Intervinienen: Yuste Cabello, Chesús - Senao Gómez, José Ignacio - Callau Puente, Javier - Ibáñez Blasco, José Ramón
La señora presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Reanudamos la sesión con el punto tercero, que es el debate y votación de la proposición no de ley número 15/11, sobre el aumento abusivo de las tarifas eléctricas, presentada por el Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista. Para la presentación y defensa de la iniciativa tiene la palabra su representante, el señor Yuste, por tiempo de diez minutos. Cuando quiera.
Proposición no de ley núm. 15/11, sobre el aumento abusivo de las tarifas eléctricas.
El señor diputado YUSTE CABELLO : Muchas gracias, señora presidenta.
Partimos de que la energía eléctrica es un servicio básico y del hecho de que en los últimos meses el recibo de la luz ha experimentado una subida brutal que ha encendido todas las luces de alarma tanto de las empresas como de la ciudadanía, de los consumidores en general, que tienen que sumar al severo castigo motivado por la crisis actual esa ola de aumentos sucesivos en el coste del recibo de la luz que tienen que soportar. Esta sería la consecuencia lógica de una pésima política energética que parece haber puesto al Estado al servicio de las grandes corporaciones. Y basta con ver las últimas decisiones del Gobierno español: aumento abusivo de las tarifas eléctricas, recorte de las primas a los productores de energías renovables, ampliación de la vida útil de las centrales nucleares...
Repasemos el desmesurado incremento de las tarifas eléctricas, que presentan un alza media muy por encima del IPC. 2011 ha arrancado con una nueva subida del 9,8%, que viene a sumarse a las producidas en enero de 2010 (una subida del 2,6%) y el pasado mes de octubre (una subida del 4,8%), además de los dos puntos en que ha subido el impuesto del valor añadido, el IVA, en el segundo semestre del año pasado. Todo ello supone un incremento desproporcionado, teniendo en cuenta además la evolución negativa del poder adquisitivo y, por lo tanto, del nivel de vida de la población, y a su vez pone en evidencia una falta de transparencia en el sistema de fijación de los precios en este sector. Es una subida desproporcionada e injusta. Recordemos que de julio de 2007 a enero de 2011 se ha producido en la factura eléctrica un incremento total del 43%, del 43%, y representa un perjuicio para veinticinco millones de usuarios mientras que beneficia solo a cinco grandes compañías, cuyos beneficios rondan por encima de los cinco mil millones de euros anuales.
Ya en el Libro blanco de la electricidad encargado por el Gobierno estatal en 2005 se hablaba de desequilibrios muy fuertes en contra de los consumidores a la vista de los amplios márgenes previsibles de la explotación de las tecnologías hidráulica y nuclear. Se calcula que el beneficio de las empresas eléctricas del Estado español con el alargamiento de la vida útil de las centrales nucleares va a rondar los mil quinientos millones de euros al año. La energía hidráulica proviene de embalses construidos en la década de los cuarenta y de los cincuenta del siglo pasado y cuyo uso del agua, que es un bien público, ha reportado a las empresas eléctricas un beneficio medio anual de mil millones de euros en los últimos diez años, dejando que la sociedad pague gran parte de los costes medioambientales. Tengamos en cuenta que la energía nuclear y la hidráulica suponen el 40% de la producción total en el mix energético.
Una vez más queda patente, por consiguiente, que la supuesta autoridad de la Administración a la hora de fijar los precios de bienes básicos en manos de la iniciativa privada es una falacia. Son las grandes corporaciones, son las grandes empresas quienes a la hora de la verdad tienen toda la información y la usan de forma interesada, ocultando algunas cosas y valorizando otras para aumentar su lucro particular, en demasiadas ocasiones un lucro desmedido, como en este caso.
En respuesta a este aumento abusivo de las tarifas, distintas asociaciones vecinales y de consumidores convocaron en todo el Estado un apagón el pasado martes día 15 a las diez de la noche para dejar testimonio del rechazo de la ciudadanía ante esta política tarifaria. Chunta Aragonesista apoyó esa acción porque denunciamos que, con esas medidas, desde el Gobierno se está consagrando un oligopolio en la producción eléctrica mientras se frena el desarrollo de las energías renovables por parte de los pequeños productores y se deja en manos de unos pocos la producción de un bien básico como es la electricidad; en manos de grandes compañías que declaran beneficios y reparten dividendos desorbitados mientras dicen soportar un déficit tarifario de tres mil quinientos millones de euros, con cuya excusa logran la aprobación del Gobierno a este tarifazo que atenta contra las empresas y la ciudadanía en plena crisis económica. Recordemos que, en 2010, Gas Natural Fenosa ganó mil ciento noventa millones de euros; Iberdrola, dos mil ochocientos veinticuatro millones de euros, y Endesa, tres mil cuatrocientos treinta millones de euros. Creo que esos datos son suficientemente elocuentes.
A nuestro juicio, la protección del consumidor, que es quien sufre las consecuencias finales de este tipo de abusos, debe ser una prioridad para las Administraciones públicas, y por eso hemos trasladado ese debate social a esta Cámara presentando esta proposición no de ley, en la que pedimos al Gobierno de Aragón que solicite al Ministerio de Industria la anulación del reciente acuerdo que ha posibilitado el aumento abusivo de las tarifas eléctricas; que tome las medidas necesarias para propiciar otro modelo eléctrico que facilite el control de los objetivos medioambientales de ahorro energético, el impulso de las energías alternativas y las practicas de consumo responsables, y que adopte las medidas necesarias para un control efectivo del llamado déficit tarifario y de la formación de precios de la electricidad, buscando un modelo que resulte más transparente que el actual. En este mismo sentido pretendíamos que las Cortes de Aragón se sumaran testimonialmente al apagón del día 15, pero, dado que la fecha ya ha pasado, anuncio la previsión de modificar los términos de la iniciativa, eliminando ese segundo párrafo, como es natural.
En coherencia con acuerdo similares que se han aprobado en otras instituciones aragonesas (por ejemplo, en el Ayuntamiento de Huesca, donde se aprobó por unanimidad), pido a todos los grupos parlamentarios el voto favorable a esta iniciativa.
Muchas gracias
L a señora presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
Se han presentado dos enmiendas por parte del representante del Grupo Parlamentario Popular. Tiene la palabra para la defensa de las mismas. Cuando quiera, señor Senao.
El señor diputado SENAO GÓMEZ : Gracias, presidenta.
Señorías.
El Grupo Parlamentario Popular ha presentado dos enmiendas. La primera de ellas, de modificación en aras precisamente a las últimas palabras del representante de Chunta. Era en el sentido de esa unanimidad que sería deseable, pero nosotros pensamos, desde nuestra óptica, que esta proposición no de ley que se presenta hoy a las Cortes de Aragón requería alguna modificación. Entonces, nosotros hablamos de revisar el acuerdo que ha propiciado el aumento de las tarifas eléctricas, porque entendemos que anular no es lo mismo y, además, tenemos que seguir tirando hacia delante, es decir, todo esto hay que hacerlo y, por supuesto, creo que este problema no viene de ahora, sino que hay una proyección y que el problema está también en la indefinición de algo que también se ha hablado en el debate anterior y que el propio representante del Partido Socialista decía que no se ponía la gente de acuerdo o que no se ponían los grupos de acuerdo para consensuar qué política energética tenemos que llevar en el futuro. Yo creo que, en esto, a lo que hay que acudir es a las palabras de alguien que nosotros no habíamos nombrado antes, sea por considerarlo casi innombrable al término de legislatura, pero sabe muy bien a quién me refiero, y que nos preside a todos los españoles, y que, si un día dice una cosa, y al día siguiente dice la contraria, y el anterior ha dicho ni lo uno ni lo otro, es imposible saber realmente con quién te tienes que sentar y para qué. Lo que hay que tomar son decisiones sensatas y, además, que tengan fiabilidad y proyección a corto, a medio y a largo plazo. Y parece que estos hechos son imposibles, al menos con los datos de los que disponemos hasta el día de ayer.
Y, entonces, nosotros planteamos una revisión de ese acuerdo y, sobre todo, hablamos de planificación. Hay que hablar de una planificación a medio y largo plazo en un mix energético —también se hablaba en la anterior comparecencia— que haga posible, como dice parte del texto de nuestra enmienda, conformar los precios de la electricidad en un marco competitivo, sobre todo en un marco competitivo de la Unión Europea. Aquí, el gran debate es que, España no puede perder el tren de la modernidad. O sí. Este es un debate que tenemos que decidirlo. No aquí, en esta Cámara, evidentemente, porque esta es una responsabilidad de ámbito nacional y corresponde al Parlamento español y a los representantes, a los agentes sociales. Todo esto es una decisión que nos tenemos que dar todos y saber qué es lo que queremos hacer en el futuro: si queremos quedarnos en el tercer mundo o queremos seguir compitiendo en el primer mundo. Lo ideal es que no hubiera ni primer mundo, ni segundo, ni quinto —estoy de acuerdo en ello—, y que todos deberíamos trabajar en las líneas para que las diferencias cada vez fueran menores y eso fuese posible. Pero, hoy por hoy, no es menos cierto que o avanzas en la Unión Europea en una línea de modernidad, o las posibilidades y el riesgo que hay de descolgarse hacia posiciones diferentes es más que probable.
Ya en la actualidad carecemos de datos importantes: ni el ciudadano sabe lo que va a pagar por cada kilovatio que consume al encender una bombilla, porque no se le ha dicho la verdad —y no culpo a nadie, ¡ojo!, no culpo a nadie en este tema—, no se le ha dicho la verdad, y llega el momento de que hay que decir la verdad, porque con la verdad se va a todos los sitios. Y ese debate, más pronto que tarde, va a tener que resolverse. Ese debate, mucho antes de lo que pensamos, lo vamos a tener que plantear. El ciudadano tiene que saber cuál es coste de la energía. Nuestras empresas, que tienen que competir para crear empleo, que es el meollo de la cuestión en estos momentos de crisis, tendrán que competir no solo con esto, pero es uno de los puntos importantes. No todas las empresas tienen la posibilidad de hacer cogeneración —aquí ya lo hemos visto—. Hay una serie de megavatios, pero son grandes empresas, y estas sí pueden entrar a competir. Si producen su propia energía, fantástico, pero esto no lo puede hacer todo el mundo —hay pequeños negocios en los que es imposible—, y, por lo tanto, tiene que ir dentro de un marco global de ese mix energético que, si nos miramos en el espejo de Francia, nos miramos en el espejo de Alemania e incluso de Italia, nosotros nos quedamos cada vez más descolgados, y las previsiones de futuro, si no se toman decisiones rápidas, pueden ser de cierto riesgo. Y digo que son de cierto riesgo porque, cuando hay que tomar decisiones de una planificación que todos conocemos, que nos movemos en unos parámetros de entre diez, quince años, es un tiempo lo suficientemente extenso como para analizar.
Por lo tanto, debemos saber lo que cuesta, debemos saber si a lo que tenemos que volver es al candil de aceite, que cuesta o sale más barato, siempre que el aceite cueste más barato, que ya veremos... Claro, ya veremos, porque el tema de las materias primas está también como esta. Pero esto tenemos que analizarlo. Y creemos que en esta buena voluntad que estamos proponiendo y que yo entiendo en la iniciativa que presenta Chunta, quizás sin ser tan drástico o tan duro en las expresiones de que hay que anular y de que son abusivas o no son abusivas, nosotros, desde nuestro grupo, en lo que entramos es en que sí es necesario revisarlo. Es decir, lo que no se puede es sorprender al ciudadano. Y en cualquier medio de vida (emprendedores, empresarios, negocios, comercio, para el turismo) hay que saber, a la hora de hacer un presupuesto, lo que te va a costar, en algunos negocios, lo que es fundamental, que es la energía eléctrica, y eso hay que saberlo para poderlo presupuestar. Si lo sabes, lo presupuestas al principio, y sabes si un negocio es viable o no lo es. Si esto no se sabe de antemano y viene la sorpresa de que viene un veinte, de que viene un quince, de que viene un treinta y ocho por ciento, esto no hay quien lo soporte. Y, claro, se está soportando. ¿Quién lo está soportando? El más débil.
Por lo tanto, falta planificación, falta sinceridad —hay que decir la verdad—, y lo que nosotros proponemos aquí en aportar ese granito de arena desde las Cortes de Aragón hacia el Gobierno de Aragón y, a su vez, al Gobierno de España es que lo que hay que hacer es sentarse a hablar, pero urgentemente. Esto no es una cuestión electoral de que falten pocos días para unas elecciones o no: esto se debió hacer hace mucho tiempo. Insisto: no culpo a nadie —atención al dato—. Aquí creo que somos responsables todos. Más responsabilidad, evidentemente, tiene ahora el que está gobernando porque los procesos de crisis se están ahora sufriendo, y, cuando hay momentos de crisis, hay que tomar determinaciones urgentes y rápidas, no puede uno estar mirándose el ombligo muchos días, porque, mientras nosotros nos miramos los ombligos, otros países emergentes, que actualmente están en el tercer mundo, quieren ser del primero, y a mí me parece muy bien que lo sean, pero no a costa de España. A mí me parece muy bien que todos estemos en el primer mundo, pero no a costa de que España o algunos otros países como nosotros nos quedemos después a verlas venir. ¡Ojo!, que ese es uno de los riesgos que tenemos, y por eso pretendemos, con esta enmienda, plantear y tratar de posibilitar un entendimiento o un apoyo que sería yo creo que positivo, que de estas Cortes saliese unánimemente un acuerdo, limando lo que hubiera que limar de cada una de las propuestas, para poderlo sacar adelante. Se ha hecho en algunas ocasiones en otros temas; este creo que lo merece, es un tema importante.
La segunda enmienda, no perderé mucho tiempo en ella. Ya lo ha dicho el proponente. Es ya extemporánea por la fecha. Pasó ayer por la noche; por lo tanto, como la va a retirar, supongo, la va a modificar, no hay nada más que decir.
Nada más, y muchas gracias, señora presidenta.
La señora presidenta (DE SALAS GIMENEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
A continuación es el turno de intervención del resto de los grupos. En primer lugar, el señor Callau tiene la palabra por el Partido Aragonés.
El señor diputado CALLAU PUENTE: Gracias, señora presidenta.
Qué complejo, qué complejo es este tema cuando nos queremos mover en un terreno tan resbaladizo y tan farragoso que queremos llegar a acuerdos en los que no estamos de acuerdo sin tener que decir ninguno, absolutamente ninguno, lo que realmente pensamos. Y eso es lo que vamos a tratar de hacer aquí hoy. Yo, a lo mejor, me salgo un poco del guion, porque lo que se está intentando aquí ahora mismo entre Chunta Aragonesista y Partido Popular es sacar algo pactado entre los dos que no diga nada, que no nos resuelva absolutamente nada, para quedar bien todos ante los ciudadanos. Pues, mire, el Partido Aragonés va a votar en contra de esta proposición no de ley y en contra de la enmienda que propone el Partido Popular, porque, si bien suaviza o matiza, no entra en el nudo gordiano, no entra en la verdad de la verdad de lo que hay detrás de este debate que se plantea. Y habla el Partido Popular de que debemos entrar en el tren de la modernidad y de que hay que decir la verdad. Y estamos de acuerdo, no en el tren de la modernidad, porque creo que estamos en el tren de la modernidad —depende de lo que se entienda por modernidad—, pero, en que hay que decir la verdad, estamos totalmente de acuerdo. Y, por eso de que hay que decir la verdad, señorías, el Partido Aragonés va a votar en contra de esta proposición no de ley.
Es cierto lo que ha dicho el Partido Popular, que hay que tener en cuenta el coste de la energía y que hay que ser competitivos, por supuesto, pero luego ha dicho una frase que a mí me ha llamado la atención. Dice: yo no culpo a nadie de lo que está pasando ahora y de lo que ha pasado ahora y de la situación a la que hemos llegado, no quiero culpar a nadie. Pero bien es cierto y hay una realidad evidente: que, señorías, de las decisiones de hoy dependen las consecuencias del mañana o, lo que es lo mismo, de aquellos polvos vienen estos lodos. Por lo tanto, en esto hemos llegado a donde hemos llegado por una serie de decisiones que, desde luego, no han tomado los ciudadanos; las hemos tomado o las han tomado los políticos en su momento, cuando han tomado decisiones, y de eso no estamos exentos.
El Partido Aragonés sí que quiere un cambio del actual modelo eléctrico, por supuesto; es necesario. Yo creo que eso lo tenemos todos absolutamente claro. Por lo tanto, estamos de acuerdo en cambiar el actual modelo eléctrico. Estamos en un sector cambiante y dinámico, y hay que estar atento a las oportunidades para apoyarlas y para impulsarlas. Pero esto, señorías, depende de múltiples factores, opuestos muchos de ellos entre sí. Este es realmente el nudo gordiano del debate, cómo alcanzar el equilibrio óptimo entre todos estos factores: mayor y mejor respecto al medio ambiente frente a los costes de construcción de nuevas líneas —y ese es un debate que habrá que abordar—; la política de incentivos para el desarrollo de fuentes renovables frente a los costes crecientes de la electricidad para consumidores y para empresas, lo que hace que nuestras empresas disminuyan en competitividad. Y hay una observación de Chunta sobre los beneficios que se contrapone a la liberalización del mercado. Además, la proposición no de ley de generación ordinaria incumple la Directiva 96/92, de la Comunidad Europea, relativa a las normas comunes para el mercado interior de la electricidad.
Señorías, la generación de energías se desarrolla en un régimen de libre competencia con dos costes principales: en primer lugar, el valor de las inversiones realizadas para el desarrollo de la red de distribución, y en segundo lugar, los costes de operación y mantenimiento de dicha red. Todo esto viene condicionado además en el momento en el que estamos por la elevada cuantía de la deuda reconocida del sistema eléctrico, que alcanza los veinticuatro mil millones de euros.
Ya se están acometiendo medidas, como las solicitadas por Chunta por los cauces reglamentarios, pero nuestro voto en contra va a ser porque creemos que el debate debe estar perfectamente enmarcado, y aquí no se ha enmarcado. Sí que estamos a favor de la protección del medio ambiente, por supuesto que lo estamos, y así nos definimos; sí que estamos a favor de la investigación en renovables, pero debemos ser conscientes de que todavía no son rentables por sí mismas y de que, por lo tanto, hay que subvencionarlas, y que esto también genera un coste, que la protección del medio ambiente también genera un coste. Pero no nos dejamos llevar por la demagogia o los silencios cómplices del miedo a coger el toro por los cuernos. Es muy bonito solo decir más y mejor medio ambiente, más renovables y que, además, paguemos menos en la factura o en el recibo de la luz.
Pero esto, que queremos y que todos nos hemos definido y que —repito el Partido Aragonés— también está de acuerdo con mejorar el medio ambiente, con apoyar la investigación en las renovables, que todavía no son rentables, esto tiene un coste que hay que pagar, y no podemos esconderlo a los ciudadanos. Esa es la primera verdad que debemos decirles a los ciudadanos, señor Senao, que la energía eléctrica vale lo que vale, porque nos estamos autoimponiendo también una serie de medidas que consideramos que están por encima del coste. Por lo tanto, partiendo de esa verdad es donde debemos empezar el debate sobre la energía. Eso es lo fundamental para el debate. En ese terreno y en ese marco nos moveremos y estaremos dispuestos a trabajar todo lo necesario. Mientras tanto, mientras haya silencios cómplices, mientras haya cosas que no se quieren decir porque no resultan favorables en el momento en el que estamos, no entraremos a debatir absolutamente nada.
Muchas gracias.
La señora presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
Para finalizar el turno de intervención, el representante del Grupo Parlamentario Socialista, el señor Ibáñez, tiene la palabra.
El señor diputado IBÁÑEZ BLASCO: Muchas gracias, señora presidenta.
Empezaré diciendo que al Grupo Parlamentario Socialista tampoco nos gusta el actual sistema ni el actual modelo, ni de generación ni tarifario, y que nos gusta todavía menos que se haya tenido que tomar una decisión por parte del Gobierno central de subir la tarifa eléctrica en la cuantía en que lo ha hecho. Yo creo... No sé si alguien podía tener alguna duda, pero yo creo que nadie debe tener ninguna duda. Pero, a partir de aquí, habría que decir más cosas en las que entendemos que la proposición no de ley de Chunta Aragonesista no quiere entrar.
Yo voy a intentar plantear el debate porque la iniciativa de Chunta la quiero considerar que es bienintencionada incluso, quiero pensar que realmente creen que hay un problema y que sería bueno solucionarlo, pero hay que hacer algún esfuerzo, señor Yuste, hay que hacer algún esfuerzo para llegar a esa conclusión.
A nosotros nos parece que es voluntarista. Es una iniciativa que no plantea... A mí me gustaría que aquí Chunta Aragonesista hubiera expresado claramente cuál es su modelo energético, pero con porcentajes: renovables, tanto; y de carbón, tanto; y de nuclear, tanto o nada... Que sí, que es abusivo, que todo está mal y que tome las medidas y que otro modelo... Y ¿qué modelo, señor Yuste? Claro, es que en eso podemos estar todos de acuerdo, pero, si queremos afrontar el problema de verdad, tendremos que reconocer que la tarifa eléctrica tiene dos componentes, como decía el señor Callau.
En uno de los componentes, que es el coste de las materias primas, ni el Gobierno de España ni ningún Gobierno del mundo democrático pueden hacer absolutamente nada. Y resulta que las materias primas, en un año, en un año solo, señor Yuste, han subido el 40%: petróleo, gas... Las materias primas han subido el 40%. Eso no lo fija el Gobierno, eso lo fija el mercado, y, como lo fija el mercado, el Gobierno no tiene ninguna posibilidad de maniobra.
La otra parte del coste, que sería el peaje que las compañías eléctricas pagan por usar la red de Red Eléctrica Española, eso sí que es competencia del Estado español fijarlo, y lo que ha hecho ha sido congelarlo. Para evitar que la subida tuviera que ser mayor, ha congelado la parte que es de su decisión. Pero es que, además, a eso tenemos que sumar que tenemos en este país un déficit tarifario, y yo tampoco quiero echar la culpa a nadie, y además tengo que reconocer que la enmienda que planteaba el Partido Popular me gusta bastante más que la proposición de Chunta Aragonesista, aunque, lógicamente, la enmienda no se vota, y entendemos que hay razones, como ha dicho el portavoz del PAR, para votar en contra. Pero en cualquier caso sí que quiero... No, no, la enmienda no se vota. Lo ha dicho el portavoz del PAR; supongo que habrá sido un error. La enmienda no se vota; la enmienda, en todo caso, la tendrá que aceptar o no el grupo proponente. Pero lo que sí que quería manifestar es que me parece más razonable y más tendente a la posibilidad de haber llegado a algún tipo de acuerdo la enmienda de modificación del Grupo Popular que su proposición no de ley.
Es cierto, tenemos un déficit tarifario, generado porque los ciudadanos estamos pagando desde hace diez años en la factura eléctrica menos de lo que es el coste de la energía, que, si hay que decir la verdad, hay que decir la verdad hoy y hace diez años también. En el año 2000, cuando se tomó la decisión, también habría que haber sido capaces de haber dicho la verdad y que los ciudadanos hubiéramos sido conscientes de que estábamos pagando todos los meses menos dinero del que costaba generar esa electricidad. Y eso ha generado un agujero o una deuda con las compañías eléctricas, como lo quieran llamar ustedes, que está por encima de veinte mil millones de euros en estos momentos.
Si para plantear soluciones a este problema no tenemos en cuenta ninguna de estas cuestiones, yo, señor Yuste, le tengo que decir que creo que no vamos bien. O sea, si no tenemos en cuenta que tenemos un problema, que tenemos una deuda que hemos asumido porque un Gobierno de España, con toda la legitimidad del mundo, tomó un acuerdo que fue no subir las tarifas entonces y que eso generara una deuda que se iría pagando y que además pagamos intereses, y que ha llegado donde ha llegado... Pues o lo queremos solucionar o no.
Entonces, el Gobierno de España, ¿qué es lo que ha hecho para intentar solucionar ese problema? Pues el Gobierno de España lo que ha hecho es tomar una serie de medidas para conseguir ahorrar en tres años nada menos que cuatro mil seiscientos millones de euros en el coste. ¿Cómo? Pues ha habido que hacer un acuerdo con la energía eólica, y ha habido que bajarles las primas —es que esto es así—. Otro acuerdo con la termosolar. Con la fotovoltaica no ha sido por acuerdo, pero se ha tomado una decisión. Se ha aprobado en un decreto del Gobierno de España, que tampoco nadie lo dice, se ha puesto un peaje en este caso a la generación. Las compañías eléctricas, por primera vez en la historia de este país, van a pagar 0,5 euros por cada megavatio que produzcan al Gobierno. El Gobierno también ha tomado una decisión que es ampliar el bono social hasta 2013, que tampoco se recuerda aquí. Hay cinco millones de hogares en España, de parados, de pensionistas con pensiones mínimas, que no sufren la subida de la luz. Eso es una política social del Gobierno socialista, que lo ha hecho. Pero, lógicamente, si el Gobierno entendía que esto es un problema; si, lógicamente, además esto se produce en un momento en el que los bancos les ponen dificultades a las compañías eléctricas para seguir financiando esa tarifa —los bancos, saben ustedes, en estos momentos, unas entidades que se crearon en su día para prestar dinero resulta que en estos momentos no prestan dinero, los bancos y cajas no prestan dinero a casi nadie—... Con lo cual, las compañías eléctricas, como todo el resto de empresas y de particulares, tienen problemas para financiar en este caso la deuda que el Estado tiene con ellas. Y, en definitiva, para intentar que en 2013 este déficit tarifario desaparezca, y a partir de ahí, si fuéramos capaces todos los españoles, todos los partidos políticos, de decir qué es lo que nos parece que sería bueno que en España pase dentro de veinticinco o treinta... Porque lo que estamos sufriendo hoy viene de decisiones que se tomaron en los años setenta, en cuanto a generación, y el déficit tarifario, de decisiones que se tomaron hace diez años, con lo cual tenemos que ser capaces de tomar decisiones ahora para que dentro de cincuenta años el problema no lo tengamos y tengamos un modelo energético que nos interese.
De todas formas, también decirles una cosa: esto no solo afecta a España. No sé si es para alegrarse o para preocuparse más, pero este problema no es de España. El aumento del coste de la energía afecta a todos los países, y a países como Holanda, Alemania, Portugal o Italia les ha afectado igual que a nosotros. Y otro dato más: el precio con impuestos de la electricidad en España, con impuestos, total, está por debajo de la media de la zona euro y por debajo de países como Italia, Irlanda, Bélgica, Alemania, Austria, Dinamarca o Suecia, con lo cual, a la hora de competir tampoco estamos tan mal. Es mejorable, lo tenemos que mejorar. Sobre todo, lo que tenemos que decidir es —insisto— hacia dónde queremos llevar la producción de energía en nuestro país, pero eso, señor Yuste, desgraciadamente no lo podemos hacer debatiendo una proposición no de ley en la Comisión de Industria; eso es un debate mucho más amplio que, afortunadamente, ni el Partido Popular ni los partidos de la oposición en Madrid lo han querido hacer, pero los sindicatos y los empresarios, los agentes sociales, sí que por la vía del acuerdo económico y social están trabajando precisamente en conseguir eso. Yo espero y deseo y el Grupo Parlamentario Socialista espera y desea que, una vez los agentes sociales y el Gobierno pongan el marco, el resto de formaciones políticas de una vez ya se sumen y entre todos decidamos qué es lo que queremos hacer con el futuro energético de nuestro país. Ese es el debate, ese es el problema. Yo creo que tiene mucho más carga de profundidad y mucho más análisis que el que se pretende hacer con esta proposición no de ley, que, insistimos, nos parece voluntarista y que, por tanto, no podemos votar a favor.
Muchas gracias, señora presidenta.
La señor presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
¿Consideran necesario suspender la sesión? Tiene la palabra el representante del grupo que ha presentado la iniciativa para fijar su posición en relación con las enmiendas del Grupo Popular. Cuando quiera.
El señor diputado YUSTE CABELLO: Sí. Muchas gracias.
He intentado alcanzar una transacción con la primera enmienda del Grupo Popular. Anuncio ya que acepto la segunda, que coincidía con la voluntad de este grupo, que he expresado antes, de modificar los términos eliminando el segundo párrafo. Decía que he intentado alcanzar una transacción, pero presiento que nos iba a llevar bastante más tiempo, y me gustaría que fuera una transacción que lograra la aprobación de la iniciativa y la unanimidad de la Cámara, por tanto, pero, como los grupos que apoyan al Gobierno, singularmente el portavoz del Grupo del PAR, han expresado con tanta claridad que no aceptarían ni la proposición no de ley, ni la enmienda del Grupo Popular, ni ninguna transacción que se hiciera en torno a eso, entiendo que no vale la pena que perdamos el valioso tiempo de sus señorías. Por consiguiente, no asumo la primera enmienda, aunque estábamos cerca de la transacción, por decirlo así, y acepto la segunda.
Muchas gracias.
La señora presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Muy bien.
Todos conocemos, por tanto, lo que vamos a votar: la iniciativa presentada por Chunta Aragonesista excepto el último párrafo. ¿Votos a favor? Uno. ¿Votos en contra? Diez. ¿Abstenciones? Seis. Queda rechazada la proposición no de ley número 15/11.
¿Explicación de voto? Señor Yuste.
El señor diputado YUSTE CABELLO: Muchas gracias.
En primer lugar, me llaman la atención determinados argumentos que se han empleado aquí por parte de los grupos que apoyan el Gobierno y que, sin embargo, no se emplearon en otras instituciones donde se han debatido iniciativas similares; singularmente, el Ayuntamiento de Huesca, donde sí que se pudo concitar la unanimidad de la institución en torno a una iniciativa similar a esta con apenas modificaciones.
Yo creo que, incluso, algunos de los argumentos que han expresado el señor Callau y el señor Ibáñez nos dan la razón, en el sentido de que, efectivamente, estamos ante un modelo que no es transparente —esos silencios de los que hablaba el señor Callau—. Hace falta ir a un modelo transparente, hace falta ir a un control efectivo del déficit tarifario, hace falta que se diga la verdad en estas cosas porque, si no, la percepción de que son las grandes corporaciones las que tienen más poder que el Gobierno, que al final son las grandes corporaciones las que nos gobiernan sin presentarse a elecciones, eso, efectivamente, es realmente muy, muy negativo para la credibilidad de las instituciones democráticas.
No hemos hablado de cuál es nuestra propuesta de mix energético. Entiendo que no tocaba en este debate, y también lo entiende el señor Ibáñez, aunque es lo primero que me ha dicho, pero luego, al final de su intervención, reconoce que, efectivamente, no toca hoy, este no es el foro para hacer ese debate; ya habrá debates sobre el modelo energético, no se preocupe usted.
En todo caso estamos en un escenario en el que las grandes compañías cuentan con unos beneficios anuales que duplican o triplican ese déficit tarifario del que tanto se habla. Por lo tanto, creo que tenemos que poner en duda algunas afirmaciones que se hacen desde los intereses empresariales y que, a veces, los representante políticos compran, entre comillas, sin darse cuenta de lo que hay detrás, evidentemente, igual que en el caso anterior. Red Eléctrica Española es una empresa que tiene sus intereses y que, por lo tanto, defiende sus argumentos en función de sus intereses; también las compañías productoras de energía tienen sus intereses y los defienden, y a veces no dicen la verdad, y a veces no dicen la verdad para conseguir convencer a las Administraciones públicas de que les den la razón en cuestiones que no benefician al interés general, sino al de unas empresas en particular.
Dicho esto, lamento que la iniciativa no haya sido aprobada y espero que pueda haber iniciativas en otro sentido que permitan pronunciamientos ante el Gobierno español para que sepa que, desde luego, este tarifazo no responde al interés general.
Muchas gracias.
La señor presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
Señor Senao.
El señor diputado SENAO GÓMEZ: Sí. Gracias, presidenta.
Señorías.
Brevemente para manifestar el sentido del voto del Grupo Parlamentario Popular en la abstención, puesto que, aunque sí hemos estado próximos casi, casi al entendimiento para que el grupo proponente hubiese aceptado nuestro enmienda, hay que tener en cuenta que es evidente que en el trabajo que hemos hecho desde nuestro grupo queríamos manifestar lo que dice nuestra enmienda, y un adjetivo a veces —no a veces: en muchas ocasiones— modifica sustancialmente el contenido de la misma. Por lo tanto, sí lamentar... Este es un tema importante, este es un tema en el que —vuelvo a insistir—, actualmente, en momentos de crisis, quien gobierna tiene que tomar determinaciones, y el Gobierno de España, que es del Partido Socialista, se ha dormido, y ahora vendrán las prisas, ahora vendrán las prisas para poder tratar de reconducir este asunto. Sí es lamentable el que en otras instituciones de Aragón se haya llegado a acuerdos y aquí no seamos capaces de hacerlo. Quizás tendremos que seguir esforzándonos todos para hallar una vía de entendimiento y de apoyo a algo que, aunque se escapa de la propia responsabilidad directa del Gobierno de Aragón, sí las Cortes de Aragón tienen la obligación de defender los intereses de todos los ciudadanos y transmitir al Gobierno de Aragón para que a su vez transmita al Gobierno de España estas cuestiones que, evidentemente, urge resolver y tomar el toro por los cuernos. Por lo tanto, es lo que tenemos que lamentar y esa es nuestra posición al respecto de nuestro voto.
Nada más, y muchas gracias.
La señor presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
El señor Ibáñez tiene la palabra.
El señor diputado IBÁÑEZ BLASCO: Muchas gracias, señora presidenta.
Muy brevemente, pero por dejar dos o tres cosas claras de la postura del Grupo Socialista en este tema. Mire, señor Yuste, que no nos preocupa que haya debate... Si ya sabemos que habrá... Si ha habido, ya ha habido muchos debates... Lo que hacen falta son acuerdos, señor Yuste. Debates hemos tenido yo creo que más que suficientes, de verdad. Yo creo que, en estos momentos, la postura de Chunta Aragonesista, yo creo que la tengo clarísima; la de Izquierda Unida —no está—, también; la del Grupo Popular, también; la del Partido Aragonés, igual; la del Grupo Socialista, también. Lo que necesitamos es, sabiendo eso, que ya lo sabemos, llegar a los acuerdos necesarios para que eso nos impida a todos pedir lo blanco y a la vez lo negro, porque, como ahora no tenemos acuerdo, cada uno decimos lo que nos apetece y decimos cosas que son totalmente contrarias a las otras que decimos también. Y eso solamente se evita si llegamos a un consenso y a un acuerdo que nos obligue a todos a no decir más tonterías, con perdón —entre comillas si me lo permiten—, y ajustarnos al acuerdo que hemos alcanzado. Debates podemos tener todos los que queramos, pero no sirven de nada —ya lo sabemos todos—. Acuerdos, señor Yuste, necesitamos acuerdos.
Y una vez más, por lo menos a nuestro juicio, desde nuestro punto de vista, ha sido el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero el que, ante un problema, ante una solución heredada, que no la ha generado él, que no tiene la culpa nadie, pero, ante un problema, lo que ha intentado es encontrar soluciones, y ha hecho lo que le ha parecido conveniente sin el apoyo de nadie, una vez más, y ha sido responsable, y ha tomado todas las medidas —las he intentado explicar antes, incluso alguna más—. Las eléctricas están obligadas por ese decreto del gobierno a financiar el bono social hasta 2013, con lo cual, hasta el 1 de enero de 2014, cinco millones de hogares en España por lo menos, de las personas con menor poder adquisitivo, no tendrán subida de la luz. Pero es que, además, las eléctricas vienen también obligadas a pagar las políticas de ahorro y eficiencia energética, que son seiscientos setenta millones de euros, en tres años. Insisto: el Gobierno de España se habrá equivocado o no, como siempre, pero, por lo menos, ante un problema que no ha generado él, pero que hay que solucionar, lo que ha hecho ha sido tomar las decisiones para que la subida de la luz, que ha sido muy alta, fuera lo menos alta posible y para que, mediante este ahorro de cuatro mil seiscientos millones que se va a producir en los tres años siguientes, las futuras posibles subidas de la luz sean las menores posibles. Eso es lo que ha hecho el Gobierno de España, que entiendo que es responsable, sensato, y lo que tiene que hacer uno cuando gobierna, porque la obligación de los que gobiernan es esa. Pero no se puede decir que han tomado la decisión porque les ha apetecido, poco menos, y que es un abuso. No. Acuerdos que nos obliguen para que no podamos seguir pidiendo la luna y, por otro lado, lo contrario a la luna, porque eso no es bueno, y el Gobierno ha hecho lo que ha podido y lo que ha entendido necesario para que la subida fuera lo menor posible y que las que vengan en el futuro sean también las menores posibles.
Nada más, señora presidenta.
La señora presidenta (DE SALAS GIMÉNEZ DE AZCÁRATE): Gracias, señoría.
A continuación el cuarto punto, ruegos y preguntas. ¿Algún ruego, alguna pregunta?
El primer punto. ¿Alguna objeción al acta de la sesión anterior?
Lectura y aprobación, si procede, del acta de la sesión anterior.
Se aprueba por unanimidad.
Se levanta la sesión. Gracias. [Se levanta la sesión a las doce horas y cuarenta y cinco minutos].