Cortes de Aragón



DEBATE Y VOTACIÓN DE LA MOCIÓN NÚM. 59/09, DIMANANTE DE LA INTERPELACIÓN NÚM. 91/09, RELATIVA A LA POLÍTICA GENERAL DEL GOBIERNO DE ARAGÓN EN INFRAESTRUCTURAS DE JUSTICIA.
Legislatura: VII. D.S.C.A. n.º 58 de Plenos Página: 5029
Ind. Tramitación: Mociones
Intervinientes: Barrena Salces, Adolfo - De Salas Gimenez De Azcarate, Ana Maria - Bernal Bernal, Chesús - Vallés Cases, María Yolanda - Lana Gombáu, Manuel

La señora vicepresidenta primera (PÉREZ ESTEBAN): Se reanuda la sesión [a las diecisiete horas y cinco minutos].

Debate y votación de la moción número 59/09, dimanante de la interpelación número 91/09, relativa a la política general del Gobierno de Aragón en infraestructuras de Justicia, presentada por la Agrupación Parlamentaria Izquierda Unida de Aragón.

Tiene la palabra el portavoz, señor Barrena, para la fijación de su posición.

Moción núm. 59/09, dimanante de la interpelación núm. 91/09, relativa a la política general del Gobierno de Aragón en infraestructuras de Justicia.

El señor diputado BARRENA SALCES: Gracias, señora presidenta.

Señorías.

Saben ustedes que la moción que defiendo está enmarcada en un debate —ya tuvieron oportunidad de ver la interpelación con la que acabamos el Pleno anterior— que busca ni más ni menos que centrar o situar la cuestión de lo que tiene que ver con los equipamientos para Justicia, especialmente en lo que se refiere a la ciudad de Zaragoza, puesto que en la interpelación que tuve el honor de debatir con el señor consejero vimos que en el resto del territorio había acuerdo, había acuerdo en cuanto a los equipamientos, los espacios, los lugares y demás; por lo tanto, lógicamente, lo vamos a centrar ahí.

Saben porque ha sido materia de debate mediático, ha sido tema de debate en otras instituciones como el Ayuntamiento de Zaragoza, y el debate llega hoy aquí, a las Cortes, impulsado por Izquierda Unida. No tiene que ver nada más que con lo que pensamos que ha sido un cambio de posición del Gobierno de Aragón, cambio de posición que tiene que ver con la, desde nuestro punto de vista, inadecuada gestión que ha habido de la «post-Expo», y a partir de ahí, en función de ese error que se ha asumido por ahí, tener que justificar la decisión de llevar la Ciudad de la Justicia, que siempre se había ubicado y siempre se había referido y siempre se había situado en el casco histórico de la ciudad de Zaragoza, puesto que saben ustedes que ahí está la Audiencia, ahí están los juzgados, ahí están otra serie de equipamientos, y entonces, a partir de ahí, es cuando ha surgido la cuestión.

Nosotros pensamos..., bueno, voy a recurrir el santoral en esta ocasión, aunque saben que soy muy poco dado a ello, ¿no?, pensamos que no se puede desvestir a un santo para vestir a otro, y pensamos que no tiene sentido modificar centralidades —y en estos momentos estamos hablando de la centralidad del servicio público de Justicia— por el mero hecho de hacerlo. En todas las propuestas presentadas se habla de traslados de sedes de un lugar a otro, traslado de dependencias, traslado de juzgados, desde nuestro punto de vista sin tener resuelto el quid de la cuestión, que es cómo y de qué manera, en el caso de que se decidiera hacer eso, se va a resolver la cuestión de los recursos económicos que requerirían.

A nosotros nos parece que reubicar equipamientos requiere un proyecto, requiere un plan, requiere una financiación, y nos parece que en estos momentos no los hay, salvo que —que es lo que también hemos tenido oportunidad de oír y de conocer— se piense conseguir esos recursos necesarios para el traslado con recalificaciones justamente en la plaza del Pilar, es decir recalificando las actuales sedes de los juzgados de Zaragoza.

Nosotros, además, pensamos que la opción que últimamente se baraja de situar en la zona de la Expo la Ciudad de la Justicia no viene motivada por una planificación de las necesidades de Justicia, ni tan siquiera por una determinación, si se quiere, del modelo de ciudad que al menos a Izquierda Unida le plantea, el tema de la ciudad consolidada, el supuesto traslado —yo creo que decisión, según nos han dicho, ahora tendremos oportunidad de comprobarlo con la votación de esta moción—, el traslado de la sede de Justicia y el, en definitiva, vaciamiento de ese servicio del casco histórico de la ciudad de Zaragoza no tiene que ver más con que en la negociación que hace el señor vicepresidente, el señor Biel, presidente del PAR, en Madrid de las deudas tributarias aparece que nos toca el paquete de todo lo que hay en Ranillas. Y entonces, a partir de ahí, aunque el recinto de Ranillas se había concebido por los gestores de la Exposición Internacional 2008 como un futuro parque empresarial y comercial —es verdad que se hablaba de que ahí podría ir el Departamento de Educación al pabellón de Aragón, de que podría ir otro equipamiento al pabellón de España, estaba el Palacio de Congresos, del cual hemos tenido que debatir esta mañana—, lo cierto es que todo lo que era el recinto de la Expo, desde luego, en absoluto estaba pensado ni diseñado para llevar equipamientos públicos, otra cosa es que, como eso ha fracasado, ahora hay que justificarlo.

Yo creo que, además, la justificación que se pretende dar de concentración de sedes allí es, en definitiva, por el mismo razonamiento por el que se pueden concentrar en donde en un principio se había planificado, en donde se había acordado con el Ayuntamiento de Zaragoza, en una de estas reuniones bilaterales Gobierno de Aragón-Ayuntamiento de Zaragoza. Y lo que nos parece a nosotros es que ese cambio de posición de manera unilateral que hace el Gobierno tiene una serie de repercusiones que, desde nuestro punto de vista, van a incidir en la prestación del servicio público de Justicia.

A partir de ahí, ¿qué es lo que nosotros defendemos en nuestra moción? Defendemos ni más ni menos que el que se respete —y nos parece que un gobierno que se precie debe respetar los acuerdos a los que llega— ese acuerdo que había con el Ayuntamiento de Zaragoza para consolidar el distrito de la Justicia en el casco histórico de la ciudad de Zaragoza, a partir de ahí presentar ante esta Cámara el proyecto de ejecución necesario, evitar el cambio de uso de cualquiera de las instalaciones que en estos momentos se dedican a Justicia, especialmente las que hay en el casco histórico de la ciudad de Zaragoza, y, en definitiva, ratificar el acuerdo existente que hay con el Ayuntamiento de Zaragoza con relación a este tema.

Esos son los cuatro puntos de la moción, que quedan sometidos a la consideración de sus señorías.

Gracias.

La señora vicepresidenta primera (PÉREZ ESTEBAN): Muchas gracias, señor Barrena.

A esta moción hay presentada una enmienda por parte del Grupo Parlamentario del Partido Aragonés. Tiene la palabra la señora De Salas para su exposición.

La señora diputada DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE: Gracias, señora presidenta.

Intentaré defender y exponer y explicar la enmienda que ha presentado el Partido Aragonés, una enmienda a esta moción que entiendo, señor Barrena, que es coherente con lo aprobado en esta Cámara, y digo «con lo aprobado en esta Cámara» porque el 4 de diciembre de 2008 se aprobó por mayoría, con la abstención del Partido Popular, una moción de Chunta Aragonesista cuyo punto segundo decía, diciembre de 2008: «Proceder al progresivo reagrupamiento de las sedes de los órganos jurisdiccionales unipersonales de la ciudad de Zaragoza, mediante el traslado, como solución inmediata, a los espacios del recinto “Expo 2008”». Y también el pasado 8 de octubre se aprobó por unanimidad, esta vez sí, de todos los grupos de esta Cámara, sin votos en contra, una iniciativa, una moción en este caso, dimanante de una interpelación del Partido Popular, también en relación con los espacios judiciales en la ciudad de Zaragoza, y se decía también: «objetivo [...] unificación de todos los órdenes jurisdiccionales con el establecimiento de la Ciudad de la Justicia [...], manteniendo como sede de los tribunales el palacio de los Luna en el Coso número 1 de Zaragoza».

Y digo esto porque no se nos tiene que olvidar —y yo creo que quedó bastante claro en la interpelación que usted le formuló al consejero— como ya, desde el primer momento, el Gobierno de Aragón, desde el momento en que recibe las transferencias en enero de 2008, era consciente y entendió que era necesario tomar algunas medidas para no mantener esos siete emplazamientos de juzgados y tribunales en la ciudad de Zaragoza y, por supuesto, tampoco parecía adecuado mantener el régimen de arrendamiento de los locales que se estaban ocupando. Es verdad que en un principio se consideró prioritario impulsar el casco histórico, y así lo dijo el propio consejero —hablaba de dos etapas, y así ha sido—, pero también es verdad, y también se lo aclaró, que pronto se advirtió que resultaba sumamente problemático encontrar solares con la edificabilidad exigible con visión de futuro, eso es muy importante, con visión de futuro.

En este sentido, hay una reunión bilateral Gobierno de Aragón-Ayuntamiento de Zaragoza el 5 de noviembre de 2008, en la que se llega a un acuerdo en el que, además, se dice «también se tendrá en cuenta la posible utilización de los espacios “post-Expo” si fueran necesarios para cubrir las necesidades judiciales», importante, y se apostaba en ese acuerdo tanto por el casco histórico en relación con el edificio de Fuenclara, Imprenta Blasco y el solar de Galo Ponte como por los espacios «post-Expo».

Esa segunda etapa, a la que aludía el consejero —y yo creo que lo explicó de una forma muy detallada—, hacía referencia a esa participación también de todos los agentes implicados judiciales en el ámbito de la Administración de Justicia en nuestra ciudad de Zaragoza y la opinión unánime de reconocer el valor histórico e institucional del palacio de los Luna como asentamiento del Tribunal Superior de Justicia y apostar porque todos los juzgados tuvieran un único emplazamiento. Y, por tanto, se hablaba como prioritario, por esa unidad jurisdiccional, de lo mismo que votamos en esta Cámara el pasado octubre de 2009.

Además, se vio también por parte de los colectivos jurídicos, porque hay que ver su opinión también, para hablar de la necesidad de resolver un problema, el de los espacios judiciales en la ciudad de Zaragoza, que, vuelvo a recordar, en dos años, ha sido este Gobierno el que lo ha resuelto porque anteriormente era una cuestión problemática que no se abordaba por parte de los gobiernos, distintos gobiernos centrales.

Bien. Considerando esta cuestión, el Gobierno de Aragón, ya a mediados del año 2009 fue sensible a esa necesidad de reservar espacios en los antiguos pabellones de la Expo. Y es verdad que, en el momento actual, la cesión en la Expo se ha ampliado de forma considerable como consecuencia de compromisos derivados de las negociaciones de la Comunidad Autónoma de Aragón con la Administración central respecto a lo que son las mermas tributarias, pero no olvidemos, señor Barrena, que con anterioridad ya se estaba pensando incluso el traslado de los juzgados penales.

Bien. Paso a defender la enmienda —un poco la explicación— que hemos presentado a su moción. En primer lugar, el primer punto apuesta claramente por llegar a un equilibrio, que es lo que hemos apoyado en esta Cámara y es también la posición política del Gobierno de Aragón, del Departamento de Justicia, llegar a un equilibrio entre las instalaciones ubicadas en el casco histórico y en los antiguos pabellones de la Expo de 2008, con ese espíritu que animaba y anima el convenio bilateral Gobierno de Aragón-Ayuntamiento de Zaragoza y que se mantiene en la actualidad.

Lo que pretenden los puntos segundo y tercero de la enmienda que hemos presentado, señor Barrena, es potenciar el casco histórico mediante la construcción de un nuevo edificio en la calle Galo Ponte, contiguo al palacio de los Luna, preservando ese carácter histórico representativo y duplicar la superficie de este último, que usted ya sabe, porque así nos lo ha explicado el propio consejero en distintas comparecencias, incluso hemos conocido el proyecto y que en breve comenzarán las obras. Y en el punto tercero, seguir con la potenciación del citado casco histórico mediante negociaciones a realizar por parte del Gobierno de Aragón con el Ayuntamiento de Zaragoza para que se destinen a la Administración de Justicia y se cedan la Imprenta Blasco y el palacio de Fuenclara. Es decir, que no estamos vaciando, no se pretende vaciar el casco histórico de instalaciones judiciales, en absoluto.

El cuarto punto de la enmienda que hemos presentado descansa prácticamente en esa imposibilidad de adecuar la tradicional ubicación de los juzgados de la plaza del Pilar para la nueva oficina judicial, para las nuevas infraestructuras de las tecnologías de información y comunicación y, sobre todo, para dar solución a los nuevos juzgados que se están creando. ¿Por qué digo esto? Porque es notorio que, desde que el Gobierno de Aragón gestiona las competencias de la Administración de Justicia, se han ido incrementando, además en un número más importante, en mayor número —y yo creo que gracias a la presión que se hace desde el departamento, desde el propio consejero—, nuevos juzgados en la ciudad de Zaragoza. La media era de dos, yo creo que, en 2008, cuatro, los cuatro en la ciudad de Zaragoza; en 2009, de tres, dos en la ciudad de Zaragoza, y en 2010, por las informaciones de que disponemos, seis juzgados para Aragón y, de ellos, serán dos en la ciudad de Zaragoza.

Es más que evidente que existen dificultades en la distribución racional de los espacios cuando se decide poner en marcha nuevos juzgados y, por eso, los nuevos edificios judiciales deben tener posibilidades de ampliación de futuro y no estar encorsetados en un sitio de modo que no puedan ampliarse para esos nuevos juzgados. Que, además, usted sabe perfectamente, porque así nos lo ha expuesto tanto el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón como el propio fiscal superior, la necesidad de diez juzgados como mínimo, y así lo viene solicitando el Gobierno de Aragón. No nos dan diez, pero, bueno, seis, cuatro..., la media no está mal, ¿no?

En definitiva, ¿qué es lo que pretende esta enmienda, señor Barrena? Llegar a un equilibrio entre la potenciación del casco histórico y las zonas de la Expo pero, evidentemente, con el debido realismo, teniendo en cuenta que es verdad que en el casco histórico nunca ha habido una disposición total al Gobierno de Aragón con una edificabilidad aproximada a esos espacios —estamos hablando de cuarenta mil, cincuenta mil metros cuadrados— a un precio razonable, y, por otra parte, la Expo sí que ofrece las posibilidades de ampliación de futuro para esas nuevas sedes judiciales.

Por tanto, en el casco histórico se localizarían lo que son los órganos colegiados y, en la Expo, los órganos unipersonales, que no es ni más ni menos que lo que aquí aprobamos ya en octubre de 2009 por parte de todos los grupos. Y eso es lo que el Gobierno de Aragón, con ese acuerdo del 12 de enero de 2010, ha previsto para incrementar en más de un ochenta por ciento el espacio dedicado en Zaragoza a la Administración de Justicia, que eso es, en definitiva, lo que nos están demandando los zaragozanos, las zaragozanas, los aragoneses, más espacios y mejores espacios para la Administración de Justicia, y ahí están las posibilidades.

Y yo espero, señor Barrena, que usted acepte la enmienda porque creo que podríamos llegar a un acuerdo entre todos los grupos con la enmienda planteada por el Partido Aragonés.

Nada más y muchas gracias.

La señora vicepresidenta primera (PÉREZ ESTEBAN): Gracias, señora De Salas.

Turno de intervención del resto de los grupos parlamentarios no enmendantes.

En primer lugar, el Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista tiene la palabra para defender su posición ante esta moción, y, en su nombre, el señor Bernal puede tomar la palabra.

El señor diputado BERNAL BERNAL: Gracias, señora presidenta.

Señorías.

Señor Barrena, seré muy breve porque los cuatro puntos que usted plantea en su moción, aunque tienen el pomposo nombre de «política general del Gobierno de Aragón en infraestructuras de Justicia», se circunscriben a una cuestión, que es la ubicación de las infraestructuras en la ciudad de Zaragoza, y los cuatro puntos se refieren a la misma cuestión: a la ubicación de infraestructuras en el casco histórico, a la no modificación de la situación actual en el casco histórico y a la ubicación, por lo tanto, de esas infraestructuras en el casco histórico de la ciudad.

Y como ha dicho la señora De Salas, el 4 de diciembre del año 2008 se aprobó una moción a Chunta Aragonesista, que tuve el honor de defender, que finalmente tuvo seis puntos aprobados, y uno de ellos, el 2, dice todo lo contrario de lo que dice usted en sus cuatro puntos, porque lo que se aprobó aquí fue «Proceder al progresivo reagrupamiento de las sedes de los órganos jurisdiccionales unipersonales de la ciudad de Zaragoza, mediante el traslado, como solución inmediata, a los espacios del recinto “Expo 2008”». En esos términos fue aprobada aquella moción, que era la moción 37/08, dimanante de la interpelación 43/08, que tuve el honor de plantear al señor consejero, y, en consecuencia, es absolutamente contraria y contradictoria la propuesta que usted hace en esta moción con la que Chunta Aragonesista defendió y con la que esta Cámara asumió.

Nosotros explicamos entonces y hemos vuelto a explicar cada vez que esta cuestión ha sido debatida nuestra posición en torno a que creemos que el recinto Expo, por distintas razones, y antes, mucho antes, de que se produjera ese acuerdo que se ha producido con posterioridad, desde luego, a la defensa de aquella iniciativa y a la aprobación de esa moción..., la apuesta de mi grupo parlamentario y también de mi partido era la que defendí en aquella ocasión desde esta tribuna y la que logramos que la Cámara respaldara.

Por lo tanto, puesto que mantenemos posiciones absolutamente contradictorias en esta cuestión, nosotros vamos a votar en contra de la moción.

Muchas gracias.

La señora vicepresidenta primera (PÉREZ ESTEBAN): Gracias, señor Bernal.

Turno del Grupo Parlamentario Popular. Señora Vallés, tiene la palabra.

La señora diputada VALLÉS CASES: Gracias, señora presidenta.

Señor Barrena, oídas las intervenciones de quienes me han precedido en el uso de la palabra, siento decirle que mi intervención va a ir en la misma línea ya que esta moción tampoco contará con el apoyo del Grupo Popular de estas Cortes, como tampoco tuvo el apoyo del grupo municipal en el Ayuntamiento de Zaragoza.

Y las razones son sencillamente que usted viene a plantearnos algo completamente distinto de la moción que presentó el Partido Popular en esta Cámara a raíz de la interpelación realizada el pasado mes de septiembre, moción 53/09, relativa, como esta, a la política general en materia de espacios judiciales, moción que fue aprobada por unanimidad el pasado 8 de octubre. Moción cuya finalidad, como expuse en la propia exposición de la misma y en la interpelación que le precedió, era que se tomara en estas Cortes un acuerdo que nos comprometiera a todos en un objetivo a la hora de reorganizar los órganos judiciales de Zaragoza. Y esa solicitud, que para nosotros era necesidad, se debe, por un lado, a la variabilidad de múltiples propuestas que se han planteado en materia de ubicación de los espacios judiciales —quiero recordar aquellos momentos en los que cualquier espacio o solar vacío iba a ir destinado a Justicia—, propuestas que no terminaban de definirse claramente en el objetivo final de reorganización, unificación y reagrupamiento de todos los órganos judiciales, y, por otro lado, a la trascendencia y a la prolongación en el tiempo hasta que se complete la reorganización.

Hasta ese 8 de octubre, mucho se había hablado en las Cortes, en las comisiones bilaterales, en la prensa, en las reuniones con los intervinientes jurídicos, y se hablaba de cómo y dónde se iban a ubicar esos órganos judiciales, tanto los actuales como los de nueva creación. Y si entonces teníamos diferentes versiones por parte del gobierno, ahora las posturas diferentes son entre los partidos del gobierno, según estén estos en el ayuntamiento o en el Gobierno de Aragón.

Recuerdo, en la primera comparecencia del consejero, su galleguismo a la hora de hablarnos de «distrito» o «Ciudad de la Justicia», y en ese divagar por diferentes posturas hasta había un acuerdo de estas Cortes de trasladar con carácter inmediato los órganos unipersonales al recinto Expo, acuerdo en el que el Partido Popular se abstuvo porque no fijaba un objetivo final, sino una solución con cierto carácter de provisionalidad por su inmediatez. Este acuerdo de traslado fue cuajando y pasamos a la propuesta de la consejería, que nos llevaba a una solución de tres sedes, propuesta que mejoraba la solución pero que no recogía las peticiones del mundo de la Justicia ni las necesidades de espacio actual y de futuro de la Administración de Justicia en Zaragoza.

El Partido Popular dejó clara su postura en la moción aprobada en estas Cortes, y a la que ha llegado después de valorar y estudiar las opciones y de hablar y conocer las posturas de los directamente implicados y la opinión de nuestro grupo en el Ayuntamiento de Zaragoza. Lo que siempre hemos pedido es un criterio claro de saber a dónde queríamos ir y un plan o programa para llevarlo a efecto, como solicitamos en una moción del Partido Popular que ya debatió en noviembre de 2008 un modelo o plan de organización de los espacios judiciales con plazos y presupuestos, propuesta que fue rechazada y que ahora se plantea, eso sí, con un modelo concreto como es el distrito judicial. Y todo porque desde el Partido Popular se quería evitar que se tomaran decisiones atendiendo a necesidades y disponibilidad de cada momento, decisiones que nos llevaran, como en la situación actual, a tener hasta once sedes judiciales en Zaragoza, o como la presente, que, tras un acuerdo unánime de estas Cortes en un sentido, se nos propone ahora el contrario.

Y se valoró, no lo niego, el distrito de la Justicia, pero la propuesta de sedes dadas por el ayuntamiento no era suficiente para garantizar un reagrupamiento de las mismas, que, con la futura nueva oficina judicial, es imprescindible, y el traslado inmediato de órganos al recinto de la Expo la hace ya inviable.

Además, todos los operadores jurídicos solicitaban la máxima concentración de estos órganos, concentración que, por espacio y disponibilidad, en la actualidad solo se puede realizar en el espacio Expo. Incluso el alcalde, en declaraciones del 24 de septiembre, tal y como comenté en la interpelación, consideró lógico el traslado de los órganos judiciales al recinto Expo, lo que daba a entender un apoyo del Ayuntamiento, al que, por otro lado, según palabras de este Gobierno, se le había garantizado el mantenimiento del acuerdo de uso y disposición de los edificios del palacio Fuenclara y la Imprenta Blasco para Justicia.

La verdad es que, si hoy estamos debatiendo esta moción, tiene su raíz en los diferentes vaivenes de este gobierno hasta que se ha tomado la decisión del traslado de todos los órganos unipersonales al recinto Expo y el mantenimiento de los tribunales en el palacio Luna, con ampliación en Galo Ponte. Un largo proceso que termina con el modelo de la Ciudad de la Justicia, que seguimos manteniendo porque no creemos que hayan cambiado las circunstancias ni haya razones para el cambio. Lo único que ha variado es que se han hecho evidentes las diferentes posturas de los socios de gobierno según estén en el ayuntamiento o en el gobierno, y, ¿cómo no?, señor Barrena, en su capacidad camaleónica de votar el traslado inminente, de abogar por la concentración y espacio suficiente y ahora convertirse en concejal del Ayuntamiento de Zaragoza.

En definitiva, sigue habiendo necesidad de espacio y concentración de órganos judiciales, no se ha planteado ninguna otra solución válida que nos permita una actuación inmediata y una concentración y reagrupamiento de todos los órganos judiciales unipersonales de todos los órdenes, que es nuestra obligación en cuanto que somos diputados y es la competencia asumida por esta comunidad autónoma. Y ¿cómo se lleve a cabo? Eso es responsabilidad del gobierno y, de acuerdo con la plena autonomía municipal, competencia del ayuntamiento si se toman o no medidas urbanísticas respecto de los actuales espacios judiciales.

Y como le decía, nada ha variado pues las posturas municipales son muy legítimas, pero también hay que valorar que el propio Ayuntamiento ha trasladado parte de sus oficinas del centro al Seminario, y hay muy numerosos edificios públicos y privados sin actividad ni destino, y hay muchos barrios de la ciudad que requieren intervención municipal, pero eso es cuestión de otro foro.

Si hay un acuerdo con el Ayuntamiento dentro de la lealtad entre administraciones, es necesario que se cumpla, y en eso, señores del Gobierno, tendrán vigilantes al Partido Popular. Pero nosotros seguimos manteniendo la postura de la Ciudad de la Justicia y votaremos en contra de esta propuesta.

Muchas gracias.

La señora vicepresidenta primera (PÉREZ ESTEBAN): Gracias, señora Vallés.

Para concluir, turno del Grupo Parlamentario Socialista. Y en su nombre, señor Lana, puede tomar la palabra.

El señor diputado LANA GOMBAU: Gracias, señora presidenta.

Respecto a las infraestructuras de Justicia, el Grupo Parlamentario Socialista mantiene su respaldo a la gestión del Gobierno de Aragón porque, a nuestro entender, no se han desencadenado hechos o circunstancias relevantes que aconsejen proponer la alteración de la línea de trabajo seguida hasta el momento en la búsqueda de soluciones para la necesaria dotación de espacios judiciales en nuestro territorio.

Desde que se hiciera efectivo el traspaso de los medios para la prestación del servicio público de Justicia, se han ido acometiendo desde el Gobierno de Aragón una serie de importantes actuaciones en materia de personal de apoyo, renovación o complementación de medios y de mejora o adecuación de instalaciones y edificios, algunos de estos últimos ya concluidos y otros en proceso de finalización, sobre los que hemos tenido oportunidad de tratar en anteriores ocasiones, tendentes a conseguir una mejor calidad, accesibilidad y garantía en la prestación de este primordial servicio.

La planificación de estas acciones requería y requiere la imprescindible colaboración y participación de operadores judiciales e instituciones implicadas en este proceso, objeto que hasta el momento se ha venido observando y cuyas aportaciones han permitido y permitirán delimitar y programar lo actuado y lo pendiente de actuar.

Del conocimiento de cada situación, de la estimación y valoración de las medidas o alternativas surgidas de la participación sectorial e institucional, y de la distribución o aplicación de los medios y recursos de los que el Gobierno de Aragón dispone deben emanar y emanan sus propias decisiones.

Estas consideraciones, como no podía ser de otro modo, también tienen su incidencia en lo que se ha denominado como «proyecto de Ciudad o Distrito de Justicia», en directa referencia a la posible concentración de los distintos órganos judiciales con implantación en la ciudad de Zaragoza y su área metropolitana. La definición de estos espacios y su ubicación han ido señalando distintas fases o etapas en las que se han esbozado diferentes soluciones supeditadas de un modo u otro a la superación de obstáculos o dificultades, que evito reproducir por conocidos, y, además, recordados por el propio señor consejero de Política Territorial, Justicia e Interior en su intervención del pasado día 18 de diciembre.

En relación con el proyecto de Distrito o Ciudad de Justicia de Zaragoza y su área metropolitana, no hay más que repasar la cronología de manifestaciones, declaraciones y noticias que se han ido produciendo en el tiempo para cercionarse de que, tome la decisión que tome el Gobierno de Aragón sobre la idoneidad de los espacios y su mejor ubicación, en cualquier caso irá acompañada de un halo de inconformismo o contestación, que, provenga de donde provenga, tendrá que asumirse y enmarcarse en el contexto del ejercicio de su responsabilidad.

Señor Barrena, no podemos apoyar la moción que como grupo parlamentario ha presentado y defendido porque se aleja y dificulta aún más si cabe la consecución del objetivo que se pretende para que, alcanzado el mayor consenso posible, puedan acometerse las labores de acondicionamiento, construcción y adecuación de los espacios judiciales que se precisan en el ámbito deL que se trata.

Creemos que la enmienda de modificación presentada y razonada por el Grupo Parlamentario del Partido Aragonés responde con precisión a la planificación que sobre estos espacios debe contemplarse como solución más oportuna y satisfactoria, sin que con ello vayamos a facilitar o incurrir en incumplimiento de acuerdos o compromisos institucionales ni, en consecuencia, se abandone la realización de aquellas actuaciones previstas con esta finalidad para el casco histórico de Zaragoza, desmantelando, como usted denuncia, un sector vital para su desarrollo socioeconómico.

Por tanto, en el supuesto de no ser aceptada la enmienda de modificación citada, lamentaremos, lamentamos anunciarle, señor Barrena, nuestro rechazo a su moción.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señor diputado.

Señor Barrena, ¿quiere usted fijar la posición respecto de la enmienda presentada por el Partido Aragonés? Tiene la palabra.

El señor diputado BARRENA SALCES [desde el escaño]: Gracias, señor presidente.

No vamos a aceptar la enmienda. En definitiva, lo que hace la enmienda es dar absolutamente la vuelta a nuestra iniciativa y, por lo tanto, defiende una posición del PAR que, evidentemente, no es la de Izquierda Unida. Por lo tanto, no la aceptamos.

Gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias.

Vamos a proceder a la votación.

Votamos la moción 59/09 en los términos planteados por el grupo proponente. Comienza la votación. Finaliza la votación. Un voto y favor, sesenta y uno en contra. Queda rechazada la moción.

Explicación de voto.

Señor Barrena, nuevamente tiene la palabra.

El señor diputado BARRENA SALCES: Gracias, señor presidente.

Señorías, hemos votado a favor, evidentemente, porque es la posición que hemos defendido, la que defendemos y la que tenemos, y porque, además, estamos convencidos de que lo que ahora se plantea, que incumple el acuerdo que había entre Gobierno de Aragón y Ayuntamiento de Zaragoza, viene motivado fundamentalmente por el descrédito político que supone el fracaso de la gestión de la «post-Expo» en cuanto a su reutilización y a la falta de alternativas para, supuestamente, dar vida al entorno. Por ello, yo creo que la decisión de trasladar allí las dependencias de Justicia se debe a una urgencia por llevar allí lo que sea para tratar de justificar esa herencia que hemos tenido en función de las deudas tributarias, y sin plantearse si es bueno para la actividad, para el servicio o para la ubicación.

Hay otro elemento que tiene que ver aquí, porque me gustaría que me dijeran si en esto me equivoco: es que, para poder hacer ese traslado, ustedes necesitan recursos, y los recursos los piensan obtener de la recalificación de la actual sede de los juzgados en la plaza del Pilar, recalificación que, como ustedes saben, tiene que ser acordada en otro ámbito que no es el del Gobierno de Aragón. Pero eso, al fin y al cabo, lo que produce es la sensación de estar vendiendo una idea que todavía no se soporta ni con un proyecto ni con los recursos económicos suficientes, y, por lo tanto, no deja de ser fuego de artificio.

Y una última cuestión, especialmente señora Vallés y señora De Salas —la señora Vallés ha llegado a decir «camaleónica posición de Izquierda Unida»—, me van a permitir que les lea la transcripción del debate que se produjo en esta Cámara, en octubre, sobre la moción. Empieza usted, señora Vallés Cases, habla, después interviene la señora De Salas, que había presentado una enmienda, y después dice la señora vicepresidenta primera, que era la que estaba presidiendo: «Muchas gracias, señora diputada. Turno del resto de los grupos parlamentarios. Aprovecho ahora, y lo debería haber hecho antes de iniciar la sesión, para anunciarles a los grupos y a los diputados que ha sido retirada la moción que presentaba Izquierda Unida. Por motivos personales, no se encuentra esta tarde con nosotros, y, por tanto pasamos a dar la palabra al señor Bernal, por parte del Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista». Evidentemente, hubo unanimidad, Izquierda Unida no estaba ese día aquí; si no, le aseguro que no habría habido esa unanimidad porque habríamos defendido una vez más [el señor diputado Alcalde Sánchez, desde su escaño y sin micrófono, pronuncia unas palabras que resultan ininteligibles] el cumplimiento... Sí, pero entonces le ha sobrado lo de «camaleónico», señor Alcalde, ¿eh?, le ha sobrado entonces lo de «camaleónico». ¿Vale? Aclarado.

Nada más. Gracias, señorías, por la atención.

El señor PRESIDENTE: Gracias.

¿Chunta Aragonesista? Señor Bernal, puede explicar el voto. Tiene la palabra.

El señor diputado BERNAL BERNAL [desde el escaño]: Gracias, señor presidente.

Chunta Aragonesista ha votado en contra porque, como he explicado muy, muy, muy, muy sintéticamente, el punto 2 de una moción anterior a la que se citaba ahora, que es la 37/08, que no es de octubre de 2009, sino de diciembre de 2008, que tuve el honor, reitero, de defender en nombre de Chunta Aragonesista, fue votada en esta Cámara por todos los grupos parlamentarios salvo la abstención del grupo de la señora Vallés, del Grupo Popular.

Y lo que sí que querría aclarar, señor Barrena, y usted, además, sabe que es así, es que mi grupo parlamentario, cuando planteó aquella moción dimanante de la interpelación, no estaba ni enterado ni sabía que se estaba planteando ninguna posibilidad de que el recinto Expo y los edificios de la Expo tuvieran nada que ver en acuerdos con respecto a la deuda tributaria. Es más, mi grupo parlamentario ha manifestado siempre, por un lado, antes de que se planteara ese acuerdo en relación con la deuda tributaria [el señor presidente pide silencio con el mazo], que creíamos que la Ciudad de la Justicia, el barrio de la Justicia, el distrito de la Justicia, y llegué a decirle al señor consejero «o lo que quiera usted llamar, si quiere, la manzana de la Justicia», fuera allí, y le puedo asegurar que, al mismo tiempo, nosotros no hemos estado de acuerdo con la negociación que ha supuesto que se cambiaran estas dependencias y esas infraestructuras de la Expo vinculadas a la deuda tributaria.

No estamos de acuerdo con que sea así pero sí que estamos en la línea de que el conjunto de los edificios para las dependencias de la Administración de Justicia estuvieran en la Expo. Por lo tanto, no somos ni sospechosos de haber estado en ese acuerdo ni nada de eso. Y es más, este acuerdo parlamentario que nosotros promovimos fue muy anterior a ese acuerdo en relación con la deuda tributaria.

Por lo tanto, por eso ha votado mi grupo parlamentario en contra ya que la postura que nosotros defendimos entonces, y que fue respaldada por la Cámara, y la que usted defendía ahora eran como el agua y el aceite, y por eso hemos tenido que votar en contra.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señor diputado.

Señora De Salas, por el Partido Aragonés, puede hablar a continuación.

La señora diputada DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE [desde el escaño]: Muy brevemente, señor presidente.

Lamento, en nombre de mi grupo, que no se haya aceptado la enmienda que hemos presentado. Yo creo que esta enmienda, si Izquierda Unida la hubiese apoyado, hubiese sido de unanimidad de nuevo en esta Cámara, como lo fue la propuesta del 4 de diciembre de 2008, y es verdad que usted no estuvo el 8 de octubre, pero sí en la de diciembre de 2008.

Yo creo que he explicado perfectamente que esta enmienda era coherente con lo que se ha aprobado en esta Cámara y también con la postura del Gobierno de Aragón...

El señor PRESIDENTE: Un momento, señora De Salas, por favor.

Señorías, si es imprescindible que hablen, háganlo en un tono más moderado, por favor, para escuchar a los intervinientes.

Continúe.

La señora diputada DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE [desde el escaño]: ... y coherente también con la opinión de los operadores jurídicos, que yo creo que eso es fundamental para mejorar un servicio público que necesita en estos momentos espacios en la ciudad de Zaragoza, y las posibilidades del traslado de los órganos judiciales unipersonales a la Expo de Zaragoza así se han venido demandando y potenciando, y así también se ha hablado por parte del consejero.

Lo que decía la enmienda es lo que he dicho: equilibrio entre el casco histórico de Zaragoza y la Expo, potenciar el casco histórico manteniendo esas negociaciones —porque no decimos que no— para que se cedan al Gobierno de Aragón esos edificios, para su ubicación, para su utilización también para actuaciones judiciales. Y lo que creo es que la responsabilidad del gobierno en la distribución de los espacios judiciales, de infraestructuras judiciales, dando una respuesta a un problema que venía de décadas..., pues ahí está la respuesta que ha dado el Gobierno de Aragón y que ya digo que toda la Cámara, excepto un grupo parlamentario, ha respaldado.

Por lo tanto, yo lamento, realmente, señor Barrena, que no haya aceptado la enmienda porque creo que hubiese sido uno de los acuerdos... Que son bastantes los acuerdos en materia de Justicia que vienen apoyándose por unanimidad en esta Cámara.

Nada más y muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias.

Señora Vallés, puede intervenir a continuación.

La señora diputada VALLÉS CASES [desde el escaño]: Gracias, señor presidente.

La verdad es que lamento que no haya unanimidad en esta cuestión, unanimidad que buscamos con el acuerdo de la moción del 8 de octubre, en la que, sí es verdad, usted no estuvo presente, pero sí se mantuvo unanimidad en esta Cámara.

Y cuando hablo de «postura camaleónica», pues la verdad es que es porque su postura ha variado: usted sí que votó a favor la moción de Chunta Aragonesista en la que se producía el acuerdo de inmediato traslado de los órganos judiciales a la Expo. Y le quiero decir que, con ese voto, usted también hacía imposible ya el distrito de la Justicia, porque lo que siempre han planteado todos los operadores jurídicos y todo el personal metido dentro del ámbito de la Justicia es la máxima reorganización y concentración de órganos judiciales, y en un primer momento se planteaba o distrito de la Justicia o Ciudad de la Justicia. Cuando se toma el acuerdo de empezar a trasladar los órganos judiciales a la Ciudad de la Justicia, el único camino que quedaba y el único objetivo final tenía que ser ese: el de que todos se unificaran en la propia Ciudad de la Justicia.

Eso es lo que ha planteado siempre el Partido Popular (buscar ese objetivo, esa finalidad) y que el Gobierno estableciera un plan, un programa para el mismo. Le quiero recordar que, en noviembre de 2008, el Partido Popular presentó una moción en la que planteaba ese modelo o programa necesario para organizar los espacios judiciales, que no tuvo tampoco el voto de Izquierda Unida.

El señor PRESIDENTE: ¿Turno del Grupo Socialista?



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