Comparecencias - De Consejeros de la DGA - Ante la Comisión de Industria, Comercio y Turismo
Intervinienen: Lafuente Belmonte, Miguel Angel - Aliaga López, Arturo - Barrena Salces, Adolfo - Ruspira Morraja, Antonio - Lobera Díaz, Pedro - Vera Láinez, Ana Cristina
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Buenos días, señorías.
Señor consejero, bienvenido.
Damos comienzo a la sesión de la Comisión de Industria, Comercio y Turismo [a las diez horas y diez minutos], siendo esta la última sesión del año que celebramos.
El primer punto del orden del día lo dejaremos para el final, como es costumbre, y pasaremos al segundo punto del orden del día: comparecencia del consejero de Industria, Comercio y Turismo, a petición de seis diputados del Grupo Parlamentario Popular, al objeto de informar sobre la situación creada, las consecuencias y las medidas que el Gobierno de Aragón va a tomar ante el anuncio realizado por la empresa Delphi Packard España de trasladar parte de su actividad a su factoría de Portugal, con el consiguiente despido de más de trescientos trabajadores de su planta de Tarazona (Zaragoza).
Pasamos a la exposición de un representante del Grupo Parlamentario Popular por un tiempo máximo de quince minutos.
Comparecencia del consejero de Industria, Comercio y Turismo al objeto de informar sobre la situación creada, las consecuencias y las medidas que el Gobierno de Aragón va a tomar ante el anuncio realizado por la empresa Delphi Packard España de trasladar parte de su actividad a su factoría de Portugal, con el consiguiente despido de más de trescientos trabajadores de su planta de Tarazona (Zaragoza).
El señor diputado LAFUENTE BELMONTE: Gracias, señora presidenta.
Señor consejero, bienvenido, como siempre, a esta su comisión.
Una vez más, y ya van unas cuantas en esta legislatura -yo, en las anteriores, no lo sé, pero en esta ya van unas cuantas-, hablamos de despidos y de cierres de empresas en la provincia de Huesca. Pero fíjense sus señorías que la actualidad supera al ritmo de esta comisión en la tramitación de los asuntos, porque, después de Delphi, hace ya unos días ha salido también el Grupo Meflur. Y hoy mismo publican en prensa que ha sido aprobado el expediente de Primayor. Por lo tanto, día a día..., aunque Primayor no sea de la provincia de Huesca, pero día a día vemos cierres y despidos en la Comunidad Autónoma de Aragón.
De este tema ya se habló en el Pleno pasado -me refiero al tema de Meflur-, y, por lo tanto, nos centraremos solo en la empresa de Tarazona. Doscientos cuarenta trabajadores, señor consejero, se van a la calle a partir del mes de enero. Yo no digo que no sea por iniciativa o que ellos..., no por iniciativa, pero sí que ellos hayan firmado el acuerdo al que han llegado con la empresa, pero, en cualquier caso, doscientos cuarenta trabajadores se van a partir de enero a la calle. Y a mediados del próximo año serán en torno a trescientas cuarenta las familias... Me gustaría utilizar más el término familia que el término trabajador, porque no es solo una implicación, como usted sabe, personal, sino que trescientas cuarenta familias se van a ver con graves problemas a partir del próximo año, tanto trabajadores fijos como trabajadores eventuales. Yo -la alcaldesa está aquí; creo que han sido también sus palabras-, yo y mi grupo, desde luego, lo califica de desastre, no solo para Tarazona, sino para toda la comarca de influencia de Tarazona.
Y ¿qué hace este gobierno?, que es a lo que hemos venido hoy. Pues, fíjese, yo le voy a decir dos cuestiones que hace este gobierno, no suyas -luego hablaremos de las que usted ha hecho-, pero le voy a decir dos cositas, dos perlas que ha dicho el número tres del gobierno, que es el señor Larraz, dos perlas que ha dicho en relación con esta crisis. ¡Perdón! Ante la crisis de Meflur, el señor Larraz dice que no es un tema laboral, sino que esto es un tema fiscal. Cientos de trabajadores a la calle, y dice que no es un tema laboral, sino que es un tema meramente fiscal. Esa es la sensibilidad del número tres del Gobierno de Aragón, del Partido Socialista y del Partido Aragonés. Ciento cuarenta aragoneses a la calle en Monzón, y el señor Larraz dice que es meramente un problema fiscal. Punto y final. Esa es la sensibilidad, señor consejero, que demuestra este gobierno. Así nos va en Huesca. Pero, fíjese, la segunda perla, relativa a Tarazona, a la empresa de Tarazona: trescientos cuarenta despidos, y el señor consejero Larraz dice que el mercado absorberá los despidos. Esa es otra sensibilidad que tiene el Gobierno de Aragón, en boca del número tres, diciendo que trescientas cuarenta familias afectadas por el despido, y que ahora mismo, a fechas navideñas, están temblando, que el mercado absorberá los despidos. ¿Qué compromisos, señor consejero, y qué implicación demuestran estas palabras? ¡Qué triste, señoría, todo lo que se está produciendo en torno a la empresa zaragozana y en torno a las empresas oscenses!
La compañía traslada parte de su producción de Zaragoza a Portugal. Un problema de deslocalización, un problema que yo creo que hemos hablado aquí cientos de veces sobre la deslocalización, y no se ha hecho realmente nada -esa es otra; hablaremos también-. Y mire que hemos hablado, porque, cuando luego se presentan los presupuestos de esta comunidad autónoma y uno ve que año tras año siguen siendo las mismas partidas -realmente no hay diferencias significativas-, y luego ve que en las comisiones de Industria se apuesta tanto por la diversificación del tejido industrial y por hacer no sé cuántas iniciativas, y ve que en los presupuestos no tienen ningún reflejo, no deja de pensar que es todo un brindis al sol y no deja de pensar que es literatura. Bueno, pues hablamos de un tema de deslocalización en Zaragoza, en Tarazona, y hablamos de que este gobierno no hace nada. Pero fíjese que no hace nada, y no lo dice este diputado: es un hecho, es una constante.
Nunca este grupo, señor consejero, ha reclamado responsabilidad del cierre de ninguna industria, ya sea en la provincia de Huesca, con el goteo de esta legislatura, o bien sea ahora, o bien sea en la provincia de Teruel o en Zaragoza. Nunca hemos reclamado la responsabilidad del cierre al gobierno, porque no la tiene, simplemente porque no la tienen ustedes. Ni lo hemos hecho ni lo haremos. Pensamos que en una decisión empresarial es la empresa la que toma esa decisión -y valga la redundancia-. Al igual, señor consejero, que usted se ha querido apuntar triunfos de implantación de empresas en Aragón, en la provincia de Huesca o en la provincia de Zaragoza, y no es usted el responsable, aunque sí alguna culpa pueda tener, pero el responsable de una decisión empresarial la tiene la empresa.
Pues bien, ¿qué le reclamamos al gobierno? Pues dos cuestiones muy concretas: la primera, que el gobierno cree en Zaragoza, en la provincia de Zaragoza, y en Huesca el entorno adecuado para fortalecer y desarrollar un tejido industrial fuerte -no solo la capital de Zaragoza, señor consejero, es importante; también la provincia de Zaragoza es muy importante-; y la segunda, que este gobierno actúe con eficacia y agilidad ante la situación que nos ocupa. ¡Nada más! No tienen ustedes la culpa de que Delphi cierre en Tarazona, no tienen ustedes la culpa.
Fíjense sus señorías ante la primera, ante lo que tiene que ser un entorno adecuado para la creación de empresas fuera de la capital de Zaragoza, en la provincia entera. Ni siquiera, señor consejero, son capaces ustedes de llevar a cabo las infraestructuras industriales necesarias. Del polígono de Tarazona hablamos ya hace tiempo. La señora alcaldesa también dijo lo que tenía que decir en su momento. Ni siquiera son ustedes capaces de crear el suelo industrial necesario para que los emprendedores puedan instalarse en localidades como Tarazona. Les dejan ustedes la salida adonde ustedes mismos los abocan. Ni siquiera de eso.
Y la segunda de las obligaciones suyas, que eso sí que es una obligación suya, es plantear medidas e iniciativas que usted mismo contesta por escrito ante una pregunta de Chunta Aragonesista. Usted mismo lo ha contestado por escrito, en una pregunta de Chunta, que fíjese lo que dice. La pregunta es qué medidas urgentes van a tomar ante la crisis de la empresa de Tarazona Delphi, y usted dice, simplemente... En los dos primeros párrafos no dice nada; en el tercero le dice a Chunta que están trabajando duro. Eso es lo que dice. Se lo puedo enseñar a cualquiera de ustedes. Están trabajando duro. Y lo último, como única iniciativa, lo que ustedes aportan es subvenciones a fondo perdido. Toda esa es su estrategia para paliar la crisis de Tarazona: subvenciones a fondo perdido y que ustedes están trabajando duro. Eso es todo lo que dice en su contestación; léalo bien, porque no dice nada más. En suma, y lo que demuestra, es que no saben, no tienen ni idea de lo que hacer en Tarazona, no saben cómo atajar el problema. La provincia de Huesca: otro constante goteo de cierre de empresas, y lo único que dijo en ese momento también, con SEB-Moulinex y con otras empresas, es que están trabajando duro. Ahora en Zaragoza y antes en Huesca. Es lo único que aportan.
Le he dicho antes que nosotros no buscamos culpables en el cierre, en el goteo constante de empresas en Aragón, pero sí son culpables ustedes de otra circunstancia: de la pasividad; de eso sí que ustedes son culpables.
¿Han hablado ustedes con la empresa, señor consejero? ¿Han tenido negociaciones? ¿Qué les transmiten sus directivos? ¿A qué acuerdos han llegado? ¿Qué iniciativas o qué soluciones les plantean ustedes? Cuando la empresa SEB-Moulinex cerró, ustedes aplicaron veinticinco medidas en Huesca, veinticinco medidas que usted sabe que no sirvieron absolutamente para nada. ¡Para nada! En ese momento declararon a Barbastro municipio prioritario, y ahora declaran en Zaragoza a Tarazona municipio prioritario, y usted sabe que eso no sirve para nada; simplemente es un brindis al sol que usted, cuando le ponen un micrófono, lo dice.
Los propios sindicatos, quiero dejar de manifiesto que dijeron en su momento que las medidas aplicadas por el Gobierno de Aragón no habían servido para nada en Huesca. Y en Tarazona ni siquiera han planteado esas veinticinco medidas. Fueron medidas teóricas, fueron medidas de manual, de libro. En la práctica, el resultado, más bien escaso; prácticamente nulo.
En el mes de septiembre del año 2004, el presidente del Gobierno de Aragón, el señor Iglesias, decía en el Pleno de las Cortes que, por ahora, por el momento, decía textualmente, el problema de la deslocalización en Aragón no le importaba lo más mínimo. Eso son palabras textuales del señor presidente de la comunidad autónoma. Yo espero, señor consejero, que usted, que creo que es un poco más sensato que él, le manifieste que empiece a preocuparse un poquito más por los problemas de deslocalización en Aragón. Espero que realmente sea así, que se lo diga usted.
En resumen, señor consejero, preguntas que nos gustaría que fueran contestadas e iniciativas que deseamos que usted nos explique, porque, hasta ahora, lo que hemos visto es que ustedes no tienen ningún tipo de solución al problema planteado.
Muchas gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Muchas gracias, señor Lafuente.
Señor consejero, tiene usted la palabra por un tiempo máximo de quince minutos.
El señor consejero de Industria, Comercio y Turismo (ALIAGA LÓPEZ): Gracias, señora presidenta.
Señorías, buenos días.
Comparezco en esta Comisión de Industria, a petición de seis diputados del Grupo Parlamentario Popular, para informar sobre la situación exacta creada y las consecuencias y las medidas que el Gobierno de Aragón va a tomar ante el anuncio realizado por la empresa de trasladar parte de su producción a la factoría de Portugal, con el consiguiente despido de esos más de trescientos trabajadores que se señalaban en el escrito de presentación.
En primer lugar, quizá convenga a sus señorías, los que somos antiguos en esta plaza, hacer un poco de historia sobre el expediente de la Delphi, porque no se pueden entender algunas de las afirmaciones, un poco ligeras, que se están haciendo sobre el tema de la Delphi. Como saben sus señorías, y yo también estaba en estas batallas, el problema de la planta, las plantas de Delphi en Aragón arranca el año noventa y nueve y 2000 -hagamos memoria-, que al final llegaron a la extinción de muchos puestos de trabajo, fundamentalmente en la planta de Belchite, en lo que, con las firmas de los trabajadores -también hay que reconocer que fue un hecho histórico, porque se reconocieron indemnizaciones de ochenta y cinco días por puesto de trabajo-, y con fechas 17 de febrero y julio de 2000, lo que se ha denominado en llamar «los acuerdos de Madrid», Delphi Packard España firmó un expediente con los trabajadores -¡firmó un expediente con los trabajadores!- para establecer unas medidas de un expediente serio por pérdida de competitividad de la compañía, en lo que ya conocen sus señorías: la industria del cable va del norte al sur. Vino a Aragón en los ochenta y se va de Aragón en 2000, después de veinte años. Esto es de libro, igual que nos está pasando en otros sectores, como el textil, etcétera, etcétera, por la competencia. Hago este énfasis porque parece que no nos queramos enterar de que vino a España por costes de Alemania en los años ochenta, y luego, en 2000, veinte años después, se está yendo del norte al sur. Y ya lo comenté en alguna comisión que yo mismo fui a ver la planta que tiene en Tánger, la Delphi, cuando se fue, y, lógicamente, al tipo de salarios, etcétera, etcétera... Al final, las empresas no es que se deslocalicen. ¡También tienen derecho a trabajar los trabajadores de Tánger! ¿O es que solo nos preocupamos de nosotros mismos?
En todo caso, hecha esta salvedad, como digo, se firma un plan industrial en las fechas febrero y julio de 2000 que... -y ahí está el matiz-, cuya conclusión acababa el 31 de diciembre. En este plan industrial se contemplaban -y yo creo que, ahí, los comités de empresa consiguieron acuerdos históricos- indemnizaciones de ochenta y cinco días por año trabajado. Eso marcó incluso un antes y un después para la reivindicación social en la comunidad autónoma, puesto que era una compañía multinacional que había utilizado nuestra mano de obra y nuestros trabajadores para competir, vender, etcétera, etcétera. Pues, bueno, si se marchaba, que se dejara algo en esta tierra. Y, al menos, en esos expedientes, los trabajadores, yo creo -nosotros también intervinimos ahí para llegar a los acuerdos correspondientes- que consiguieron acuerdos históricos en lo que respecta a las indemnizaciones. Estos acuerdos, su vigencia expiraba el 31 de diciembre de este año 2006. ¿Está claro, señorías? Expiraba. Entonces, el comité de las plantas de Tarazona y Belchite, los que quedan, decidieron negociar con la compañía prorrogar este plan industrial y adaptado a seis años después de que se había producido aquel plan industrial.
Estos acuerdos, como digo, el comité de empresa y la compañía firman un nuevo acuerdo, que aquí tengo delante, el 1 de agosto de 2006. Y lo voy a leer textualmente, porque las cosas luego han derivado en lo que... Dice: la empresa realizará esfuerzos para mantener la actividad industrial, etcétera, etcétera... Pero hay algún punto que deja entrever que queda abierto, y lo reconocen los propios trabajadores: como consecuencia de la crisis que viene afectando al sector de la fabricación de componentes para vehículos, así como la dificultad que puede suponer el pleno cumplimiento del plan industrial según los parámetros previstos, ambas partes están de acuerdo en prefijar causas cuyo acaecimiento supondría la concurrencia de aceptación por ambas de las causas del 51 del Estatuto de los Trabajadores. Son: generación de resultados operativos negativos, disminución de ingresos, pérdida de clientes, procesos de reestructuración que sean necesarios para poder mejorar el resultado operativo. Es decir, que los mismos trabajadores y la compañía reconocen en estos acuerdos que hay problemas. Está claro -resultado operativo es costes-, está claro y está aquí bien escrito. Queda abierta la puerta en estos acuerdos de 1 de agosto de apertura del preceptivo período de consultas para, manteniendo la... O sea, de bajas voluntarias, señoría, de bajas voluntarias. Y, además, se reconocen ochenta y cinco días de salario por año de servicio, a computar hasta el 31 de diciembre de este año, y posteriormente eso son cuarenta y cinco días. Conclusión: en este expediente ya se viene a reconocer que hay problemas en la factoría por cuestiones de costes, y los mismos comités de empresa -aquí están las firmas- firman todos de acuerdo para garantizarse, señoría, indemnizaciones por si vienen mal dadas. ¡Hay que decirlo!
No obstante, a lo largo de este expediente, este departamento que usted dice que es pasivo, que no hace nada..., yo he mantenido contactos a lo largo de 2003, 2004 y 2005 con Delphi y hemos apoyado, con subvenciones a fondo perdido, mejoras en las cadenas de producción, mejoras en las inversiones productivas para hacer la planta más operativa, señoría, y, además, están publicadas las ayudas en el Boletín Oficial de Aragón, están publicadas. Es decir, que no es que yo me entere de esto el día que voy a Tarazona, sino que constantemente hemos estado hablando con la compañía para intentar que, vía los instrumentos legales -que ahora dice que la subvención era a fondo perdido-, los instrumentos legales que hay de apoyo a la competitividad, y aquí tengo los expedientes... Es decir, que nunca hemos descuidado, sabiendo y conocedores del problema, nunca hemos descuidado las cuestiones relacionadas con esta factoría. Eso, para que le quede claro, y yo pongo a su disposición todos los papeles.
A partir de ahí, lógicamente, el problema se produce unos días antes. Yo tenía previsto viajar a Tarazona, porque yo conocía el problema, lógicamente. Lo que pasa es que a mí... Y lo voy a decir en esta comisión, lo voy a decir siempre: si yo tengo que captar empresas y llevarlas a una zona que sale continuamente porque hay crisis, los empresarios... Entre usted y yo. Dicen: «Oiga, mire, a mí no me hable usted de ir a zonas de crisis». Luego, muchas veces, si usted, señoría, me llama por teléfono, o cualquiera de ustedes, yo le explico cómo está el tema, y no creamos mal ambiente, porque tengo... Viene a mi despacho gente... Y esto me ha ocurrido con las cuencas mineras centrales y nos ha ocurrido con Andorra. En el momento que hemos roto las inercias... Pero si sale: «Crisis en Tarazona», los empresarios dicen: «Oiga, no me lleve usted a un sitio donde hay crisis. ¡No me lleve allí!». Es decir, que muchas veces creemos que estamos haciendo un buen favor, y estamos haciendo un flaco favor a la hora de atraer inversiones. En todo caso, sepa su señoría que no hemos estado parados. Hemos dado expedientes para productividad, para mejora de costes, para mejora de cadena de producción, etcétera, etcétera.
Como le digo, hemos estado siguiendo el expediente de regulación de empleo. Yo tengo aquí anotados todos los días que he hablado con la alcaldesa, con el presidente del comité y con la compañía, que hablé hasta con París. Porque yo quería tener claro que se aseguraba que, si nosotros estábamos a apoyar el expediente, tenía que tener claro que se aseguraba que no se perdía una parte de los trabajadores por hacer un centro europeo de competencia. Y eso lo quería, y lo consulté y hablé con la dirección de la compañía en París, porque creí oportuno hacer esa cuestión.
A partir de ahí, como sabe, el expediente se ha aprobado el día 12 de diciembre, se ha aprobado un expediente -corrijo a su señoría- donde son doscientos sesenta y siete trabajadores los que han firmado la baja voluntaria. Y le voy a señalar una cuestión: importantísimo también el trabajo que ha hecho el comité de empresa, importantísimo, porque se apuntaron trescientos sesenta y siete, con lo cual se ponían en peligro todos los puestos de trabajo. Y yo le digo que hay que felicitar al comité de empresa, porque se habían apuntado más personas, y hubo que hacer reuniones en grupos pequeños para no perder totalmente el centro productivo. Y de esas conversaciones y de esas gestiones tiene aquí usted perfectamente documentadas todas las actuaciones, a horas intempestivas.
En todo caso, al final tenemos el expediente, como le he explicado, aprobado y firmado por el comité de empresa, donde se contemplan, lógicamente, estas indemnizaciones. En primer lugar, los primeros trabajadores -datos fehacientes- salen, como dice usted, los primeros, en enero. Después viene, en marzo, abril y mayo, el bloque de los trabajadores. Lógicamente, para ir adaptando una empresa no pueden irse doscientos cincuenta, porque las cadenas y la línea de producción marcan unos mínimos que, además, están recogidos en el propio acuerdo industrial. Que la empresa podría incluso decidir qué trabajadores o decir qué no trabajadores, porque un trabajador, en una parte de esas de calidad, puede echar abajo el trabajo de cincuenta. En fin, lo explico un poco...
Conclusión: los dos hemos estado trabajando durante todo este período intentando, como le digo, que mantengamos el empleo como ese centro de recambios, porque, además, los trabajadores que se quedan tienen asegurados, si ocurre algo luego, los ochenta y cinco días por año trabajado hasta el 31 de diciembre y, señorías, cuarenta y cinco días a partir del año seis hasta el once, o sea, que no se queda nadie sin cobertura, en este caso, de la indemnización por despido.
El expediente se ha firmado, se ha aprobado. Y, ¿qué dice usted? No he hecho nada. Pues, mire usted, en primer lugar tiene mal la información, porque en Tarazona hay doscientos ochenta mil metros cuadrados de suelo disponible, y, que yo sepa, usted no me ha llamado para mandarme ninguna empresa. Yo estoy captando, estoy hablando, estoy hablando en Tarazona. ¡Hay suelo disponible! Y, además, desde el día 30, anteponiéndonos a lo que yo conocía, se firmó un convenio con el ayuntamiento para llevar el gas, el gas natural, porque una empresa, a veces, no tiene gas natural y es un handicap. Hay que tener agua, gas, banda ancha y electricidad. Ya saben sus señorías. Con lo cual, hemos puesto seiscientos y pico mil euros para llevar a ese polígono el gas natural, porque, ya le digo, hay doscientos ochenta mil metros.
Segundo: en ese polígono industrial, las empresas que se instalen tendrán atención preferente. Y ha cometido otro error con lo de Barbastro, porque hay una empresa que este consejero ha ido a buscar y que ha evitado que se fuera a otra localidad como Navarra, que es Massó y Carol, que se está implantando en Barbastro, en virtud de esos acuerdos preferentes que le decía.
Con lo cual, otra acción concreta: el convenio para que el coste del suelo, señoría, sea barato, porque sabe que es el suelo del SEPES, y hemos llegado a un acuerdo ayuntamiento, Diputación General de Aragón, el SEPES y la Diputación Provincial, y, al final, el coste del suelo sale en torno a veinte euros. Medidas concretas. Esto no es elucubrar, lo he dicho.
Por otra parte, como le he dicho, una vez convocadas las ayudas de las pymes... Yo lo voy a decir, porque me lo preguntan todos los medios: yo tengo contactos con alguna empresa para ir a Tarazona, pero no la voy a decir hasta que no la tenga cerrada, porque ya sabe que, en estos momentos, a veces anuncias cosas... Yo no tengo que anunciar nada que no cierre, y, en esos casos, lo mejor es callarse y seguir trabajando.
En todo caso, como conclusión, hemos apoyado también a otras industrias en Tarazona, de las inversiones que están haciendo, que están cogiendo empleo. Incluso, cuando llegue el momento, como le digo, espero tener alguna solución más seria.
Al final, hemos conseguido, se ha conseguido, por el esfuerzo de trabajadores, la empresa, el ayuntamiento y todos un poco, no perder, como le digo, ese centro productivo. Y sepa su señoría que esto es así. El caso de Primayor... Pero léase su señoría hoy algún periódico aragonés, donde el empleo del sector industrial de Aragón es uno de los mejores de España, porque se está creando mucho empleo, que usted siempre se olvida de eso. Y léase los datos que hoy se publican. Y, además, en estos casos, lo que hay que actuar es con rapidez y, muchas veces, con mucha discreción, porque, si vamos predicando que vamos a llevar ocho mil empresas, quizá nos encontremos con la sorpresa de que no llevemos ninguna.
En todo caso, espero haber contestado a toda esta serie de cuestiones que me planteaban, y, si no, intentaré hacerlo en la réplica.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Muchas gracias, señor consejero.
Para la réplica tiene la palabra el señor Lafuente, en nombre del Grupo Parlamentario Popular, por un tiempo máximo de cinco minutos.
El señor diputado LAFUENTE BELMONTE: Gracias, presidenta.
Mire, señor consejero, lo primero que le voy a decir es las dos muletillas que tienen ustedes en este gobierno constantemente con la oposición. Nosotros no le hemos llamado para instalar ninguna empresa porque las competencias las tiene usted y el que gobierna es usted. A ver si quitamos eso ya de estas Cortes, porque, constantemente, los consejeros del Gobierno de Aragón le piden las soluciones a la oposición. Pues, mire, el que gobierna es usted. El que está gobernando es el Partido Socialista y el Partido Aragonés, y las soluciones las tienen que aplicar ustedes, porque es su obligación, entre otras cosas. Y, si no, en las próximas elecciones, a ver si los aragoneses quieren, se quitan ustedes, y verán más soluciones, pero cuando tengamos las competencias; ahora son suyas.
Y la segunda cuestión: a usted le da miedo -a usted, no-, a los consejeros del Gobierno de Aragón les da mucho miedo que hablemos de determinadas cosas, porque, si no, no se instalan empresas... Vamos a hablar con cuidadito de estas cosas, no nombremos la palabra crisis, porque si no... ¡Cuidado con lo que decimos en los Plenos! ¡No nos pueden dar información de las empresas para no...! ¡Oiga!, mire, pero ¿qué le parece que son estas Cortes? Es el sitio donde precisamente, en Aragón, se tiene que dar la información. ¡Aquí, en estas Cortes! Pero ¿qué es esto del secretismo que ustedes están queriendo aplicar constantemente en estas Cortes? ¡No nombremos determinadas palabras, porque, si no, afectará...! Pero, ¡oiga!, que las competencias en el gobierno las tendrá usted, pero también nosotros tenemos una obligación, que es controlar lo que usted hace. Y, si ustedes no nos dejan decir determinadas palabras o no nos aportan la información necesaria, no podemos hacerlo. Con lo cual, nosotros no tenemos la competencia de lo que ustedes nos piden, que es gobernar, y tenemos una que queremos hacer, que es hacer de oposición, que ustedes no nos dejan.
Fíjese, ha dicho usted, señor consejero: «La industria del cable va del norte al sur». Eso es lo mismo que dijo con el sector textil. No podemos hacer nada, pero son palabras suyas. Y ¿por qué en Galicia sí que pueden hacer, señor Aliaga? ¿Por qué en Galicia les va tan bien con el sector textil? ¿Por qué, porque tienen más imaginación? ¿Porque han tenido otras ideas? ¿Porque son mejores empresarios los gallegos que los aragoneses? Yo no me creo eso. Eso lo está diciendo usted.
Y le voy a decir la tercera cuestión. ¡Oiga!, yo respeto mucho el empleo en Tánger, pero me importa más en Tarazona, provincia de Zaragoza, mucho más que el de Tánger. Yo entiendo que a usted le debe de preocupar mucho el de Tánger, pero a mí me importa más el de Tarazona. Y me importa más la alcaldesa de Tarazona que el de Tánger, sinceramente se lo digo, aunque sea del grupo completamente y diametralmente opuesto al mío. Pero me importa bastante más su municipio que el de Tánger.
Y, además, usted, hoy, ha venido a decir y a corroborar sus palabras, que dijo el 14 de noviembre, que dijo cuando fue a Tarazona -porque fue a ver, como usted ha dicho bien, a la señora alcaldesa-. Mire sus palabras: «Hay un hecho cierto: el número de gente apuntada es la variable llamada x, y otro hecho, que es la gente que necesita, que es la variable y. Hay que conseguir que la x sea igual a la y». Efectivamente. Lo pusieron a caldo por decir eso. ¡Lo puso todo el mundo a caldo: la empresa y los sindicatos! ¡Todo el mundo! ¡Todos lo pusieron a caldo por esas palabras! Y no me extraña, porque la sensibilidad que usted manifiesta con trescientas cuarenta familias es la variable x y la variable y. Podía haber utilizado usted otros términos, no tan fríos como la x y la y, y podría haber dicho lo mismo. Pero hablar de la gente que pierde el empleo en variables x e y... Le pusieron a usted a caldo. ¿A eso reduce usted todo el problema? ¿A la variable x que le coincida con la y? Y acaba de incidir en eso: para usted no es un problema de futuro de una comarca; es un problema... -lo ha dicho perfectamente, y, a buen entendedor, pocas palabras-, para usted es un problema simplemente de encaje, de que sobran trescientas cuarenta personas -doscientas sesenta y siete en este momento, ha dicho usted- y que les tiene que dar salida por algún sitio. Como hay un pacto firmado con los sindicatos, a usted le sobra ya el problema. Pues a este grupo no porque le importan Tarazona y su comarca. A este grupo no porque le importan Tarazona y su comarca. Y dijeron lo mismo en Sabiñánigo, lo mismo: «No podemos hablar, pero tenemos una empresa que quiere venir». ¡Lo mismo! Ahora tampoco pueden hablar, pero en Tarazona hay muchos intereses empresariales que quieren implantarse, pero no hablen desde la oposición, porque entonces serán ustedes los culpables de que no se instale ninguna empresa. Si ustedes siempre tienen la sartén por el mango... Si no va nadie ha sido porque los de la oposición hemos dicho algo. Siempre tienen al culpable para echarle la culpa, y siempre es la oposición, porque no podemos hablar de lo que ustedes no quieren que hablemos.
Yo, señor consejero, sinceramente, y afirmando sus palabras, ¡no saben qué hacer! ¡Punto! A ustedes se les van cerca de trescientos empleos, y no saben qué hacer, no tienen ninguna iniciativa, y las que tienen no les funcionan.
Ese rumor que han sembrado desde hace meses... Porque usted sabía lo que iba a pasar; usted, desde luego, dispone de la información -nosotros no la tenemos, entre otras cosas porque no nos la dan, pero usted disponía de la información-. Y se ha querido poner la tirita antes de la herida. Y lo que ha hecho es sembrar. Usted, lo que ha hecho es sembrar: «No se preocupen en Tarazona, que tenemos un montón de intereses empresariales que, si la oposición no habla demasiado de ellos, vendrán a Tarazona». Pues mire, nosotros, desde luego, no vamos a ser los que evitemos que una empresa se instale en Tarazona. Si nos piden un esfuerzo, no hablaremos de ningún nombre. ¡Oiga!, pero hay conversaciones, como usted decía, por teléfono, conversaciones privadas, y realmente se puede llegar a acuerdos privados, y se puede hacer política no solo desde un micrófono. Pero yo no sé nada de eso. A nosotros nadie nos ha dicho nada de eso. En el Ayuntamiento de Tarazona nadie sabe nada de eso. La alcaldesa, igual sí. Desde luego, el grupo municipal del Partido Popular en Tarazona no sabe nada de eso. Y nos piden la discreción a nosotros. ¡Oiga!, pues seguiremos con la discreción, pero entre otras cosas porque no sabemos a qué discreción nos obligan, porque no sabemos nada de eso. ¡Pero igual que no...!
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Señor Lafuente, debería de concluir. Ha consumido su tiempo.
El señor diputado LAFUENTE BELMONTE: Acabo ya, señora presidenta.
Pero, entre otras cosas, porque nadie sabe nada de eso.
Señor consejero, vuelvo a repetirle -y quiero concluir-: no es un problema exclusivamente laboral o no es un problema exclusivamente fiscal, como dijo el señor Larraz, que también, pero es un problema que afecta al asentamiento de población en Tarazona, a la distribución y vertebración de la población de Aragón y a un problema concreto que en este momento es Tarazona, que han sido muchos en la provincia de Huesca y que también tenemos algún caso en la provincia de Teruel.
Pónganse ustedes las pilas y, cuando hagan algo, hagan algo mejor que lo que hicieron con SEB-Moulinex, que realmente tenga un calado y, realmente, soluciones. No solo apelen a que la oposición sea discreta, pero que tienen muchas iniciativas en marcha.
Muchas gracias, señora presidenta.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Gracias, señor Lafuente.
Señor consejero, para la dúplica tiene usted la palabra por un tiempo máximo de cinco minutos.
El señor consejero de Industria, Comercio y Turismo (ALIAGA LÓPEZ): Yo no sé si no me he explicado bien -gracias, señora presidenta-. Señoría, yo no he pretendido molestarle a usted con la coletilla, no he pretendido molestarle, créame que no he pretendido molestarle. Simplemente le he comentado la experiencia real de todos los días. Yo hablo y digo: «Oye, ¿por qué no te instalas en Tarazona?»; y dice: «No, joder, que hay crisis», no sé qué. O sea, yo le cuento mi vida personal diaria, y usted me lo lleva a que no me preocupan las familias. ¡Pues claro que me preocupan! Me preocupan más las familias, porque a lo mejor, señor Lafuente, si no hubiera habido una serie de negociaciones, como le he dicho, con cierto nivel de discreción, no serían doscientas sesenta y siete, que le corrijo: serían setecientas. ¡Setecientas!
Y lo de la industria que va del norte al sur... Pero si usted, vamos, si eso no lo ve ya... Mire lo que está pasando con la industria de la automoción. Es decir, si usted no lo ve ya, eso es mala señal; si no ve que la industria manufacturera intensiva en mano de obra va del norte al sur: aquí, en Alemania, en Francia... En todos los países del mundo va del norte al sur, como fue a España cuando la industrialización..., a partir del plan de estabilización del cincuenta y nueve, que vinieron todas las grandes multinacionales por costes y por crecimiento de mercado.
Bien. En todo caso, yo, cuando dije lo de x e y, yo creo que es un ejemplo claro. Es decir, para que podamos mantener la actividad en la compañía con un mínimo de que puede hacerse una producción, se necesitan doscientos, trescientos trabajadores. Y le llamé a la variable y. Soy ingeniero, y tengo que explicar las cosas con un poco de... Y no me puso nadie verde -se lo está inventando-: todo lo contrario.
Y luego hacían falta, lógicamente... Si la situación se tensaba de una manera que todos... Y, de hecho, el hecho cierto es que se apuntaron más de los que realmente al final han pactado el expediente, y yo he dicho aquí que el trabajo del comité de empresa convenciendo a la gente, etcétera, etcétera. Yo creo que en estos expedientes, si algún día llega usted a ser consejero, verá que esto va a ser habitual, porque precisamente estamos viviendo unos tiempos de bonanza, y vienen más a Aragón que van, que se van. Viene más empleo del sector industrial que se va, porque hay unas condiciones. Dice: no, es que este gobierno ha hecho un acuerdo con los empresarios y sindicatos, el AESPA, y hay planes de formación, y hay apoyo a la I+D, y hay órdenes de pymes que priorizan los sectores maduros, que lo hemos puesto este año, y hay nuevos empleos en el sector energético. Y la realidad es esa: que el crecimiento de la economía aragonesa es crecimiento serio, y ante eso es difícil hacer oposición. De verdad, usted lo tiene muy difícil. Y dice usted: en Huesca. ¡Hombre!, no me descuente solo... Hemos arreglado algún tema en Huesca. ¿Cuántos puestos de trabajo tiene usted en Walqa? No los ha contado. Sumando. Sume a ver los que se han perdido. Igual hay más creados que perdidos.
Entonces, yo no quiero polemizar con usted, señor Lafuente, pero, mire, yo le puedo asegurar que desde el gobierno, con el ayuntamiento, con el comité de empresa y con la empresa, hemos hecho todo lo posible para que no se nos cayera más empleo -más familias, que dice usted, que lo lleva al terreno familiar-, para que no se perdiera la producción en Aragón.
Y le digo una cosa: este acuerdo está firmado por los empresarios y los agentes, y se está garantizando también un derecho del trabajador, que es recibir una indemnización si pierdes el empleo.
Y, luego, si con esta coyuntura, con este gobierno serio y fiable, no somos capaces de compensar esto, ya me lo pedirá, ya me pedirá el resultado en mayo o junio, y yo le diré. Pero yo creo que se ha hecho todo lo posible por intentar... Pues mire: con estos expedientes... Y lo de Galicia del sector textil es un ejemplo que viene de mucho más atrás y no es comparable, porque, aquí, el sector textil es de pequeñísima dimensión y no tenía diseño propio, sino que trabajaba para las marcas. Y algún diputado en esta mesa sabe mucho también de eso, en esta sala. En todo caso, yo no he querido polemizar, pero he dicho que, al menos, a mí me queda la tranquilidad..., nunca estás tranquilo, porque esto puede ocasionarte en el 2008 otro expediente, pero al menos de que hemos hecho todo lo posible porque el efecto -que lo dije también- sea el mínimo posible. Le he dicho: suelo industrial en Tarazona disponible.
Y lo que ha dicho de que no le informo, que es mi responsabilidad..., pero algunos alcaldes de su partido me llaman y me dicen: «Tengo una empresa», y en veinticuatro horas cerramos. Conque mire usted.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Muchas gracias, señor consejero.
Seguidamente pueden intervenir los representantes de los diferentes grupos parlamentarios, por un tiempo máximo de cinco minutos, para solicitar aclaraciones o formular preguntas.
Tiene usted la palabra, señor Barrena, en nombre del Grupo Parlamentario Mixto (Agrupación Parlamentaria Izquierda Unida de Aragón).
El señor diputado BARRENA SALCES: Gracias, señora presidenta.
Buenos días y bienvenido, señor consejero.
Gracias por la información. Y yo voy a compartir con usted alguna reflexión. Probablemente, en un tono más sindical que el que ha defendido el señor Lafuente, que, desde que descubren la problemática de los trabajadores y trabajadoras, la verdad es que es de agradecer esa preocupación por ellos.
Pero voy a empezar por reflexionar sobre una cosa que usted ha dicho, más que nada porque, si lo enfocamos así, seguramente irá a peor. Usted ha dicho: «Me importa mucho más la alcaldesa de Tarazona que el alcalde de Tánger». ¿Sabe lo que ocurre? Que al alcalde o alcaldesa de Tánger -me extraña que en aquel país sea alcaldesa, me extraña-, seguro que al alcalde de Tánger le importa mucho más Tánger que Tarazona. Claro. Y por eso entramos en el mercadeo al que nos llevan, y por eso no podemos enfocar las cosas así, porque siempre habrá un alcalde de Tánger que, como le preocupará más Tarazona, o Barbastro, o Huesca, o Zaragoza, las multinacionales, que son las que hacen negocio, van a encontrar sitio donde ubicarse. Y, por lo tanto, yo creo que deberíamos de empezar a preocuparnos del modelo económico -por cierto, que le gusta mucho más al Partido Popular que a Izquierda Unida- y este tipo de situaciones.
Dicho esto, y entrando en el problema, yo, que respeto profundamente a los trabajadores y trabajadoras y a sus representantes, tengo que reconocer que lo que está pasando en Delphi viene de muy atrás. Viene de un acuerdo firmado con la Unión General de Trabajadores, en solitario, pero legítimamente firmado, porque son sus representantes y, evidentemente, son los que siguen recibiendo el apoyo mayoritario de trabajadores y trabajadoras de las plantas de Delphi -han ganado otra vez las elecciones, hace un par de meses-. Y, por lo tanto, yo, desde ese respeto que tengo por estas cosas, pues ¡qué quiere usted que le diga! Claro, nos pasan estas cosas, sí. Yo ahora he visto otra cosa que han hecho los sindicatos, que también respeto, también la UGT (Unión General de Trabajadores), y ellos firman otra cosa hasta el 2011. Yo sé que firmar cosas a tan largo plazo te ata bastante las manos, y, a partir de ahí, lo que se suele hacer es dar cheques en blanco para, a partir de ahí, que la empresa maneje, como está manejando, ese tipo de situaciones. Pero insisto: lo respeto, y, a partir de ahí, a ver cómo lo resolvemos.
Yo voy a entrar en tres temas que son los que, cada vez que hablamos de estas cuestiones, siempre le planteo al gobierno, y en este caso al consejero de Industria, igual que otras veces al de Economía. Y es, primero, qué líneas claras de diversificación industrial estamos teniendo. Ya sé que está viniendo empleo por la bonanza económica que tenemos, pero ya sé que no es seguro, porque es empleo sin mucho valor añadido. La mayor parte del empleo que viene, aunque sea para sectores industriales, evidentemente, tiene un nivel de cualificación que desde mi punto de vista lo hace vulnerable. Estamos apostando demasiado por la logística, y la logística, evidentemente, también es vulnerable.
Estamos siguiendo una línea de ayudas que yo nunca veo que lleven contraprestación para las empresas que la reciben a cambio de plantear planes industriales o compromisos de mantenimiento de empleo. Yo, siempre que pregunto esto, nunca me contestan. ¿Cuántas empresas a las que se las ayudado, como a Delphi, cuando no han cumplido sus compromisos de estabilidad en el empleo o de mantenimiento del empleo o de mejora del empleo, lo han devuelto? ¿Cuánto ha devuelto Delphi, que, aunque lo haya firmado con trabajadores y trabajadoras y con sus representantes sindicales, el empleo está bajando? ¿Cuánto ha devuelto? Y, a pesar de que ha bajado el empleo, ¿cuánto de más le han dado y con qué garantías? A mí, esa cosa me interesaría mucho saberla. Y ya no solo esa; fíjese las que tenemos -el señor Lafuente le ha citado unas cuantas-: Meflur, Primayor... Todas han tenido ayudas del Gobierno de Aragón, todas. Y, a mí, esa línea de... No seré yo el que diga que no hay que apoyar a las industrias ni a las empresas, no, jamás, pero siempre diré que asumiendo la responsabilidad social que tienen.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Señor Barrena, debería de concluir.
El señor diputado BARRENA SALCES: Acabo ya, señora presidenta.
Y, a mí, eso es un dato que todavía no lo conozco. Entonces, a ver si ahora me lo da; si no, seguiré planteando y preguntando.
Y, después, es verdad, a partir de ahí, yo sigo echando en falta programas claros de diversificación industrial apoyados, sobre todo, en los recursos endógenos que tiene nuestra tierra. Y ahí echo en falta programas claros utilizando, sobre todo, el desarrollo rural y olvidándose del bum inmobiliario, que algún día se acabará también, sobre todo porque ya no quedará sitio donde construirlos. Bueno, bueno.
Esas serían las cuestiones que Izquierda Unida querría encontrar una respuesta.
Gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Gracias, señor Barrena.
Señor Ruspira, tiene usted la palabra en nombre del Grupo Parlamentario del Partido Aragonés.
El señor diputado RUSPIRA MORRAJA: Muchas gracias, señora presidenta.
Buenos días, señorías. Buenos días, señor consejero.
Hoy, bonito día, 28 de diciembre, Santos Inocentes, nunca mejor para tener esta comparecencia presentada por el Grupo Popular, porque la verdad es que, para aprovechar estos cinco minutos, tengo que reconocer que no sé ni por dónde empezar, porque, claro, se ha abierto un debate filosófico que es imposible ni siquiera darle una serie de puntadas en cinco minutos.
Respecto al asunto de Delphi Packard de Tarazona (provincia de Zaragoza), tengo que indicar que creo que ha sido más que claro, contundente: la explicación del expediente; las gestiones realizadas por parte de la consejería de Industria, Comercio y Turismo; las gestiones realizadas por el comité de empresa; las gestiones realizadas desde el ayuntamiento; las gestiones realizadas por los propios trabajadores, entendiendo que tienen que mantener la estructura productiva en un porcentaje menor; las explicaciones dadas a la situación real sobre la deslocalización industrial, un problema que existe en la economía en la Unión Europea y en los países desarrollados, y que, si este consejero del Partido Aragonés tuviera la respuesta y la solución, sería ministro no de este país, de un país mucho más grande, y, por supuesto, llevaría las siglas del PAR en la espalda en ese momento para que quedara claro. Y, por supuesto, si tuviéramos respuesta a esas dudas metafísicas respecto a lo que apuntaba, por ejemplo, el portavoz de Izquierda Unida, y que no dudo que hará posteriormente el portavoz de Chunta Aragonesista, en una línea incluso más radical, nos encontramos que el Grupo Popular -hoy vestido adecuadamente para la fecha, porque parece que vayan todos de colegio con sus trajes oscuros-... Hay que entender que la situación es difícil de explicar.
Y me van a perdonar, porque hoy en día no se habla de productividad: se habla de competitividad. Y unos hablan de los trabajadores, otros hablan de los empresarios... Pues el Partido Aragonés habla de las empresas. Y las empresas son esas células que son necesarias en todo territorio para generar riqueza económica y social. Y la consejería de Industria, Comercio y Turismo, que sobre ella recae una parte muy importante del producto interior bruto de esta comunidad autónoma, que, por cierto, crece por encima del 3,8% en el tercer trimestre de este año -tres décimas más que en el anterior; seis más que en el trimestre del año anterior, un 1% por encima de la media nacional y más de un punto y pico sobre la media europea-... Pues la verdad es que, claro, nos encontramos que, efectivamente, claro que hay empresas que cierran, efectivamente, y nos tienen que preocupar todas.
Y, cuando yo digo empresa, me refiero a que nos tienen que preocupar los empresarios y los trabajadores, y que tenemos que preocuparnos de que exista responsabilidad social corporativa en las empresas, y que tenemos que entender que el empleo tiene que ser cada vez más de mejor calidad. Pero está clarísimo que no vivimos en el mundo de Pin y Pon; y que los problemas existen y que avanzan inexorablemente; y que el número de empresas que cierran cada semana es muy importante; y que aquí solo, afortunadamente, solo llegan aquellas que por número o por influencia socioeconómica en un territorio son relevantes para que lleguen a los medios de comunicación, pero puedo comentar ferreterías, comercios al menor, puedo comentar pequeños talleres, puedo comentar industrias que están cerrando, por ejemplo, en la provincia de Huesca todas las semanas.
No hay que mirar la parte negativa, en este caso, y hay que ser optimista por naturaleza, y más en estas fechas de reflexión navideña, sino que hay que tener en cuenta que las botellas se tienen que ver medio llenas y no medio vacías. Y lo que hay que valorar es el trabajo que se está desarrollando: las líneas estratégicas de desarrollo que se están poniendo en marcha en este Gobierno de Aragón desde hace años; los proyectos nuevos estratégicos de desarrollo que se están marcando en el territorio; el aprovechamiento de recursos endógenos; la diversificación empresarial que se está produciendo en los diferentes sectores productivos, etcétera, etcétera, etcétera, que este consejero, a pesar de a veces parecer Superman, es imposible que sea capaz de transmitir en esta comisión en unos pocos minutos; es absolutamente inviable.
Entonces creo que es mucho más importante razonar y ver las empresas que se están creando, los puestos de trabajo que se están creando y programas tan importantes como el que ha mencionado del parque tecnológico Walqa, o proyectos estratégicos como Dinópolis o como el parque tecnológico del motor o la Ciudad del Motor, en Alcañiz, o el programa de asistencia «Emprendedores en su domicilio», que en estos momentos, en las tres provincias, están generando empleo, del que le gusta a los partidos de izquierdas, que están apegados y arraigados en el territorio, que están generando puestos de trabajo que son estables y que, además, están absolutamente atados a este territorio, porque todas las mañanas tienen que levantar, entre comillas, como dicen los comerciantes, levantar la persiana.
¿Qué sucede? Que, cuando trabajamos con multinacionales que están, además, en un sector complicado como es el secundario o el industrial y que cada vez se está deslocalizando más porque se valora un factor productivo que es el coste de la mano de obra, hace que hacia el norte de África o que hacia los países de América del sur o hacia países asiáticos cada vez se esté produciendo más. Y, ¡ojo!, atémonos los machos, sujetemos el cinturón, porque esta situación no va a cambiar en los próximos años. Y esta situación de bonanza económica, que parece que a algunos les moleste -Aragón está por encima de la media porque se está trabajando bien, y eso es mérito de todos: del gobierno, de la oposición, que está permanentemente en esa labor de impulso, que a veces se puede malentender, pero solo a veces, achuchando, entre comillas, al Gobierno de Aragón para que se siga trabajando en esa dirección-, hace que Aragón esté en una posición puntera económica y de desarrollo social y económico de nuestro país, España. Y esa es la realidad. Pero, ¡ojo, que el futuro, como estoy diciendo... Se ha salvado un round -round: erre, o, u, ene, de- muy importante con respecto a lo de la Opel en el tema de la General Motors. ¿Cómo estaríamos? Aquí, en estos momentos, podríamos estar, ¡vamos!, con fuego, bomberos, extintores, la oposición subida por las paredes...
A ver, señores, las decisiones empresariales, en noventa y nueve de cada cien casos, las decide el empresario, porque es el que arriesga su dinero. Y el empresario no es una ONG ni es una fundación: trabaja para que su cifra de negocios sea la mayor posible y su cuenta de resultados sea de color azul -ese color que representa al Partido Popular-. Esa es la realidad. Y, si el empresario tiene un resultado que no le convence y cree, adaptando nuevas posibilidades de costes, reducirlos, está claro que va a temblarle muy poquito la mano para adaptar ese planteamiento. Y, cuando una empresa, señores, y los representantes de esa empresa firman ochenta y cinco días de indemnización por año de trabajo hasta el 31 de diciembre de 2006, pues, ¿qué quiere que les diga? Esa empresa tiene muy claro que va a cerrar y que ese coste que va a asumir de indemnización..., va a cerrar esa línea productiva, evidentemente, no se malentienda lo que acabo de decir, porque lo que está mandando es una... No soy especialista como es el consejero, ingeniero industrial, en temas eléctricos e industriales, ni muchísimo menos, yo soy ingeniero -con lo cual, por cierto, entre paréntesis, lo de las variables..., llevo toda mi vida trabajando con variables, y, además, recomiendo que se trabaje con ellas, porque a veces, cuando se desvían, la verdad es que los resultados son nefastos-, pero tengo que decir claramente que, cuando un empresario firma ochenta y cinco días por año de indemnización, está muy claro que lo va a asumir como un coste en su cuenta de resultados del año 2006, que la tenía ya prevista en su presupuesto P sub 0 a 1 de enero de 2006 y que tiene muy claro que con Portugal va a reducir los costes y que dentro de cinco, diez, doce o catorce años este problema sucederá en Portugal, porque se encontrará trabajando en Marruecos o en São Paulo o en Bangladesh.
Por tanto, ¿que hay que trabajar esa dirección? Por supuesto, pero no queramos encontrar la aguja en el pajar, porque el problema de las deslocalizaciones es algo con lo que vamos a tener que aprender a convivir; que tenemos que minorar sus efectos negativos, pero que la solución no está allí, sino que está en que la diversificación empresarial en todos los sectores productivos sea cada vez mayor y que la situación económica en Aragón se mantenga y, si puede, que siga creciendo de la misma forma que está haciendo en los últimos seis años.
Por tanto, señor consejero, feliz Navidad, feliz año nuevo 2007; siga trabajando de la forma que lo hace hasta ahora; no desordene los papeles de sus expedientes, porque estoy convencido de que en los próximos meses preelectorales y electorales seguirá teniendo que venir a dar la cara y dar explicaciones de sus gestiones durante estos últimos años.
Nada más, y muchas gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Muchas gracias, señor Ruspira.
Señor Lobera, tiene usted la palabra en nombre del Grupo Parlamentario de Chunta Aragonesista.
El señor diputado LOBERA DÍAZ: Gracias, señora presidenta.
Señor consejero.
Siempre me toca empezar haciendo algún comentario a las alusiones que hace el señor Ruspira de este portavoz. En este caso, antes de escuchar mi intervención, ya dice que voy a ser radical. Señor Ruspira, el radical es usted. El radical es el señor Ruspira por esa defensa férrea al sistema neoliberal por encima de todo. El radical es usted y, desde luego, no nosotros, porque lo que nosotros hacemos es defender unas posturas que nos creemos y que creemos que son positivas para Aragón, contando con la gente, y no que el mercado lo decida todo. Desde luego, nos preocupa que se nos tilde de radicales a nosotros cuando son ustedes en esa defensa del neoliberalismo salvaje y brutal.
Y, como estamos en el 28 de diciembre, como usted decía, no quiero ser yo el Herodes que mate a los niños -o, en este caso, a los diputados que apoyan al gobierno-. Bueno, voy a centrarme en el tema. [Risas.]
Señor consejero, yo quiero hacer un poco de historia con usted. No sé si se acuerda de la empresa Aludisc, de Sabiñánigo, que hace casi cuatro años, cuando yo le preguntaba en un Pleno que qué medidas estaba adoptando el Gobierno de Aragón para favorecer la instalación de industrias en Sabiñánigo y que cubran el vacío dejado por el cierre de Aludisc, usted me dijo que muchas y muy variadas, y acabó su intervención diciendo que «entonces nos falta un fleco: poder reabrir Aludisc, y en esos trámites estamos», y ahí nos quedamos. Al final, veintinueve trabajadores de Aludisc a la calle, y los que consiguieron trabajo, desde luego, en peores condiciones que el que tenían.
Se ha recordado aquí también, por parte de los otros portavoces, el tema de Moulinex, que, como a usted le gusta decir, es una deslocalización de libro. ¿Se acuerda usted de esa doble comparecencia que tuvieron aquí usted y el señor Bandrés? Anunciaron medidas, contactos con empresas, recolocaciones... Pues bien, después de más de dos años de cierre de Moulinex, las promesas han sido incumplidas; dos años después, en Barbastro, hay una grave carencia en trabajo industrial. Cuatrocientas cuarenta personas quedaron desempleadas. Ustedes prometieron mucho y, desde luego, no se cumplió nada. Solo -según mis datos- se han creado cincuenta puestos de trabajo, que se trata de un empleo bastante precario, en donde apenas se cobran seiscientos euros, y las más afectadas son las mujeres.
Además, podríamos hablar de la situación de Brilen, ahora también en Barbastro. Y le doy estos ejemplos porque han sucedido durante su mandato, en los que ha tenido usted una participación directa. Por no recordarle también, como usted sí que lo ha hecho, el caso de Delphi Belchite, que Belchite aún está sufriendo las consecuencias de esa grave deslocalización.
Desde luego, mire, nosotros, vistos los antecedentes que ha habido de su gestión, para Delphi Tarazona le pido que haga las cosas con rigor, señor Aliaga, que haga las cosas con rigor y seriedad. Desde Chunta Aragonesista sabemos que es un asunto muy complicado, que es muy complicado hacer que se instalen empresas fuera de los grandes cinturones industriales, que es muy complicado instalar empresas en Tarazona, limítrofe con Navarra, con la fiscalidad que tiene Navarra, más beneficiosa que la aragonesa. Sabemos que es muy complicado, vivimos en la realidad, desde luego, pero queremos que haga usted las cosas con rigor.
Usted ya aquí ha anunciado: «¡Ya tengo contactos!, ya no sé qué, no sé cuántas, ¡no quiero decir nada!». ¡Pero es lo que dice siempre! O sea, no me cabe la menor duda de que usted tiene los contactos, pero no dé falsas esperanzas. Actúe con rigor y anuncie las cosas cuando estén ya firmadas. No esté aquí para salvar ahora la situación dando esas posibles soluciones.
Desde luego, quiero recordar que estamos hablando de la comarca de Tarazona, pero tampoco nos tenemos que olvidar de que está afectada la comarca de Borja, que un buen número de trabajadores de Delphi en Tarazona también lo eran de Borja. Y, ¡fíjese!, este despido afecta, el número de despidos, al 10% de los trabajadores del sector industrial, sumando las industrias de Tarazona y de Borja, o sea, QUE estamos en unos términos comparables a lo que sería cerrar la Opel aquí, en Zaragoza, o sea, que estamos hablando de una situación muy, muy, muy grave.
Y, desde luego, lo ha comentado ya el portavoz del Partido Popular, con esto que vino a decir el señor Larraz de que, «bueno, el mercado los absorberá, estamos en buenos niveles de desempleo»... ¡Hombre!, nosotros queremos que el mercado industrial reabsorba a estos trabajadores, pero en Tarazona y en Borja, que se puedan quedar allí, que no tengan que emigrar a otros lugares. Ese es el trabajo, el gran trabajo y el esfuerzo que hay que realizar. Que sí, que posiblemente si se van para aquí, a algún sitio o a otro, encontrarán trabajo, pero hacerlo allí es lo complicado.
Con lo cual, si usted actúa con rigor y con seriedad, va a tener todo el apoyo del Grupo de Chunta Aragonesista.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Señor Lobera, debería concluir: ha consumido su tiempo.
El señor diputado LOBERA DÍAZ: Sí, voy a concluir rápidamente. Por lo menos, el mismo tiempo que ha tenido el señor de...
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Ya ha consumido el mismo tiempo que ha tenido el señor del PAR.
El señor diputado LOBERA DÍAZ: Vale, muy bien. Muchas gracias.
Entonces, señor Aliaga, tiene dos trabajos importantes que hacer con este asunto: uno, que lo que queda de Delphi se mantenga -habrá que buscar acuerdos, negociaciones con la empresa para que se pueda mantener-, y dos, buscar rápidamente la creación de empleo, de empleo industrial, de calidad, que a veces ese concepto de calidad no sé si lo tiene muy interiorizado cuando me dice esas cosas sobre el empleo de la hostelería, por ejemplo, con el tema del castillo del Papa Luna, que el trabajo de calidad... Mírese, que usted lo dice mucho, lo del Acuerdo Económico y Social para el Progreso de Aragón, que ahí sí que se dan unas líneas de lo que los agentes sociales y sindicatos entienden por empleo de calidad. Pues, si trabaja en esa línea de crear, de conseguir empleo de calidad, va a tener el apoyo de Chunta Aragonesista.
Nada más, y muchas gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Gracias, señor Lobera.
Señora Vera, tiene usted la palabra en nombre del Grupo Parlamentario Socialista.
La señora diputada VERA LAÍNEZ: Muchas gracias, señora presidenta.
Consejero, bienvenido.
Creo que sería conveniente, como ya han hecho el resto de portavoces y como también ha hecho el propio consejero, centrar el tema. Y es una realidad en Aragón, en todas sus comarcas, en todos sus municipios, en los centros territoriales que cuentan con una multinacional, sin duda alguna, la deslocalización es una continua amenaza. Es un hecho, es una realidad que, sin duda alguna, debemos trabajar para solucionarlo.
Pero en este caso, en Tarazona, llevábamos muchos años -prácticamente desde que Delphi se instaló en nuestra localidad-, llevábamos muchos años con esta amenaza, incluso hablando siempre del posible cierre de la planta. Y hablando del posible cierre en una planta que ha tenido no setecientos trabajadores que tiene hoy: ha tenido mil quinientos trabajadores en esa planta. Ha tenido la suma de Belchite, ha tenido la suma de Ólvega, que al final se cerró, que vinieron a trabajar a Tarazona. Siempre ha habido una continua amenaza encima de esta planta en nuestra localidad por lo que estamos hablando: el porcentaje del coste de la mano de obra en cuanto al producto que se realiza es elevadísimo, y tenemos que ser conscientes de esta realidad.
También el consejero ya ha hecho historia en lo que han sido los dos acuerdos que el comité de empresa y que la propia dirección de la empresa acordaron para, en primer lugar, defender el empleo, en primer lugar. El comité siempre ha estado intentando defender el empleo, pero, lógicamente, si en algún momento se producía una circunstancia en la que no era posible, debían defender las indemnizaciones de los despidos de los propios trabajadores, de unos trabajadores que hay que decir que siempre se han volcado con la producción de la empresa y que han estado trabajando y siempre defendiendo el empleo.
Ya se ha dicho también que por parte del Gobierno de Aragón ha habido..., y es un hecho, es una realidad que se ha estado trabajando continuamente con esta empresa, desde las ayudas para mejoras de la actividad productiva, el apoyo a la competitividad de esta empresa, como muchas otras cuestiones que se han ido produciendo a lo largo de la historia de esta planta en nuestra localidad, en Tarazona. Desde luego, también se ha estado trabajando en dar unas alternativas, en buscar medidas que hicieran al polígono industrial y a nuestra zona, a Tarazona y a toda su comarca, medidas que pusieran dentro de la competitividad del sector el polígono industrial, concretamente, de nuestra localidad, como pueden ser medidas como el convenio de comercialización de las parcelas del polígono industrial, en el cual se recoge una subvención del 50% del precio de adquisición de dichas parcelas; un convenio que se va a formalizar próximamente con SEPES, con el Gobierno de Aragón, con la Diputación Provincial de Zaragoza y también con el ayuntamiento de la localidad. También debemos crear un polígono que cuente con todas las dotaciones, es decir, que cualquier empresa que quiera venir a la localidad de Tarazona cuente con todas las dotaciones para poder desarrollar la actividad con las máximas garantías. Y este convenio ya lo ha mencionado el propio consejero, porque fue el mismo día que él fue a la localidad de Tarazona a firmar el convenio del IAF, como presidente del Instituto Aragonés de Fomento, con Gas Aragón y con el propio ayuntamiento para gasificar el polígono industrial.
Pero también ha habido una ayuda constante a las empresas, al resto de empresas de la localidad, a la propia empresa Delphi. Pero también hemos tenido un problema muy grave que yo no se lo he oído a nadie, y es que el gobierno se implicó, hace no mucho, además, con una empresa que también podíamos haber sufrido esta deslocalización en nuestra ciudad. Hay que hablar de la empresa, que se denominaba Solano, que, al final, hoy en día se llama Wrigley, y que ciertamente ahí se defendieron... ¿Cuántos puestos de trabajo se defendieron ahí? Estábamos hablando de que se cerraba la planta de Tarazona o se cerraba la planta que estaba en Barcelona, en Lérida.
Con lo cual, creo que el apoyo del Gobierno de Aragón a la localidad de Tarazona ha sido siempre una constante, como entiendo que va a ser, porque, desde luego, se están poniendo todas las condiciones favorables y necesarias para el asentamiento de empresas y de nuevas inversiones. Y, ciertamente, señor consejero, animarle a que continúe en el trabajo que viene desarrollando, en el que estoy segura que va a desarrollar para que sea una realidad muy pronto en el polígono industrial de Tarazona y en toda su comarca.
Muchas gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Gracias, señora Vera.
Señor consejero, puede contestar a las cuestiones planteadas por los diferentes grupos parlamentarios.
El señor consejero de Industria, Comercio y Turismo (ALIAGA LÓPEZ): Gracias, señora presidenta.
En primer lugar, señor Barrena, la orden de ayudas a las pymes que establece condiciones de puntos de subvención en función, sabe que la pactamos con Comisiones Obreras y UGT, pactada, y los porcentajes de ayudas van ligados a inversiones, productividad, innovación, creación de empleo y mantenimiento. Y el mantenimiento son dos o tres años -normativa europea-. Cuando se acaba el período de vigencia de la orden, yo no puedo exigir, por norma, la devolución. De más, se publica en el boletín oficial.
Mire, una idea, una idea... En el tema de la diversificación, mucha gente habla, pero, a mí, si ustedes me dan un manual, yo lo incorporo en mis actuaciones, como estoy incorporando cosas que me sugieren unas veces por escrito, otras veces en los pasillos. Yo tomo nota. Mire, por ejemplo, dice: diversificación basada en recursos endógenos, la minería no energética». ¿Sabe que tenemos más puestos de trabajo ya en la minería no energética que en la minería energética? Dos: la energía renovable. ¿Sabe que esta comunidad autónoma, por ejemplo, con las cosas, las órdenes que ha sacado de solar, ha puesto el nivel por delante de la legislación española en solar a ver si se animan? Incluso hemos tenido que rectificar, porque había un bum de expedientes que ni tenían financiación. ¿Han visto? O sea, basado en la energía re-no-va-ble. El tema de la industria agroalimentaria, donde, aparte del trabajo que está haciendo el Departamento de Agricultura, nosotros también estamos trabajando. En coordinación completa, se están apoyando cuestiones de la industria agroalimentaria. El tema del papel. ¿Por qué están aquí las papeleras nuevas, que han venido las ampliaciones? Porque hay agua, energía y mano de obra cualificada. O sea, estoy de acuerdo con usted.
Yo, cuando voy o he ido a Tánger o he ido a Rumanía, señorías, voy a ver qué pasa ahí, porque, muchas veces, las decisiones que tomamos aquí, si no somos ágiles o no vemos el problema... Entonces, yo voy también para ver qué pasa. Les voy a contar una anécdota. De la planta de Belchite, que yo he estado ahí bastantes veces, salían chicos jóvenes de todos los pueblos con R 5, Toledos, y de la planta de Tánger salían mil señoras con velo andando, que algunas hacían ocho kilómetros para ir a trabajar -esa es la diferencia-, cobrando los unos los mil euros al mes y cobrando las otras los cuarenta euros a la semana, o sea, ciento y pico euros. Yo voy allí..., no voy a nada: voy solamente a hacerme una idea de por qué perdemos en estos temas de costes laborales. Eso, que quede como tema.
Entonces, ¿la diversificación? Efectivamente, pero todas las comunidades autónomas... Los astilleros españoles aún están sin resolver. ¡Aún están sin resolver! La reconversión de los astilleros aún está sin resolver en España, fíjese usted, tanto que dice el señor Lafuente: aún está sin resolver.
En todo caso, señor Ruspira, efectivamente, no solo son las grandes grandilocuencias, sino el trabajo día a día. Yo, con las cámaras de comercio, como sabe, con usted y con todo el equipo de cámaras, el PAED, que ha creado en Aragón muchos empleos, apoyando lo que ha dicho usted, señor Barrena, el desarrollo rural, porque el PAED es, normalmente... Y hay proyectos preciosos de lo que llamaba ya el informe de la Comisión Europea nuevos yacimientos de empleo. En todo caso, señor Ruspira, gracias, porque usted sí que me entiende a mí bien lo complicado que es esto. Yo creo que me entiende..., el señor Lafuente también me entiende; lo que pasa es que no lo puede decir. Y el señor Barrena, también, porque, además, cuando hay un problema en alguna empresa, el señor Barrena me llama, fíjense ustedes, me dice: «Oye, Arturo, ¿cómo está esto?», y se lo explico.
En todo caso, señor Lobera, le agradezco seriamente su tono. Yo, lo del rigor... A veces, todos cometemos torpezas. Yo reconozco que algunas veces, mire usted, con la presión que tenemos, vas a un sitio y te ponen veintisiete medios de comunicación que quieren la respuesta, a mí se me ocurre lo de las x y la y por no decir nada. Y no estoy creando falsas expectativas, porque otros las crearon, y yo tuve que coger a contrapié el tren. Y eso me crea más problemas, porque el mismo comité me dijo a mí. «¡Oiga!, a ver, el nombre de esa empresa, que se ha anunciado, que nos queremos ir todos. Si va a haber empleo seguro...». Entonces, créame que yo sufro mucho con estos temas.
Y lo del empleo de calidad lo digo también porque me interesa decírselo a los empresarios del sector turístico. Es decir, hoy -y lo hemos hablado con muchos representantes- nadie quiere trabajar los fines de semana, nadie quiere trabajar en agosto. Y el empleo que está acudiendo al sector turístico es el de baja cualificación, y esa es una realidad. Y ahí, o hacemos un esfuerzo, o hacen un esfuerzo los empresarios, o van a tener más serios problemas en los temas. Y yo le reconozco a usted que a mí también me preocupa, y me preocupa lo que ha pasado, y se lo he explicado, y me preocupa mucho lo que ha pasado en una hospedería de que no haya ese feeling entre empresa y trabajadores, como curiosamente hay en este... ¿Saben cuánto cuesta este expediente a la Delphi, por cierto -un dato-? Una media de setenta y cinco mil euros por trabajador de media: dieciocho millones de euros cuesta. Otro dato. Miren, en la línea con el Ayuntamiento de Zaragoza, ¿saben que las naves donde está la Delphi se hicieron en el año 1994, que a mí me tocó estar ahí haciendo ese expediente, y se comparten 50% ayuntamiento, que puso los terremos, etcétera, y 50% el IAF? El alquiler lo hemos cobrado: doscientos treinta y ocho mil euros. Y la mitad del alquiler, que corresponde, en este caso, cobrar al Instituto Aragonés de Fomento, va destinado al convenio para gasificar, señor Lafuente. Para que vea que yo soy sensible... Ahora, no tengo varitas mágicas.
En todo caso, por extender a Tarazona, Borja -Tarazona, Borja-... Las ampliaciones de Mondo, Ferralla Duarte, Lunke Aragón... En fin, ahí estamos también trabajando con otras empresas del entorno, porque hay también muchos trabajadores que no son ni de Borja ni de Tarazona. Lo sabe, ¿no?
Cuando decían que anuncié en Sabiñánigo... Sí, yo creía, y al final se fue a Almudévar -ya sabe a qué empresa me refiero-. Al final, en los últimos momentos, la inversión que iba a Sabiñánigo se quedó en la provincia de Huesca: se fue a Almudévar, que es una planta nueva. Y eso -alguna persona de aquí tiene más conocimiento de este expediente-, habíamos estado negociando para ir a Sabiñánigo y al final se nos fue a Almudévar, pero se quedó el expediente en Huesca. Igual que cuando se fue la empresa de prefabricados de vigas de Huesca a Monzón. En fin...
Y, por último, alcaldesa, me he olvidado, efectivamente. Lo llevaba por aquí en este barullo de papeles que llevo, pero me he olvidado, porque en unas negociaciones en secreto con el representante americano cuando cambia el accionariado de Wrigley, que cambia el accionariado, se cierra la planta de Lérida y la gana Aragón. Y hoy en Tarazona, afortunadamente, tenemos... Es decir, también algunas veces perdemos algo, pero les voy a decir una cosa, señorías: no perdemos contra otras comunidades autónomas, y eso es bueno para los aragoneses; no hemos perdido ningún expediente contra otras comunidades autónomas. Los perdemos frente a Tánger, frente a Vietnam o lo que quieran ustedes, señorías, pero no perdemos ningún expediente frente a otras comunidades autónomas; luego saquen ustedes sus conclusiones.
En todo caso, gracias por su atención, y les deseo un 2007 muy feliz. Gracias.
La señora presidenta (HERRERO HERRERO): Muchas gracias, señor consejero. Que empiece usted también un feliz año 2007.
Y, si les parece, señorías, hacemos un muy breve receso y continuamos con los siguientes puntos del orden del día. [Se suspende la sesión.]