incumplimiento y de no defender la realidad, les aseguro que, afortunadamente, gracias y por el bien de esa democracia, ustedes tendrán que dar cuentas y rendirlas otra vez ante los tribunales.
Muchísimas gracias. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Vaquero.
Su turno de dúplica, señora consejera.
La señora consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales (PÉREZ ESTEBAN): Señorías.
«Aragón lo que hace es adelantarse al vacío legal. Hay que recordar que las competencias en materia de Sanidad recaen en las comunidades autónomas. Hacer una ley que sea votada en las Cortes constituye un ejercicio de responsabilidad política. Había que tomar una decisión y el bien jurídico de proteger la salud no lo podemos olvidar, es principal».
La verdad es que las hago mías, las hago nuestras, son declaraciones de José María Gimeno, catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad Zaragoza el otro día en un medio de comunicación.
Señora Vaquero, después de ese exceso, como siempre le digo, de teatralización que viene usted a hacer a la política, le tengo que decir que nosotros lo que vamos a hacer, insisto, y le agradezco que haya pedido esta comparecencia, porque lo hicimos ayer en rueda de prensa, tras deliberación del consejo de gobierno y tras dar a conocer la consejera de Sanidad lo que iba a suceder a partir del 9 de mayo, y nos da la oportunidad de volver a recordarlo aquí, que es aplicar una ley. Una ley que tiene el aval nada más y nada menos que de más del 71% de esta cámara y que nos permite precisamente seguir estableciendo, en función del nivel de alerta, el nivel de la evolución de la pandemia, y que está muy regulado en los distintos capítulos, como usted debe de conocer…
Bueno, a veces aquí habla y habla con cierta ligereza, porque, claro, cuando dice el recurso de inconstitucionalidad, a esta ley no hay ninguno, señora Vaquero [rumores]. No hay ninguno, no hay ningún recurso de… Que no, que no, que no existe, que no está la cuestión de [rumores]... Oiga, señora Vaquero, mire, usted no sé si es licenciada en Derecho, yo no voy a decir eso… Claro, pero me da igual. Aquí usted, aquí usted venga, aquí usted venga a debatir, a debatir, estamos en política, señora Vaquero, y, por tanto, usted ha cuestionado aquí la labor de los servicios jurídicos del Gobierno [rumores]… Ojo, los servicios jurídicos del Gobierno y los de esta casa. Así es usted, señora Vaquero, que sabe más que nadie. Usted sabe más que nadie, baje los humos, bájelos. Sea más humilde, sea más humilde. Fíjese, ha recordado a la televisión, que, por cierto, yo también me siento plenamente orgullosa porque está batiendo récords en audiencia, y si el programa de ET y José Miguel viniera de repente y viera el espectáculo que ha pasado con el Partido Popular, desde luego, no pasaría el informe a su planeta, sino que se iría pitando en la nave.
Fíjese, mire, en marzo del veinte, el PP acusa al Gobierno central de reaccionar tarde y decide apoyar el estado de alarma. En mayo del veinte no apoya la prórroga, califica al estado de alarma como un agujero negro para las libertades, y llega a hablar de dictadura constitucional. En junio insiste en considerar perjudicial el estado de alarma. Llega julio, y entonces cambia la cosa, el PP ataca al Gobierno central por lavarse las manos y por eludir su obligación de coordinar, dirigir y amparar todas las administraciones. Ojo, en agosto, la propia señora Díaz Ayuso acusa al Gobierno de dejación de funciones. En septiembre, Pablo Casado hace bandera de este argumento y critica la cobardía, irresponsabilidad y deslealtad de La Moncloa. Llega octubre y otra vez su mensaje: el PP se abstiene en el nuevo estado de alarma por no avalar el atropello legal, incluso amaga con ir a la Comisión de Venecia, y, claro, que le tienen que afear claramente que no puede ir un partido político a ese órgano de consulta del propio Consejo de Europa. Como diría el señor Rajoy: ¡joder, qué tropa!
Esto es lo que están haciendo ustedes, señora Vaquero, y aquí usted no ha dicho absolutamente nada de cómo atendería en este momento si no estuviera la Ley 3/2020, la necesidad que sigue habiendo, porque, oiga, señora Vaquero, igual usted es que reconoce aquí que no ha dicho que ya no hay virus. Igual ustedes dicen que es que la pandemia ha desaparecido y entonces no es necesario seguir estableciendo medidas de control de aforos. Igual, igual es lo que ustedes están diciendo, que ya no hace falta, que ya no hace falta [rumores]. ¡Pero sean valientes y díganlo y díganlo, sean ustedes valientes y díganlo aquí! ¿Ustedes creen que tenemos que seguir tomando medidas para proteger la salud de los aragoneses porque la pandemia sigue vigente, o no? ¿Y, si lo tenemos que hacer, cómo lo harían, señora Vaquero? [Aplausos].
El cinismo les supera, señora Vaquero. Es que, de verdad, en una situación de excepción, o de extraordinaria dificultad, el cinismo, el cinismo, la falta de decoro, la falta de decoro les supera, señora Vaquero.
De todas formas, recuerdo a Carlos Alsina en una entrevista a Pablo Casado, nada sospechoso, que decía: «se queja usted de que [corte automático del sonido]…». Es decir, una esquizofrenia a la que nos tienen sometidos, señora Vaquero, desde hace demasiado tiempo.
Y, por cierto, y, por cierto, le voy a parafrasear a una cantante, a Rocío Jurado, pero lo voy a adaptar, porque apelan ustedes mucho a la libertad, a la libertad. Ojo, ojo, y digo: se nos rompió, se nos rompió la libertad de tanto usarla, señora Vaquero. Hombre, y tengo que decirle que normalmente se hacen reales algunos refranes como el que dice que dime de qué presumes y te diré de qué careces.
Ojo, ojo, porque en cuestión de libertad, ninguna lección, señora Vaquero. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Vaquero.
Dejo unos segundos.
Bueno, continuamos si les parece con los grupos parlamentarios. Turnos para los grupos parlamentarios.
Señor Sanz, por Izquierda Unida.
El señor diputado SANZ REMÓN: Señorías de las derechas, han citado a varios personajes ilustres de este país, pero les ha faltado citar a algunos no tan ilustres, porque su discurso catastrofista y legalista coincide perfectamente con algún discurso leído de José María Gil Robles, por ejemplo.
Están en una senda absolutamente predecible, pero muy preocupante para el conjunto de la democracia de este país, señorías del Partido Popular. Miren, no defraudan, nosotros, Izquierda Unida, sabíamos que iban a traer este debate y lo sabíamos porque era evidente. Era evidente que, en el momento en el que avanzase el proceso de vacunación, era evidente que, en el momento en el que se levantase el estado de alarma, y se rebajase la percepción de excepcionalidad, relajase, relajase, digo bien, ustedes iban a volver a la senda que no se atrevían a hacer antes por impopular, evidentemente, de poner peros y trabas a la gestión de la pandemia, habida cuenta del modelo político, también institucional, que hemos elegido para avanzar ante un reto que nos ha puesto a prueba, y lo decíamos en el debate de la Ley 3, que nos ha puesto a prueba como sociedad, no solo como comunidad política, sino también al andamiaje jurídico que había permitido desarrollar el ámbito constitucional a nivel competencial de las comunidades autónomas.
Y eso es lo que están haciendo ustedes. Ustedes lo que están haciendo es volver a situar en el hemiciclo la desconfianza. La desconfianza sobre algo tan fundamental como es nuestra capacidad jurídica y la voluntad de esta cámara de regularla para avanzar en materia de modulación del ejercicio en determinados derechos, fundamentalmente para salvaguardar otro, que es el derecho a la vida, que es el más importante, señorías, que es la salud, y en eso sí tenemos competencias y en eso sí tenemos que avanzar.
Sabíamos que traerían este debate y de paso cargarían también contra el modelo elegido por parte del Gobierno central para avanzar en esta gestión, y sabíamos también que iban a poner encima de la mesa todas esas propuestas en materia de modificación de leyes que ustedes han hecho, y no nos equivocábamos. Es decir, este debate no ha servido para preguntar a la consejera sobre el incremento de vacunación, sobre el proceso de coordinación necesaria que vamos a tener que desarrollar. No, ha servido para lo que ha servido, para poner en tela de juicio nuestra capacidad.
¿Qué es lo que le preocupa a las derechas? ¿Disponer de normas que nos permitan avanzar en el marco de nuestras competencias? No. Porque esas las tenemos, esas las tenemos. Lo que les preocupa, lo que les preocupa es precisamente que se haya optado por un ámbito de desarrollo competencial, de gestión compartida, de cogobernanza, que tiene que avanzar muchísimo más todavía hacia el ámbito del federalismo y del autogobierno.
Eso es lo que les preocupa a ustedes. Eso es lo que les preocupa a ustedes. Es más, no solo no les preocupa no disponer de normas jurídicas, porque aquí han venido a poner encima de la mesa una cuestión que a nosotros nos parece profundamente preocupante, que es su voluntad de cuestionarlas constitucionalmente, su voluntad política y, con ello, lo que están haciendo ustedes es desvestirnos de herramientas para gestionar debidamente una crisis sanitaria que sigue arrojando unas cifras muy preocupantes. Eso es lo que están haciendo ustedes hoy aquí. Y hay que hablar de política y hay que hablar desde qué marco están ustedes, desde qué marco están ustedes afrontando este debate, señora Vaquero. A mí me ha preocupado mucho.
Que no se contagie, por favor, que no se contagie la opción que nos lleva a abordar esta cuestión desde dos perspectivas posibles, y yo creo que ustedes no están abordándola desde la cobardía y sí la están abordando desde el populismo, porque, obviamente, todo el mundo está cansado; obviamente, todo el mundo tiene ganas de salir, pero a la gente hay que decirle que estamos en una situación muy compleja que requiere de esfuerzos y compromiso colectivo. Y es modular. Y yo, Izquierda Unida está muy, muy, muy de acuerdo en seguir desarrollando nuestra capacidad todos a una en una cuestión tan importante como esta. Y discreparemos con el Gobierno en multitud de cosas, pero el mensaje que tenemos que mandarle a la ciudadanía no es el del catastrofismo o el legalismo, es el de vamos a resolver los problemas y vamos a poner la salud en el centro.
Miren, no se puede decir una cosa y su contraria. No pueden decir que no al estado de alarma y luego pedir que se continúe el estado alarma. No se puede decir, en el ámbito de un modelo de gestión compartida de la sanidad pública, que hay que legislar desde Madrid, pero que no tenemos que legislar en el ámbito en el que tenemos competencias, que es aquí. No se puede, señoría. Si lo hacen, están haciéndolo por algún motivo que, desde luego, Izquierda Unida no comparte.
A partir de ahí, yo lo único que espero es que, cuando haya que solicitar medidas más restrictivas, y hay que hacerlo, porque la situación sanitaria, como digo, no es buena, si tenemos que recurrir al Tribunal Constitucional para hablar de los cierres perimetrales o de los toques de queda, yo espero que este parlamento asuma la responsabilidad de dar respuesta a esas herramientas que nos permitan hacer frente a la pandemia, porque, de lo contrario, lo que estará poniéndose encima de la mesa es otra vocación [corte automático del sonido]… Y lo hemos vivido en algún debate previo ya, señorías. Lo hemos vivido en algún debate previo.
La salud no puede ponerse a la cola de las prioridades. En este parlamento se han dicho cosas muy peligrosas, como que las medidas restrictivas estaban anulando… Pero ¿cuál es el problema de fondo? El problema es que la gente sigue muriendo y sigue enfermando, y hasta ahora la ciencia nos arroja que hay una serie de mecanismos y la ley tiene que dar respuesta a esas necesidades.
Y, desde luego, Izquierda Unida, señora consejera, estará en dotarnos de las herramientas oportunas para poder garantizar la correcta gestión sanitaria, que todavía hoy, todavía hoy, y con más motivo todavía, es necesario hacer para garantizar y poner encima de la mesa lo que ha venido siendo lo fundamental, que es poner la vida en el centro. Firmeza, sobre todo, firmeza y garantía de que esa perspectiva de poner la salud por delante de todo no la perdamos por esa sensación de relajación que implica la superación del estado de alarma.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Sanz.
Grupo Aragonés, señora Peirat.
La señora diputada PEIRAT MESEGUER: Muchas gracias, presidente.
Buenos días, señora Pérez, y, en primer lugar, agradecerle las explicaciones que nos ha ofrecido sobre las medidas que tiene previsto adoptar el Gobierno de Aragón tras el próximo 9 de mayo, fecha en la que decae el estado de alarma declarado por el actual Gobierno de la nación.
Efectivamente, ha surgido el debate y la preocupación no solo entre las diversas comunidades autónomas, sino también entre la ciudadanía en general, sobre la situación que se va a generar tras ese 9 de mayo. Los últimos meses de pandemia han sido un capítulo de la vida de todos nosotros totalmente inédito, sin precedentes y, desafortunadamente, con unas consecuencias horribles en todos los ámbitos que ya creo que todos conocemos.
Por todo ello, es más que entendible que la ciudadanía se pregunte qué va a pasar a partir de ese 9 de mayo. Como ya todos conocemos, se ha discutido mucho si las comunidades autónomas tienen o no capacidad jurídica para establecer determinadas medidas o no.
El Gobierno de Aragón tiene a su disposición, como bien se ha expuesto, una serie de herramientas legales que le confieren una serie de potestades y competencias para poder actuar en un caso como el que nos ocupa. Es legislación que ya existía antes de la aparición de la COVID-19 y que permitía ya entonces acordar limitaciones preventivas e intervenir de manera urgente con el establecimiento de medidas sobre las cosas, locales o personas en caso de riesgo para la salud pública, que creo que es lo que debatimos.
Pero, efectivamente, esas leyes son, como se citaba, la Ley 6/2002, de Salud Pública de Aragón, y la Ley 5/2014, de Salud de Aragón. Pero no estaríamos siendo honestos con nosotros mismos si entendiéramos que con dicha normativa la situación excepcional, sobrevenida y sin precedentes de la pandemia estaba ya totalmente controlada tras un levantamiento del estado de alarma. Y es que esto, evidentemente, no es suficiente. Sí que sirve para muchas cosas, sí que contribuye sin duda alguna a la posibilidad de actuar de manera contundente para la protección de los aragoneses dictando medidas limitativas o restrictivas, pero lo cierto es que, si algo hemos aprendido con la COVID-19, es que la realidad ha superado a todo lo previsto hasta el momento por parte de la normativa de todos los poderes públicos del conjunto del planeta.
Efectivamente, hacía falta algo más, y ese algo es la aprobación de una ley específica en Aragón, la Ley 3/2020, de 3 de diciembre, que aprobamos con un amplio consenso en estas Cortes de Aragón y cuyo proyecto de ley fue remitido por el Gobierno de Aragón, previamente, en tiempo y forma. Esta ley sí supone una especialidad normativa y específica relativa al bloque normativo del que ya disponíamos para establecer un régimen jurídico de alerta sanitaria al objeto de controlar la pandemia de la COVID-19 en Aragón. Una norma que es dictada al amparo, señorías, al amparo de nuestro Estatuto de Autonomía. Una vez más se pone de manifiesto lo importante que es que Aragón disponga de las competencias necesarias para su desarrollo, y en este caso protección sanitaria, de una forma eficaz y claramente pegada a la realidad que vivimos en Aragón.
Es esta norma aragonesa la que otorga al ejecutivo aragonés un abanico de posibilidades de actuación con la debida cobertura legal, y puede actuar, como ya todos conocemos, de manera directa sobre materias esenciales, tales como la regulación de las distancias de seguridad, uso de mascarilla, regulación sobre los requisitos de reuniones y eventos, establecimiento de los diversos niveles de alerta en función de la evolución de la pandemia, con sus correspondientes medidas, etcétera. Yo creo que ya todos conocemos lo que regula. En definitiva, creemos que Aragón ha sabido dotarse de normativa muy específica, en la que sí que desde el PAR seguiremos luchando para que esta sea aplicada, manteniendo el equilibrio de nuestra economía aragonesa.
Pero, más allá de todos estos aspectos jurídicos, que son también plenamente necesarios, Aragón cuenta con un elemento a su favor, que es el que nos va a hacer salir, y ese elemento no es otro que la propia responsabilidad de los aragoneses. Por ello, yo sí que quiero acabar con un mensaje optimista. La COVID-19 nos ha afectado de manera contundente en todos los ámbitos de nuestras vidas, nos ha arrancado a seres queridos, ha afectado a la salud de miles de aragoneses, se ha llevado por delante muchos aspectos de la economía, pero hoy la vacunación es nuestra gran herramienta para conseguir acabar con esto definitivamente, y la actuación de los poderes públicos, junto a la responsabilidad de los ciudadanos, nuestra máxima garantía.
Muchas gracias, presidente.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Peirat.
Por el Grupo Parlamentario Vox, señor Morón.
El señor diputado MORÓN SANJUÁN: Muchas gracias, señor presidente. Señorías, señora consejera.
Hablar del plan del Gobierno para afrontar esta nueva etapa que se va a abrir aquí en Aragón a partir del día 9 de mayo pues es hablar inevitablemente de esta Ley 3/2020. Una ley que, ante la finalización del estado de alarma, habilita al Gobierno de Aragón para decretar confinamientos perimetrales, entre otras cuestiones. Para entendernos, un señor de Soria, ante un cierre perimetral provincial en Aragón, va a poder ir a Calatayud, pero un señor de Calatayud no va a poder ir a Hueca, por ejemplo.
Vox votó en contra en el debate de esta aprobación de esta ley no por ser negacionistas, como usted ha dicho, que además no sé qué tiene que ver el Holocausto con la pandemia. No sé, esa apropiación y ese es uso tan torticero del lenguaje que utilizan ustedes a veces. Nosotros votamos en contra por una cuestión de constitucionalidad, como ya dijimos en su momento, porque, como consideran muchos expertos, muchos expertos en Constitución, es inviable hablar de una limitación de la movilidad, que es un derecho fundamental, sin recurrir siquiera, sin recurrir siquiera al argumento que utilizó en su momento el Gobierno de España del estado de alarma. Es que ustedes ni siquiera tienen esa cobertura. Pero es que nosotros en Vox, por supuesto, tampoco reconocemos esa cobertura del estado de alarma para conculcar esos derechos fundamentales. Por eso, Vox recurrió ante el Tribunal Constitucional ese primer estado de alarma y también el segundo. Y también es curioso que, después de casi seis meses del segundo estado de alarma, de este estado de alarma perpetuo podríamos llamar, pues todavía el Tribunal Constitucional no se haya pronunciado respecto a la legalidad del primero y del segundo. Pero es que esta ley aragonesa tampoco concreta en qué circunstancias y con qué garantías se puede llevar a cabo la suspensión de este derecho, así como las sanciones aparejadas y a qué control se debe someter.
También votamos en contra por la inseguridad jurídica que genera. Se dispone que la ley tendrá vigencia hasta que el Gobierno de España declare la finalización de la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19, pero no define cuándo, cuándo finalizará la crisis sanitaria. Porque la crisis sanitaria ya finalizó una vez. El señor Sánchez ya dio por finalizada la crisis sanitaria una vez. Entonces, ¿cuándo será la siguiente vez que la dará por finalizada? ¿Qué seguridad jurídica existe?
El artículo sexto de la ley establece las obligaciones personales de confinamiento, como son la obligación de aislamiento, la obligación de cuarentena, estableciendo que se cumplirá preferentemente instando la colaboración voluntaria, y ante la negativa se podrán imponer pues una serie de medidas específicas, pero ¿qué tipo de medidas serán necesarias para frenar de forma individual o de forma colectiva esta pandemia? Tampoco se hace referencia en la ley. No se establece ni qué tipo de medidas ni por cuánto tiempo. El artículo 14 también hacía referencia al régimen sancionador, que también es muy confuso. Es decir, es una ley que tiene visos de ser claramente inconstitucional y que, desde luego, como mínimo, genera una gran inseguridad jurídica.
El presidente de la Sala de lo Contencioso-administrativo del Supremo, el señor César Tolosa, pronunció ayer unas declaraciones, y entre ellas dijo que, tras el 9 de mayo, con el fin del estado de alarma, se abre un panorama desde el punto de vista legislativo sumamente complejo. «Lo deseable», agrega, «sería que la situación jurídica fuera de certidumbre y de normas claras para poder afrontar el problema sanitario con una respuesta unívoca desde el punto de vista judicial». Oiga, pues eso no es lo que se ha hecho aquí, ni en Aragón ni en España. Porque, desde luego, no es una respuesta unívoca la que se ha buscado. Lo que se está pretendiendo ahora son diecisiete respuestas. Y eso, desde luego, no nos da ningún tipo de seguridad ni desde el punto de vista judicial ni desde el punto de vista social.
Señorías, lo más grave de todas estas medidas restrictivas de escasa o nula justificación científica adoptadas por el Gobierno de Sánchez y ahora asumidas también por el cuadripartito de Aragón es que no se ha conseguido frenar la pandemia, a día de hoy no se ha conseguido frenar la pandemia, y no se han acompañado todas estas medidas restrictivas de medidas que compensasen la prohibición de realizar una actividad comercial productiva o de servicios por imperativo legal.
¿El resultado de todo lo dicho? Ya lo conocemos: muerte, inseguridad, ruina económica y desconcierto para toda la ciudadanía. Supongo que ya se habrán familiarizado con ese tipo de carteles: «cierre», «liquidación por cierre» [el señor diputado muestra los carteles a los que se refiere]. Eso es lo que vemos en las calles, eso es lo que vemos ahí. Lo que pasa es que el Gobierno de Aragón no lo ve porque no ve la realidad social de la calle.
Es lamentable el limbo jurídico en el que el Gobierno socialcomunista de España ha sumido a las comunidades autónomas, en el que nos encontramos también en Aragón, por más que se hayan legislado al respecto, ante la falta de voluntad política y de liderazgo para haber legislado frente a las pandemias. Han tenido el Gobierno de España y las comunidades autónomas catorce meses para poder legislar en referencia a las pandemias y para poder haber redactado un plan para cuando finalizara el estado de alarma. No lo han hecho, no lo han hecho, y ahora es un sálvese quien pueda.
Una vez más se ha puesto de manifiesto la incompetencia del Estado de las autonomías para dar una respuesta eficaz a los problemas de los españoles.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Morón.
Por el Grupo Parlamentario Chunta, señora Lasobras.
La señora diputada LASOBRAS PINA: Gracias, presidente. Buenos días. Gracias, señora Pérez, por las explicaciones que nos ha dado.
Bueno, oye, tanto el presidente del Gobierno central como la ministra de Sanidad ya nos dijeron hace unos días que a partir del 9 de mayo no se iba a prorrogar el estado de alarma. Ahora serán las comunidades autónomas las encargadas de dictar las normas de restricciones para contener la propagación del virus, porque, desgraciadamente, la pandemia continúa entre nosotros. Nos amparan diferentes leyes estatales: la Ley de medidas especiales de salud pública, la Ley General de Sanidad o la Ley General de Salud Pública; y también nos amparan leyes autonómicas como la Ley de Salud de Aragón o la Ley de Salud Pública de Aragón. Pero aquí en estas Cortes de Aragón también se aprobó una norma autonómica, la Ley 3/2020, que refuerza el nivel de intervención administrativa de control para el virus, para reducir, sobre todo, los altos niveles de contagio. Y aquí es donde quiero poner en valor nuestra capacidad de autogobierno para ser capaces de atender las necesidades básicas de la ciudadanía aragonesa como la educación, servicios sociales o sanidad, en este caso. Esta ley debe permitirnos afrontar el escenario posterior al 9 de mayo y, por lo tanto, en caso de que fuera necesario poder realizar confinamientos perimetrales de municipios, comarcas, zonas de salud o distritos y también aplicar aforos o franjas horarias.
Pero, realmente, ¿qué es lo que les interesa a los aragoneses y a las aragonesas? Pues lo que les interesa es saber qué va a pasar a partir del 9 de mayo. Esta ha sido la pregunta que nos han hecho últimamente las personas. Nos han preguntado qué es lo que va a suceder. Algunas piensan que se va a volver a la normalidad de marzo del 2020, otras piensan que continuaremos con restricciones por la incidencia acumulada en las últimas semanas.
Y yo pido prudencia, un mensaje que no me cansaré de repetirlo: mucha prudencia; y nosotros, como responsables políticos, debemos pedir eso, porque el virus está aquí entre nosotros y la pandemia no ha terminado y habrá que tomar más medidas, porque los datos no invitan a la relajación.
Preocupan mucho las localidades de Tarazona, Jaca o Calatayud, las comarcas de Cinco Villas, Cariñena, Ribera Alta y Valdejalón, porque más de ciento cuarenta mil personas nos encontramos confinados a tres días del fin del estado de alarma. Los datos no engañan y las fronteras no existen. Y ¿qué hacemos? ¿Abrir todo de un día para otro como si nada hubiera pasado? Pues no, y, aunque la quinta ola de la enfermedad no ha tenido la misma incidencia que las anteriores, posiblemente, y gracias al plan de vacunación, esta ola no puede ser tomada a la ligera y exige el mantenimiento de las máximas preocupaciones.
Entendemos que la población esté cansada por las restricciones y quieran hacer una vida normal, que se encuentren en fatiga pandémica, pero no podemos relajarnos porque esto no ha terminado y hay que vivir el día a día; y, a día de hoy, los datos, como he dicho anteriormente, no son buenos. Por ello es muy importante explicar a la población por qué y para qué se aplican estas medidas.
En Aragón se han establecido varios confinamientos perimetrales, que es una de las medidas más estrictas porque supone una restricción de movilidad para bajar los contagios; pero, hablando de confinamientos, quiero trasladar la preocupación y la inquietud de varios alcaldes de la Val d'Onsella, ya que al confinar la comarca de las Cinco Villas, que es la más extensa de Aragón, por los altos índices de contagio de Ejea, Tauste o Sádaba, se han confinado también los municipios de las Altas Cinco Villas, que tienen cero casos de contagios en su zona de salud. Quizá, esta zona de salud tiene cero contagios porque tienen el mayor índice de vacunación, un 35%, y esto hay que ponerlo también en valor.
Estos alcaldes de la Val d'Onsella han emitido una carta al Departamento de Sanidad porque consideran injusta esta decisión, pero es muy difícil tomar medidas que agraden a toda la población, pero Ejea, Tauste y Sádaba representan a veintiséis mil habitantes frente a los doscientos habitantes de los municipios de la Val d'Onsella; y Sos es el municipio que cuenta con un sector turístico importante y abre las puertas a este valle.
Sé que el Departamento de Sanidad está estudiándolo y me consta que está valorando la propuesta que le han hecho esas alcaldías de confinar por zonas de salud o sectores sanitarios que nuestra ley autonómica nos permite. Y esta sería una buena solución: confinar por zonas de salud, porque además en Cinco Villas esto se puede hacer por su singularidad geográfica y porque es una de las comarcas más extensas.
Por otro lado, será muy difícil volver a la nueva normalidad que había antes de marzo. Nos hemos dejado demasiadas cosas por el camino, muchos sentimientos encontrados, puestos de trabajo, muchos fallecimientos, y el que piense que todo va a ser igual es que no ha aprendido nada de la COVID. Además, esta pandemia también debe ayudarnos a reflexionar sobre muchas cuestiones, sobre qué modelo de desarrollo queremos en Aragón, qué modelo de sanidad y de educación pública y cómo debemos ayudar a las personas más vulnerables o qué hacemos con los conflictos territoriales. En definitiva, debe servirnos para plantear un futuro mejor para Aragón.
Finalmente, quiero destacar que el consejo de ministros aprobó también este martes un real decreto donde, además de proteger las medidas de escudo social que estaban sujetas al estado de alarma, establece también un [corte automático del sonido]… comunidades autónomas puedan evitar problemas con los tribunales superiores de justicia. Así, se garantiza que todas las comunidades puedan aplicar las mismas medidas para luchar contra el virus si lo consideran necesario.
Para finalizar, esperamos que se vaya avanzando con el plan de vacunación en Aragón. Es la única salvación que tenemos para que bajen los contagios y superar esta maldita pandemia.
Gracias, presidente.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Lasobras.
Por el Grupo Podemos, señora Cabrera.
La señora diputada CABRERA GIL: Muchas gracias, señor presidente.
Muchas gracias, señora consejera, por presentar cuál es la línea del departamento o cuál es la línea del Gobierno de Aragón. Y de recordar una cuestión: que el domingo acaba el estado de alarma, pero el virus no se va. La COVID-19 existe, y persistirá después de ese estado de alarma.
Y lo que garantizaba el estado de alarma, para lo que vino, fue para establecer las garantías jurídicas y establecer, por lo tanto, un marco de seguridad, un marco de salud, y ahí es donde tenemos que centrar el debate, es decir, en defender la sanidad pública y en defender la sanidad de la ciudadanía, en este caso, la aragonesa.
La figura del estado de alarma no va a ser prorrogada, pero las comunidades autónomas tienen desarrollados mecanismos de carácter legal que permiten establecer medidas para proteger la salud de todas y de todos, en un marco que se ampara por la Ley de 1986. Pero también pondremos dos ejemplos más desde Aragón, dos leyes que nos parece que son importantes: la Ley 6/2002, del 15 de abril, de Salud de Aragón, que permite, por lo tanto, acordar esas limitaciones preventivas respecto a aquellas actividades públicas y privadas que directa o indirectamente puedan desarrollarse en nuestro territorio y puedan, por lo tanto, impedir consecuencias negativas para la salud o que se antepongan a la salud de la ciudadanía. Y otra ley, otra ley que también nos parece que es importante, que también se ha puesto en valor en este parlamento y que también se ha puesto en valor por todos los grupos que me parece que tienen una visión progresista, y es la Ley 3/2020, del 3 de diciembre, por la que se establece un régimen jurídico de alerta sanitaria para el control de la pandemia de la COVID-19 en nuestra comunidad autónoma.
Proteger la salud y seguir salvando vidas es lo más importante, lo fundamental que hay que defender hoy, pero no podemos pasar por alto que esta crisis está teniendo un impacto duro y más duro en las personas más vulnerables. El Gobierno de coalición, el Gobierno central, trabajó para desarrollar un escudo social que protegiera a la gente corriente de los impactos de la crisis de la COVID, pero muchas de esas medidas estaban vinculadas a la vigencia del estado del arma. Ahora ya no es así, y lo que también se está defendiendo es lo que ponía en marcha, lo que defendía también el consejo de ministros, que hablaba de la prórroga de medidas de protección social; y hoy, desde nuestro grupo parlamentario, desde Podemos Aragón, como no podía ser de otra manera, lo ponemos en valor.
Ponemos en valor que se haya defendido algo tan básico, tan claro, que es el pan, el techo y el trabajo. Y estamos hablando de que el escudo social indica que la salida debe ser por la izquierda, que la salida debe ser en el amparo y la defensa de la justicia social y, por lo tanto, volvemos a reclamar ese pan, techo y trabajo. Y se hace de manera muy básica, pero, como decíamos, de manera fundamental, con medidas como las relacionadas con vivienda, como la prohibición de los desahucios o la prórroga de los contratos de alquiler de vivienda para evitar las subidas de precios, que van relacionadas con las medidas extraordinarias en materia de protección de las personas trabajadoras, medidas extraordinarias en materia de defensa de las personas que desarrollan sus puestos de trabajo y que mantienen, por lo tanto, su vigencia en esas medidas de protección por el desempleo, con la conservación de un tipo de un 70% aplicable a la base reguladora para el cálculo de la prestación, transcurridos los ciento ochenta días de prestación en las prestaciones por ERTE. Unas cuestiones que también van relacionadas además de con la vivienda, además de con el empleo, con la sanidad pública, la sanidad universal, el acceso a la misma.
Y hoy, ya que pasamos por aquí, me gustaría volver a reclamar lo que ya en Estados Unidos parece una realidad, lo que la Unión Europea se está planteando, que tengamos a bien esa liberalización de las patentes, porque las medidas que deberían de venir para quedarse para ese escudo social son un ejemplo de un gobierno progresista, como es el Gobierno de España, medidas que desde lo social están haciendo frente a ese capitalismo que otros intentan imponer.
Desde Podemos hemos defendido en cuantiosas ocasiones que la salida, como decíamos, debe de ser desde la justicia social, y valoramos positivamente esa prórroga, la prohibición de los cortes de agua, de electricidad y de gas, la prórroga automática del bono social eléctrico a los hogares más vulnerables, los ERTE y, por lo tanto, a que aquellos que no reúnen los requisitos ordinarios de acceso a la prestación, así como la movilización de una enorme cantidad de recursos públicos para reforzar la sanidad y, por lo tanto, proteger a trabajadores autónomos, a pequeñas y medianas empresas. Cuestiones adoptadas con motivo de la crisis y que pedimos que se sigan manteniendo, y así lo ha demostrado el Gobierno central.
Pero siempre lo hemos dicho: requerimos de un cambio de modelo y ahí hay que ampararse en las leyes, hay que ampararse en el parlamentarismo, hay que ampararse en el debate y, por lo tanto, en lo social. Las medidas que van [corte automático del sonido]… laborales desde las mujeres víctimas y su defensa, mujeres víctimas de violencia de género, a sus hijos, a sus hijas y, por lo tanto, nos muestran que el sistema, tal y como estaba establecido, no valía. Hemos evidenciado las grietas y hace falta un cambio de paradigma, un cambio social que debe de enseñarse y que debe de mostrarse en los momentos más duros, cuando se requiere un cambio radical desde esa visión de izquierdas.
Así que el domingo, como decíamos, desaparece el estado de alarma. El virus permanecerá y, por lo tanto, para todo lo demás, sigamos: mascarilla, distancia social y pocas aglomeraciones, y para siempre, y para todo lo demás, justicia social.
Muchas gracias, señor presidente. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Cabrera.
Por el Grupo Parlamentario Ciudadanos, señora García.
La señora diputada GARCÍA GONZÁLEZ: Gracias, señor presidente.
Y, gracias, señora consejera, por su presencia aquí a requerimiento del Partido Popular y por las explicaciones que nos ha dado.
Es cierto que la pandemia obligó y ha obligado en todo momento a tomar una serie de medidas tendentes todas ellas a la prevención y a la seguridad de los ciudadanos y, sobre todo, a la defensa de su salud. En un primer momento, el Gobierno de España decretó el estado de alarma, estado de alarma que ha sido prorrogado en numerosas ocasiones, entre otros, gracias al apoyo de Ciudadanos. Nosotros aquí creo que hicimos un ejercicio de responsabilidad y apoyamos todas y cada una de las prórrogas del estado de alarma nacional. Ahora hay otros partidos que solicitan que se prorrogue cuando en su momento no lo querían.
Transcurrida la última prórroga del estado de alarma, lo cierto es que, y en esto perdonarán que lo diga, el señor Sánchez se quitó el traje de las restricciones y se puso el traje de las vacunas. Pero lo cierto es que dejó a las comunidades al albur, a cada una de ellas, de sus posibilidades, de su capacidad de legislar y de su potestad para afrontar esta crisis.
Nosotros, como partido, hemos pedido siempre un plan de actuación coordinada, que hubiera unas normas comunes, que no hubiera diecisiete regímenes especiales, que no hubiera agravios entre comunidades autónomas. Pero, miren, esto es el pasado. Ahora nos enfrentamos a que dentro de tres días acaba el estado de alarma y tenemos que saber qué va a pasar y tenemos que decirles a nuestros ciudadanos qué pueden hacer y qué no pueden hacer, porque es lo que nos están demandando.
Mire, yo sí que creo que tenemos un paraguas jurídico y un paraguas legal. Tenemos un paraguas jurídico y un paraguas legal tanto nacional, con la Ley de Salud Pública, como autonómico, con también la Ley de Salud de aquí de Aragón; tenemos la Ley de desescalada o de nueva normalidad, la ley nacional, y tenemos aquí una ley, que es cierto que votamos, nosotros, como partido y representación parlamentaria en este parlamento, apoyamos la Ley 3/2020, la ley que regula las restricciones, las medidas de prevención y de contención de este virus, la apoyamos, y vamos a seguir apoyando todas aquellas medidas que vayan en beneficio de los ciudadanos y que vayan en beneficio y para preservar la salud de todos y cada uno de ellos.
Es cierto que esta ley, a lo mejor, se nos va a quedar corta y es cierto que, a lo mejor, va a haber que, según la evolución de esta pandemia, va a ver que ir tomando otras medidas, porque hay medidas que no pueden tomarse con la ley aragonesa que tenemos ahora mismo. Entonces, va a haber que hacer otro tipo de medidas, quizás, no lo sé, depende de la evolución, evidentemente. Tenemos que ponernos a trabajar en ello, porque, si llega, tenemos que ser capaces de consensuar medidas que vayan en beneficio de todos los ciudadanos y de todos los aragoneses.
Esas medidas, además, con el real decreto legislativo que ha publicado el Gobierno, en concreto, ayer salió en el BOE, entiendo que, si en el supuesto caso de que tuviéramos que, al final, acudir a los tribunales, se ha establecido un régimen muy ágil, a pesar de que la justicia es lenta, hay un régimen muy ágil donde los tribunales superiores de justicia van a tener que resolver en tres días, donde un recurso de casación se tendrá que presentar en tres con un periodo de derogaciones de cinco, donde se podrán habilitar días inhábiles, donde hay un ministerio fiscal que vela por los intereses de los ciudadanos y donde el Tribunal Supremo tendrá que resolver en el plazo de tres días. Estamos hablando de unos plazos brevísimos.
Si aquí en Aragón somos capaces de dotar de medios, que eso sí que me preocupa, es decir, tenemos ahora mismo el marco legal y el marco jurídico para el caso supuesto de que quisiéramos tener que atender o tener que recurrir a los tribunales, si tenemos el marco, que tengamos también los medios materiales para poder afrontar ese marco. En cualquier caso, esto, esta medida, si ha de tomarse, si al final acaba alguna de nuestras medidas en los tribunales, dotará de seguridad jurídica a los ciudadanos, dotará, además, de una igualdad, sentará doctrina, sabremos a qué atenernos, porque a lo mejor el primer recurso no es nuestro, es de Asturias, es de Cantabria, pero sabremos a qué atenernos, que es lo que no tenemos ahora mismo.
En cualquier caso, en cualquier caso, entiendo que tenemos un instrumento jurídico, que tenemos la capacidad normativa para seguir avanzando en la lucha contra la pandemia.
Y, para concluir, yo, desde luego, jamás preguntaría a un Gobierno, sea el suyo o sea el que sea, qué medidas legales y constitucionales se van a tomar, porque entiendo que las medidas que se van a tomar son legales y constitucionales. Yo sí que le pido a usted como Gobierno que las medidas que tomen sean proporcionales, que respeten las libertades de los ciudadanos, que sean eficaces, trasparentes y que se anticipen ante las situaciones.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora García.
Por el Grupo Parlamentario Socialista, señor Villagrasa, tiene la palabra.
El señor diputado VILLAGRASA VILLAGRASA: Gracias, señor presidente. Buenos días, señorías.
Qué diferencia de tono y de contenido, señora García, de su intervención en tribuna a la primera de la señora Vaquero. Yo creo que estamos ante un tema lo suficientemente serio y sensible como para evitar que se hiperpolarice, como para utilizar palabras tan duras y tan deshumanizadas como la apisonadora, instaurar un sistema de miedo a los ciudadanos, modelo de sociedad fracasada, contrarios a la ley, acusaciones permanentes de inconstitucionalidad, un Gobierno que ataca a los jueces…
Creo que todos los gobiernos, y este no ha sido una excepción, señora Pérez, lo que han hecho ha sido trabajar mañana, tarde y noche en defensa de los derechos, de las libertades, de la seguridad y de la protección de los ciudadanos, ante una circunstancia de enorme dificultad y de enorme complejidad, como nunca antes ningún gobierno se había tenido que enfrentar. Y eso, señora Pérez, desde el Grupo Parlamentario Socialista, y este portavoz considera que desde amplios sectores de la sociedad, merece nuestro respeto, nuestro reconocimiento y nuestro agradecimiento, porque es muy fácil, o creo que nos podríamos quedar en una situación de bastante comodidad, el venir aquí a esta tribuna y utilizar palabras duras, olvidarnos de los índices que hemos tenido, del tiempo que hemos tenido que estar en nuestros domicilios, del sufrimiento que ha habido por parte de muchas familias, de las tensiones que ha habido respecto de muchos sectores de la sociedad, y de un virus que sigue estando hoy presente en la sociedad. Y permítanme que, día a día, y con el esfuerzo de miles de profesionales, de las instituciones y de los gobiernos, se va combatiendo con la política de vacunación, de la que, por cierto, yo oigo poco decir aquellos elementos tan negativos y aquellos pronósticos tan catastrofistas de que las vacunas no iban a llegar, de que no iban a ser efectivas o de que no íbamos a llegar a los porcentajes.
Señora Pérez, usted, los consejeros, las consejeras, veo a la consejera de Sanidad del Gobierno, al presidente del Gobierno, todos han estado trabajando de la manera más humana y de la manera más seria y de la manera más empática posible para que en Aragón nos fuera bien y para que en Aragón las personas no sufrieran, y, cuando hemos estado ante un escenario jurídico de dificultad, yo me pregunto: ¿qué habrían hecho el Partido Popular o el partido de Vox, que también ha sido muy crítico ante esta situación? Aparte de pegarle zapatillazos al señor Sánchez, o venir aquí y decir que no nos gusta nada. ¿Qué habrían hecho ustedes?
Tuvimos ese debate en el mes de diciembre, y este portavoz les dijo: con las herramientas que tenemos, derivadas del Estatuto Autonomía, de las leyes orgánicas que limitan y que nosotros podemos delimitar derechos fundamentales, y con un elemento principal, que es la protección a la salud, nosotros hemos actuado, hemos tomado medidas, por supuesto que no tenemos un cien por cien de fiabilidad ni somos los más listos de la clase, pero somos personas, y este es un Gobierno honesto, que se ha preocupado por la salud y por el bienestar de sus ciudadanos.
Y me niego a que se instale en el discurso público que las instituciones vamos a conculcar o vamos en contra de los derechos fundamentales de los ciudadanos, o que nos saltamos a los jueces; y me niego a que en un parlamento se replique constantemente la negación de la separación de poderes, y me niego a que instalemos en el debate público una situación de catastrofismo, de comodidad y que nos olvidemos de una circunstancia tan dura, que todavía la estamos viviendo y que todavía la tenemos que combatir; y reivindico el papel de los políticos y de los representantes, desde los alcaldes a los cuales alabamos tanto, pero que siguen teniendo los desvelos, a los parlamentarios y a los gobiernos y a aquellos funcionarios y a aquellos juristas y a todo el mundo que ha tenido que trabajar tanto y que lo ha hecho por la protección y por la seguridad de la sociedad. Lo reivindico.
Reivindico el valor de la palabra, de la empatía, del respeto, de aportar soluciones jurídicas, del trabajo que se ha tenido y del que nos queda por hacer. Y también asumo obligaciones. Y vengo a decir que el Partido Socialista Obrero Español, los socialistas aragoneses, también lo que defendemos es que estamos en un país de libertad y estamos en un país en el que tenemos derechos y libertades, y tendremos también que empezar a hablar de las obligaciones que asumimos todos a nivel individual para que a todos nos vaya bien. Y, en esa España de los derechos, las libertades y las obligaciones, pues creo que poco aporta un debate como el que se ha traído aquí en estos términos.
Señora Pérez, usted ayer compareció también en rueda de prensa, responden siempre a todas las preguntas, se anticipan a las situaciones y, mire, yo estoy orgulloso de que en Aragón hayamos tenido una ley como la 3/2020, más de catorce decretos, las decenas de medidas, la realidad en el día a día, que se han ido tomando decisiones. Señora Pérez, cuenta con el apoyo y, sobre todo, con el respeto, con la empatía y con el agradecimiento del Gobierno del que usted forma parte por haber afrontado desde un lado humano, desde un lado legal y desde un lado del trabajo en el día a día, el enorme reto y las enormes dificultades que hemos tenido.
Y, creo, señorías que, si en este momento, usted hablaba de unos personajes de Oregón Televisión, creo que si este debate lo vieran muchos de los ciudadanos, también los que les votan a ustedes y que para mí tienen todo el respeto, pues quizás hoy no se sentirían orgullosos de algunas de las palabras y de testimonios que se han vertido en esta tribuna.
Adelante, señora Pérez, con un Gobierno que trabaja, que es serio, honesto, responsable y que además legisla para garantizar los derechos, las libertades y las obligaciones de toda la sociedad aragonesa.
Muchas gracias. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Villagrasa.
Señora consejera, para contestar al resto de los grupos.
La señora consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales (PÉREZ ESTEBAN): Gracias, presidente. Señorías.
Señor Sanz, ha dado usted en el clavo. A veces el árbol no nos deja ver el bosque; y aquí se ha estado hablando de cuestionamiento, de inconstitucional, de palabras muy gruesas que no voy a repetir, pero no sabemos si realmente se defienden los confinamientos, por ejemplo, y la cuestión de debate es si tiene que regularlos esta ley u otra. Pero no entramos en el fondo de cómo protegemos y de cómo establecemos las medidas precisamente que garanticen a un gobierno establecer esos instrumentos que nos permitan contener precisamente la expansión del virus. Es decir, vamos a una cosa formal, que no es menor, pero no sabemos al final porque no entran, quien ha propuesto este debate no entra en el fondo la cuestión.
Insisto, a mí me ha quedado la duda de si abrimos ya todo y aquí hay libertad absoluta, porque no existe el riesgo de contagio, o realmente tenemos que seguir estableciendo esas medidas precisamente para proteger la salud de los aragoneses. Y creo, francamente, que es incomprensible, pero es lo que hoy hemos visto aquí, y me parece muy atinada su reflexión y que ha girado su intervención precisamente en torno a eso, en torno esa esquizofrenia, ¿no?, de alguna manera, de pedir lo uno y lo contrario y de oponerse fundamentalmente a quien tiene la responsabilidad de tomar las decisiones, que, en este caso, es el Gobierno de Aragón aquí o el Gobierno de España en Madrid. Porque eso es el aval, eso es el histórico que hemos ido viendo en este más de año de gestión de esta pandemia. Por cierto, para la que no estábamos nadie preparados, algo inédito, no en Aragón, en España, en el mundo, y que hemos tenido, insisto, a base de prueba y error, que tomar decisiones, pero aquí y en todos los sitios.
¿Qué nos ha dado la aprobación de esta ley? [Rumores]. Tenga respeto, señora Susín, tenga respeto, tenga un poquito de respeto, no sé si conoce esa palabra, y de educación.
¿Qué es lo que nos da esa ley aprobada aquí? Nos da seguridad y, sobre todo, nos da eficacia en la aplicación de las medidas, e inmediatez, que es la clave. Nosotros necesitábamos en una situación de repunte y de subida controlar, tener mecanismos legales que le dieran legitimidad y seguridad en este caso al Gobierno de Aragón para poder tomarlas, y eso es lo que ha permitido esta ley. Es tan absolutamente fina que regula cualquier tipo de escenario y de unidad territorial. Desciende tanto… Y yo digo que se ha hecho también con la aportación de todos los grupos, porque es una ley que emana del Gobierno… Es que, cuando alguien de fuera pueda estar escuchando, tiene que entender que las leyes se aprueban en el parlamento, independientemente de que se traigan desde el Gobierno proyectos de ley o proposiciones de ley, se aprueban en el parlamento, y hay un trámite precisamente de ponencia, de debate, de incorporación de enmiendas, que es lo que definitivamente consigue el aval de estas Cortes.
Y nos hemos preciado no en esto, en todo, señora del Partido Aragonés, de defender los intereses de los aragoneses, defender los intereses de Aragón por encima de cualquier otro, y lo ha hecho la consejera en el Consejo Interterritorial una y otra vez, y lo ha hecho bajo criterios exclusivamente empíricos, sanitarios, científicos, siempre. Y lo ha hecho el presidente del Gobierno en cada una de las conferencias de presidentes que tuvieron los presidentes de las comunidades autónomas con el presidente de España. Siempre, y lo seguiremos haciendo. Que nadie se equivoque, que no por decir una mentira se convierte en verdad, algo que utiliza el Partido Popular con mucha frecuencia, y que, desde luego, quien sí dio una norma de sumisión y de arrodillamiento, como decía la señora Vaquero, fue un presidente aquí, que le dijo al señor Aznar: «aquí nos tiene, úsanos». Eso no lo hemos hecho jamás nosotros en Aragón y le aseguro que lo seguiremos defendiendo. [Aplausos].
Señor Morón, no está usted informado. Cuando Calatayud, pongamos un ejemplo, si Calatayud está confinado, ni puede entrar un soriano, ni puede entrar un zaragozano, ni puede salir una persona de Calatayud. Como nos pasó en el confinamiento autonómico, en periodos festivos con franceses, por ejemplo, que podían, y, sin embargo, tenían que regirse con las normas precisamente de la comunidad autónoma. No podían entrar. Y de eso tenemos un aval, un informe de la abogacía del Estado precisamente porque también suscitaba dudas.
Insisto, todas las decisiones en la gestión de esta pandemia inédita pueden generar dudas. Yo eso lo reconozco, y puede haber gente, y, sobre todo, cuando te pones detrás de la barrera, puede haber gente con la capacidad de criticar una y otra decisión, pero, insisto, una persona de Calatayud, si está confinada, pongo Calatayud como ejemplo, ni puede salir, ni nadie puede entrar en Calatayud. Un soriano no puede entrar en Calatayud, señor Morón. Quiero que quede claro porque esa es la realidad.
Otra cuestión que también es muy importante aclarar, porque yo creo que es que hablamos con demasiada frivolidad de esto. Como sabemos de todo, el comentario está en el bar. Yo lo entiendo, por eso creo que aquí se exige rigor, porque tenemos una gran responsabilidad en lo que decimos. La pandemia no termina cuando decae el estado de alarma, que es lo que yo creo que usted ha querido decir. No, no. En los niveles de alerta está especificado cuándo se vuelve a la nueva normalidad, que es en el nivel 1. Creo que es, señora consejera, ya me disculpará si me confundo, por debajo de cincuenta en catorce días y por debajo de veinticinco mantenidos en catorce días. Así es la nueva normalidad.
Es decir, hay unos indicadores que se tomaron ya hace muchos meses que regulan cuándo desaparece la pandemia, cuándo desaparece esa situación de emergencia. Por lo tanto, hombre, señor Morón, eso de que decae el estado de alarma y desaparece la pandemia, ¡ojo, ojo!, porque entonces sí que justifica muchas de sus declaraciones. La pandemia sigue entre nosotros. El virus está.
Fíjese si está, y lo uno con la señora de Chunta Aragonesista, que, cuando terminó el anterior estado de alarma, teníamos ciento veintidós contagios, porque saben que nosotros en Aragón, con la situación en verano de todo el sector de la fruta, no pudimos rebajar datos como pudieron rebajar alguna otra comunidad. Teníamos ciento veintidós contagios. Ayer teníamos trescientos setenta y cuatro. Tres personas en las UCI, ayer teníamos setenta y dos. Cuarenta ingresados, doscientos noventa ahora. Es decir, la situación todavía es preocupante, y, por tanto, lo que tenemos, la herramienta que nos hemos dotado en Aragón y que se ha adoptado estas Cortes, no el Gobierno de Aragón, estas Cortes, es precisamente poder seguir protegiendo a nuestros conciudadanos, porque todavía existe una situación de riesgo evidente [aplausos], porque los datos, desde luego, no invitan a que aquí ya se ha acabado y a la torera... No. Y las comunidades autónomas, en este caso, Aragón somos los únicos que estamos en esa situación.
Señora García, efectivamente, decía, hay una ley que nos regula prácticamente todo y que está estructurada por capítulos: nivel de alerta 1, alerta 2, alerta 3, y que, luego, además, por orden de la consejera se pueden levantar o flexibilizar precisamente las medidas, como es el caso que nos va a ocupar a partir del próximo domingo, a partir del decaimiento del estado de alarma el día 9, pero es verdad que hay cosas que no podemos hacer, que esta ley no nos ampara, que son el toque de queda y el confinamiento autonómico. Bueno, pues ahí queda, en función de la evolución de la pandemia, en función de los criterios que el propio departamento, exclusivamente con criterios sanitarios, objetivamente con criterios sanitarios, iremos tomando, en función de los instrumentos con que en este momento el Estado nos ha dotado y que nosotros mismos tenemos.
Mire, su intervención me hace, y la uno con la del señor Villagrasa, me invita a hacer una reflexión con ustedes. Hace unos meses tuvimos un encuentro las tres comunidades autónomas: Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón en Talavera de la Reina. Estábamos en una mesa sentados consejeros del Partido Socialista, que llevaban en Castilla-La Mancha y en Aragón la Sanidad, un consejero de Economía del Partido Popular en Castilla-La Mancha y una consejera de Ciudadanos de Sanidad de Castilla y León; de Castilla y León, también el consejero de Economía del PP. En esa mesa compartíamos todas y cada una de las medidas, señora consejera, todas y cada una de las medidas. ¿Dónde está la ideología en la resolución de los problemas en la situación tan extraordinaria en la que vivimos?
Yo dije, oye, igual tenemos que hacer un esfuerzo en que nosotros nos vayamos a Castilla y León a explicar lo que hemos hecho a la oposición, y que venga Castilla y León y explique aquí lo que se ha hecho, dejando al margen la ideología, dejando al margen los intereses partidistas y poniendo por encima de todo la salud de las personas y el bien común.
Y termino, y por eso digo que es muy importante hablar con rigor: se decía aquí y se ha puesto sobre la mesa una sospecha de duda que se había puesto una cuestión de inconstitucionalidad al Tribunal Constitucional de la Ley 3/2020. Bueno, pues es cierto que hay un recurso, una cuestión de inconstitucionalidad, señora Vaquero, a la Ley 3/2020, pero a la del 18 de diciembre, Ley 3/2020, de 18 de diciembre, que es la ley que regula la jurisdicción contencioso administrativa del Gobierno de España, pero no a la ley 3/2020, de 3 de diciembre, que es la nuestra.
Señora Vaquero, es muy importante, porque usted sabe mucho y estudio todos los días y me aplico muchísimo. Así que le recomiendo que, hombre, cuando diga una cosa así y una afirmación de esta naturaleza, esté usted mejor enterada y, sobre todo, mejor asesorada.
Señorías, agradezco enormemente, agradezco no solo el tono, señor presidente, termino, no solo el tono, sino el ofrecimiento permanente que encontramos en la mayoría de ustedes para superar esta situación, para superar, espero, el final de esta pandemia, de esta tragedia, y cada uno elige dónde posicionarse. Eso, desde luego, es libertad de cada uno de ustedes.
Muchas gracias. [Aplausos].
El señor PRESIDENTE: Gracias, señora consejera.