Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón


Comparecencias - De Consejeros del Gobierno de Aragón - Ante la Comisión de Ordenación Territorial

Comparecencia del Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes para informar sobre el proyecto de ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Aragón para 1993, en lo concerniente a su Departamento.

Diario de Sesiones de las Cortes de Aragón n°: 042 de Serie A (III Legislatura)
Intervinienen: Acin Boned, Luis - Esteban Izquierdo, Isidoro - Calvo Lou, Valentin - Maestro Tejada, Jesus - Bernad Royo, Enrique - Pina Cuenca, Francisco

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Comienza la Sesión. [A las once horas y veinte minutos.]
Buenos días, señor Consejero, señores directores generales del Departamento de ordenación del territorio. Vamos a dar comienzo a la Comisión de ordenación del territorio en este período habilitado de sesiones para tener conocimiento de la exposición y de las justificaciones que el Consejero, en nombre de su Departamento, haga ante la Comisión de los presupuestos para el ejercicio de 1993.
Aprovecho la ocasión de que ésta sea la primera sesión que celebra la Comisión para desear a todos sus señorías una feliz continuación del ya iniciado año 1993. Y sin otros comentarios por parte de la Presidencia de la Comisión, paso a dar la palabra al señor Consejero de ordenación del territorio, señor Acín.
Señor Acín, cuando quiera.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Señor Presidente, señorías.
Salgo a esta tribuna porque, entre otras razones, creo que se me oye muchísimo mejor, no tengo que tener un micrófono en la mano, y, lógicamente, puedo manejar mejor los datos, y, además, algunos medios de comunicación me han rogado que, si era posible, precisamente por lo mismo, saliera a la tribuna, pues tendrían mejor sonido luego. No hay otra razón especial. Si podemos dar a todos una cierta satisfacción, es algo que hago muy gustoso.
En primer lugar, y con independencia de presentar los presupuestos del Departamento de ordenación del territorio para el año noventa y tres, me gustaría, en todo caso, señorías, descender un tiempo a lo que se llama explicación del presupuesto y su grado de ejecución en el año noventa y dos. Los señores del Partido Socialista hábilmente han colocado algunas perlas cultivadas en la opinión pública, a través de los medios de comunicación, y están haciendo creer a la opinión pública que este Gobierno no gestiona. Pero si no gestiona, ¿para qué más competencias, para qué reforma del Estatuto?; si no son capaces de llevar a efecto el cumplimiento de las que actualmente tienen, ¿por qué, en todo caso, somos, según ustedes, sectaristas y partidistas a la hora de otorgar subvenciones? Además, nos acusan ustedes de que estamos actuando con una pérdida de autonomía municipal, a través de la Ley de Ordenación del Territorio, a través de la Ley de Comarcalización, y a través de la falta de un fondo de cooperación municipal finalista, que ustedes piden para que cada ayuntamiento lo adecue a lo que considere más oportuno.
Lo de no ejecutar -y yo hablo, indudablemente, por el Departamento de ordenación del territorio- creo que es tónica general dentro del Gobierno; está claro que voy a tratar de explicarlo, y les tengo que decir a sus señorías que el Departamento de ordenación del territorio, teniendo en cuenta el presupuesto ordinario del año noventa y dos, más las incorporaciones, ha tenido un presupuesto de treinta y dos mil setecientos cincuenta y nueve millones, y un grado de ejecución autorizado del 92,78. Ya sé que después sus señorías, a pesar de lo que yo me esfuerce -y probablemente tendrán ya, creo yo, un discurso preconcebido-, discutirán conmigo si, de alguna manera, esto de autorizado, contraído o pagado lo sabemos explicar o no ante la opinión pública; pero como ustedes pondrán ejemplos, yo ya me reservo para mi intervención de réplica para poner los míos, a ver si, de una vez por todas, somos capaces de explicar ante la opinión pública, a través de los medios de comunicación cómo se ejecuta, para que, de alguna manera, quede claro que las cosas no se pagan hasta que no se acaban, y que cuando se contraen, por si no se contraen, no se pueden sacar a concurso.
De cualquier manera, les tengo que decir a sus señorías que en materia de carreteras, desde que este Consejero lo es de ordenación del territorio, ha llevado a efecto una inversión real pagada de 16.344,4 millones de pesetas. Las actuaciones han sido: Caspe-Maella, Santa Isabel-Peñaflor, Lucena-Calatorao-La Almunia, Morés-El Frasno, Castejón de Sos, Benasque, Santa Liestra-Morillo, Huesca-Plasencia, Binéfar-Tamarite-límite de la provincia de Lérida, Alcañiz-Castelserás, Teruel-Ejea-Albarracín, Más de las Matas-Castellote, Monterde-Orihuela, Calanda-embalse de Calanda, Tramacastilla-Noguera, Albentosa-Manzanera, Perdiguera-Leciñena, variante puerto de Alcubierre, hospital de Tella-Salinas, Graus-Lascuarre, Letux-Lécera, Magallón-Bureta, Gurrea-Las Pedrosas, Maella-límite de la provincia de Tarragona, variante de Gallur, Panticosa-acceso al balneario, Biescas-Bubal-Lanuza, Plasencia-Concilio, Sena-Ontiñena-Chalamera, Santa Eulalia-Pozondón-cruce de Monterde, Mediano-Aínsa, Zaragoza-Perdiguera, nacional II-Epila, Rueda-Lumpiaque, Santa Isabel-Montañana. 16.344,4 millones de pesetas ejecutados y pagados después, lógicamente, de terminar las obras.
Obras en ejecución que están ahora y que, lógicamente, tienen partida presupuestaria en el año noventa y tres: la variante de Ibdes, Bureta-Fuendejalón, Val de Ferriz-Valareña, Zuera-Las Pedrosas, variante de Illueca, acceso a Cadrete, Puente la Reina, Lascuarre-Puente Colomina, variante de Albelda, Nogueruelas-Linares, Teruel-Corbalán, y de recuperación paisajística, hacen un total aproximado de tres mil quinientos cuarenta y un millones de pesetas.
Pero, señorías, vamos a empezar a desglosar -dentro de que la ordenación del territorio no debe ser partidista, y sí buscar los intereses generales, nunca particulares- lo que significan, para empezar a dejar las cosas claras a la hora de actuar desde el Departamento de ordenación del territorio, estas inversiones en los distintos municipios que conforman la Comunidad Autónoma de Aragón; si no me equivoco, setecientos veintinueve, y unos doscientos núcleos incorporados: un total de casi mil. Hemos tenido el detenimiento, el cuidado exquisito en pararnos, por ejemplo, en ver qué han significado estas carreteras, a cuántos municipios han afectado en ese año, en dos o tres meses que llevo de Consejero en ejercicio de este Departamento, y les puedo decir que son trescientos cincuenta municipios afectados, uno por uno -tengo aquí la relación-, por las carreteras que antes les he enumerado.
Pero, curiosamente -y lo siento, lo siento, probablemente, por mis compañeros de coalición-, la ordenación del territorio -sin ser tontos, insisto- no puede ser una cosa partidista: de esos miles de millones de carreteras ejecutadas, afectan a municipios del Partido Aragonés en tres mil trescientos veintiséis millones de pesetas, al Partido Socialista en nueve mil trescientos trece millones de pesetas, al Partido Popular en tres mil quince millones de pesetas, al CDS en doscientos cuarenta millones de pesetas, a la Chunta Aragonesista, que es extraparlamentaria, en medio millón -porque, claro, tienen poquitos municipios-, a Izquierda Unida en otro medio millón, porque quizás no tenían municipios en el transcurso de los trescientos cincuenta, y, en todo caso, independientes, ciento diecinueve; obras de interés comarcal o general, no cuantificadas por municipios, ciento diecisiete. Luego ya vamos viendo aquí unas diferencias notorias. Ustedes luego dirán que como tenemos más municipios, lo lógico es que nos afecte más; pero lo que están vendiendo es todo lo contrario.
Entonces, ya tenemos aquí unos ejemplos muy importantes, porque, incluso, fíjense, hemos llegado hasta el extremo -y no les voy a leer- de lo que afecta a cada uno de los trescientos cincuenta municipios, las inversiones de esos diecisésis mil millones de carreteras. Y decimos Abizanda, cuarenta y siete millones de pesetas, Adahuesca, medio millón... Hasta ahí, hasta donde ustedes quieran, trescientos cincuenta municipios. Hace falta perder un ratito de tiempo, ¿verdad?, saber por dónde pasa la carretera, cuántos pueblos atraviesa, cuál es el término municipal... Probablemente habrá desviaciones de cinco pesetas, de treinta y tres, pero aquí lo tienen ustedes para contrastar, en todo caso, lo que ha significado el grado de ejecución en carreteras en el año 1992.
Pero nos encontramos, a su vez, ahora con actuaciones en materia de obras hidráulicas por parte del Departamento de ordenación del territorio, y hemos tenido actuaciones en Abiego, en Albalate de Cinca, en Alcubierre, en Alfántega, en Azara, en Azlor, en Barbastro, en Bárcabo, en Belver de Cinca, en Biescas, en Binéfar, en Castiello de Jaca, en Castillonroy, en Fraga, en Grañén, en Gurrea de Gállego, en Huesca, en Huesca capital, otra vez más en Huesca, otra vez en Huesca, otra vez en Huesca, Monzón, Monzón, Ontiñena, Ontiñena, Peraltilla, Puértolas, Pueyo de Santa Cruz, Robres, Sahagún, Sariñena, Tamarite de Litera, Tamarite de Litera, Tramaced, Valfarta, Valle de Hecho, Velilla de Cinca, varios, varios, varios, Híjar, Lledó, Andorra, Berge, Codoñera, Fuentes de Rubielos, Fuentespalda, Ejea de Albarracín, Orihuela de Tremedal, Orrios, Perales de Alfambra, Rubielos de Mora, Teruel capital, Teruel capital, Torres de Albarracín, Valdealgorfa, Alfajarín, Alpartir, Boquiñeni, Bureta, Burgo de Ebro, Cabañas de Ebro, Cervera de la Cañada, Cetina, Clarés de Ribota, Clarés de Ribota, Cosuenda, Cuarte de Huerva, Cubel, Ejea de los Caballeros, Farlete, Frago, Fuentes de Jiloca, Gelsa de Ebro, Grisel, Illueca, Jaraba, Lécera, Letux, Longares... Mire, hasta no sé cuántos, doscientos y pico municipios, que, sumados a los trescientos y pico, probablemente repetiremos en algunos municipios tres y cuatro actuaciones desde la ordenación del territorio.
Pero, por ejemplo, como un dato indicativo, les tengo que decir que, aproximadamente, de este tipo de actuaciones, está un 60% a favor del Partido Socialista, con sus distintos municipios, el 25%, para la coalición de gobierno PAR-PP, y el resto para Izquierda Unida. Porque no les quiero asaetear con datos, pero, si ustedes me preguntan con detalle, se lo diré a ustedes. Por eso, vayan sumando, no obstante, que el Departamento de ordenación del territorio -como su propio nombre indica: pretende ordenar lo desordenado y lo que queda, en todo caso, por planificar- es el que tiene las inversiones más importantes, como es natural -las estoy leyendo-, y no jueguen ustedes, como normalmente, a decir que en el Departamento de Presidencia se es sectarista o partidista porque, de los seiscientos millones, quinientos van al PAR-PP, y el Departamento o el Presidente destina el 70% al PAR-PP. Ustedes suman esas dos cifritas, y hablamos de mil millones de pesetas -mil cien-, pero ahora solamente con cualquiera de las partidas que les leo ya nos deben ustedes no sé si son ocho mil, nueve mil o diez mil millones hasta aquí. Pero esperen, que no hemos terminado, a ver si luego, en todo caso, hay que decirles a los ayuntamientos que realmente hagan oposición frontal continuamente a la Diputación General de Aragón, algunos en concreto, porque resulta que no hacemos absolutamente nada.
Señor Presidente, ¿podría tomar un poquito de agua?
Nos vamos al suelo y vivienda de Aragón, y decimos: actuaciones más relevantes del grado de ejecución presupuesta en el año noventa y dos, programa de suelo industrial. Se encuentran terminados y en fase de ejecución polígonos industriales en los siguientes municipios [pausa].
Programa de suelo industrial. Les decía que están terminados, o en fase de ejecución, polígonos industriales en los siguientes municipios: Pedrola... Está puesto a conciencia el primero porque es el magnífico polígono que hemos hecho allí, cerca de General Motors, en donde, cuando lo inauguramos -y este Consejero asistió-, me encontré con un magnífico cartel que decía: "Colaboran en la ejecución de este polígono -y decía así, ¿eh?- General Motors, Diputación General de Aragón, Ayuntamiento de Pedrola", en igualdad de condiciones. Setecientos noventa y cinco millones, nuestros, del Departamento de ordenación del territorio, y un terreno que aportó, eso sí, el Ayuntamiento de Pedrola; del cual el señor Perversi decía con cierta gracia: "Se acuerda usted, señor Marco, por aquí unos conejos pasando... Bien, y lo hemos convertido en polígono". Sí, pero había conejos pasando... La multiplicación de los panes y de los peces la ha llevado a efecto el Departamento de Ordenación Territorial con setecientos noventa y cinco millones de inversión en el Ayuntamiento de... Por otra parte, encantadísimos, ¿eh?, porque son unas empresas magníficas instaladas en el polígono, instaladas en un municipio socialista, con empleo, cerca de un municipio socialista, para gente que vote o no socialista, pero con una inversión del Departamento de ordenación del territorio, iniciado en la época de don Joaquín Maggioni, que haré siempre referencias a él, porque todo no se acaba en un año.
La Almunia de Doña Godina, Bujaraloz, Alfajarín, Cariñena -que el sábado que viene se inaugura el polígono de Cariñena con dos empresas, que antes han pretendido vender otros partidos políticos sin haber puesto nada más que nada: un poquito de terreno; las empresas las ha conseguido el Consejero de Economía, y el polígono lo ha hecho el Departamento de ordenación del territorio-, Gurrea de Gállego, Alcorisa, Utrillas, Valderrobres, San Mateo de Gállego, La Puebla de Híjar y Montalbán.
Polígonos industriales recientemente iniciados o en fase de contratación: Monreal del Campo, Cariñena, Andorra, Castejón de Monegros y Pina de Ebro.
Total, en polígonos terminados y en ejecución, dos mil doscientos veintiséis millones de pesetas; en polígonos recientemente iniciados y en contratación, mil setenta y ocho millones de pesetas. Total: tres mil trescientos cuatro millones de pesetas en polígonos industriales.
Programa de suelo residencial. Hemos actuado, fundamentalmente, en dos frentes: en el área II, o varias áreas del Actur-Puente de Santiago, y en la Fronfresca de Teruel. Pretendemos, lógicamente, con el suelo residencial dar cumplimiento a ese plan de la vivienda y fomentar que las cooperativas y particulares tengan suelo en buenas condiciones, y cuando digo "en buenas condiciones" lo demostramos con el ejemplo: que no supere el valor del suelo el 15% del valor oficial de la vivienda, que, hasta la fecha, salvo el Gobierno aragonés, antes y ahora, es el único que está predicando con el ejemplo, sacando parcelas a concurso, que suponen una inversión por debajo del millón de pesetas, que podría ser el resultante del 15% de la aplicación del suelo con respecto a la vivienda. No como otros, insisto -y lo he dicho en muchas comparecencias-, no como otros, o algunas cooperativas con nombres que podrían asemejarse a un equipo de fútbol. Lo he dicho y lo diré: eso no es política social de viviendas, eso es comprar un suelo para tener una repercusión de tres millones y medio, y cuatro millones de pesetas, en el Actur o en otros sitios, para, realmente, después confundir a la opinión pública con viviendas sociales. Pero les voy a decir, curiosamente, qué hemos hecho con ese suelo y con esas mil doscientas ocho viviendas que, en principio, hemos facilitado que se construyan, porque les tengo que dejar a ustedes bien claro que el Gobierno aragonés no pretende ser casero; cuando digo "casero" es que no pretendemos ejecutar directamente las viviendas y tener a la gente alquilada o vendida: pretendemos facilitar un suelo en buenas condiciones para que, realmente, el promotor privado o las cooperativas hagan viviendas en Aragón.
Pues, miren, en el Actur, en el área VII, la parcela 23, noventa y seis viviendas para la cooperativa Valle del Ebro; en el área VII, la parcela 24, ciento veinte viviendas, la cooperativa de trabajadores municipales del Ayuntamiento de Zaragoza; área VII, parcelas 6 y 8, ciento noventa y dos viviendas, para la sociedad municipal de la vivienda; área XV, parcela 13, ciento veinte viviendas, para una cooperativa de la Guardia Civil; área VII, parcelas 7 y 8, doscientas ochenta y ocho viviendas; Santa Isabel, veinticuatro viviendas, construcciones Romano, S.A.; Santa Isabel, 48, cooperativa Valle del Ebro; Santa Isabel, 48, Unión viviendas sociales; Santa Isabel, 65, EBROSA; Santa Isabel, 65, cooperativa Isabel de Portugal; Santa Isabel, 31; Santa Isabel, 49, Cooperativa Victoría Martínez; Santa Isabel, 62, Ayuntamiento de Zaragoza. Insisto: mil doscientas ocho actuaciones en materia de suelo, para que construyan cooperativas y particulares en buenas condiciones y no fomentar la especulación.
Programa de viviendas de promoción pública. Ustedes saben que aquí dijo don José Marco, en una interpelación al Presidente de la Comunidad Autónoma de Aragón -y no íbamos a salir todos los Consejeros a replicarle, porque con uno sobró-, que en el famoso convenio del MOPT y de la Diputación General de Aragón, el Gobierno aragonés solamente ponía las ventanillas. Yo, desde luego, estuve pensando un rato en el coche en cómo se bajaban y subían: "Salgo, no salgo". Bueno, ya llegará el momento de poder explicar, porque lo último que se dice, si se demuestra, es lo último que queda. Desde luego, delante del Ministro Borrel ya comprobó su presidente y portavoz del Grupo Socialista que esto no era así, porque si pide datos al Gobierno central, le pondrán en antecedentes de cómo funciona el plan de viviendas. Desde luego, algunos fallos habrá -hay mucha burocracia administrativa-, pero está clarísimo que hay cosas que se van haciendo.
Y en ese sentido tengo que decirles que existe un convenio, para que no se confunda a la opinión pública, exclusivo entre el Gobierno aragonés y los distintos ayuntamientos de la Comunidad Autónoma para que realmente podamos, ante la oferta de suelo por parte de los ayuntamientos, realizar viviendas de promoción pública (las denominadas viviendas sociales), siendo, hasta la fecha -y ustedes pueden contrastarlo con otras comunidades autónomas-, el mejor convenio que existe en España para este tipo de viviendas. Ojalá pudiéramos hacer más viviendas de las programadas en el discurso de investidura por parte del Presidente Emilio Eiroa, pero se comprometió inicialmente, y vamos por ese camino, a contraer, más o menos, cuatrocientas viviendas por año (total: mil seiscientas en los cuatro años de Legislatura), y éste es un convenio que no me cansaré de repetir que es a veinticinco años, con el 5% de interés, el 5% de entrada, y para personas que no superen dos veces y media el salario mínimo interprofesional. El Ayuntamiento, lógicamente, ofrece el terreno. Pero ahora iré poniendo ejemplos. Eso de la contratación directa, convenida, delegamos o no delegamos... No, hombre, si creemos tanto en la autonomía municipal, en los gestores municipales, y les trasladamos a ellos después el que, además de financiar nosotros estos convenios, el Ayuntamiento encargue el proyecto a quien quiera libremente, contrate la obra y se preocupe de su ejecución, y nosotros financiando. Me imagino que algún cartelito pondremos para que se enteren en el municipio que estamos actuando, ¿verdad? Pero ¡qué menos que eso! Pero a veces también, señorías, resulta que yo puedo contraer un convenio con un municipio; a partir de ese momento el municipio tarda tiempo en encargar el proyecto, el proyecto puede ser que se retrase, después tarda la adjudicación, y ahí entraremos en los ejemplos que podemos poner, si ustedes quieren después, a la hora de juzgar o no la ejecución presupuestaria.
De cualquier manera, hablando de viviendas de promoción pública, de éstas que acabo de comentar, convenios exclusivos nuestros, del Gobierno aragonés, con ayuntamientos, son: viviendas terminadas, trescientas cincuenta y dos; viviendas en ejecución, seiscientas sesenta y seis; viviendas en contratación, doscientas sesenta y tres. Total: mil doscientas ochenta y una viviendas, con una inversión comprometida de siete mil seiscientos setenta y un millones de pesetas.
Y ahora vamos con el programa de viviendas de protección oficial de promoción privada, ése de las ventanillas, que decía don José Marco, que solamente aportaba el Gobierno aragonés, junto con el MOPT. Tengo que decirles, siendo realista, que es un convenio -y ya lo dije en su momento-, un magnífico convenio, hecho entre las comunidades autónomas y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes. Y ese convenio, con sus lagunas y sus problemas, con los retrasos, a veces, en la concesión de algunas entidades financieras, que no depende de nosotros, indudablemente, va avanzando. Y yo les puedo decir que para viviendas de régimen general (VPO), el año noventa y dos hemos concedido mil cuatrocientas quince; teníamos un cupo de mil quinientas veinticinco, luego hemos tenido un porcentaje del 92,78%. De VPO, régimen especial, hemos tenido concesiones por un total de doscientas ochenta y seis, sobre un cupo de ochenta; luego nos hemos pasado en el cumplimiento a un 357,50%. De precio tasado hemos concedido subvenciones por mil trescientas sesenta y ocho, sobre un cupo de seiscientas noventa y cinco; luego hemos cumplido con creces el cien por cien: a un 196%. Y en rehabilitación hemos actuado en setecientos sesenta casos, frente a un cupo de doscientas treinta, luego hemos llegado a un grado de ejecución del 330%.
Esto va a significar que, prácticamente, el cupo del año noventa y tres, salvo que haya revisiones, nos lo hemos comido ya desde el Gobierno aragonés, de acuerdo con el Ministerio de Obras Públicas y Transportes. Un dato que se puede destacar es que la Comunidad Autónoma de Aragón se encuentra, respecto del resto de las comunidades autónomas -lo pueden contrastar con el MOPT- en el número uno respecto de las viviendas de precio tasado, y en el número dos en rehabilitación. En el resto nos encontramos en la mitad hacia arriba de la banda de las diecisiete comunidades autónomas. No obstante las ventanillas de la Comuniad Autónoma de Aragón, aparte de los magníficos funcionarios que han atendido a los que, de alguna forma, estaban interesados, han comprometido en adquisición de VPO, en rehabilitación y en vivienda rural, en total, cuatro mil seiscientas veintiséis actuaciones; total: mil seiscientos dos millones de pesetas.
Más adelante, no se preocupen, volveré a contrastar los municipios del PSOE con respecto a las viviendas, los de polígono industrial, para que vayamos sumando, y luego veremos exactamente si este Gobierno se preocupa o no de los ayuntamientos de la Comunidad Autónoma.
En ordenación del territorio. Aparte de aprobar, que esto también significa gestionar, una Ley -que ya me hubiera gustado a mí que fuera consensuada, pero no lo ha sido- de ordenación del territorio, está claro que hemos hecho las directrices, o estamos a punto de terminarlas, de ordenación territorial general del Pirineo, directrices de los valles de Berdún, Ara, Esera, Alto Aragón y Alto Gállego; que estamos preparando programas territoriales en Daroca, Romanos, Used, ya terminados en Sobrarbe y Ribagorza; que hemos contratado unas directrices de ordenación territorial del entorno de la ciudad de Huesca; que hemos firmado un convenio en el eje oeste de la ciudad de Zaragoza con unas inversiones supramunicipales de ciento cincuenta millones de pesetas; que hemos otorgado ciento sesenta y siete ayudas a entidades locales para planeamiento y gestión urbanística y programas territoriales, que sirven a más de trescientos cincuenta ayuntamientos, por valor de trescientos cincuenta y dos millones de pesetas; que estamos desarrollando un centro de documentación e información territorial de Aragón; que hemos iniciado las acciones del servicio de información geográfica informatizado; y que hemos concluido, en este caso en la ordenación del territorio, dentro de ese porcentaje del 92%, casi un 96% en la ordenación del territorio.
Y como dato curioso también en estos temas de las gestiones que hemos hecho en la ordenación del territorio, y explicando que, como ustedes sabrán, hay un plan que funciona muy bien -y hay que decirlo así, no lo he dicho yo: lo dicen los ayuntamientos, con mayoría socialista-, la Ley de ordenación integral del Somontano del Moncayo, con un plan de actuación de trescientos millones de pesetas cada año, durante cuatro, hasta la fecha, por consenso, siendo mayoría los ayuntamientos socialistas que lo componen; hemos destinado el 50% a obras de interés general, supramunicipal, comunicaciones u otro tipo de obras de ese tipo de interés, y el 50% a obras que ha planteado directamente cada ayuntamiento: restauración de una iglesia, abastecimiento de agua, alumbrado, o mejora de la fuente del pueblo. Una minidiputación provincial en la comarca del Moncayo, pero actuando en consecuencia y con sentido común, coordinando las cosas con los distintos municipios. En una palabra, solamente el Somontano del Moncayo tiene un plan de actuación de obras y servicios que supera con creces al de toda la provincia de Zaragoza por parte de la Diputación Provincial, en inversiones reales.
Entonces, en ordenación del territorio, de esas subvenciones que ha dado a trescientos cincuenta ayuntamientos, da la coincidencia final que han sido setenta y cuatro para el Partido Socialista -digo subvenciones...-, cuarenta y uno para el Partido Aragonés, veintisiete para el Partido Popular, cinco para el CDS, dos para Izquierda Unida, cuatro para independientes y catorce para mancomunidades y programas supramunicipales; el 34,8% es para el PSOE, el 13,7% para el PAR, el 16% es para el PP, el 2% para CDS, el 2,3% para Izquierda Unida, el 2,7% para independientes, el 28,4% para mancomunidades, que de éstas, la mayoría, como son de ustedes, habría que bascular un cierto porcentaje en favor de ayuntamientos del Partido Socialista.
Ahora vamos con la restauración del territorio, que antes se llamaba medio ambiente, y las actuaciones que ha hecho, que, seguro, parecerán pocas, ya lo sé; pero hemos hecho algo que me parece ya que es empezar e ir concretando a partir del estudio actuaciones concretas. Hemos hecho un plan general de residuos industriales, respecto a Inquinosa se han puesto en marcha dos comisiones, una interna, de la casa, para ponernos de acuerdo en las actuaciones que vamos a realizar, y otra, en todo caso, externa, con distintas administraciones implicadas; porque el tema de Inquinosa no es exclusivamente del Gobierno aragonés: ahí nos hemos sentado ya el Ministerio de Obras Públicas y Transportes, la Confederación Hidrográfica del Ebro, el Ayuntamiento de Sabiñánigo y el Departamento de ordenación del territorio, en concreto, la directora general de restauración del territorio. Está clarísimo que aquí se sabe ya que hay trescientos veintiún espacios contaminados, que habría que invertir diecisiete mil cuatrocientos millones de pesetas y que, indudablemente, hay que empezar por algunas partidas ya para que prediquemos con los hechos con respecto al próximo año, y que luego explicaré, porque estoy hablando un poco del preámbulo de lo que sería la restauración de espacios contaminados.
Hemos producido varias autorizaciones de gestores de residuos y tenemos en trámite el depósito de seguridad; al mismo tiempo hemos autorizado a recoger los aceites usados a tres empresas que antes no existían; en autorizaciones de productores de residuos, hemos realizado bastantes inspecciones, entre ellas, muchas, por qué no, a Inquinosa; hemos atendido infinidad de denuncias, no tantas como el... ¿cómo se llama este servicio de la Gurardia Civil...? Seprona, exacto; es que entre el SEPRONA, el SEMENA, el COMENA, uno al final termina...
Como saben, hemos llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Zaragoza para que se ubique en el término municipal una planta de transferencias, transferencias de residuos y depósito de seguridad, que ya el Gobierno aragonés ha concedido a la empresa OMICRON, lógicamente, por la parte administrativa, la subvención que correspondía, con los espacios de tiempo necesarios según vaya haciendo la obra; falta la licencia municipal, que espero que en breve la pueda ya conceder el Ayuntamiento de Zaragoza. Hemos actuado por primera vez con el tratamiento in situ de empresas productoras de residuos. Les tengo que decir -lo comenté el otro día- que el MOPT quería haber iniciado un programa con las comunidades autónomas para tratamiento de residuos in situ, que destinaba inicialmente ochocientos millones de pesetas a principios del año noventa y dos; bajó a setecientos y pico al cabo de poco tiempo, y al final no sé qué les ha pasado, pero se han quedado en catorce millones para toda España. Nosotros, en realidad, ahí hemos actuado, aproximadamente, con cerca de trescientos millones de pesetas entre tratamientos in situ y otro tipo de actuaciones. Hemos actuado también en el apoyo a los vertederos de las mancomunidades y vertederos municipales.
Finalmente, por no alargar mucho más esta intervención, les diré que a nivel de inversiones reales en distintos municipios, desde la restauración del territorio, y territorializado por partidos políticos, hemos afectado a cincuenta y cuatro municipios del Partido Aragonés, treinta y siete del Partido Popular, ciento doce del Partido Socialista, tres de Izquierda Unida, cinco del CDS, dos independientes y dos de la CHA; total: doscientos quince municipios afectados por este tipo de actuaciones en restauración del territorio a nivel de vertederos, de mancomunidades y municipios a nivel independiente.
Ahora vamos con lo que sería arquitectura, restauraciones y convenios de rehabilitaciones del casco histórico de Huesca, Teruel, Zaragoza, Alquézar, Valderrobres, Uncastillo, y hasta dónde queramos llegar, incluso Fonz, con una serie de áreas de rehabilitación preferente. Les puedo volver a leer, pero me parece que llegaríamos a doscientos y pico municipios otra vez, unos datos finales, por ejemplo, de cómo hemos actuado en promoción directa: en arquitectura resulta que para municipios del PSOE, ciento doce millones setenta y ocho mil pesetas; para municipios del PP, treinta y tres millones de pesetas; para municipios del PAR, sesenta y cinco. Esto en la provincia de Huesca -vamos a hacerlo por provincias también-. En Zaragoza, en arquitectura -insisto: en actuaciones directas-, el PSOE, setenta y tres; el PP, ocho millones y pico; el PAR -aquí les gana-, ciento cincuenta y siete en Zaragoza; CDS, diez millones de pesetas. En Teruel, en arquitectura, tenemos cincuenta millones quinientas ochenta y dos mil, PSOE; cuarenta y cinco, PP; PAR, cincuenta y uno. Cierto equilibrio. Quizá ahí les ganamos un poquito en éstas, que son de promoción directa. Pero tenemos otras que son convenidas con ayuntamientos del PSOE, y en Zaragoza tenemos cuatrocientos doce millones, para ayuntamientos del PSOE; siete millones, ayuntamientos del PP; PAR, treinta y cuatro millones de pesetas. En Huesca, el PSOE, trescientos ochenta millones de pesetas (aquí está incluido el convenio de las capitales de provincia); el PP, veinte millones; el PAR, doce millones de pesetas. Y en Teruel, en actuaciones convenidas, treinta y tres millones, Partido Socialista; diez, Partido Popular; trescientos setenta, Partido Aragonés, en el convenio de rehabilitación con el Ayuntamiento de Teruel.
Luego volvemos a demostrar, con este tipo de actuaciones, el reequilibrio territorial que busca el Departamento de ordenación del territorio, y, desde luego, creo que tiene que servir, desde mi punto de vista, no obstante, el que, realmente, ustedes, con estas cifras, de una vez por todas, si quieren ser asépticos y objetivos, reconozcan y sean fieles a la realidad y digan a la opinión pública lo que crean conveniente, porque ustedes están para criticar, y también para criticar constructivamente con alternativas y, al mismo tiempo, dar a conocer, lógicamente, la verdad.
Me sorprendo porque curiosamente yo vi una página el otro día en un medio de comunicación, en Huesca, y dice: "Los pueblos mejoran su infraestructura". No lo dudo. Un plan de obras y servicios de la Diputación Provincial de Huesca: trescientos quince millones de pesetas, ochenta y seis municipios, ¡magnífico! Y aquí uno lee que dice: tres, cuatro, cinco, tres, cuatro, cinco, tres, dos, tres, cuatro, cinco... Por ejemplo, abastecimiento de aguas, y hay un pueblo al que le dan tres, pero hay que invertir cien, o sea, harán falta treinta y tres años para que realmente este pueblo tenga agua. Entonces en este pueblecito ya queda bien la Diputación poniendo tres millones, y viene al Departamento de ordenación del territorio a pedir noventa y siete. ¿Competencias delegadas? No; vamos a ser realistas. Y esos son los municipios que, en un momento determinado, se le echan objetivamente o no objetivamente, por parte del PSOE, al Gobierno aragonés: "Oiga, si me ha dado tres millones la Diputación..."; pues yo otros tres. No tendrá agua en veinticuatro años. ¡Magnífico!: trescientos quince millones de pesetas. Fíjese usted el tiempo que tendría yo para hacer política si fuera Presidente de la Diputación Provincial de Huesca: con ochenta y siete actuaciones convenidas en distintos municipios, a tres milloncitos, se delega en el ayuntamiento y ya está.
Porque, fíjese, solamente le voy a citar cuatro actuaciones, pero, en concreto, tres que desde obras hidráulicas hemos concedido en el año noventa y dos. Por ejemplo, el cubrir el barranco del Alcabón, Ayuntamiento de Fraga; actuar en el barranco de Sía, Biescas (PSOE); o el encauzamiento del río Queiles, en Tarazona (PSOE). Mil ciento veinticinco millones de pesetas en tres actuaciones. Pero a ver si somos realistas: ¿sabe lo que ha hecho el Gobierno aragonés con esto?: les ha transferido el dinero a los ayuntamientos; siendo socialistas, no nos parece nada raro, confiamos en su capacidad de gestión. Y ¿quién contrata las obras?: el ayuntamiento socialista; si tuviera algún interés el Gobierno aragonés en quedarse estas adjudicaciones, ¿por qué las iba a delegar? Puedo yo empezar pensar igual que algunos de ustedes piensan, a revolver aquí, con carácter general, las adjudicaciones: que no las cedo a un ayuntamiento, que tiene la gestión municipal más cerca, precisamente porque puede tener algún interés determinado. Yo no dudo en este momento, pero podría dudar, y hemos delegado allí mil ciento veinticinco millones. O sea, con unas actuaciones como éstas, cualquiera de éstas, esto va al plan de obras de servicios de la Diputación Provincial de Huesca, o al de Zaragoza. Y aún les voy a poner un ejemplo más sencillo. Mire, si yo decidiera hacer una vivienda en cada uno de estos ochenta y seis municipios, claro, tendría que ser unifamiliar, y luego a sorteo con los que realmente la quisieran en cada uno de estos municipios; porque, claro, una, ante no sé cuantas peticiones que habría, resulta que, como cada una tiene un promedio de inversión de seis millones, seis millones y medio, cinco millones y medio, sólo con una vivienda en cada uno de estos municipios ya estaría solucionado. Así es, aunque fuera por eso de aparentemente buscar el reequilibrio de participar económicamente igual que participa el PSOE donde gestiona. Pero de verdad es que los crieterios que tenemos que aplicar son de mucho más sentido común que los que estamos aplicando a la hora de la ordenación del territorio.
Bien, yo les diría en concreto que, cuando ustedes, creo, y me parece muy bien, piden un fondo de cooperación municipal, yo creo que lo están pidiendo porque, a falta de recursos, que, por otra parte lo entienden las diputaciones provinciales, si la partida que destina el Gobierno fuera como ustedes quieren para un fondo no finalista, en realidad, quien vendería la actuación en el pueblo sería el señor alcalde, y de esa manera no se comparte tanto el proyecto cuando está convenido con la Diputación General de Aragón.
Entonces, con toda sinceridad, me parece que, de una vez en esta Comunidad Autónoma, nos tenemos que poner de acuerdo, a falta de muchísimas inversiones históricas en esta Comunidad Autónoma, en priorizar las inversiones a realizar en cada uno de los municipios, o, además de hacer diez viviendas, un micropolígono industrial, mejorar la carretera, pavimentar una calle, a través del Gobierno aragonés, ¿además se quiere un fondo de cooperación municipal para venderlo exclusivamente el señor alcalde, o tenemos en cuenta en el fondo de cooperación municipal todas las inversiones que realiza el Departamento de ordenación del territorio? A ver si aclaramos realmente los conceptos de una vez.
Por otra parte, dicen ustedes que pierden autonomía municipal con la Ley de Comarcalización y con la Ley de ordenación del territorio, y precisamente la Ley de ordenación del territorio, en un momento en que estamos a falta de viviendas sociales, permite, con una tranquilidad total, según el artículo 39: "A solicitud de los ayuntamientos afectados y mediante un procedimiento de gestión administrativa coordinada, el Departamento de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes podrá declarar el interés social de un uso, actividad, construcción o implantación en suelo no urbanizable, fuera del suelo sometido a protección, por el planeamiento o normativa urbanística o territorial, cuando se justifique para la realización de programas de viviendas sociales". Me refiero a qué mala será la Ley de Ordenación del Territorio, que permite en un municipio, de acuerdo el ayuntamiento con nosotros, lógicamente clasificar, en un proceso rapidísimo de dos meses, que les puedo a ustedes leer si quieren, en dos meses, en todo caso, facilitar suelo en buenas condiciones para hacer viviendas sociales. ¿Realmente esto al Partido Socialista no le convence, o estará por que siga habiendo suelo en manos de unos pocos y fomentar la especulación? Porque, si esto es tan malo, vamos a analizarlo aquí. Hay que poner ejemplos prácticos para convencer a la opinión pública.
Bien, pues de momento, y con el debido respeto, señor Presidente, señorías, he dado cumplimiento, quizá un poco exhaustivo, de lo que ha sido el grado de ejecución del año noventa y dos, que estoy convencido, antes de que después intervengan los distintos grupos políticos, que no coincidiremos, pero yo tengo aquí la obligación, por supuesto, porque estamos en el Parlamento, de dar todo tipo de explicaciones. Ya sé que algunos vienen ya, insisto, con las ideas muy claras y preconcebidas, y no facilitarán la objetividad.
Presupuesto del año noventa y tres. Tenemos un presupuesto ordinario de dieciocho mil cuatrocientos doce millones de pesetas; hemos bajado un 25% del presupuesto del año anterior, pero enseguida sus señorías, yo creo que en plan constructivo, reconocerán que el Departamento de ordenación del territorio, como ha puesto en marcha un plan de infraestructuras, con dos empresas públicas, compensa, lógicamente, esta bajada del 25%, en beneficio de infraestructuras básicas de la Comunidad Autónoma de Aragón, con dos planes de inversiones.
De cualquier manera, por explicarlo con un cierto detenimiento, esos dieciocho mil cuatrocientos doce millones de pesetas se pueden distribuir, para que nos entiendan en conceptos, cuatro mil seiscientos millones de pesetas, aproximadamente, para un tema de viviendas, desarrollo urbanístico; mil seiscientos millones para obras hidráulicas -hablo de inversiones, no hablo de gastos de personal, gastos corrientes-; arquitectura y restauración, mil novecientos millones de pesetas; restauración y protección del medio ambiente, novecientos; ordenación del territorio y planes de ordenación del territorio, mil trescientos, y en carreteras, tres mil setecientos millones, que son la terminación de las obras en curso, más las que luego podamos añadir por el plan de infraestructuras. En total, en realidad, en los prespuestos del noventa y tres hay una capacidad inversora del Departamento de ordenación del territorio, entre el presupuesto ordinario y las empresas públicas a las cuales me referiré, de cuarenta y seis mil millones de pesetas.
En el presupuesto del noventa y tres, y como actuaciones más destacadas, figura la mejora del abastecimiento de El Frago y conducción al centro terapéutico de Zaragoza, con un presupuesto de cuarenta y siete millones, y aportación del cien por cien de la Diputación General de Aragón. Figuran también los proyectos de la segunda fase de la depuración de aguas residuales -proyectos, hablo- de municipios entre mil y dos mil habitantes. La mejora del abastecimiento de Ejea de los Caballeros, que, sobre un presupuesto de setecientos cincuenta millones de pesetas, vamos a empezar a iniciar este tipo de actuaciones. El encauzamiento del río Gallo, en Orihuela del Tremedal (Teruel), sobre un presupuesto deveintiséis, entraremos con el 75%. Un proyecto de la red de colectores del eje oeste de desarrollo de Zaragoza, con un presupuesto -en el proyecto, hablo, no de ejecución- de treinta y nueve; entraremos con el 62,5% y con un aportación del Ayuntamiento de Zaragoza de treinta y siete. La mejora del abastecimiento de la mancomunidad de aguas de Monegros, sobre un presupuesto de unos siete millones trescientas mil, con el cien por cien, aproximadamente. Abastecimiento de Albalate de Cinca, sobre un presupuesto de ciento cincuenta y dos, entraremos con el 80% de subvención, y el resto financiado. La mejora del abastecimiento de Osso de Cinca, sobre un presupuesto de ciento nueve, 80% de subvención. El proyecto del embalse de San Salvador, en el término de Belver de Cinca, proyecto para el que tenemos anteproyecto, que después, con la empresa pública, hablaremos de hasta dónde podemos llegar. El nuevo abastecimiento de Sariñena, el nuevo abastecimiento de Montmesa, Ortilla y Lupiñén, el encauzamiento del río Arba de Luesia, en Ejea de los Caballeros, el encauzamiento del río Arba de Biel, en Ejea de los Caballeros nuevamente, otra partida presupuestaria. Y así podemos llegar a subvenciones en actuaciones de infraestructura hidráulica, con un importe de quinientos cinco millones aproximadamente. Y continuaremos, lógicamente, subvencionando los del Queiles, en Tarazona; al barranco del Alcabón; Isuela, en Huesca, y barranco de Sía, en Biescas.
También hay aquí una pequeña novedad, y es que destinamos cincuenta millones de pesetas a crear una empresa mixta, hidroeléctrica, con la otra administración; esperemos que sea Gobierno central, Ministerio o la CHE, de acuerdo con el Pacto del Agua, para que, de una vez por todas en Aragón, si realmente llevamos a efecto el Pacto del Agua, con los distintos convenios, seamos capaces de aprovecharnos aquí de nuestros recursos endógenos, y no sigamos siendo expoliados, como hasta la fecha, por algunas concesiones que luego reinvierten fuera el beneficio obtenido en la Comunidad Autónoma de Aragón.
En ordenación del territorio, indudablemente nos vamos a empezar a volcar en el plan especial de protección del Pirineo, en un programa territorial específico para el Sobrarbe, en un programa territorial específico para la Ribagorza, en los programas de los ejes de desarrollo de la ciudad de Zaragoza, en otros programas territoriales derivados del Pacto del Agua. En concreto, les leeré un cuadrito que muestra que para el plan especial de protección del Pirineo habría que invertir once mil novecientos cincuenta millones; en su momento y específicamente, ya lo explicaré en las Cortes, también a eso luego me referiré. Yo desde el día 29 de octubre he pedido en estas Cortes diez comparecencias en Pleno, voluntarias por algunos temas por los que ustedes están preocupados. Si luego me preguntan todavía por qué he comparecido, ustedes tendrán una versión y yo otra; pero las contrastaremos aquí. Yo ya quise venir: del 29 de octubre tengo una fotocopia de una carta enviada al Presidente de las Cortes.
Plan especial de protección del Pirineo. Entonces, en el presupuesto del noventa y tres hay cuatrocientos noventa y siete millones para esta partida, del plan especial, para iniciar; novecientos setenta y siete millones, a cargo de la Dirección General de ordenación del territorio, y trescientos veinte a cargo de la empresa Instra (Implantación de Infraestructuras en Aragón, S.A.). Para el programa territorial del Sobrarbe, que ya está el proyecto terminado (también lo presentaremos en su momento), habría que invertir cinco mil ciento noventa y dos en varios años, ocho o diez, y empezamos con trescientos millones quinientas mil pesetas, de las cuales cincuenta y dos millones quinientas mil van por la Dirección General de ordenación del territorio y doscientos cincuenta por la empresa Instra. Para el programa territorial de la Ribagorza, que está el proyecto terminado, creemos que habría que invertir cinco mil ochocientos noventa y seis millones de pesetas en ocho años: trescientos veintiséis en el presupuesto del noventa y tres: cuarenta y seis por la Dirección General de ordenación del territorio y doscientos ochenta por la empresa Instra. Para programas en los ejes de desarrollo de la ciudad de Zaragoza, cuatrocientos ochenta millones de pesetas; presupuesto del noventa y tres: cien millones por la Dirección General de ordenación del territorio y trescientos ochenta por la empresa Instra.
Para el Pacto del Agua, para iniciar convenios. Por ejemplo, para Santa Liestra o para algún otro convenio que pueda llevarse a efecto... Al hablar del Pacto del Agua, hay que aclarar que hay, aproximadamente, unos sesenta y cinco millones de pesetas. Nosotros nos hemos creído esto del Pacto del Agua y hemos empezado a poner partidas presupuestarias ya. Ya vale de estudios; o sea: no tenemos competencia en materia de obras hidraúlicas, pero, como afecta a la ordenación del territorio, lógicamente ponemos unas partidas para iniciar ya ese cumplimiento derivado de la resolución del mes de junio en las Cortes de Aragón.
Y para el Moncayo, como es natural, porque seguimos trabajando de acuerdo con la ley aprobada en estas Cortes, destinamos trescientos millones de pesetas nuevamente en el año noventa y tres, que junto con los del noventa y dos, noventa y cuatro y noventa y cinco, suman un importe de mil doscientos millones de pesetas, de acuerdo con la ley que, en principio, se aprobó por unanimidad en estas Cortes de Aragón.
En carreteras destinamos noventa millones, de la Dirección General, para un programa de firmes deslizantes; destinamos doscientos quince millones de pesetas para el programa de seguridad vial; para expropiaciones y servicios afectados, noventa millones; para programa de estudios y proyectos, ochenta y cinco; para un programa de travesías, noventa; y luego, son mil novecientos cincuenta millones de pesetas para que la Dirección General de Carreteras termine los tramos en curso, empezados, porque los nuevos se llevarán a efecto a través de la empresa pública, y esos tramos son la travesía de Graus, Villalengua-Puente la Reina, Lascuarre-Puente Colomina, variante de Albelda, Nogueruelas-Linares I, Teruel-Corbalán I, variante de Ibdes, Bureta-Fuendejalón, Val de Ferriz-Valareña, Zuera-Las Pedrosas, puente sobre el río Jalón -sobre el río Kwai de don Pascual Marco- en Alhama de Aragón, la Almolda-Bujaraloz-Caspe, la estación de autobuses de Teruel y la estación de autobuses de Sabiñánigo.
También destinamos cien millones de pesetas a ayudas a líneas de transporte de viajeros deficitarias. Destinamos noventa millones de pesetas a treinta y siete servicios que tenemos que subvencionar para que funcionen, aunque sean deficitarios, a nivel de servicios regulares de viajeros; destinamos unos veinte millones, poquitos, a asociaciones profesionales del sector; y destinamos ciento treinta millones a pagar el convenio con Renfe del transaragonés y de los servicios implantados en la ciudad de Teruel, tal y como firmamos en su momento; luego, tenemos treinta y cinco millones de pesetas para renovación de vehículos afectos a líneas regulares de viajeros.
Esto sería la Dirección General de Carreteras, las partidas más relevantes. Espero que sus señorías no quieran que yo aquí -lo digo con todo cariño- descienda a si compramos un ordenador de quinientas veintiocho mil pesetas o si realmente empleamos cien mil pesetas para comprar lapiceros. Si ustedes quieren preguntar, les contestaremos, y también espero que los directores generales me echen una mano y bajen y desciendan hasta donde haga falta.
Bien, en arquitectura, en actuaciones de promoción pública, de restauración, están previstos trescientos treinta millones de pesetas: ciento diez millones de pesetas por cada una de las tres provincias; en actuaciones de rehabilitación integradas para Alquézar, Fonz, Valderrobres, Uncastillo, ciento cuarenta millones de pesetas; en actuaciones para emergencia, modificaciones y liquidaciones, ciento veinte. Por cierto, aquí me quería parar un momento yo, para poner un ejemplo muy tonto, pero es que es bueno ponerlo, porque claro, se acumulan las peticiones. Ustedes no se si sabrán, si tienen conocimiento, de que en la Diputación Provincial, en el año noventa y uno, aproximadamente, se destinaban -igual cometo un error- entre setecientos y ochocientos millones de pesetas para restauración en la Diputación Provincial de Zaragoza. El año noventa y dos me parece que han dejado trece, pero sin nombres y apellidos, ante una emergencia, o sea, sin poder comprometerse porque, claro, se puede caer un techo y hay que actuar con una plantilla, me parece, de veinticuatro o veinticinco personas aproximadamente. Como para el noventa y tres no van a poner nada -yo ya querría tener más aquí también, de presupuesto-, ahora ese equipo, ¿saben ustedes a qué se dedica?: a organizar proyectos de los municipios, sobre todo del Partido Socialista, para echarlos rápidamente al Departamento de ordenación del territorio; claro, porque ya se lo han gastado todo, no tienen nada que gestionar. Entonces hay que emplear el tiempo en hacer política; está claro que nos ahorramos el proyecto. ¡Hombre!, así yo hago proyectos cincuenta mil. El problema es que con perricas, chufletes.
Para actuaciones convenidas destinaremos aproximadamente ciento cincuenta millones de pesetas; para prestaciones subsidiadas, veintiséis, y para subvenciones de arquitectura tradicional y popular, sesenta y cuatro.
Para las ayudas a ayuntamientos decretadas como áreas de rehabilitación preferente, que recientemente autorizamos once, destinamos ciento veinte millones de pesetas; para ayudas a particulares en localidades del territorio aragonés, de arquitectura tradicional y popular, otra variación: ciento treinta millones de pesetas.
Y luego también tenemos que hacer constar aquí lo de los cascos históricos de Huesca, Teruel y Zaragoza, y su repercusión en el año noventa y tres, en esos convenios que tenemos de cuatrocientos millones de pesetas por cada casco histórico, de los que trescientos sesenta millones aporta el Gobierno aragonés, y cuarenta millones, los tres ayuntamientos de capital de provincia.
Tambien sus señorías sabrán que, indudablemente, tenemos que firmar pronto un convenio sobre la aluminosis en esta Comunidad Autónoma, y que, a pesar -y lo digo con todo el cariño del mundo- de la discreción con que actuamos -y lo sigo agradeciendo públicamente- todos los partidos políticos para no alarmar innecesariamente ante, digamos, los chequeos de las distintas patologías graves y menos graves que se descubrieron en la Comunidad Autónoma de Aragón, es cierto que un convenio solamente se puede firmar entre dos partes cuando las dos partes lo quieren; entonces, estamos -lo digo y me anticipo a alguna pregunta que puedan realizarme- a la espera de que fije fecha, porque lo quiere firmar el propio Ministro de Obras Públicas y Transportes, cosa que me parece perfecta, y entiendo que debamos ser deferentes con él para que ponga la fecha, pero le digo al mismo tiempo que agilice cuanto antes la fecha, porque si no firmamos el convenio no podemos poner en marcha las ayudas.
Vuelvo a repetir aquí también que dejé claro, cuando comparecí, que si no teníamos una total coordinación entre las distintas instituciones para llevar a efecto el problema de la aluminosis, no saldría bien. Me refería con eso a colaboración de la FAMP y de la ASAM, que así lo dijeron en su momento, y de las tres diputaciones provinciales, que, desde luego, aportarán -estamos en la creencia, pero hay que firmar el convenio- los servicios técnicos a falta de servicios técnicos municipales cuando así se requiera, aunque nosotros subvencionemos a las propias diputaciones provinciales a través de los colegios profesionales. Si no nos ayudan -se lo voy a explicar, señor Paco Pina, no se extrañe usted tanto; usted no está siempre presente, me imagino, y no es bueno establecer un diálogo en un Parlamento, pero si puedo aclararle esto con dos minutos más de tiempo, probablemente lo evitaré después, pero usted gesticula y creo que es bueno que preste un poquito de atención, y, si no, mire, no me fijaré en usted y lo explicaré para el resto; no hay problema-... En mi despacho tuvo lugar una conversación con distintas instituciones: tres diputaciones provinciales, la FAMP y la ASAM, para llegar a un acuerdo y solucionar el problema de la aluminosis, porque ese problema no es exclusivo de este Gobierno ni del Gobierno central, y ya dije en su día que se inició en el año cincuenta, cuando yo tenía dos años, o sea, que buscar responsabilidades ni mías o de los técnicos -usted no había nacido, que es un poco más joven que yo-... Allí se acordó, porque con sentido común y con objetividad hay que actuar así, que no tiene el Gobierno aragonés técnicos suficientes para asistir a cada uno de los casos que puedan surgir en cada municipio. Y se acordó, y está acordado así; otra cosa es que ahora ustedes no quieran firmar. Se acordó, que no digo que no quieran firmar, que digo que no se ha firmado, lo digo ante la gesticulación, pero se acordó que donde haya ayuntamientos con servicios técnicos municipales suficientes se ocupan ellos, en donde no hay ayuntamientos con servicios técnicos municipales suficientes, se requiere la ayuda de los técnicos municipales, que, en este caso, por ejemplo, fíjense si podrían ir los de la Diputación Provincial de Zaragoza, que ahora no hacen más que proyectos de restauración; es por poner un ejemplo. Y en caso, y en su defecto, de no poder llegar con ellos a cubrir la existencia de técnicos municipales, nosotros íbamos a subvencionar, y estamos en eso, a las diputaciones provinciales por si tienen que requerir otros servicios técnicos con colegios profesionales. Eso es así; pero si no firmamos eso y no firmamos el convenio con el señor Borrell al 50% -sabemos cuál es el problema de la aluminosis, sabemos que patologías graves y muy graves hay-, si no empezamos a solucionarlo, repartamos también responsabilidades o no retrasemos la firma, para que yo, en todo caso, ante la opinión pública, no pueda parecer que no ejecuto.
Dirección General de Restauración del Territorio. Vamos a iniciar la restauración del alto Gállego, en relación con los espacios contaminados que ha producido en el tiempo Inquinosa, y vamos a destinar doscientos millones de pesetas del año noventa y tres. Habría que invertir, indudablemente, más de mil quinientos millones de pesetas, pero vamos a empezar por doscientos, que esperamos se dupliquen, por las conversaciones mantenidas, o casi, con el resto de las Administraciones públicas implicadas en esa restauración conjunta que queremos hacer entre el MOPT, la CE, el Ayuntamiento de Sabiñánigo y nosotros.
Y empezaremos también, dentro de esas prioridades que tenemos de trescientos veintiún espacios contaminados, por el área de Monzón, a la que destinaremos ciento veinte millones de pesetas. Seguiremos, lógicamente, con el plan de tratamiento de los residuos tóxicos y peligrosos, tratamiento in situ. Seguiremos en el apoyo a los vertederos mancomunados, con una subvención del 75% en caso de ser mancomunidades, y del 50% en caso de ser municipios individuales. Vamos también a actuar, con una partida pequeñita, pero ahí se ve la intención, y ojalá podamos en su momento recuperar más, con diecisiete millones de pesetas, a restaurar y acondicionar algún espacio rústico en áreas rurales que tengan algún cierto interés para el ciudadano, especialmente en su función recreativa y turística. Vamos a continuar con el desarrollo de los glaciares del Pirineo aragonés, con una elaboración de un reglamento en desarrollo de la ley, con una edición de un folleto educativo como material de apoyo, con una edición de un libro de contenido divulgativo, de tal manera que destinemos a éstos unos diez millones de pesetas aproximadamente.
También vamos a continuar con el programa de acciones de restauración de espacios físicos degradados por acción del hombre y del paisaje; me refiero a proyectos de restauración de obras que hemos llevado a efecto, de carreteras, y que, lógicamente, estamos trabajando ya en Villamayor-Alcubierre, Huesca-Ayerbe, Puente la Reina-Embún, y tres proyectos más con que pensamos, lógicamente, actuar en la provincia de Teruel, con un importe total de cuarenta millones de pesetas.
También, lógicamente, actuaremos con la educación ambiental en el diseño de campañas de concienciación social, campañas medioambientales específicas sobre tóxicos en el hogar, envases, lubricantes, formación medioambiental, etcétera.
A través del ISVA, el Instituto del Suelo y la Vivienda de Aragón, aunque la mayoría de las actuaciones de suelo se van a llevar a efecto por Prosyva, por la empresa pública de promoción de suelo y vivienda, pues vamos a terminar, como antes les decía, varios polígonos que ya había contratado el ISVA y que, lógicamente, los debe terminar, como son Alfajarín, Alcorisa (la segunda fase), Utrillas, San Mateo de Gállego, Monreal del Campo, Cariñena, Andorra, Castejón de Monegros y Pina de Ebro. Algunos de estos proyectos, les advierto ya, no tienen un reflejo presupuestario en el noventa y tres, ya que se ha fiscalizado y aprobado el gasto en el último trimestre de 1992. Lo digo porque es normal que los vayan a buscar y no los encuentren; la "ratonería" presupuestaria es ésa: ya están fiscalizados en el último trimestre del año noventa y dos, por eso no verán ahí los nombres y apellidos.
Luego, para 1993, los polígonos industriales ascienden a setecientos setenta y ocho millones de pesetas aproximadamente, y luego ya les leeré los que en principio vamos a poner en marcha a través de la empresa pública.
Como programa de suelo residencial, ya les anticipo que vamos a hacer una actuación importante de acuerdo con el Ayuntamiento de Zaragoza en el área II del Actur, para sacar adelante dos mil -dicen los últimos datos municipales-, dos mil doscientas setenta y ocho viviendas, a ser posible destinadas el 50% para cooperativas y el 50% para particulares. Ya ha habido contactos entre ambas instituciones, se está haciendo un plan de actuación urbanística y esperemos que pronto el ayuntamiento lo apruebe, y esto permitirá, en la línea que les decía antes, sacar suelo en buenas condiciones, que no supere el 15% del valor oficial de la vivienda.
También está previsto en el área VII, en la parcela 34, sacar a concurso setenta y dos viviendas; en el área XV, parcela 5, ciento sesenta y ocho viviendas; en el Actur, en el área XIX, trescientas viviendas, éstas para promoción de viviendas en alquiler. Ustedes saben que hay una nueva modalidad entre el MOPT y los gobiernos autónomos, con la que el cupo es de trescientas viviendas para el próximo año, por eso no podemos poner más; así, se facilita a un promotor privado que construya viviendas en alquiler; entonces, hay que buscar un sitio para que interese al empresario privado construir y a los futuros señores que alquilen les apetezca ir por la zona en que se ubiquen, lógicamente, estas viviendas. Y para que ustedes se centren, el área XIX del Actur está pasando el Puente de Santiago, justo a la derecha, enfrente casi de ese famoso edificio de televisión que tanto quieren ustedes; ahí, más o menos, está el área XIX.
En la Fuenfresca, en Teruel, también sacaremos ciento veinticuatro viviendas a concurso, y quizás algunas más, porque hay algunas cooperativas interesadas.
En resumen, en actuaciones en suelo y vivienda, en materia de viviendas que podemos sacar para el año en que estamos, noventa y tres, en el área II, serían unas dos mil dos (nos centramos en dos mil); en el resto del Actur, quinientas cuarenta; en la Fuenfresca, unas ciento veinticuatro; en Alfajarín, dos mil viviendas -poquito a poco, por fases-, y trescientas viviendas que, en principio, podríamos sacar a concurso a finales de año en los terrenos adquiridos a Industrias Albajar en Huesca. Total: cuatro mil novecientas sesenta y cuatro actuaciones previsibles en materia de vivienda; no digo de construir viviendas: de facilitar suelo, insisto, en buenas condiciones, no sea que luego se lo apunten y me pregunten si las hemos hecho; es facilitar suelo en buenas condiciones para que los constructores privados y las cooperativas puedan lógicamente hacerlas.
En promociones directas están previstas, de esas viviendas sociales que antes les decía a veinticinco años con el 5% de interés, con el 5% de entrada, en promociones directas quinientas siete viviendas: en Zaragoza doscientas tres, en Huesca doscientas treinta y seis, y en Teruel sesenta y ocho; y de promociones convenidas con ayuntamientos para que las ejecuten y contraten ellos, mil doscientas treinta y tres: Zaragoza, quinientas setenta y siete; Huesca, doscientas noventa y seis; Teruel, trescientas sesenta viviendas.
Y luego pensamos actuar en el desarrollo del plan de viviendas MOPT-DGA para el año noventa y tres, con mil novecientas cincuenta viviendas de protección oficial, de promoción privada, de régimen general, y de ellas, mil ochocientas cincuenta con destino a venta y cien con destino a arrendamiento. Con doscientas cinco viviendas de protección oficial de promoción privada de régimen especial, de las que ciento veinticinco con destino a venta y ochenta con destino a arrendamiento.
Ayudas para la compra de mil doscientas cincuenta y cinco viviendas a precio tasado, de las cuales, cuatrocientas son para primer acceso a la vivienda; ayudas para la rehabilitación de trescientas noventa viviendas, y ayudas para compra de suelo para la construcción de mil trescientas cincuenta viviendas.
Bien, yo les quería dar esos datos que antes hemos comentado; me faltaba por darles datos con respecto a actuaciones en suelo industrial y viviendas, que creo que es importante que los conozcan, pues tenemos, en este momento, entre terminados, en contratación y en programación, en municipios del Partido Socialista, tres mil trescientos veintitrés millones de pesetas en actuaciones en polígonos, terminados y en marcha; en ayuntamientos del PAR, 1.092,79; en ayuntamientos del PP, mil quinientos nueve millones de pesetas. Total: seis mil doscientos dieciocho millones de pesetas, de los que, insisto, tres mil trescientos veintitrés les corresponden a ustedes.
En viviendas les hago ya un resumen final. Tenemos, entre terminadas, en ejecución y contraídas, en ayuntamientos de PSOE, que son dos capitales de provincia también, Zaragoza y Huesca, mil seiscientas setenta viviendas; en ayuntamientos del PAR, setecientas sesenta y ocho; PP, doscientas noventa y dos; y otros, noventa y ocho. Total: dos mil ochocientas veintiocho actuaciones, con un importe de dieciocho mil novecientos cincuenta millones de pesetas.
Como habrán visto, realmente los presupuestos de ordenación del territorio tienen todos nombres y apellidos; no sé dónde está lo que ustedes no encuentran, no sé dónde está la intervención del señor Marco, cuando interpelaba al Presidente de la Comunidad Autónoma, que decía: "El señor Acín es muy difícil de perseguir". Bueno, yo he querido aquí comparecer, insisto, en diez comparecencias voluntarias; ahora comparezco aquí y desgloso una por una todas las cosas, ¿o es que prefieren que no lo haga porque eso duele?; no lo sé.
Vamos con las empresas públicas, a explicar lo que ya es conocido por casi toda la opinión pública; pero como no hay nada que ocultar, lógicamente, pues voy a contarles los proyectos en principio que están previstos para este año noventa y tres y noventa y cuatro. [Pausa.] Como ven, se me pegó una buena costumbre de don Hipólito Gómez de las Roces: el manejo de fichas.
Miren, por parte de la empresa pública Promoción del Suelo y la Vivienda de Aragón (Prosyva), que a lo mejor el nombre no es bonito, pero ustedes saben que cuando se va a montar una sociedad anónima no depende del nombre que uno le quiere poner, sino de los nombres que has pensado y están registrados, entre todos queda uno que, a lo mejor, no te gusta, pero..., pues se llama Prosyva: Promoción del Suelo y la Vivienda de Aragón, así, sin más, sin trampas ni cartón. Como saben ustedes, éstas se aprobaron por un decreto en mayo del noventa y dos, se constituyeron en julio, y esta empresa en concreto tiene mil millones de capital social, a la cual se le ha incorporado parte del suelo que tiene o tenía el ISVA como patrimonio, como ampliación de capital, de tal manera que, aproximadamente, esta empresa pública puede jugar hoy, entre capital y suelo incorporado, con unos diez mil millones de pesetas, y como tal, para que ustedes vayan entendiendo esto pasito a pasito, más o menos, como tal esta empresa va a una entidad financiera y se compromete en todo caso con unos créditos para algunas actuaciones que pretende realizar, y ella misma, si realiza actuaciones urbanísticas como podría ser el caso del área II del Actur, y si pone en marcha dos mil viviendas y recupera dos mil millones, obtiene unos ingresos, lógicamente, para ir pagando ese tipo de actuaciones públicas, que, a veces, son de interés social, en polígonos industriales u otro tipo de cosas a las cuales me referiré.
De cualquier manera no voy a extenderme mucho en la filosofía de las empresas públicas, porque quizás ustedes después es donde quieren pasar el mejor rato conmigo, ¿no?, y yo ya les contestaré adecuadamente con mis criterios en relación con lo que ustedes opinan; para eso estamos.
Esta empresa pretende poner en marcha o hacer o iniciar los polígonos de Calamocha, Benasque, Almudévar, Alagón, Ricla, Sariñena, Mequinenza, Albarracín, Cella, Brea de Aragón, Pina de Ebro (segunda fase) y Binéfar. Estos polígonos han sido ya aprobados por un Consejo de Gobierno, y no los pone en marcha ya el ISVA, sino que los pone en marcha la empresa pública de Suelo y Vivienda. A su vez, esta empresa pública llevará a efecto la remodelación del Monasterio Alto de San Juan de la Peña, con una inversión aproximada de mil millones de pesetas, y también la plaza de toros de Tarazona, aproximadamente con una inversión de ciento cincuenta millones de pesetas. Eso es lo que pretende hacer, en principio, esta empresa pública con cargo al noventa y tres y al noventa y cuatro -hay proyectos de estos que no se pueden realizar en un solo año-.
Vamos con la Instra. Es una empresa pública (Implantación de Infraestructuras de Aragón, Sociedad Anónima; abreviadito, cortito, Instra -bueno, tampoco pudimos encontrar un nombre mejor, de los que pedimos, de alguna forma, para registrar-). Esta empresa pública pretende llevar adelante en estos momentos de una inversión de veinticinco mil novecientos cincuenta millones de pesetas; saben que también tiene un capital de mil millones de pesetas. Ha sido ya aprobado por Consejo de Gobierno. Hay un anexo aquí, si no me equivoco... En este caso, sobre la filosofía a lo mejor no coincide, pero yo he leído en algún sitio que don Ramón Tejedor decía: "¡Hombre!, está bien explicado esto de la empresa Instra". Decía usted -no lo sé- "bien explicado"; no decía usted que estuviera a favor, pero sí que estaba bien explicado, o sea, que habíamos traído aquí un plan económico-financiero, una previsión de pagos. Luego no sé si estará de acuerdo o no en la filosofía, pero usted decía que por una vez parece ser que esto estaba bien presentado por lo menos. Pues esta empresa pública pretende destinar trece mil millones para carreteras. Ustedes saben, y no me cansaré de repetirlo, que habría que invertir cien mil millones del año noventa y dos para que las carreteras competencia de la Comunidad Autónoma de Aragón estuvieran en condiciones, totalmente restauradas. Si vamos a invertir trece, faltarán todavía ochenta y siete mil del año noventa y dos. Y aunque nos parezca que actuaremos de una manera objetiva, como así prevemos, y, al mismo tiempo, teniendo en cuenta los proyectos que estén ya redactados, mejorando comunicaciones con otras comunidades autónomas limítrofes, mejorando la red de comunicaciones de lo que sería la franja oriental, pues estamos convencidos de que para cada municipio su carretera es la más importante, y no conseguiremos que estos trece mil millones satisfagan plenamente el deseo de mejorar las infraestructuras. Pero como se está para gobernar, pues pondremos nombres y apellidos de la manera más objetiva, y, lógicamente, pondremos en marcha trece mil millones de pesetas para carreteras en la Comunidad Autónoma.
Para embalses de la Comunidad Autónoma de Aragón, de interés para la Comunidad Autónoma de Aragón (que, por cierto, antes me refería a ellos con lo del Pacto del Agua), destinamos inicialmente cuatro mil millones de pesetas, para llegar a acuerdos con los usuarios. No sé por qué se extraña alguien que hayamos dicho esto, porque hoy hay una vieja ley del once que sigue sirviendo, que a veces la aplica el Gobierno central: el 40% se da a fondo perdido, el 40% se financia a veinte años y el 20% lo ponen los usuarios. Otras obras las declara de interés general el Estado, que somos todos, el Gobierno central, y paga el 100%. Y para otras, como por ejemplo en Cataluña, hay un decreto con el que el Gobierno catalán se ha puesto de acuerdo con futuros usuarios y aporta el 60%, y el 40% los usuarios. Cuando nos sentemos a hablar con los usuarios, una vez que, lógicamente, el presupuesto esté aprobado, si Dios quiere, llegaremos a la fórmula que realmente mejor convenga. Pero yo destacaría que, especialmente, el embalse que en principio se pretende construir en el fondo de San Salvador, de veinte hectómetros cúbicos, mejorará la regulación del canal de Aragón y Cataluña, y también se va a complementar la iniciativa del Gobierno central en Santa Liestra, por no citar el resto de los embalses, es decir por no... Pero si quieren se los leo; es decir, que no tengo ningún inconveniente en decirles que los embalse, en concreto, son los de Herrera de los Navarros, Noguera, San Salvador... Estos son los embalses que, en principio, queremos acometer desde el Gobierno aragonés de acuerdo con los usuarios en un momento determinado.
Y aquí tenemos el inicio y el compromiso de siete mil millones de pesetas para la depuración de aguas residuales de los municipios de más de dos mil habitantes. Si sumamos lo que tenemos que gastar en los municipios de más de dos mil habitantes, son doce mil y pico millones, más Huesca capital y Teruel capital, casi son catorce mil millones de pesetas lo que tenemos que invertir para depurar esos municipios.
En la comparecencia de este Consejero que tuvo lugar aquí, en este salón de Pleno, ya insinué que podía haber una partida presupuestaria para este próximo año, yo ya insinué que llegaríamos o deberíamos llegar a acuerdos con las distintas federaciones o asociaciones de municipios, yo ya insinué que deseaba suerte en la cumbre de Edimburgo a don Felipe González con los fondos de cohesión, yo ya insinué que, quizás, en un momento determinado haya que poner un canon de depuración. También he llegado a comentar que por qué no se privatizaba la ejecución, la llevanza y la gestión de la depuración de aguas residuales de estos municipios en la intención, más que nada clara, de que ante semejantes cantidades de dinero que tenemos que invertir en muchas prioridades, las Administraciones públicas destináramos estos fondos a otras cosas; pero como todo eso parece que no acaba, si no digo de convencer, de ponernos de acuerdo, porque las cosas a veces se eternizan innecesariamente, aquí hay siete mil millones, que el 50% de los catorce mil que habría que invertir.
La intención que tienen este Consejero y el Gobierno es colaborar, lógicamente, con el Gobierno central, si así es posible, y teniendo en cuenta que Aragón está excluida de bastantes fondos estructurales de: fondos de cohesión que se destinan a mejora de redes transeuropeas, a mejoras de medio ambiente, abastecimiento y calidad de las aguas, depuración de aguas residuales, proyectos de restauración, en todo caso de minas a cielo abierto, reforestación, etcétera, para los que ya tenemos los proyectos terminados. Yo recuerdo que don Ramón Tejedor dijo: "Ahora, ustedes preparen proyectos, no sea que esto se apruebe y después no los tengan". Bueno, pues ya están preparados y, entonces, ahora esperamos iniciarlos, en cuanto se pueda; ya lo hemos transmitido al Gobierno central, al Ministerio de Obras Públicas y Transportes, para ver con qué cantidad podrían colaborar con el Gobierno aragonés y los distintos municipios, a la hora de comprometerse en la ejecución de estos proyectos. Pero también tenemos la intención de firmar un convenio con la Confederación Hidrográfica del Ebro, al igual que con otras comunidades autónomas, para que del canon de vertido que actualmente cobra la CHE revierta en un 85% en la Comunidad Autónoma para depurar aguas residuales. Pero tampoco se engañen: actualmente, en conversaciones mantenidas y en estudios realizados con don Antonio Aragón, lo que hoy recibiría o recibe la CHE por ese canon de vertido, excluido el acuerdo que ya tiene con el Ayuntamiento de Zaragoza, no pasa de trescientos millones de pesetas al año; por lo tanto, el 85% de trescientos millones, hoy son doscientos y muy poco, o casi no llega.
Quiero decir con esto que con eso poquito podemos hacer; ahora bien, bueno será tenerlo porque se habla de, en un momento determinado -no sé cómo resultará-, la ley del plan hidrológico nacional. No lo sé, pero está clarísimo que, en todo caso, según como resulte, puede aumentar, de alguna forma, el canon de depuración a través del canon de vertidos.
Lo importante es tener una cifra de partida para sentarse; pero también les digo lo siguiente: si no somos capaces, y el Gobierno aragonés aquí está, con la mitad del dinero, de conseguir dinero de los fondos de cohesión o del canon de depuración y algunas aportaciones, que me gustaría que fueran las mínimas, de los ayuntamientos, no podremos realizar el plan de depuración de aguas residuales, o sea, que lo dejo claro aquí. Yo con esto no me estoy comprometiendo a depurar las aguas residuales, que tampoco es mi única competencia, de los cincuenta y un municipios de más de dos mil habitantes. Estoy diciendo que el Gobierno, que conoce eso, que tiene los proyectos hechos, propone ya sentarse en una mesa, con quien haga falta, con siete mil millones de pesetas, para hacer la depuración de aguas residuales, pero que conste que no me estoy comprometiendo a hacerlas, porque si no hay suma de otras administraciones, de otros fondos, no se podrán realizar.
Para un centro de transportes de mercancías en Aragón se destinan seiscientos millones. Se instalarían en el término de Malpica y los socios de Tradime, doscientos y pico, aportarían el terreno, que les cuesta, comprándoselo al SEPES, cuatrocientos setenta y cinco millones de pesetas -me parece-, que les pide el SEPES de una parcela -me parece- de cinco hectáreas, una cosa así, aproximadamente, y es lo que aportarían ellos, más seiscientos millones del Gobierno aragonés, para hacer un centro de transportes en la ciudad de Zaragoza, que no tiene nada que ver con la propia ciudad del transporte.
Luego ya hay mil trescientos cincuenta millones, como antes les he explicado, en planes específicos de ordenación del territorio: Sobrarbe, Ribagorza, el plan de protección especial del Pirineo o el entorno de Huesca; ya les he dado unas cifras que ascienden a mil trescientos cincuenta millones de pesetas. Bien, esto sería la empresa Instra.
Y creo, señor Presidente, señorías, que aunque indudablemente tengo mucho que decir todavía, teniendo en cuenta que son las doce y media, si les parece, yo termino mi comparecencia de explicación del grado de ejecución del presupuesto del noventa y dos, y del presupuesto del noventa y tres, y espero a sus señorías, lógicamente, en la réplica correspondiente para aclarar los datos que sean necesarios en mi siguiente intervención.
Nada más y muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
Vamos a proceder a la interrupción de la sesión por el tiempo de doce minutos, para poder reanudarla a la una menos cuarto en punto.
Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Señores Diputados, señor Consejero, señores directores generales, vamos a reanudar la sesión.
De acuerdo con la resolución aprobada por la Junta de Portavoces, corresponde el turno de intervención, en primer lugar, al portavoz del Grupo Parlamentario del Partido Socialista Obrero Español.
Señor Esteban, tiene la palabra.

El señor Diputado ESTEBAN IZQUIERDO: Gracias, señor Presidente.
Resulta complejo, desde luego, ante el estilo apabullante al que nos tiene acostumbrados este Consejero, el replicar no sólo a lo que nos ha traído aquí -aunque él crea que no y le haya dedicado más tiempo a lo que es el grado de ejecución del presupuesto-, porque le quiero recordar al señor Consejero que, efectivamente, en este parlamento existen pendientes todavía unas comparecencias que solicitó, a petición propia el señor Consejero, y la Mesa y Junta de Portavoces -le habrá llegado al señor Consejero la información porque el representante del Gobierno así tomó nota en esta Junta de Portavoces- le solicitaron que facilitara información -la que considerara oportuna- a los Grupos Parlamentarios, para poder celebrar esas comparecencias del señor Consejero.
Curiosamente, el día anterior, o el mismo día en el que tenía lugar la primera comparecencia del señor Consejero, no se había recibido esa información, como muy bien recordará él mismo, y no se pudo celebrar; pero como el Consejero en algunos momentos tiene cierta sensación de estar ocupando no sólo la consejería, que ya es bastante, más las empresas creadas y demás, de responsabilidad asumida, sino que también está invadiendo otras parcelas del Gobierno, aquí nos cita, nos alude, nos habla de otras consejerías y demás, y, al final, desde luego, viene a justificar, de una manera acumulativa y bastante compleja, los grados de realización de su Departamento. Yo le quiero decir, pese a que nos ha cambiado la intención de la intervención, que no crea el señor Consejero que aquí somos monolíticos y que venimos ya con la lección exclusivamente aprendida y sin tener en cuenta lo que el señor Consejero aquí dice; porque, además, como el señor Consejero tiene la habilidad, en ciertos momentos, dentro de la corrección que le caracteriza, de provocar al resto de los Grupos Parlamentarios, pues hace que inevitablemente caigamos en la trampa, en cierta medida, además, apetecible, de intentar o de procurar cambiar las intervenciones que pudieran tenerse previstas.
Por una parte, no sólo por lo que usted dice aquí en tono provocativo, sino también porque luego enumera... da datos que no se recogen en donde se tienen que recoger, que es en el documento del proyecto de la ley de Presupuestos que presenta en esta Comunidad Autónoma el Gobierno de la misma. Por eso, ante anuncios ya más concretos o exahustivos, nosotros tenemos que intentar agudizar la imaginación y el ingenio para poder replicar a algo que no está comprendido y que está oculto en los presupuestos que se nos citan. Hay excepciones, hay, desde luego, algunos servicios, algunos departamentos y algunas direcciones generales que sí que es cierto que particularizan más las actuaciones que se van a llevar a cabo, pero hay otras en las que la generalidad es la norma común de su Departamento. Pero como a mí y a nuestro Grupo lo que nos sirve y lo que nos vale -y no le voy a dedicar mucho tiempo porque tampoco tengo tanto tiempo como tenía el Consejero anteriormente para intervenir- es rebatirle algunas y darle la razón en otras de sus informaciones sobre el grado de ejecución del presupuesto anterior, yo me limito a lo que sí me creo, y lo que me creo es lo que desde los servicios de intervención de la Diputación General de Aragón se nos hace llegar (concretamente en fechas muy recientes, hace escasos días, a fecha 14 de diciembre del noventa y dos) sobre el grado de ejecución de los presupuestos de las distintas consejerías.
Hablo de grado de ejecución, y alguna experiencia tengo para saber diferenciar entre grado de ejecución y de obligación de lo autorizado. Lo autorizado es voluntarismo puro, recogido, desde luego, en unos acuerdos que pueden, en un momento determinado, tenerse que responder y tenerse que llevar a cabo, lógicamente. Pero, sin embargo, lo que sirve y lo que vale es el grado de ejecución en una consejería, que es una consejería de gestión, es una consejería ejecutiva, y ahí vemos cómo, una vez más, la nota que le corresponde a su Departamento no es de las más altas de esta Comunidad, de este Gobierno autónomo, señor Consejero, porque si el haber ejecutado el 44% del presupuesto del capítulo III, que se aprobó en este parlamento, creo que no es una cifra muy alta; o en el capítulo VI, haber ejecutado el 43,78% del mismo. Y aquí no sirve el decir que se pagan las obras al final, cuando están realizadas; se van pagando así, cuando se van presentando las certificaciones y se van realizando las obras, y no creo que ningún contratista o director de obra espere a terminar o a la finalización de determinadas obras, que, por cierto, algunas tardan cuatro o cinco años en ejecutarse -y usted lo sabe muy bien- desde que se aprueba el proyecto, y no digo nada desde que se recogen en los presupuestos.
Estos días ha estado anunciando usted que, próximamente, se va a terminar la estación de autobuses de Teruel. Bueno, esta estación hace ya muchos años que se vio reflejada en los primeros presupuestos de esta Comunidad Autónoma y, sin embargo, terminará felizmente a final de año, según nos dijo el señor Consejero en fechas recientes.
Así pues, en grado de ejecución de inversiones, el 43% es muy poco, y hasta tendría cierto sentido el que en inversiones, por la commplejidad de redacción de proyectos y demás cuestiones que yo me voy a saltar, pudiera darse esta circunstancia en el grado de ejecución. Bueno, hay consejerías más eficientes y otras menos eficientes en ese capítulo, pero también es cierto que en el capítulo VII, que se trata de "Transferencias de capital", es muy fácil que haya alguna consejería que ya lleve ejecutado el 99,96%, mientras que la suya no pasa del 63%.
Entonces, todo lo demás nos puede sonar muy bien a los oídos, pero unido a que el pasado año usted, aquí, en esta tribuna, también anunció que se iban a llevar a cabo una serie de actuaciones desde su Departamento (y que quiero recordar que algunas nos las ha vuelto a citar hoy y otras ni aparecen), bueno, pues el hecho de que no esté aprobada la ley de vivienda en la Comunidad Autónoma, la ley de ordenación integral por zonas, el centro de documentación territorial, el programa cuatrienal de infraestructuras supramunicipales (que usted anunció aquí el pasado año con la presentación de los presupuestos), el establecimiento de fórmulas de creación de empresas de desarrollo en comarcas desequilibradas y una serie de enumeraciones que le seguiría haciendo aquí, como financiar totalmente la estación de autobuses en Huesca, la estación de autobuses en Sabiñánigo (que la anunció para el pasado año; no sirve para este año), ese centro de transportes al que hacía referencia al citarnos las actuaciones de la empresa privada... de la empresa pública, que nos va a poner en funcionamiento el centro de transportes de mercancías... Una serie de actuaciones que, junto con algunas que no voy a citar aquí, creo que vienen a reafirmar, a poner de manifiesto que, desde luego, no es oro todo lo que reluce en su Departamento, aunque usted, con su habilidad habitual, así nos lo haya intentado querer manifestar.
Pero nosotros aquí venimos a hablar de presupuestos, y venimos a hablar de los presupuestos de la cámara de la Comunidad, que van a poder ser fiscalizados y que van a poder ser sometidos a un seguimiento desde este parlamento. Pero, también, inevitablemente, vamos a tener que hablar de las empresas públicas, porque es un instrumento complementario que justifica algunas de las cantidades o de las cifras que se recogen en el presupuesto que se nos ha presentado desde esta tribuna.
Nosotros creemos que los presupuestos, señor Consejero, siguen siendo unos presupuestos que no nos convencen, y aquí sí que ya podemos venir con la idea preconcebida, dado que hemos estado estudiando minuciosamente el tocho -permítaseme la expresión- del proyecto de presupuestos al que hemos tenido acceso, porque en estos presupuestos se viene a poner de manifiesto, una vez más, como generalmente ocurre, que un Gobierno de la Comunidad Autónoma no es capaz, sin incrementar el gasto corriente, de reducir luego, por otra parte, las inversiones. A nosotros nos sorprende el que en esta Consejería, Consejería inversora, lo que crezca sea el gasto corriente y no el gasto inversor.
Y ahí me voy a parar a detallar algunas de las actuaciones que por capítulos nos han sorprendido más. Nos ha sorprendido que se incremente el gasto corriente en un 24,5%, mientras el resto del presupuesto baja sustancialmente. Pero, además, nos ha sorprendido que en capítulos o en conceptos como el de "gastos de divulgación y promoción", los incrementos sean del 19%; y ya no digo nada en los "Estudios y trabajos técnicos", una de las funciones que, aparentemente, van a tener encomendadas las empresas públicas, que sufre un aumento del 158%, porcentualmente hablando. No he querido decir nada de personal, porque éste ha sido un debate que se ha anticipado a los propios presupuestos, pero hay una realidad que nos ha sorprendido, al menos lo que soporta ese proyecto de presupuestos, y es que las gratificaciones del Departamento aumentan en un 162%; explíquenos, señor Consejero, a qué se corresponde o por qué el artículo uno, de altos cargos, se incrementa en un 7,5%. Se me va a decir que es que ya fue el año pasado... pero si cogemos en el mes de mayo lo que se trajo a este Parlamento y lo comparamos con lo que hay hoy aquí para debatir, veremos la realidad.
Si se quieren hacer unos presupuestos que sean más ajustados, en los que se tenga menos gasto público, se puede eliminar perfectamente esa función que están haciendo los "agentes mediadores independientes", que así se titula esa partida, y que creemos que es totalmente innecesaria.
En inversiones reales -ya lo he dicho al principio de mi intervención-, es para nosotros inaceptable la reducción que sufre el capítulo VI. Y se me podrá decir -y luego hablaremos de ello, y usted lo ha comentado anteriormente en su intervención- que las empresas vienen a sustituir y que aquí de lo que se trata es de mantener los restos de lo que se va a hacer. ¿Qué quiere decir con esto, señor Consejero? ¿Es que va a eliminar las direcciones generales inversoras o el propio Departamento en beneficio de las empresas? ¿Es que van a dejar de hacer inversión las direcciones generales que son inversoras? ¿Es que durante esos cinco años o esos años en los que se compromete financieramente (aunque, a nivel de ejecución, va a ser solamente en dos), va a dar fiesta a todos los altos cargos y a todos los miembros del Departamento y van a pasarse... -pasarse no, porque dice que eso funcionará con muy poco personal-? Entonces, ¿qué va a pasar? ¿Se va a seguir manteniendo este gasto, que, por otra parte, se incrementa, y, sin embargo, no se va a hacer ningún tipo de inversión?
Usted aquí ha utilizado una serie de datos para intentar justificar el que no existe, por parte de su Departamento, sectarismo a la hora de la aplicación de los fondos de su Departamento en transferencias de capital, fundamentalmente, y en transferencias corrientes. Mire, la verdad es que si usted hubiera venido a comparecer, a lo mejor esos datos los hubiéramos tenido antes a nuestra disposición. Con los datos que hemos podido barajar, la verdad es que si consideramos la implantación de unos partidos políticos u otros partidos políticos, la desproporción, y no la cantidad que usted nos enumera aquí de municipios, que también es desproporcinada en número de municipios que existen de un signo político y de otro, es favorable evidentemente al partido que sustenta a este Gobierno, a una parte del Gobierno, porque usted mismo nos ha dicho que la otra parte se ha visto bastante castigada.
Pero usted ha hecho aquí una serie de consideraciones sobre el papel que están realizando otras instituciones, el que están dejando de realizar a través de planes provinciales, a través de otras actuaciones que le son propias. Y les recuerdo que les son propias también las actuaciones que, salvo en las tres capitales de provincia, corresponden al tema del título hidráulico, en lo relativo a suministros de agua, a toda la parte del ciclo hidráulico, menos el tema de residuos, a las diputaciones provinciales.
Las diputaciones provinciales quizá tengan que actuar con esa merma de fondos a los que usted ha aludido, consecuencia de que, desde el Gobierno de la Comunidad Autónoma, se está incumpliendo una ley de coordinación que sí que tuvo, en un momento determinado, un buen tratamiento: el año en el que el señor Presidente, al que ha aludido usted, el de las fichas, tuvo la gentileza de incrementar -solamente duró ese año el incremento- a ciento cincuenta millones de pesetas por cada una de las tres instituciones provinciales; venían siendo de cincuenta millones de pesetas, y luego se ha vuelto a cincuenta, y creo que este último año, si no me fallan las informaciones, han sido bastante más escasas las transferencias de delegación, que se habían aprobado por ley de coordinación del Gobierno de la Comunidad Autónoma. Entonces, en lo que sí se está convirtiendo este Departamento, en buena medida, es en un departamento que sustituye la función y la labor asignada a las diputaciones provinciales, porque su Departamento está actuando en temas de ciclo hidráulico de abastecimientos de aguas -que me parece muy bien, y es lógico que, si tienen los fondos, ustedes actúen-, pero lo normal es que si delegaron la transferencia, la competencia -tanto que hablan de ello en las últimas fechas- se transfiera con la suficiente consignación presupuestaria a esas instituciones, y no tengan que dedicarse, como usted ha dicho, a preparar proyectos para venir a pedir y a llamar a la puerta.
¿Es que no será que les gusta que les llamen a la puerta de ustedes para determinar en cada momento a dónde deben ir ciertas actuaciones? Es que no solamente se limitan a eso, es que hacen pavimentaciones de calles también, es que hacen una serie de actuaciones que son propias de otras instituciones locales y no de la Comunidad Autónoma, porque así lo quiso la Comunidad Autónoma en un momento determinado. Así que no se esté, en este momento, reprochando a instituciones que históricamente han venido acumulando una serie de deuda que, ahora, es verdad que les impide el poder actuar con la flexibilidad con la que han venido actuando. Pero, bueno, no es tarde, no es tarde, porque al ritmo que llevan ustedes, desde luego, si no se dan otros factores en los que, a lo mejor, están pensando, difícil lo van a tener también para actuar en un futuro no muy lejano, con el nivel de endeudamiento a que nos están sometiendo a todos los aragoneses. Pero esto lo quería dejar claro para que se entendiera.
Y hablando por departamentos, de los que usted nos ha comentado, mire, el hablar de carreteras, del número de carreteras que se hacen, que se dejan de hacer... Primero, porque no se recogen en el presupuesto... luego es baladí el que usted aquí nos empiece a hablar de las que salen; ha pasado igual con las que se terminan, porque en las que se terminan ha aludido a algunas que ya llevaban bastantes años ejecutándose. Es verdad que usted, en estas últimas fechas, a lo largo de todo el año, ha ido inaugurándolas y ha ido terminándolas, pero, desde luego, no eran de este ejercicio pasado, que era del que usted nos quería hablar, sino que eran de ejercicios anteriores al que usted ha citado. Y nos ha hablado de las que se piensan hacer. Bueno, si es que van con carácter finalista, dígasenos, recójase en el proyecto de presupuestos, que para eso está, porque eso sí que da, desde luego, una obligatoriedad para poder pedir o exigir después al ejecutivo la realización de determinadas carreteras.
Ya ha dicho algo de las carreteras. Desde luego, yo pienso que hay actuaciones de obras de infraestructura que se pueden circunscribir, que se pueden aplicar a determinados ayuntamientos, pero hablar de carreteras, cuando menos comarcales, y circunscribirlas a determinados municipios es, desde luego, de una alegría supina, al menos desde mi punto de vista. Señor Consejero, yo creo que transitan las carreteras no sólo los vecinos de un determinado lugar, de un determinado pueblo; y usted me podría hablar de unas determinadas localidades de un determinado signo político -y esto lo digo a favor suyo-, porque si lo llevo por Teruel, usted sabe muy bien por dónde se han hecho la mayoría de las carreteras. Pero no quiero llevarle a ese terreno, entre otras razones, porque muchas de ellas fueron programadas ya por su antecesor, y no sólo por su antecesor, sino por el antecesor de su antecesor, y usted lo sabe muy bien, pero que curiosamente se justifican y se corresponden con municipios, por lo general, del signo del Partido Aragonés: ¡qué casualidad! -y permítame que utilice lo que más conozco-, tanto la sierra de Gúdar como la sierra de Albarracín. Entonces, salvo que sea una vía de penetración que va a un pueblo determinado y ahí se termine la carretera -y esas no corresponden normalmente a la Comunidad Autónoma, como usted sabe muy bien-, lo lógico es que las carreteras no sean de un determinado color político, sino que deben serlo de todos. Por eso, desde luego, creo que no nos sirve el que esto se haga así, y mucho más cuando este parlamento no tenga la posibilidad de poder fiscalizar y controlar las actuaciones que se van a llevar a cabo a través de las empresas que se ponen en funcionamiento.
En cuanto a obras hidráulicas, hay efectivamente una serie de actuaciones que condicionan en buena medida esta Dirección General, como son el Pacto del Agua. El que ustedes estén recogiendo unas cantidades para complementar o para sustituir la Ley de 1911 en la parte en que tienen que responder los ayuntamientos quizás no nos sirva. Yo he visto -y solamente hoy nos ha citado algunas más-, he podido ver por ahí alguna actuación en un pueblo -pues será casual, pero es en un pueblo con ayuntamiento del Partido Aragonés-: el embalse de La Tosquilla, que está financiado por la Ley del 11, pero que yo pensaba que en las actuaciones -porque en el Pacto del Agua así se recoge en buena medida-, salvo las que iba a acometer como actuaciones propias de la Comunidad, iba a participar en todo lo relativo a expropiaciones, pago de terrenos y demás, no a sustituir la parte de aportación de los regantes en este caso, o de los usuarios en este caso, que a través de la Ley del 11 tienen que aportar. Pero, bueno, en cualquier caso, es bueno que se considere una partida para ello, aunque nos parece escasa en función de los compromisos que se adquirieron en algún momento determinado. En fin, todo es susceptible de la interpretación que se dé.
Bien es cierto -y usted lo ha dicho hace unos momentos- que se están dando una serie de circunstancias un poco complicadas, pero es que la complejidad se pone de manifiesto en el momento en que hay unos recursos que no se corresponden con lo que aquí hemos asumido: una petición de necesidades que no son las que a través del pacto del agua se han aprobado unánimemente, etcétera. Esto tiene que crear la desconfianza, créame, en cualquier interlocutor, como es el caso del señor Borrell. Es lo que pensamos nosotros y en momentos en los que el tema del agua es un tema tan preocupante para todos.
Hay una serie de actuaciones en algún departamento que nos ha llamado la atención. Por ejemplo, en ese departamento de medio ambiente y restauración -digo medio ambiente y restauración porque, desde luego, el editor no ha tenido en cuenta que se ha cambiado el nombre del departamento: en unas tapas pone todavía "Dirección General de Medio Ambiente"; en otras partes (resúmenes), dice "Dirección General de Restauración"-, siguen siendo escasas las cantidades que contempla uno de los servicios más necesarios en esta Comunidad Autónoma. Lo que ocurre -y esto ya se lo pusimos de manifiesto en la comparecencia de la señora directora general- es que, ante la dispersión, la falta de coordinación y la asunción por parte de otras consejerías de la máxima responsabilidad aparentemente en medio ambiente, esté huérfana, una vez más, esta Dirección General de actuaciones que consideramos que deben ser importantes.
Pero también nos gustaría que en algún capítulo, en el de "Inversiones", se nos explicara a qué van a corresponder, y lo ha dicho el señor Consejero en parte, pero como el señor Consejero tiene la costumbre -y a lo mejor es sana, de cara a los medios de comunicación- de hablar de cifras grandilocuentes cuando se ve delante de un medio de comunicación, las cifras que ha estado anunciando el señor Consejero en determinadas apariciones públicas recientemente, pues díficial van a ser... Va a pasar como en el caso ese del abastecimiento del agua, que decía el señor Consejero que con tres millones, hasta que se llegue a cubrir todo el proyecto, se va a llegar aquí al año no sé cuantos. Pues igual va a pasar con algunas cifras que aquí se ha dicho por parte del señor Consejero que se recogen en su Dirección General, y que, sin embargo, va a ser muy difícil, si no se aporta mayor cantidad, de llevar adelante. Porque, evidentemente, el Consejero se echa en manos de lo que puede suponer la colaboración y la aportación de otras instituciones (en este caso, Fondos de cohesión, etcétera) para llevar adelante su programa; eso es interesante, es bueno, porque es verdad que de lo poco bueno que ha funcionado y se ha hecho más ágilmente por parte de esta Consejería ha sido todo lo concertado, y algunas cosas no se han desarrollado, pero digo acuerdos importantes tomados con otras Administraciones. Esto, desde luego, ha de continuar y hay que ir llevándolo adelante.
Las empresas públicas algo tendremos que decir. Lo que es la parte del presupuesto de su Departamento, la sección 13, lo que sí pone de manifiesto, una vez más, es su incapacidad, por necesitar de mayor gasto para funcionar, cuando resulta que, por otra parte, se le va a mermar de inversiones a realizar, y ahí está la incoherencia, señor Consejero. Pensamos que se sigue abusando de las transferencias, creemos que a pesar de todas las cifras y datos que usted nos ha dado es mucho más racional y mucho más sensato el que todos los municipios -aunque usted no lo crea así-, sean del signo y del color que sean, puedan ser autónomos para destinar sus propios fondos y para inventar sus calles, pero a través de presupuestos no finalistas. Para nosotros, eso es mucho más objetivo. Hay muchos ayuntamientos del PAR, según ustedes, que también recibirán unas buenas cantidades de dinero, y no será por tener que ir a solicitarlo a través de las distintas consejerías, lo cual es verdad que les da a las consejerías una cierta importancia, y además, evidentemente, en muchos casos ocurre como en el suelo que nos ha citado, que aparecen todos los departamentos, todas las instituciones; quizás falte en algún caso algún agente, algún gestor que aparezca en alguno de estos carteles, porque usted tiene siempre, desde luego, la idea de estar nombrando unas determinadas localidades. Bueno, pues en esas localidades, a lo mejor, también, a alguno nos gustaría que figuraran algunos otros nombres en los carteles y no sólo los de las empresas o instituciones que usted ha venido a citar.
Y en cuanto a las empresas, no nos cabe ninguna duda que las empresas, siempre que sea con el fin de llevar adelante algo, de iniciar un servicio, de hacer una actuación concreta o una función concreta, no tenemos ningún recelo. Ahora, cuando las empresas, de alguna forma, vienen a sustituir, vienen a quitar patrimonio de la Comunidad Autónoma para entregarlo a la iniciativa privada, a nosotros sí que nos preocupa; cuando esas empresas vienen a sustituir el parlamento por un consejo de administración que, quizá, no va a transmitir o trasladar toda la gestión de esas empresas a este parlamento y, evidentemente, nos va a costar mucho más el poder hacer un seguimiento, sí que nos preocupa la creación de estas empresas. Cuando estas empresas que están creadas para proyectar, construir, financiar, etcétera, nos tememos que se vayan a dedicar única y exclusivamente a adjudicar e, incluso -y, desde luego, juristas tiene la Comunidad Autónoma y este propio parlamento-, nos tememos que no estén en consonancia directa con las normas establecidas por la Comunidad Europea en cuanto a lo referente a publicidad, etcétera. Esto, en la propia creación de las empresas. Los parlamentarios que nos sentamos en este hemiciclo pensamos que es de preocupar, porque nosotros creemos que la transparencia (y así se quitan todas las dudas, se disipan todos los temores) se consigue con la fiscalización desde el parlamento de la acción del Gobierno, y aquí, de alguna manera, lo que se está es desviando; y no digo que se vaya a hacer mal, señor Consejero, ¡líbreme Dios!, yo lo que digo es que pudiera darse esa circunstancia; ese temor, desde luego, invade al Grupo Socialita.
A nosotros nos preocupa de INSTRA el que no vaya a ser ella la que ejecute, que sea una empresa instrumental. Nos preocupa, por otra parte, cómo se van a pagar las obras, aunque, evidentemente, usted ha hecho -y en el presupuesto de las empresas se contempla- una serie de anualidades de pago que ya, por supuesto, con los intereses de veinticuatro mil o veinticinco mil millones de pesetas de inversiones, se transforman en treinta y cuatro mil seiscientos ochenta y tres; es decir, que vamos a tener que pagar una buena cantidad de intereses los aragoneses. Y es normal que se anticipen las inversiones y las infraestructuras, es decir, que es bueno que se anticipe, pero es que en dos años usted nos hipoteca en buena parte, no sólo a nosotros, sino a los consejeros que le vayan a suceder, si es que alguna vez piensa dejar esta consejería, que no lo sé, pero hasta el año noventa y nueve -y por medio habrá unas elecciones, y ya no digo que vaya a mantenerse a lo largo de estos tiempos-, a nosotros el hecho de que durante estos años, hasta el año noventa y nueve, se esté hipotecando la gestión de una consejería... ¿Van a estar de fiesta? ¿Van a dar año sabático a esta consejería? O, por el contrario, ¿se seguirá hipotecando o incorporando nuevos créditos? Porque se dice muy bien en el acuerdo del Consejo de Gobierno, al referirse a estas cantidades, que "dichas aportaciones serán asumidas con cargo al presupuesto del Departamento de Ordenación Territorial, que se minorará en las cuantías necesarias de créditos disponibles para otras finalidades en la medida que sea preciso para financiar las indicadas aportaciones, de tal forma que el programa de obras de infraestructura no suponga minoración en los créditos de otras secciones del presupuesto de la Comunidad Autónoma".
El párrafo anterior, desde luego, no tiene desperdicio, en cuanto que demuestra fehacientemente algo que venimos diciendo desde hace tiempo: que en la Diputación General de Aragón... (perdón, no es sociedad anónima; bueno, es que estamos hablando de empresas), que la Diputación General de Aragón no elabora los presupuestos en función de las necesidades, sino que, simplemente, se los reparten entre los consejeros. Pero ¿quién le va a decir, cuando estemos aprobando este presupuesto, lo que se ha de presupuestar el año que viene? Eso tendrá que hacerlo el propio Consejo de Gobierno en un momento determinado, cuando tenga que determinar las cantidades. Desde luego, van a estar coartando la capacidad que tenga, porque ¡hombre!, si usted es capaz, desde luego, de ejecutar esto, a lo mejor hasta le satisface al Grupo de la oposición el tener que, a través de su Departamento, ir haciendo más cosas. ¡Claro!, se hacen con deuda, con lo cual, por otra parte, lo que estamos haciendo (y es evidente, y esto mis compañeros ya lo pusieron de manifiesto en la comparecencia del consejero del ramo, del Consejero de Economía- es, ni más ni menos, que ir endeudándonos al margen del parlamento, sin computar índice de endeudamiento a través de las empresas que sí tendría que hacerse a través de los presupuestos ordinarios de la Comunidad Autónoma.
No me voy a alargar más, pero sí que le voy a decir -bueno, por supuesto, si se me deja-, muy brevemente, lo que pienso sobre la empresa de Promoción del Suelo y la Vivienda de Aragón. Usted ha dicho algunas cosas anteriormente que a mí me gustaría, sobre todo, que reflexionara o tomara buena nota, porque hay algunos polígonos industriales de los que usted ha citado que tienen -y usted lo sabe; unos, de un signo, y otros, de otro- aportación de esta empresa que usted va a crear o que ha creado ya y que va a poner en funcionamiento subvenciones del Instituto Aragonés de Fomento. La otra pata de esa mesa tiene tres consejeros, o sostiene tres consejeros fundamentalmente: Consejero de Presidencia, con su empresa, que también la tiene; Consejero de Economía, con el Instituto Aragonés de Fomento, y usted mismo, que, de alguna manera, sostienen la tabla que puede ser la de la dirección del Gobierno autónomo. Para nosotros, desde luego, esto es, cuanto menos, preocupante dentro de la expectación que nos sugiere y la necesidad de hacer un seguimiento exhaustivo, que no sabemos cómo, y que usted nos explicará a la hora de fiscalizar y controlar exhaustivamente la buena marcha de estas empresas públicas.
Por todas estas razones, desde luego, señor Consejero, espero que nos aclare estas cuestiones después de esta intervención y del turno de preguntas al que posteriormente le someteremos, tanto a usted como a sus directores generales, que pueden tener muy buenas intenciones en su cabeza, que pueden ser personas que planifiquen muy bien y que tengan muy buenas intenciones, pero que se rompen por el nudo gordiano de esas alegrías de intencionalidad política que el señor Consejero tiene que llevar a cabo en su acción de Gobierno diaria.
Por todas estas razones, le digo que el Grupo Socialista está en total desacuerdo con los presupuestos que se nos han presentado desde su Departamento.
Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Esteban.
¿El señor Consejero desea intervenir después de cada...? Globalmente, al final de todas ellas. Muchas gracias, señor Consejero.
Por el Partido Aragonés, tiene la palabra su portavoz, señor Calvo.

El señor Diputado CALVO LOU: Gracias, señor Presidente.
Si me lo permite, hablaré desde el escaño, como ha sido siempre costumbre en estas comparecencias, y así le quitamos un poco de solemnidad y, probablemente, le daremos más rapidez.
En primer lugar, quiero dar las gracias al señor Consejero por la comparecencia, así como a los altos cargos del Departamento que le acompañan.
Yo creo que después de la intervención del Consejero, a los partidos que apoyamos al Gobierno nos toca siempre hacer de ponderadores, pero después de la intervención que ha tenido el Consejero, sobre todo en su primera parte, yo creo que esa ponderación tenía que haber salido del partido de la oposición, puesto que nos ha puesto de manifiesto todas las inversiones que se han hecho en ayuntamientos de signo socialista que, evidentemente, dejan a nuestros ayuntamientos, aquellos dominados por el Partido Aragonés y el Partido Popular, pues en clara desventaja, y yo creo que el señor Consejero habrá visto después de la intervención del portavoz socialista que le ha servido de poco, porque a pesar de esa exhaustiva inversión en ayuntamientos del signo socialista, pues parece ser que los presupuestos no les gustan. Nosotros, que no somos sectarios, no obstante, y como no debía ser menos, vamos a apoyar los presupuestos, puesto que satisfechas las necesidades de los ayuntamientos socialistas, entendemos que ahora nos llegarán a los ayuntamientos de nuestro signo.
La explicación del presupuesto ha sido prolija; yo creo que no era necesaria, porque en el presupuesto que nos ha presentado están perfectamente explicadas todas las inversiones y la filosofía que impregna el proyecto del Gobierno, y, por lo tanto, a lo mejor no era necesaria esa explicación tan prolija. No obstante, nosotros felicitamos al Consejero por el esfuerzo que, desde la Diputación General de Aragón, se va a hacer para crear infraestructura tan necesaria para vertebrar a Aragón, y eso, en un año de crisis, donde los presupuestos, evidentemente, por estar "instalados" de alguna forma en esa crisis, se ven obligados a rebajar algunas partidas.
Y también quiero felicitar al Consejero por haber tomado lo positivo de otras Administraciones públicas y adaptarlo a los presupuestos de la Diputación General de Aragón, y me estoy refiriendo, concretamente, a la creación de esas empresas públicas que tanto preocupan al portavoz socialista, porque, de alguna forma, es seguir el ejemplo de la Administración central. No en vano, esa Administración central, socialista, maneja más de quinientas empresas de este tipo con un montante gestionado de más de tres y medio billones de pesetas, con be de Barbastro, como diría mi compañero Bolea Foradada. Por lo tanto, no veo por qué eso puede crear absolutamente ningún complejo ni ninguna preocupación al Grupo Socialista: el dinero manejado por estas empresas es la mayor partida del Estado, después de pagar las pensiones y al INSALUD; por lo tanto, no creo que ése sea un tema que verdaderamente pudiera preocupar al Grupo Socialista.
Yo no voy a responder al Grupo que me ha precedido en el uso de la palabra, porque creo que el Consejero no lo necesita y, además, estoy seguro que será un placer para él contestar a toda la intervención. Pero sí quiero hacer dos matizaciones, porque cuando se ha hablado de la deuda histórica de las diputaciones, no sé muy bien a qué deudas se refería; si es una deuda histórica no con las diputaciones sino con las provincias más deprimidas de España (y en ésas entraría Teruel), evidentemente, existe una deuda histórica -y al hablar de historia, estoy refiriéndome a muchísimos años-. Pero si se habla de la deuda financiera de la Diputación Provincial de Teruel, ésta, verdaderamente, no es una deuda histórica, es una deuda que no tiene más de ocho años, y los responsables de esa deuda creo que están aquí.
En la provincia de Teruel también se ha hecho mención -y quiero matizarlo- de que parece ser que en el Departamento, de acuerdo con lo que he oído anteriormente, gran parte de las inversiones se habían hecho en ayuntamientos con responsable del Partido Aragonés o del Partido Popular. No voy a entrar en ese detalle, porque no pensaba que fuera a darse hoy un debate de esa naturaleza, pero tengo los datos suficientes para asegurarle al portavoz socialista que más de la mitad de las inversiones de este Departamento han sido en ayuntamientos del Partido Socialista en la provincia de Teruel, más de la mitad. Tengo los datos, y con mucho gusto, puesto que nos vamos a ver prontamente, se los facilitaré.
Por mi parte, pues, nada más, simplemente poner de manifiesto nuevamente nuestro apoyo total al presupuesto, animar al Consejero para que siga con ese dinamismo en favor de construir todas las infraestructuras que Aragón necesita para encaminarse al próximo siglo, que está tan cercano y en el que tenemos un reto tan importante.
Nada más y muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Calvo.
Por el Partido Popular, tiene la palabra el señor Conejero.

El señor Diputado CONEJERO BENEDICTO: Muchas gracias, señor Presidente.
Señor Consejero, señoras y señores directores generales. En primer lugar, agradecerles muy sinceramente su presencia aquí.
Entrando ya en materia, con respecto al grado de ejecución del presupuesto del noventa y dos, hay que decir que de un montante total de treinta y dos mil setecientos millones, según los datos del Consejero, está ejecutado más del 92% en el concepto de autorizado, por supuesto, más del 92%, lo cual nos parece una cifra altamente positiva, verdaderamente positiva. Cuando los datos surgen, máxime de un modo tan explícito como lo ha hecho el Consejero en su exposición de esta mañana, los comentarios descalificatorios, que se vierten con frecuencia, quedan al descubierto, perdiendo su disfrazado entramado argumental.
La valoración global que merece el presupuesto del Departamento de Ordenación Territorial al Grupo Parlamentario Popular puede expresarse en los siguientes términos: presupuesto realista, responsable, ajustando sus cifras a la difícil situación económica que atraviesa nuestro país; presupuesto inversor, fundamentalmente inversor, y presupuesto progresista.
Es un presupuesto realista. Algunos datos al respecto: el capítulo I ("Gastos de personal") tiene un montante total de tres mil doscientos sesenta y tres con nueve millones, lo que supone un aumento de ciento ochenta y seis con ocho millones de pesetas con respecto a los tres mil setenta y siete con un millones del presupuesto del noventa y dos, y un 6,1% aproximadamente, en términos porcentuales.
Capítulo II ("Gastos en bienes corrientes y servicios"): sube en ochenta y cinco con un millones con respecto al noventa y dos, o sea, un 17%. En este mismo capítulo, la subida del año anterior fue del orden del 62%.
Capítulo IV ("Transferencias corrientes"): noventa y dos con cinco millones más (un 29.8%), cuando el pasado año el aumento suposo un porcentaje aproximado del 145,5%. En total, la suma de los gastos corrientes arroja un incremento de trescientos sesenta y cuatro millones (9,4%), cuando en el noventa y dos la variación al alza fue de seiscientos seis con nueve millones (un 18,5%). La lectura que de todo esto se puede sacar a nuestro juicio es clara: reajuste, y reajuste serio, en este apartado.
Decía también que era un presupuesto inversor: los capítulos I, II y IV ("Gastos de personal", "Gastos en bienes corrientes y servicios", "Transferencias corrientes") suponen cuatro mil doscientos con cinco millones de pesetas, es decir, un 23% del montante total del Departamento; mientras que los capítulos VI, VII y VIII ("Inversiones reales", "Transferencias de capital" y "Activos financieros") alcanzan una cantidad de catorce mil ciento sesenta con cuatro millones, lo que supone un 77% del presupuesto.
Por otra parte, el Departamento de Ordenación Territorial sigue siendo el primero en cuanto a la cantidad que se le adjudica del presupuesto del Gobierno aragonés: dieciocho mil cuatrocientos doce con nueve millones, que representa cerca del 20% del total, la quinta parte del presupuesto aragonés. Si a esto añadimos lo concerniente a las dos sociedades públicas dependientes del Departamento (Prosyva e INSTRA), nos encontramos con una capacidad inversora que incluso sobrepasa los cuarenta y seis mil millones de pesetas, tal y como anunciaba el Consejero no hace mucho.
Y, en consecuencia, tendremos que concluir indicando que a pesar de esa baja de cinco mil novecientos ochenta y seis con cinco millones del año actual con respecto al noventa y dos, en lo que al Departamento se refiere, el presupuesto no solamente es profundamente inversor, sino también altamente progresista. Nos encontramos en el camino apropiado para no pararnos, para seguir creciendo y creando infraestructuras para el desarrollo. El Gobierno de Aragón está facilitando una gestión eficaz, cada vez más eficaz.
En un análisis por servicios, podemos encontrarnos con descensos en las partidas correspondientes a los servicios 02, 04 y 20 ("Carreteras", "Obras hidráulicas" y "Suelo y vivienda de Aragón"); incrementos en el 03, 05 y 06 ("Ordenación del territorio urbanístico", "Arquitectura" y "Restauración del territorio"), y por lo que respecta al 01 ("Servicios generales"), prácticamente se mantiene.
Los descensos pienso que realmente no son tales, por lo ya comentado de las empresas públicas de infraestructuras y vivienda; por lo tanto, no volveré sobre el mismo tema. Además, ya ha sido ampliamente comentado esta mañana por el señor Consejero.
La Dirección General de Ordenación del Territorio y Urbanismo pasa de novecientos ochenta y siete con ocho millones a mil quinientos doce con uno, lo que supone un aumento de quinientos veinticuatro con tres millones, que en términos porcentuales representa un cambio cualitativamente muy importante, ya que va del 4,05% al 8,21% del total del Departamento. La Dirección General de Arquitectura contaba en el noventa y dos con mil novecientos ochenta y uno con seis millones, y ahora tiene dos mil doscientos sesenta y nueve con tres; por lo tanto, sube doscientos ochenta y siete con siete millones (del 8,12% pasa al 12,32% del total del Departamento).
Y, por último, la Dirección General de Restauración del Territorio, tal como se indica ahora, sufre una variación al alza de ciento noventa y cuatro millones (del 3,78% al 6,06%: prácticamente se dobla en términos porcentuales), incremento importante dada la materia de la que se trata; precisamente, el medio ambiente, como usted aludía antes.
En conclusión, y para terminar, como le decía al principio: presupuesto realista, responsable, inversor y progresista.
Muchas gracias, señor Presidente.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Conejero.
Por el Partido Convergencia Alternativa de Aragón-Izquierda Unida, tiene la palabra el señor Maestro.

El señor Diputado MAESTRO TEJADA: Gracias, señor Presidente.
Voy a utilizar la tribuna también por aquello de la comodidad.
En primer lugar, agradecer a los directores generales y al Consejero que estén hoy aquí en esta comparecencia; también a todas las Diputadas y Diputados. Estas sesiones, la verdad es que están siendo maratonianas y un poco pesadas, por la de veces que tenemos que escuchar los mismos argumentos, puesto que todas las consejerías tienen un hilo conductor.
De la intervención de hoy del señor Consejero, lo que más me preocupa es que está confundiendo permanentemente el equilibrio territorial y la ordenación del territorio con la distribución partidista o no de los presupuestos. No salgo de mi asombro por la obsesión que ha mostrado hoy, en esta tribuna, explicando a qué partidos se ha beneficiado. Desde luego, si este mensaje se transmite, tal y como yo lo he entendido aquí, a la opinión pública y llega a los ciudadanos, que me imagino que muchos no están afiliados a ningún partido político, van a decir que para qué pagan sus impuestos si lo único que se mira al final es a cuántos o a qué partido se ha beneficiado más o menos, porque eso es lo que trasciende de su intervención, su gran preocupación por demostrar que usted no está haciendo política partidista.
No sé si cuando dice "usted" se está refiriendo también al Gobierno, porque yo creo que ha quedado claro en el resto de intervenciones de los Consejeros, y yo creo que la realidad supera a lo que uno quiera imaginar o decir, y la verdad es que la impresión que se sigue causando con determinadas inversiones, sobre todo con las más importantes, es que se hacen con criterios partidistas, pero lo lamentable de hoy es que se ha esforzado en demostrar todo lo contrario para ir cada vez más hundiéndose en su propio argumento y confundiendo al final, porque yo no me he enterado de si alguna zona desfavorecida de esta Comunidad ha solucionado sus problemas. Lo que sí he visto es que los ayuntamientos del Partido Socialista van bastante bien sobrados de dinero; lo que no sé ya es si eso se corresponde con alguna zona desfavorecida de esta Comunidad que estaba necesitada de un reequilibrio y donde sus pueblos o sus habitantes veían amenazada su existencia y supervivencia en aquellas zonas.
Le vuelvo a recordar que esta falta de evaluación contrasta con los datos que hemos manejado recientemente, cuando se discutía la Ley de Ordenación del Territorio, o la de Comarcalización. Estamos hablando de que existen en Aragón cerca de doscientos municipios amenazados con desaparecer en vísperas del próximo siglo, por lo tanto, es un tema que nos preocupa porque se siguen despoblando. A ver si se resuelven los problemas fundamentales que eviten esa despoblación, aunque hay que decir también que el conjunto de la Comunidad ha perdido población. Es decir, algo está ocurriendo, pero no solamente es el tema demográfico, porque hay otras zonas de España que sí que crecen y, parece ser, que están creciendo también a costa de él y, por lo tanto, nuestro territorio está perdiendo esa población. No hemos oído ninguna evaluación al respecto. Eso sí, me he enterado muy bien de los municipios del PAR, del PP, del PSOE, del CDS... y como los de Izquierda Unida tenemos tan poquitos, pues no hacía falta ir muy lejos para enterarnos de lo que nos había llegado. Pero, eso sí, me lo llevo muy bien aprendido, y ya sé que me tengo que afiliar a otro partido político, por lo visto, para poder disfrutar de las inversiones y de la parte que de mis impuestos me corresponda.
Bien, una vez dividido el territorio aragonés en partidos políticos y en inversiones para estos partidos políticos, nos ha inundado con cifras y proyectos (eso lo sabe hacer muy bien). Nos desglosa qué partidos se han beneficiado, kilómetro por kilómetro, y luego nos habla de la cantidad de mesas en las que usted se sienta el primero y se dedica, por lo visto, a esperar. Usted ya cumple y nos insiste una y otra vez -luego veremos a ver la intervención que hizo el año pasado-, nos vuelve a explicar lo mismo, cantidad de cosas que usted dice, que lo plantea como si fuera un tema de su Departamento: que se va a resolver, aparece ante la opinión pública... siete mil, cinco mil, veinte mil millones... Y luego nos encontramos con que lo que ha puesto es la mesa, que usted se sienta el primero, y ya, a esperar.
Con todo esto, yo me encuentro ante una imagen del Consejero de ordenación del territorio que intenta desmarcarse de la imagen que está dando, desde luego, el Gobierno aragonés en su conjunto, en cuanto a la ineficacia, la poca ejecución, el partidismo de sus actuaciones, la falta de diálogo o acuerdos en algunos de los temas importantes. Y usted ha venido -incluso ya se ha dicho anteriormente: por encima de sus competencias como Consejero- a hablarnos de otros temas que, en todo caso, le afectan directa o indirectamente, pero que son de otras consejerías, incluso del Presidente del Gobierno aragonés. Por lo tanto, me ha dado la impresión de que usted ha venido, como pantalla del Gobierno, a intentar romper la imagen que están dando otras consejerías y, desde luego, no me ha convencido en absoluto, porque ha sido un interés tan desaforado que se le ha visto rápidamente cuáles eran sus intenciones.
Confunde permanentemente la gestión, el manejar dinero (que parece ser que es lo más importante hoy en día), con hacer una política eficaz. Ha hablado muy poco del contenido real de las directrices que va a aplicar de control, de inspecciones, de ordenación y desarrollo de iniciativas; nos ha hablado del dinero que cuesta cada cosa y cómo va el asunto del dinero y del partido político al que se va a beneficiar más o menos.
El año pasado nos recordaba que había hablado ya con ciento cuarenta alcaldes, que tenía ciento cincuenta más esperando con los que no había podido hablar; imagino que durante este año noventa y dos habrá hablado, por lo menos, con el doble, y le habrán inundado de proyectos, le habrán inundado de cifras, le habrán inundado de gestiones. Y, además, quiero decirle una cosa: todos estos alcaldes, en su conjunto, verdaderamente, suman un número de proyectos y de iniciativas importantes, que usted aprovecha, evidentemente, y que luego nos plantea aquí como si usted tuviera unas dotes especiales para llegar a todos los rincones de la Comunidad y a presentar todos esos proyectos que hoy nos ha puesto aquí, encima de la mesa, como si los hubiera ideado todos usted solito, usted solito o su Departamento. Yo lo que quiero decir es que esos ciento cuarenta o ciento cincuenta alcaldes, los setecientos sesenta municipios más el resto de instituciones están permanentemente dando a luz a este tipo de iniciativas, y yo creo que nos sobran iniciativas, y lo que hay que hacer precisamente es ordenarlas y darles un sentido político: priorizar, y eso es lo que cada vez escucho menos por parte de este Consejero. Eso sí, nos cuenta las cifras, las suma todas... y ésa es otra cuestión. Al final, ya no sabemos exactamente con qué quedarnos de las cifras que nos encontramos un día tras otro en la prensa de todo tipo. La verdad es que hay veces que yo no sé ya con qué cifra quedarme; me preguntan, me llaman periodistas o me llama gente, y yo no sé si esto es lo que se han gastado ya, lo que va a poner él, lo que espera que pongan, etcétera, etcétera. Es una incertidumbre permanente.
Usted tuvo una comparecencia el año pasado en la que iniciaba su intervención diciendo que estaba contraído prácticamente todo el presupuesto del noventa y dos; decía, en palabras textuales: "Insisto, está contraído el presupuesto de este año noventa y dos; veo difícil, salvo, como luego explicaré -y ésa explicación era la de las empresas públicas que iba a crear-, pero prácticamente, el presupuesto del noventa y dos está contraído". Esa opinión contrasta, desde luego, con las cifras de Intervención de la Diputación General de Aragón a 15 de diciembre del noventa y dos, que nos han entregado, y que, por no cansar a sus señorías, no voy a repetir, porque ya se ha repetido varias veces. Estaba todo comprometido, ya no había más dinero, y luego nos encontramos con que los tantos por ciento no coinciden. Por lo menos, ésta es una interpretación, nosotros hacemos otra, y el resto de los partidos también hacen otra interpretación, pero, si nos ceñimos a los listados, ahí es donde creo que debemos encontrar un poco la respuesta más sensata.
Por supuesto, hablaba de que se ampliaría con las inversiones de las empresas públicas, que, por lo menos, durante el noventa y dos, no han sido muchas. Nos hablaba del plan general de carreteras otra vez, nos hablaba del plan cuatrienal de vivienda, de iniciar las estaciones de autobuses... Es decir, volvemos a reiterar los mismos temas. Evidentemente, algunos son plurianuales, pero no nos añade nada nuevo de cuáles son las fases, cómo se han desarrollado, en qué puntos está y cuánto es lo que falta por desarrollar. Siempre se habla de lo mismo o, por lo menos, en los mismos términos.
Habló también del plan de restauración de obras públicas. Este año lo ha vuelto a hacer: ha hablado de cuarenta millones; yo no sé si son los treinta y nueve del año pasado, si se han gastado ya o no se han gastado, porque, le vuelvo a insistir: por qué es tan difícil, porque, por mucho que usted se empeñe -y usted tendrá muchos datos, y yo ya he traído muchos listadillos aquí-, realmente, a nosotros nos cuesta muchísimo trabajo, por no decir que nos resulta imposible en algunos asuntos, saber exactamente si se ha gastado lo que se dijo que se iba a gastar y en dónde se ha gastado, y por más que se empeñen, de momento esto está así.
En respuesta ayer del señor Consejero de Economía, el señor Lanzuela, decía -que a nosotros, desde luego, no nos parece una respuesta aceptable- que nos fuéramos por ahí a ver otros parlamentos y a ver el parlamento de la nación, a ver de qué se enteran, porque aquí seguro que se enteran de algo más de lo que se enteran por ahí, y con eso, parece ser que ya era suficiente para que las cosas estuvieran bien. No nos satisface, desde luego, en absoluto la información real que se nos da, no nos satisface, y otra cosa es la que luego usted parece que maneja y que tiene a su disposición, y que nos gustaría, en todo caso, saber exactamente si ha cumplido, si ha ejecutado tan bien, tan perfecto, el presupuesto. Dénos los datos, porque eso seguro que nos convence, eso es irrebatible, irrefutable, para la prensa, para los medios de comunicación, en general, y para los partidos políticos, que nos ha tocado hacer la oposición en esta cámara. Por lo tanto, si los tiene y son así, como usted dice, nos los pasa, los leeremos, y, si es verdad, no nos quedará más remedio que darle la razón.
Le voy a hacer una pregunta, señor Consejero, porque el año pasado puso mucho énfasis: veinticinco kilómetros de carril cicloturista alrededor de cada una de las capitales de provincia de esta Comunidad, veinticinco kilómetros, que suman en total setenta y cinco. Este año parece que se le ha ido el entusiasmo, porque esto nos lo vendió como: "Fíjese hasta dónde llega el ánimo ecologista de este Departamento que, sin pedirlo nadie, va a hacer veinticinco kilómetros..." Yo, desde luego, desconozco si se ha hecho un sólo metro de estos setenta y cinco kilómetros que se supone se habían presupuestado, y que, desde luego, me siento incapaz de buscar en esos presupuestos y en la ejecución que me han dado para ver si se ha cumplido, si se ha invertido algún duro en esta cuestión.
Sí que he seguido con detenimiento la Ley de ordenación del Somontano del Moncayo -y usted lo sabe-, con preocupación por ver dónde se destinaban las inversiones que en él se realizaban: los trescientos millones. Efectivamente, se establecieron unos mecanismos, se han tomado decisiones democráticas en el Consejo de ordenación del Somontano del Moncayo, y yo ya le manifesté mis discrepancias con algunos de los proyectos que se habían aprobado y que, por mucho que se hayan aprobado por unanimidad, considero que rozan (por no decir que incumplen) algunos de los criterios que se establecieron en la Ley de ordenación. Me dirá que soy un pesado y que ya estamos otra vez en el mismo tema del Moncayo. Me parece un tema preocupante porque se han realizado obras, sobre todo viarias, para arreglar algunas pistas, incluso para asfaltar algunas de ellas, que, si quiere que le diga la verdad, lo he consultado, he ido a verlas, me he molestado, y muchas de ellas no van a ningún lado. Se han hecho inversiones de dinero sobre todo en pistas que no van a ningún lado y que no tienen ninguna utilidad, ninguna utilidad, y que, además, se han hecho sin el estudio de impacto ambiental que se dijo que se haría, sobre todo, para todo tipo de infraestructuras viarias que se realizaran en el entorno del Moncayo. Y, además, le voy a decir que el plan de ordenación de los recursos del Moncayo que se elaboró contemplaba la ampliación del parque, precisamente, en las zonas donde se han construido estas carreteras, y ya le comuniqué que me preocupaba.
Había otra serie de obras, como podían ser las restauraciones de algunas iglesias, en donde no me quiero meter, porque pienso que han servido, por lo menos, para crear empleo en la zona, que era uno de los factores que se pretendían; pero la verdad es que me preocupaba bastante que las primeras inversiones, que lo más necesitado en el Moncayo, con todo lo que habíamos hablado y discutido, fuera, en algunos municipios, el arreglar la torre. Si con eso se creó empleo y se dinamizó el lugar para salvar algo, me parece bien, pero en sí mismo, el hecho de rehabilitar una torre de una iglesia no creo que sea competencia de este plan de ordenación del Somontano del Moncayo, porque hay otros Departamentos que ya quedamos que serían los que debían hacer esas inversiones, y la Ley de ordenación era para complementar, sobre todo, lo que hacía referencia a una ordenación integral, cuestiones de conjunto, y, sobre todo, para respetar el medio ambiente y los valores naturales, manteniendo como fuera la población en aquella zona. Esta es mi preocupación. Ya veremos cómo se desarrollan en el futuro las próximas obras para el año noventa y tres, y, desde luego, como ejemplo de lo que pueden ser otros planes, otras leyes para otras zonas que se nos anuncian, creo que la experiencia será buena, por lo menos para rectificar en aquellas cuestiones que todos veamos de una manera clara y contundente.
De los glaciares no vamos a hablar porque si, desde luego, se ha hecho algo en el noventa y dos con el tema de la protección de los glaciares, es tan poco que yo creo que no es motivo de satisfacción. Y si, desde luego, lo que se nos anuncia para el noventa y tres es algo parecido a lo del noventa y dos, pues, vamos dados.
Le voy a recordar las sociedades públicas, porque así va cronológicamente la intervención. Usted dijo textualmente: "Hay que engañar de alguna forma el presupuesto, sin engañar -añadía a continuación-, ser más ágiles, irse endeudando poco a poco...", etcétera, etcétera, y seguía y continuaba su intervención. Este es el verdadero motivo, no hay otro. Incluso, luego, en las memorias que aparecen de cada una de estas empresas, se citan en unas frases parecidas el motivo por el que se crean esas empresas, y, curiosamente, se utilizan unos términos que añaden a lo que usted dijo en aquel momento lo que ahora se dice en el texto de la memoria. Por ejemplo, de INSTRA dice: "es un instrumento ágil, que permitirá realizar la política de proyecto, construcción, financiación y conservación de infraestructuras básicas y de transporte por cuenta de la Diputación General de Aragón, con las adecuadas características de celeridad, operatividad, capacidad de acceso a la financiación crediticia y eficacia". Desde luego, con estos argumentos, si no hay otros -que, de momento, nos tenemos que ceñir a lo que aquí se dice-, son los argumentos que creo que con buen criterio hemos criticado, porque no creemos que ésos sean -valga la redundancia otra vez-los criterios para crear empresas públicas y realizar una serie de actividades. Además, anunció una cuestión -y luego volveré al tema de las sociedades públicas-, anunciaba entonces la creación de una de telecomunicaciones con Eléctricas Reunidas... No sabemos nada, pero, vamos, yo prefiero no saber nada, pero quiero decir que usted lo dijo, y ya se olvida de las cosas -parece ser- que dice.
Volviendo al tema de las aguas residuales, cronológicamente, como iba distribuyendo su intervención, nos volvió a hablar de las aguas residuales; en aquel momento, nos volvió a citar que no había partida para el problema de las aguas residuales. Decía: "no está en el presupuesto, pero sí está en la cabeza de este Consejero". Ahora ya parece que de la cabeza ha pasado al papel y a la mesa ésa, a esperar a que se siente alguien más. Es decir, el problema se vuelve a plantear como que es una de las estrellas de este presupuesto, y luego nos encontramos con que no hay tal estrella; y al año que viene, seguramente, estaremos hablando del mismo problema y en los mismos términos, pero, eso sí, parece ser que no va a ser por culpa del señor Consejero.
Trató de la aluminosis, que en aquel momento no tenía partida; luego se ha habilitado lo que se ha podido.
Y está la situación -como ya ha explicado- para la autovía, que en aquel momento tampoco se habilitó partida y en estos momentos todavía no se ha habilitado ninguna partida, imagino, según nos explicó cómo iba a desarrollarse la financiación.
Por lo tanto, son grandes temas que no están en el presupuesto, que son ideas, que ahí está el tema, y, bueno, ya veremos a ver cómo se desarrollan al final del noventa y tres. Le explicamos con todo esto cuestiones que usted nos plantea en el presupuesto y que, realmente, al final nos damos cuenta que no es el presupuesto, que es otra cosa lo que nos explica. Y esto es lo que nos explicó el año pasado y, parece ser, lo que nos vuelve a repetir.
Las obras hidráulicas de interés para la Comunidad el año pasado aparecían sin partida, estaba lo de Piñana, que también estaba sin partida para el noventa y dos; no sé cómo estará ese tema, porque todavía no lo he podido descubrir.
Lo que sí que aparece este año -bueno, el año pasado aparecía sin partida- es el problema con Renfe, que este año sí que aparece con partida, y, curiosamente, me voy a detener en este aspecto, porque en ese apartado de transportes, de financiación a empresas deficitarias, no se si se ha dado cuenta que es uno de los que ha aumentado con respecto al año anterior, lo que quiere decir que la situación en esta Comunidad con el tema del transporte de viajeros entre localidades, tanto por ferrocarril como por carretera, está complicado y está preocupante, porque las ayudas hay que seguir incrementándolas. Por supuesto, en el tema ferroviario, por lo que se nos anuncia, se van a seguir incrementando las ayudas, y veo que, en buena lógica, las partidas para esta cuestión se han aumentado en el presupuesto, lo que no es común ni habitual en el resto de partidas, pero en éstas sí.
Por lo tanto, creo que estamos ante un problema muy grave, y no se está abordando con unos verdaderos criterios políticos que nos vayan a solucionar el problema: de momento se van poniendo parchecitos, cada vez tenemos que ir poniendo más dinero sin ver una luz clara al final de este problema.
Usted habló también de la Ley de ordenación y de la Ley de carreteras, que aparecían sin partida. Nos habló también de la ordenación del Pirineo...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Señor Maestro, vaya finalizando su intervención, puesto que ha rebasado con creces el tiempo que corresponde al número de representantes que su Grupo Parlamentario tiene en la misma.
Muchas gracias.

El señor Diputado MAESTRO TEJADA: Es que no sabía yo que se hacía por el número de representantes...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Si usted se toma la molestia y es habilidoso en hacerlo, verá el tiempo que corresponde a cada uno de los intervinientes; el suyo ha sido rebasado con creces.

El señor Diputado MAESTRO TEJADA: Bien, pues voy a ir abreviando.
Como habrá tiempo, por supuesto, en el debate del viernes y habrá tiempo también en las diferentes enmiendas, yo, simplemente, lanzar algunas preguntas a la Dirección General de Restauración del Territorio. Quiero saber exactamente si, verdaderamente, se ha contratado todo el personal que estaba previsto el año pasado, cosa que se vendió como uno de los grandes proyectos para el noventa y dos. Tengo mis dudas sobre cómo está realmente la plantilla, porque se han contratado unas asistencias técnicas para proveer de personal al Departamento, y parece ser que se van prolongando en el tiempo, y yo no sé si se han cubierto las plazas o no, porque con las cifras que manejamos en los presupuestos sobre personal no ha quedado clara esta situación.
El plan de residuos tóxicos y peligrosos, o de los residuos en general. Yo desconozco o sigo sin conocer qué es ese plan. Sabemos de una serie de actuaciones puntuales que se han anunciado, y ustedes el año pasado hablaron de plan... Este año vuelven a hablar de plan, y yo sigo sin conocer ese plan, y esta cámara tampoco conoce ese plan. Por lo tanto, sí que nos gustaría saber ese detalle.
Volviendo un momento al tema de las empresas públicas, quiero, en todo caso, aparte de lo que ya se ha dicho y lo que hemos dicho en la comparecencia de economía y demás, hacer una pregunta: se van a adquirir por parte de INSTRA treinta y cinco millones de acciones de otras empresas; ¿qué empresas? ¿Hasta dónde se va a seguir por ese camino de que una empresa compre otras empresas?, porque ahí es ya donde esta cámara perdería el control definitivo del dinero que se gestiona a través de esa empresa. Quiero saber también los cincuenta millones que aparecen para la empresa relacionada con el Pacto del Agua, y, realmente, a qué se va a dedicar, porque hemos visto que en INSTRA aparecen los embalses y el desarrollo de infraestructuras; entonces, saber exactamente a qué se va a dedicar esta empresa del Pacto del Agua.
Y yo creo que, en todo caso, simplemente manifestarle una vez más que es un experto en sumar peras con manzanas, y con esto me refiero a que suma cuestiones de presupuesto que no sabemos si son, si han sido, o si serán, pero todo suma en un volumen millonario, multimillonario, de cientos de miles de millones, que confunde, desde luego, a la opinión pública.
Rechazar una vez más la filosofía y la distribución que se ha hecho del presupuesto y recordarle que su Departamento tampoco destina el 0,7% global a cooperación con organizaciones no gubernamentales de países en vías de desarrollo, como prometió el Consejero de Economía en el debate de los presupuestos del año pasado.
Nada más. Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Maestro.
Por el Grupo Mixto, tiene la palabra el señor Gomáriz.

El señor Diputado GOMARIZ GARCIA: Gracias, señor Presidente.
Señor Consejero, aunque el tiempo me es limitado para el estudio exhaustivo de los presupuestos que usted presenta hoy aquí, debo felicitarle en líneas generales, a usted y a su equipo, por dos razones: una de ellas es por venir aquí a presentar los presupuestos, informarnos, pero, sobre todo, la felicitación que yo quiero ofrecerle es porque, en la medida en que me ha sido posible, creo que son unos presupuestos coherentes. Técnicamente, no hay mucho que decir, pues están bien; políticamente, le diría que son agresivos, y esto tiene hasta incluso un poquillo de más importancia, si me la quiere reconocer, que, por el hecho de asistir a todas las comisiones, voy viendo unos y otros, y, entonces, en los presupuestos que usted presenta, si a alguien debiera darle la nota mayor, por lo que hasta ahora he visto, sería a los suyos. Hay una agresividad, hay un algo de tirar adelante, de sacar esta Comunidad Autónoma adelante en los temas concernientes a su Departamento.
Por otra parte, decir que también me satisfacen porque, en gran medida, se cumplen las líneas básicas que el Partido Popular presenta en su programa de gobierno, algo que estoy haciendo ad pedem litterae, un seguimiento del mismo para que se cumpla dicho programa.
No obstante, me va a permitir que haga una advertencia, pues yo me la tomo muy en serio -los demás no sé cómo se la tomarán-: usted ha sido hábil para dotarse de los medios necesarios a fin de sacar este presupuesto adelante, es decir, posee los medios, posee los medios; otros departamentos creo que no poseen los medios suficientes, y éste es un punto importante.
Yo, digamos como político, como un señor que ha hecho campaña electoral, como un señor que se ha comprometido con una serie de gente, hay unas cuestiones que considero prioritarias respecto a otras. Me parece muy bien que usted saque sus presupuestos adelante, y, además, es motivo de gozo por mi parte, pero que no sea a costa de aquello que es prioritario en esta Comunidad, y yo entiendo -mi humilde entender- que es prioritaria la agricultura, son prioritarias las "pymes", se necesita un apoyo a la Universidad... porque usted mismo, todo esto que está diciendo, difícilmente podría conseguirlo sin buenos técnicos, y nuestra Universidad aragonesa se está quedando atrás, al igual que las nuevas tecnologías, los nuevos estudios, y, si no, se den un recorrido.
Yo no voy a decir ahora -y no quiero entrar nunca en ese tema- si la culpa la tiene el Gobierno central o la tenemos nosotros. Nosotros estamos en una Comunidad que queremos sacar adelante. Vamos a solucionar los problemas del mejor modo posible, que para eso estamos aquí. Entonces, no quiero que esto sea -repito, porque es importante- a costa de los trabajadores del campo (que ayer los tildaba como "los pobres de la sociedad"), no quiero que sea a costa de la pequeña y mediana empresa (que cada vez cierran más y se encuentran con mayores problemas). Creo que los beneficios de estas empresas públicas que se gestionan debieran ir a parar a subsanar la problemática existente en empresas donde hay trabajadores que necesitan, para ver la tele, estar comidos (un ejemplo que se me ocurre).
La asistencia social también la considero prioritaria. Hay muchos problemas en nuestra sociedad: el sida, minusválidos, ancianos, etcétera, etcétera, y los tenemos ahí, están ahí. De algún modo hay que hacer algo por ellos. Y, bueno, la Universidad. Estos cuatro puntos.
Entonces, me parece muy bien que su proyecto se lleve adelante, yo le aplaudo, pero también quiero que se lleven los demás.
Entonces, sirva esto como una humilde opinión de un Diputado que está viendo los presupuestos en una visión de conjunto.
Agradecerle, pues, el que haya venido y nos haya presentado los presupuestos, y ya le digo que me satisfacen.
Gracias, señor Presidente.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Gomáriz.
Para respuesta a las intervenciones de los portavoces de los distintos Grupos Parlamentarios, tiene la palabra el señor Consejero.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Señor Presidente, señorías.
Gracias a todos los partidos políticos presentes en la cámara por el tono en que han intervenido con respecto a la explicación presupuestaria que he hecho para el año noventa y tres, y el grado de ejecución del presupuesto del noventa y dos. En cada comparecencia que hago, explicando presupuestos o no, siempre tengo que explicar... Parece, una vez más, que es mi forma de ser, que ya se me conoce que soy así, y he evolucionado bastante para como, con mi genio, me pide el cuerpo muchas veces; pero yo creo que hay que darle un picante y una mordacidad al parlamento, y aquí es donde tenemos que hablar. Y es bueno que aquí lo que yo diga parezca, por parte de ustedes, que no es bueno, o, si es bueno -y eso lo sentiría más-, pues realmente no lo quieran reconocer porque están en una postura adoptada así, de oposición frontal. Porque creo que no hay ningún partido político que gobierne en ningún sitio que haga todo mal, y yo todavía tengo que oírles a ustedes que digan aquí por lo menos una cosa, dos, tres, de las doscientas ochenta, que haya hecho bien el Departamento de ordenación del territorio, y algo habrá hecho bien, y estoy para hacerlo bien, por otra parte. Yo creo que así es como construimos en la política; deberíamos ser sinceros y decir: esto, sí; esto, no; esto, no; pero con esta alternativa, que nunca las oigo. Y siempre utilizamos más las vías de los medios de comunicación que el parlamento para, lógicamente, intentar confundir a la opinión pública. Y no es bueno porque la clase política, al margen de la idea de corrupción generalizada en la opinión pública, con estos comentarios lo que hacemos es desmerecer, que, realmente, cuando nos encuentren por la calle casi nos desprecien como colectivo, y eso no es bueno. Y por eso deberíamos empezar un poco a construir aquí dentro, y a debatir hasta el final. Yo insisto, ustedes seguirán insistiendo.
Tiene algunas notas del interventor -que lo dudo- del día 15 de diciembre... Yo tengo una ejecución presupuestaria, y yo le voy a pedir al señor interventor que sea capaz de venir aquí a hacer unos cursillos parlamentarios de seguimiento presupuestario, de unos y de otros. Porque este Consejero ya una vez explicó su grado de ejecución presupuestaria con una pizarra, cuando era Consejero de Industria, y alguno de ustedes lo recuerda, y cuando lo expliqué con una pizarra -pero no borrando, ¿eh?, pasando, así, hojas-, al final decía que era ciento un mil no sé cuántas pesetas; todos, ante la evidencia y la explicación gradual de cada cosa, dijeron: tiene usted razón, señor Consejero; vayan al Diario de Sesiones. Y espero, no obstante, si el interventor no da cursillos de seguimiento presupuestario, que este Consejero, si ustedes lo tienen a bien, aprovechando una de las comparecencias voluntarias que ha pedido, les explique el grado de ejecución presupuestaria, y me comprometo a hacerlo con una pizarra, pero si todos nos sentamos antes con la objetividad de entender con el mismo lenguaje lo que estamos explicando.
Porque, por poner un ejemplo muy tonto, pero muy práctico, normalmente una carretera -insisto- no se paga hasta que no se ejecuta. Ahora bien, si quieren ustedes que nos parezcamos a algunas adjudicaciones del Gobierno central, que, para cumplir fielmente con el cien por cien del presupuesto, permite a contratistas acopiar materiales a pie de obra, certificar los ingenieros, y poder cubrir a final de año la ejecución presupuestaria, díganmelo. Pero normalmente hasta que no se construye, hasta que no se hace, no se paga. Y que conste que eso lo hacen, y será legal; pero aquí no lo hacemos ante la confianza que demuestra el empresario. Y no estoy dudando de que no sea legal; si no, no se podría hacer. Pero se está engañando la ejecución presupuestaria, porque el tramo de carretera no está terminado: están los acopios de materiales. O sea, que hablemos el mismo lenguaje.
En segundo lugar, cuando alguien tiene la intencionalidad política, si nos lo creemos, de firmar un convenio de veinte viviendas -como ponía antes un ejemplo-, de momento es un documento que produce un documento "A", de autorización; cuando el ayuntamiento está con el proyecto hecho, y ese proyecto sale a concurso y lo va a adjudicar, es cuando nos comprometemos formalmente con un contrato. Y es que, entonces, ¿qué pasa?, ¿que no vamos a comprometer ni vamos a contraer, por veinte viviendas, ciento treinta millones, y si, en todo caso, no lo ha ejecutado el ayuntamiento, no vamos a pasarlo al año siguiente y estará aquí como autorizado aunque no esté pagado? O sea, ¿el contraído de veinte viviendas en un pueblo no es gestión política con ese ayuntamiento? Bah, en fin... Ya digo que hacen falta cursillos, que aquí no les vamos a convencer, y, sobre todo, hace falta que mucha de la gente de esta Comunidad Autónoma gestione, que si todo el mundo pasase por la gestión -si es buena la alternancia en el poder-, al final sabrían que, realmente, hablando entre gestores, uno se entiende.
Por otra parte, querido Isidoro Esteban -y ya sabe usted que digo "querido" de verdad-, usted ha querido decir antes que cuando yo he dicho que tengo pendientes comparecencias voluntarias en estas Cortes... El día que me daban ustedes la comparecencia voluntaria, de alguna forma, no aporté información suficiente el día anterior, y, de mutuo acuerdo, suspendimos esto para febrero. Pero yo quiero dejar aquí sentada una cuestión: respetando, por supuesto, a mi buen amigo y compañero José Angel Biel, Consejero de Presidencia, ustedes le sugirieron que yo facilitara información, la que pudiera, antes de mis comparecencias voluntarias, para lógicamente estar preparados previamente aquí cuando yo compareciera. Pero, curiosamente -y en política me van ustedes enseñando-, cuando el señor Arola, usted, o quien sea, interpela a un miembro del Gobierno, se publica en las Cortes finalmente esa interpelación con una exposición de motivos, la pregunta que quieren realizar; pero nunca le cuentan a la Consejera de Cultura o al Consejero de ordenación del territorio qué le van a decir en la interpelación. Eso es el debate parlamentario: no se lo cuentan, sorprenden al señor Consejero en aquel momento los nuevos argumentos, y eso es debate parlamentario. Y ustedes tienen que prepararse, con lo que yo acabo de decir, en un receso, y a volver a venir. O sea, que cuando un Consejero pide... está en su derecho, y aunque yo no facilitara información previa cuando pido comparecencias voluntarias, estaría en mi derecho, con el Reglamento en la mano, porque el que la pide es el Consejero; estaría en mi derecho. Otra cosa es la cortesía parlamentaria, el que yo pueda o no facilitar documentación previa, pero, en el fondo, no he comparecido hasta la fecha porque ustedes, en realidad, querían tener documentación previa -en algún caso determinado, que hay muchas más comparecencias pendientes-; yo ya quise comparecer para explicar las empresas públicas y sus proyectos.
Usted se ha ido refiriendo en un picoteo, señor Esteban, a varios temas, y a todos no le contestaré, porque, indudablemente, nos van a dar aquí las cinco de la tarde. La estación de autobuses de Huesca, señor Isidoro Esteban, no depende inicialmente de la capacidad -o no- económica de mi Departamento, depende de una modificación puntual del plan general que el Ayuntamiento de Huesca hace dos meses que nos ha remitido al Departamento de ordenación del territorio y que la hemos devuelto por falta de documentación, no por otras historias que se han querido publicar en un momento determinado. Y la de Sabiñánigo... pregunte a su correligionario Antonio Calvo cómo está, y le dirá que hasta hace un par de meses no ha conseguido don Antonio Calvo la expropiación de los terrenos de Renfe, cedidos al Ayuntamiento de Sabiñánigo. Hasta que no tiene uno el dominio sobre el terreno no se puede encargar el proyecto, y eso le corresponde a don Antonio Calvo con Renfe, y hace un par de meses que lo ha terminado. Hay que saberlo todo, que no depende uno de las intencionalidades políticas en un Departamento, sino de cómo el resto de las Administraciones se coordinan con uno para, finalmente, hacer actuaciones.
Ha dicho usted cuatro o cinco cosas que no me ha dado tiempo a tomarle... que no he puesto en marcha... más bien parecían documentos de carácter técnico. Si usted se lee la Ley de Prdenación del Territorio, es con el desarrollo del reglamento cuoando verá la luz... Y tenemos seis meses, me parece que por mayo estará terminado, según la aprobación de la Ley por estas Cortes, el reglamento de la Ley de Ordenación del Territorio.
Usted ha dicho: cómo se puede manejar la opinión pública, y no me acuerdo qué porcentaje ha dicho que hemos subido en gratificaciones, un 160%, no sé qué ha dicho usted. Dieciséis millones, hemos subido dieciséis, no el 160% de quinientos millones, dieciséis millones; no diga 160% de quinientos millones, que podían ser ochocientos. Dieciséis millones, eso es lo que hemos subido, con seis direcciones generales y un secretario general. Pero sea usted objetivo: no el 160%, dieciséis millones y ya está.
Gastos de personal. Si se aplica, lógicamente, el convenio de esta Comunidad -que no es el convenio del Gobierno central-, nosotros, amortizando plazas en el presupuesto del noventa y tres, bajamos un 4%. Haga números. En segundo lugar, no aumentamos gastos de personal. Usted es muy listo, al bajar las inversiones -que, lógicamente, usted ha dicho que yo lo diría- que van a las empresas públicas, lógicamente, el gasto de personal que se mantiene con respecto a las inversiones sube, pero no subimos gasto de personal.
Por cierto, yo les espero el próximo viernes para hacerles algunas preguntas también de contraste con otras instituciones públicas. Ustedes saben que yo soy Consejero de este Gobierno y que, para que no me lo pregunten, tengo -me parece- tres millones y medio de gastos de representación; me han sobrado setecientas veintiuna mil pesetas; no obstante, tengo que decirlo. Puedo nombrar a tres personas de confianza, como ustedes saben, criticadas por ustedes. Ocupo un puesto, por lo menos el que nos ha dado el protocolo en la Comunidad Autónoma, y pienso, de alguna forma, aquí, para esclarecer ante la opinión pública cómo funcionamos las administraciones, contrastando puestos protocolarios: presidencia de una institución en relación con un Departamento autónomo; cargos de confianza de esa persona, de ese presidente, con un consejero, cuántos contrata a dedo y cuántos contrato yo; cuántas escoltas tiene, si es que le hacen falta y a mí no... y me estoy refiriendo a un presidente de diputación provincial. A ver si empezamos a aclarar exactamente en este momento cuánto personal de confianza puedo contratar yo, como Consejero de Ordenación del Territorio: tres asesores, como ustedes cuando estaban gobernando como socialistas, tres. Que yo sepa, el actual jefe de la oposición me parece que ha contratado a veinticinco o a veintiocho, y tiene escolta (le hará falta, a mí no, y desde luego no será por mi agresión, ni física ni personal). Así que a ver si aclaramos realmente en los debates presupuestarios, que todos los dineros públicos son de los aragoneses o provienen de ellos, directa o indirectamente, qué hacemos los hombres públicos a la hora de gastar el gasto público y de qué nos rodeamos, de qué fantasmería nos rodeamos en un momento determinado, que a mí no me hace falta.
Entonces, usted dice: dieciséis millones de gratificaciones; no tiene nada que compararse con lo que sube y tiene de gastos de protocolo y, de alguna forma, de "parabandulia" el actual jefe de oposición (me acabo de inventar una palabra nueva: "parabandulia", que no debe estar ni en el diccionario).
No vamos, en absoluto, a dar vacaciones a ningún personal del Departamento de ordenación del territorio, ¡faltaría más! Otra cosa es que me gustase obtener mayor productividad en su conjunto, digo en el conjunto de la Comunidad; pero estoy, en el conjunto también, bastante satisfecho de las actuaciones de los técnicos, directores generales y personal de mi Departamento.
Cuando luego llegue el apartado de las empresas públicas, indudablemente, ya le explicaré cómo combinamos la cuestión. La Dirección General de Carreteras, aunque ahora tenga poco presupuesto para ejecutar con todo su personal y con todos los técnicos, no se va a pasar a la empresa pública, va a colaborar, va a gestionar, va a certificar; y, de acuerdo con el plan general de carreteras, la empresa pública, en todo caso, adjudicará, con muy poco personal. Exactamente igual que en obras hidráulicas. Y no dejo de decir aquí algo que todavía pienso, y estoy en mi derecho, que, una vez que empiecen a funcionar las empresas públicas, puede ser que someta el Departamento a una reestructuración, pero ahora no voy a anticipar algo de lo que todavía no me marca las pautas el funcionamiento de las empresas públicas. Si es necesario, lo someteré a una reestructuración, y la estoy estudiando; pero llegará el momento en que se hará, no hay que precipitarse.
Usted ha dicho que mi Departamento se estaba convirtiendo en una diputación regional. Lo dije yo en el mes de agosto, en que estaban todos ustedes de vacaciones, y no me contestó ninguno. Aprovechando que yo estaba aquí, más o menos de guardia, fui poniendo ejemplos, de vez en cuando me dijeron "vigía del Somport" y otras cosas... que, por cierto, fíjese, parece que era una premonición; la culpa no es de nadie, pero hay que seguir vigilando el Somport, porque está ahí todavía parado, por problemas políticos franceses, indudablemente, por la campaña electoral, pero bien le viene al Gobierno español, que todavía no compromete el dinero, aunque quiere, ¿lo entienden?, y lo puede destinar a otras cosas. O sea, que hay que ser vigilante, expectante. Lo digo simplemente con un tonito constructivo en la cuestión. En agosto, además, se puede trabajar muy a gusto, porque se permite ejecutar mucho, no hay tanta parafernalia que cubrir en un momento determinado.
Por lo tanto, mi Departamento -no lo diga usted- lo han convertido ustedes, no ustedes, los alcaldes... y a pesar de que a muchos alcaldes se les pide desde algunos partidos políticos que no vengan, como se dijo en un primer momento, o que ahora acosen. En un momento determinado les dicen que no vayan para que no pueda vender el Gobierno aragonés -fíjese usted qué filosofía, ¿eh?- que hace cosas con ustedes, pero ahora, recientemente, se les dice que acosen, que presenten proyectos para que los agobien, para que se vea que realmente no podemos actuar, porque en sus filas, desgraciadamente, funciona el miedo, aparte del respeto, funciona el miedo en algunos casos muy determinados.
Por supuesto, yo he dicho el primero de todos que el Departamento de ordenación del territorio no es partidista ni puede serlo, el territorio es de todos; pero me he limitado esta mañana a hacer una comparecencia aquí para ver si trataba de explicar a la opinión pública, a través de mi comparecencia, que cuando ustedes acusan de sectarismo y partidismo al Gobierno aragonés, y eso va también por el señor Maestro, que ahora está ausente -lo siento-... Realmente he hecho ese escandallo, esa distribución de inversiones por municipios, para que se vea que no actuamos así, pero que seguiremos actuando en consecuencia con objetivos de interés general, comarcalizadores, potenciadores de generar riqueza, de fijar la población, porque ése es el objetivo de ordenar el territorio. Pero, claro, si de paso ustedes no lo reconocen y confunden a la opinión pública diciendo que somos sectaristas, alguien tendrá que pararse y explicar que no es así. Y, desde luego, les espero el viernes, yo les espero el viernes para que cuando surja el debate a la totalidad, que ya les anticipo que saldré, si acaso, estos datos los tendré mucho más madurados y contrastados; lo digo para que manejen los datos con objetividad, por si acaso.
Pacto del Agua... y decía usted: el embalse de la Tosquilla. Sobre el embalse de la Tosquilla se tomó el acuerdo en el Consejo de Gobierno anterior a la formalización de la resolución de las Cortes de Aragón, porque -quede bien claro en esta comparecencia mía- se ha denominado "Pacto del Agua" a una resolución de las Cortes de Aragón que se adoptó por unanimidad en esta cámara, pero todavía no hay un "pacto del agua" entre ambas administraciones. Esa resolución nos aboca a algo que queremos, que es firmar convenios sectoriales, o globales -ojalá-, globales se dijo en un momento determinado, entre ambas administraciones, y hasta la fecha no ha sido posible, aunque hemos mantenido conversaciones. Pero también quiero dejar claro aquí que no hay nada secreto que hayamos vendido a cambio de nada.
Recientemente, y lo digo porque así viene bien para todos los grupos políticos, un grupo extraparlamentario, la Chunta Aragonesista, viene denunciando si hay un pacto secreto, porque este Consejero se reúne con don Joaquín Molins recientemente en la CHE: para qué se habrán reunido, qué no nos han contado... Pues fíjense ustedes, yo estoy en política y ustedes saben o piensan que me puede gustar salir en la foto. Ese fue un acuerdo entre Antonio Aragón, presidente de la CHE, que nos convocó; Joaquín Molins, consejero y homólogo catalán; yo, en nombre del Gobierno aragonés, y las veintidós empresas con las que había que acordar, en documento administrativo, la expropiación de Piñana. Por no ofrecer a los medios de comunicación una hora y cinco minutos que nos costó firmar, y que aún tardó don Joaquín Molins media hora, nos reunimos para un acto administrativo, para desarrollar el acuerdo que alcanzaron Eiroa, Borrell y Pujol con Piñana. Para eso nos reunimos, para firmar un montón de protocolos y acordar cuánto le corresponde a cada empresa, que en total son mil doscientos millones. Por cierto, está resuelto -usted, señor Maestro, lo preguntaba antes- con una modificación presupuestaria, como yo prometí que se haría en un momento determinado. Para eso nos reunimos. Probablemente, si convocamos a los medios de comunicación para explicar que otra vez revendemos el acuerdo de Piñana, alguien nos hubiera podido decir que estábamos haciendo un exceso de apariencia pública para algo que ya estaba, en principio, acordado, no sé en qué mes, que no me acuerdo ahora mismo, entre el señor Pujol, el señor Eiroa y el señor Borrell. Así que a ver si, por lo menos, por eso no decimos que estamos sembrando de dudas e incertidumbre a esta Comunidad Autónoma, que algo bueno se hará, que a ver si avanzamos entre todos.
Con respecto al Pacto del Agua, no obstante, quiero dejar dichas algunas cosas, o quizá una, por no volver al tema del Pacto del Agua, que costó tantísimo tiempo pactarlo y acordarlo. Yo no recuerdo en ningún momento, ni directa ni indirectamente, ni oficial ni extraoficial, que alguien estuviera acordando, a pesar de los excedentes del agua y de lo que puede o no llegar a sobrar con las piezas de regulación que hay que hacer en esta Comunidad Autónoma, que se podrían llegar a iniciar trasvases del Ebro antes de culminar las obras de regulación propuestas en el Pacto del Agua. Ya digo que ni directa ni indirectamente, ni por activa ni por pasiva, ni por ningún pacto secreto y, por lo tanto, en ese sentido, que quede bien clara mi total y rotunda oposición, en nombre del Gobierno aragonés: no vamos a admitir, aunque la Ley de Aguas diga que el agua es de todos los españoles, en absoluto que se inicien de momento comunicaciones. Y eso que se está haciendo perfectamente bien: coinciden años de sequía, momentos delicados, yo siempre he dicho que hay que dar de beber al sediento: se da; ahora, llevar el agua a otros sitios para llevar industrias y que en vez de seis millones de catalanes haya ocho, y que en vez de treinta parlamentarios, cincuenta, y en Aragón en vez de trece, nueve, para que encima no tengamos peso en Madrid, no. Porque las personas dan, lógica y desgraciadamente, al final representación política y parlamentaria, fuerza y presión para inversiones del Gobierno central en cada comunidad autónoma, y hasta ese punto este Consejero y este Gobierno no lo van a permitir.
Señor Esteban, voy a empezar con las empresas públicas y, sobre todo, dejando las respuestas muy claras. Usted ha dicho algo así como: quitar patrimonio para entregar a la iniciativa privada. Le agradeceré mucho si me pone un ejemplo de qué patrimonio quitamos para entregar a la iniciativa privada, en todo caso, ponga usted el ejemplo.
No voy a entrar en debate con usted, señor Pina, le pido, en todo caso, que sea cortés conmigo y que no haga comentarios -ya que no se lo dice el Presidente- por educación parlamentaria.
Las empresas públicas, que se crearon en el año noventa y dos y que ahora tienen plan de infraestructuras, se han creado para -valga la redundancia- crear infraestructuras básicas, no caprichos electorales. Si ustedes repasan las inversiones previstas en ambas empresas públicas con objetividad y quieren ser, de verdad, ecuánimes a la hora de opinar, de los cincuenta y un municipios de más de dos mil habitantes a depurar, treinta y uno (y lo siento por hacer esa comparación, pero son los de más de dos mil habitantes, que una directiva comunitaria nos obliga a hacerlo antes del 2005, para ser también comunitarios en ese aspecto), realmente, treinta y un municipios son del Partido Socialista. Pero igual da, es que hay que hacerlo con los municipios de más de dos mil habitantes, y habrá que continuar con los de entre mil y dos mil, y los municipios de cuatrocientos habitantes que sean turísticos, porque en un momento se convierten en mil doscientos. Yo preguntaría si ésa es la primera prioridad de un ayuntamiento, del signo que sea, porque debería serlo, para preocupar a los de medio ambiente, una de las primeras prioridades, junto con las viviendas e infraestructuras, creo yo. Porque, claro, ¿qué alternativas tendrían ustedes de proyectos que no sean los que en principio he querido iniciar yo ahí, como Consejero, en esas empresas públicas? Si no son necesarias las carreteras, la depuración de aguas residuales -inicié planes en Sobrarbe y Ribagorza, con habitantes por debajo del Sahara español, con independencia de la hermana provincia de Teruel-, si no es bueno empezar a hacer un plan de protección especial del Pirineo, que está acabado y que lo presentaré en estas Cortes, que me comprometí con ustedes a mirar, en todo caso, dirán qué otros objetivos básicos son prioritarios, pero siempre con alternativas.
Pero yo quiero aprovechar para decir que estamos hablando de un presupuesto de noventa y cinco mil millones de pesetas para el año noventa y tres, que en teoría hemos bajado diez mil millones de pesetas con respecto al año noventa y dos, pero eso es pura teoría, es que hay que ser sinceros, pura teoría; hemos bajado diez mil de verdad, en el cartel, pero bastante dinero en materia de inversiones, porque hay que empezar a amortizar la deuda y los intereses, y esta Comunidad Autónoma creo que no debe pararse, salvo que ustedes lo crean, no debe pararse. Porque si, por no endeudarnos hasta el año noventa y nueve, noventa y ocho, noventa y siete, dejamos de depurar las aguas residuales o dejamos de hacer carreteras o planes en el Pirineo, para que los hagan ustedes si hay alternancia en el poder, para entonces más retraso y más costo. A ver si somos objetivos en la crítica, porque -¿endeudar hasta el año noventa y nueve?- la Generalidad, con la Ley de Contratos del Estado en la mano y con la misma ley de presupuestos, hasta el año 2002 tiene compromisos contraídos; igual piensa Pujol estar hasta el año 2002 o 2006, u otro, pero allí al PSC catalán no le oigo, y leo todos días La Vanguardia, y allí alguna cosa saldrá, no le oigo criticar a la empresa de infraestructuras GISA, tanto como ustedes, en principio, se han cebado aquí.
Que yo sepa, aparte de todo, en este territorio hemos estado manejando datos recientemente todos, y hay retrasos históricos, de unos y de otros, de inversiones en esta Comunidad. Con recordar solamente los doscientos mil millones que pretende, si se cumple el Pacto del Agua, invertir el Ministerio de Obras Públicas y Transportes en obras de regulación; con recordar, y a veces se ha dicho en esta cámara, la mejora de calidad de abastecimiento de aguas en la Comunidad: ciento dieciséis mil millones; con recordar la inversión de veintiséis mil millones en depuración de aguas residuales, o veinte mil en espacios contaminados; con recordar los cien mil millones de carreteras que teníamos que invertir, más los de las diputaciones provinciales y otros municipios; con recordar, si se hace, el tren de alta velocidad Madrid-Lérida pasando por Zaragoza -noventa y cinco mil millones-, estaríamos acercándonos, con otros aspectos o facetas de otros Departamentos, a qué habría que invertir. Lo he dicho más de una vez, lo estoy diciendo con datos: casi un billón de pesetas en esta Comunidad Autónoma para no perder el tren y poder ser competitivos. Luego, ¿nos paramos en invertir en obras prioritarias de esta Comunidad Autónoma?, ¿esperamos a que lo decida otro Gobierno, porque solamente podemos endeudarnos aparentemente hasta mañana o pasado mañana? No.
Usted decía, señor Esteban: el acuerdo del Consejo de Gobierno decía que el Departamento de ordenación del territorio se hará cargo cada año, si no -eso no lo pone- se eleva el presupuesto del año noventa y tres, de la partida presupuestaria correspondiente a la amortización de este plan de inversiones que ahora se pone en marcha, y está claro: se me permite llegar a ese tipo de plan de infraestructuras, para ejecutar en dos años y pagar en seis, si asumo desde mi Departamento el compromiso económico, lógico, de hacerme cargo de la partida presupuestaria que corresponda en cada año. Es natural y solidario con el resto de Departamentos de la Comunidad Autónoma. Ahora bien, también le digo que si el presupuesto del año noventa y tres subiera, por lo que fuera, en su conjunto, lo que fuera, y ahí me tocan tres o cuatro mil millones, ésos irán a disminuir también la parte que me toque de amortizar; porque en esta Comunidad Autónoma todavía falta el debate de Ley de transferencias, sí o no, pacto autonómico, pero si al final, por la razón que fuera, se van asumiendo algunas competencias, habrá más techo presupuestario y habrá más techo de endeudamiento, y hay que anticiparse, hay que tener visión de futuro y no mente corta ni estrecha.
Por otra parte, cuando hay crisis económica, y eso nos lo está diciendo nuestro Presidente del Gobierno de España -que a mí también me gusta hablar de España, no solamente ustedes ahora con la nueva corriente-, nuestro Presidente del Gobierno de España nos está hablando de una crisis económica derivada de una crisis económica financiera mundial, europea o mundial en su conjunto, que indudablemente afecta al Fondo Monetario Internacional, a la OCDE, la Comunidad, el yen, el dólar y el marco, es que hay una sugestión real, hoy, en la calle de que estamos en crisis, y yo creo que todavía es más psicosis que realidad, que esa realidad llegará; entonces, cuando no hay, en principio, iniciativa privada que realmente esté sugestionada para invertir, que no sabe si va a tener o no regularización o flexibilidad de plantilla, que no sabe qué va a poder hacer con un contratado si lo coge de nuevo, que hay una cierta incertidumbre de futuro, indudablemente las administraciones públicas deben ser locomotora de las iniciativas privadas, para que no se pare. Y, curiosamente, me sorprende que, cambiando de portavoz socialista, y estando yo ahí como Consejero de Industria, hace dos años don Antonio Sierra motivó un debate conmigo donde, hablando de la socialdemocracia, que coincidimos, me dijo en aquel momento que usted estaba encantado de que yo coincidiera con una filosofía socialista de creación de empresas públicas, o mixtas -también está en el Diario de Sesiones-. Luego, entonces -me imagino-: ¿es cambio de portavoz, cambio de postura?, ¿es que uno ya no cuenta dentro tanto como contaba antes, o son posturas genéricas para atacar?
Consejos de administración. Que quede claro: no se han creado estas empresas públicas para crear poltronas, como decimos todos cuando estamos en la oposición, de reparto de poder entre PAR y PP, para crear consejos pagados; son empresas públicas que tienen, en cada una de ellas, dos directores generales -en el caso de Prosyva, Ordenación del Territorio y Suelo y Vivienda-, el secretario general de mi Departamento y yo, como presidente, y un secretario general de la calle, don Juan Antonio García Toledo, que es el único que, si asiste, cobra. Y en Instra está el de Obras Hidráulicas, está el de Carreteras, el secretario general y el presidente de esa sociedad, que es el Consejero, y nada más. Son brazos ejecutores del Departamento, y la gente que entiende está dentro de las empresas públicas, para que tengamos coordinación entre los proyectos de ordenación del territorio e infraestructuras y la ejecución de las propias empresas públicas, que son las que ejecutan después de que un equipo de trabajo funcione y planifique. Aclarar que no ejecutan por sí mismas, sino que son el vehículo, con la Ley de Contratos del Estado, y con claridad y publicidad, son las que adjudicarán en el momento oportuno, porque todavía no hemos adjudicado nada.
Y le anticipo una cosa aquí hoy, señor Esteban: este Gobierno -y no digo para cuándo- está pensando, con la Ley de Contratos del Estado, y por mucha reforma que ahora nos anuncian en el propio Congreso de los Diputados, confeccionar una fórmula de adjudicación incontestable, probablemente pionera en toda España si antes no se lanza otra comunidad autónoma, precisamente para evitar de alguna manera el que en estos momentos estemos todos en el filo de la navaja de la opinión pública, aunque no esté publicada.
Otro dato más: no sustituyen al empresario, que también están queriendo vender eso, lo complementan; la sociedad lógicamente saca a concurso y adjudica a una empresa privada, no compramos ni camiones, ni excavadoras, ni nada parecido, ni contratamos personal, por favor.
Esperen, esperen, que no he terminado, que este apartado me encanta.
Control de las empresas públicas. La Ley de Hacienda lo permite, si no, no estarían constituidas; segundo, el consejo de administración de las mismas; tercero, el Consejo de Gobierno; cuarto, el interventor; quinto, si quieren ustedes, o en primer lugar, las Cortes de Aragón, que pueden mandarnos a convocar, y ya me comprometo aquí, ahora mismo, para que lo apunten, a que cada tres meses este Consejero comparecerá para explicar la gestión de las empresas públicas -si me paso dos días, no me echen la bronca-. Cada tres meses compareceré aquí para explicar el grado de ejecución y de obligación de las empresas públicas, me comprometo aquí; claro, si después no estoy, yo no podré venir, me refiero a si dejo de ser Consejero, pero, si soy Consejero, está clarísimo que vendré cada tres meses. Y, por supuesto, hay un Tribunal de Cuentas al que ustedes tienen mucha simpatía cuando aprovechan los informes contra el Gobierno, y nosotros lo aprovechamos como oposición cuando van contra ustedes, está clarísimo.
Bien, y ahora, aparte de que el señor Borrell en un momento determinado ha apoyado este tipo de empresas públicas, como buen catalán le encantó la que se puso en marcha, GISA, a pesar de que realmente -insisto-, como no es del mismo partido, no lo puede decir; pero a él, como Ministro gestor, le encantaría tener empresas como éstas para poner en marcha. Me lo ha dicho a mí, pero no hace falta que lo diga él. Yo no sé ustedes en qué fuentes ideológicas beben y qué información tienen de verdad contrastada en su partido, porque se ha aprobado recientemente en el Congreso de Diputados una Ley de reforma de la administración que impulsará agencias y sociedades estatales, inspirada y propuesta por el Gobierno socialista recientemente. Por no leer aquí mucho, dice: "Objetivo: mayor eficacia en la gestión del gasto público a través del aumento de la autonomía y capacidad de decisión de los gestores". Y lo ha aprobado el Gobierno socialista recientemente para ordenar el sector público, y quiere cargarse los institutos autónomos, para ir a sociedades donde confíe más en los gestores, aunque se les controle, para agilizar la Administración y ser eficaces, el Gobierno de ustedes, que es el nuestro a nivel nacional.
Y, además, dice aquí una cosa muy curiosa: "seiscientos altos cargos, consejeros en las empresas públicas". Les puedo empezar a repasar la cantidad de directores generales que están en las empresas públicas, para compensar -como materia gris que son-, y algunos muy importantes, y se les irían con su sueldo; así justifican el pagarles, que lo entiendo, si no, se irían a la empresa privada para poder tener un sueldo más acorde con su capacidad. Y seiscientos altos cargos están cobrando millón, millón y pico cada año por asistir, pero algunos están en cuatro o cinco consejos, y en seis, cosa que aquí de momento no sucede. Díganme ustedes un caso que pudiésemos poner, y estarían encantados, probablemente, los directores generales, porque están cobrando poco; pero de momento la decisión es no poner ningún sueldo. Ustedes ya están funcionando con consejeros con sueldo: seiscientos altos cargos. Y, bueno, la verdad es que ya esto es el colmo. Por eso le digo que a ver si, por favor, se coordinan y se ponen de acuerdo en el discurso de gestión y filosófico-ideológico cuando vengan a esta cámara y quieran confundir a la opinión pública.
Acaba de reeditarse el Sector Público Español, segunda edición del Sector Público Español, a la que hacía referencia el portavoz del Partido Aragonés, y aquí (usted probablemente no tiene copia de este libro, ¿no la tiene, verdad?, pues se la haré llegar -le irá bien- para el viernes), yo ya le anticipo algo ahora del Sector Público Español: cuatrocientas noventa y ocho sociedades mercantiles como estas nuestras, en infinidad de sectores, pero, como hoy no me quiero extender, ¿sabía usted que las galletas Artiach las fabrica el Gobierno central?, son galletas socialistas, es una empresa pública mayoritariamente del Gobierno central, del Estado que somos todos, Galletas Artiach. Pero, fíjese: Destilerías Cazalla, S.A.; les debe de gustar a ustedes el anís fuerte, ¿no? Pero es que lo pone aquí, oiga, que es que esto lo presenta, en la segunda edición lo presenta, nada menos y nada más -un hombre que respeto muchísimo- Antonio Zabalza Martí, Secretario de Estado para Hacienda, y aquí explica las bondades del sector público. Pero, curiosamente, fíjense que ustedes piden clarificación de actuación de las empresas públicas de este Gobierno, y yo me comprometo aquí cada tres meses a venir, y fíjese si es curioso, en Galletas Artiach; en Nabisco Europe BV; en Marbú, S.A.; en Destilerías Cazalla, S.A.; en Tabacalera, S.A.; en Nabisco Portugal; en Nabisco Brands, y así hasta en doscientas, hay algunos asteriscos que dicen: "capital y reservas" -en aquel momento-, "ventas netas" -en aquel momento-, "plantilla", y en estas que les acabo de nombrar hay tres asteriscos, y va uno al asterisco y dice: "dato no disponible", ¡ah! Lo publica el Gobierno central, Secretario de Estado para Hacienda. Ustedes piden clarificación de actuación de las empresas públicas, yo me comprometo aquí cada tres meses, las acabo de poner en marcha; y ustedes, que tienen cuatrocientas noventa y ocho, en más de doscientas: "dato no disponible" ni de capital, ni de reservas, ni de personal, ni de ventas. Hombre, por favor, hagan el favor de ponerse de acuerdo -insisto- a nivel de partido, de Gobierno, de ser coherentes a nivel nacional, porque yo entiendo que en el sector público habrá cosas que funcionarán y otras no: ahí tenemos que entrar, en el debate de sí o no, funciona o no funciona, es prioritario o no es prioritario, crea mucho gasto corriente o no lo crea. Pero, hombre, aquí hay empresas con cinco mil, seis mil, siete mil trabajadores, que ya querríamos alguna empresa pública aquí por lo menos de éstas, como compensación a no sé qué, pero me voy a reservar para el viernes, que será muy gracioso, más gracioso, pero cuatrocientas noventa y ocho empresas públicas, tres billones quinientos mil millones de pesetas que manejan, y alguna de las empresas públicas del INI con un presupuesto que supera al de la Comunidad Autónoma de Aragón, y, normalmente, nadie se entera si comparecen o no en las Cortes, en el Congreso de los Diputados, porque ésa es otra, ¿eh?, entérese de cuándo comparecen de verdad todos estos presidentes, que primero pertenecen al INI, el INI al Ministro de Industria, y el Ministro de Industria al Gobierno español. Pues entérese si las empresas pequeñitas, pero mayoritarias del Gobierno socialista, del Gobierno central, del Estado, que somos todos, si comparecen de verdad en el Congreso de los Diputados.
Querido portavoz del Partido Aragonés, gracias, gracias por la defensa y el apoyo que realmente has manifestado en mi intervención como Consejero.
Siento que no esté el representante del Partido Popular, pero espero que se le haga llegar también mi agradecimiento, porque de verdad y francamente ha hecho una magnífica exposición del contraste presupuestario del noventa y dos, noventa y tres, descendiendo en cada uno de los apartados y, además, coincidiendo en ser un presupuesto inversor, realista y progresista -ha dicho él-, que me alegro muchísimo que así coincida, y ha dicho: para no pararnos, para seguir avanzando, para seguir haciendo cosas. Gracias al Partido Popular por ese apoyo que ha dado.
Señor Maestro, gracias también. Yo, de verdad, me alegro de que usted me haya dicho que parece que esto era un debate en que hacemos actuaciones partidistas. Ya le he aclarado, y le pido disculpas, le he aclarado que era simplemente para que, de alguna manera, se supiera que no estamos actuando ni trabajando sectariamente, pero que ordenar el territorio es una cosa de todos, de coordinación entre distintas administraciones, y ¡ojalá!, insisto, la Ley se hubiera aprobado por todos. De momento, trataremos de que funcione sin invadir ni atropellar a nadie; pero, desde luego, no hemos hecho precisamente actuaciones desde la ordenación del territorio fijándonos en los partidos políticos, sino porque el sentido común, la objetividad para fijar la población o para comunicarnos, es lo que nos marcaba en aquel momento las líneas de actuación.
No obstante, usted decía que si yo invadía competencias de otros Departamentos. Le ruego que hagan ustedes una cosa, ya sé que no la harán, ustedes y nosotros... Ordenar el territorio -eso es un debate largo en esta Comunidad Autónoma- es todo, hasta la Universidad, o sea, descentralizar la Universidad en Huesca o en Teruel es ordenar el territorio; ordenar el territorio es Aragón-Cazaril, y coordinarnos con el Gobierno central para que no invada un paraje, digamos, turístico o paisajístico, homologado en vías de interés cultural en el valle de Gistaín; ordenar el territorio es la autovía Villanueva-Nueno, y toda la autovía del eje norte-sur; ordenar el territorio es el tren de alta velocidad, aunque a usted le guste menos, y el Canfranc, por supuesto. Pero está clarísimo que, sin querer, mi discurso puede invadir aparentemente otros discursos de otros consejeros, sin molestarles, porque ordenar el territorio prácticamente es todo.
Tiene usted razón en algo -así voy yo a actuar con usted, como espero que actúen conmigo-, tiene usted razón en que yo prometí iniciar veinticinco kilómetros, si se podía, de cicloturismo en las tres provincias, y no lo hemos podido conseguir. Solamente como justificación le diré que seguimos en el empeño, hoy no lo he citado, que hemos -y eso es cierto, aunque le parezca mentira- avisado varias veces a la Federación Aragonesa de Ciclismo para hacerlo de acuerdo con ellos, y no hemos conseguido montar una reunión, no sé por qué. Incluso hay conversaciones con la CHE para utilizar caminos de la propia Confederación, para no tener que hacerlos nuevos, para gastar un poquito menos y que, realmente, solamente sea para carril, o sea, para bicis. Pero es verdad, tiene usted razón: aunque yo dije que podríamos empezar este año, no hemos podido empezar. Ojalá todos los políticos incumplieran dos o tres cosas de las cien que realmente prometemos o decimos, pero tengo que reconocerlo y es así.
Somontano del Moncayo. No es usted pesado, es simplemente reincidente. Usted está en su teoría, que yo la respeto mucho, dice que las pistas no llevan a ninguna parte; comunican unos pueblos con otros, ha sido decidido por unanimidad y por consenso de todos los alcaldes de la zona, y la verdad es que, salvo usted, que opina que no funciona bien, es comentario general, de verdad -y yo me alegro, porque no hay partidismos ahí-, que funciona magníficamente bien. ¿Que se puede mejorar?, puede; pero que es un ejemplo para adoptar en otras comarcas de la Comunidad Autónoma de Aragón, segurísimo.
Decía que el año pasado decía yo que en depuración de aguas residuales teníamos simplemente un estudio; ¡hombre!, para empezar hay que tener un estudio, para saber dónde se mete uno; en segundo lugar, hay que dar un paso económico importante, como creo que el Gobierno lo da poniendo siete mil millones, y yo le aseguro que es que no soy tan torpe de decir que las haremos en un año o en catorce meses, sin saber todavía con qué va a responder el Gobierno central, si con los fondos de cohesión, o la propia CHE, que ya he tomado contacto con ellos. Pero, hombre, un paso tan significativo como poner siete mil millones encima de la mesa para empezar a depurar las aguas residuales, usted tendría que haberlo aplaudido, y dice: primer paso importante en esta Comunidad Autónoma en materia de medio ambiente, con lo que hay que hacer, luego me echa un chorreo hasta donde quiera; pero usted diga de vez en cuando que se avanza un poquitín, depuración de aguas residuales, o planta de transferencias, que sé que está usted defendiendo la cuestión, o depósitos de seguridad en Zaragoza, y otro que probablemente pondremos en Monzón, y diga que el tratamiento in situ en materia de restauración del territorio va mejorando lógicamente el tratamiento de algunas toneladas en esta Comunidad Autónoma, aunque quede mucho por hacer; pero no demos la sensación ante la opinión pública de que no hacemos nada. Digamos lo que hacemos bien y critiquemos lo que hacemos mal, pero digamos que avanzamos, porque estamos avanzando, ¡hombre!

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Señor Consejero, esta Presidencia se permite recordar que queda el turno de réplicas, la respuesta a las mismas y el turno de preguntas. O establecemos todos juntos el continuar hasta tarde o limitamos el tiempo de cada una de las intervenciones.
Muchas gracias, señor Consejero.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Señor Presidente, yo voy a terminar ahora mismo y, además, le ruego disculpas, por una razón muy sencilla: hasta las cuatro menos cinco puedo debatir; a las cuatro salgo de viaje, si ustedes me lo permiten.
Bien, bueno, pues agradecer finalmente al representante del Grupo Mixto, don Emilio Gomáriz, su intervención, reconociendo que el presupuesto, inicialmente, pues es imaginativo; el inversor es progresista, es necesario.
Yo no puedo, de verdad, con toda sinceridad, lo comprenderá en este momento, el decir: bueno, todo esto a costa de que la agricultura, las "pymes" y la Universidad... Se lo digo con toda sinceridad: creo que está usted utilizando, creo que siempre con buen sentido común, su escaño. Puede negociar, lógicamente. Estoy hablando de mi Departamento; simplemente, le puedo dar un dato indicativo: hacer embalses de interés de la Comunidad Autónoma para reconvertir unas tierras de secano en regadío y que el producto se pueda comercializar es apoyar la agricultura. Quiero decir que, si usted quiere, no tengo inconveniente en que los embalses de interés de la Comunidad Autónoma los haga el Departamento de Agricultura, porque más de cuatro mil millones de pesetas será imposible insuflarle al Departamento de Agricultura; si lo importante es que se hagan las cosas, que las haga quien las haga. No creo que esté pensando usted en más de cuatro mil millones -pienso-, con el presupuesto actual, para mejorar en Agricultura, y quiero que sepa que esos cuatro mil millones -insisto- de regulación de obras hidráulicas son para mejorar unos secanos en regadío y poder sacar los productos al mercado y ser competitivos.
Nada más y muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
Vamos a dar turno de réplica, solicitando a los señores intervinientes la limitación estricta a cinco o seis minutos.

El señor Diputado ESTEBAN IZQUIERDO: Sí, señor Presidente, con su permiso.
La verdad es que es difícil en cinco o seis minutos el poder contestar no sólo a lo que corresponde a este Consejero, sino, como habla de muchas más cosas, pues, claro, a lo mejor hay que habilitar tiempo también para contestar y hablar de otros Departamentos, de otros Ministerios, de otros -en definitiva- instrumentos o elementos que no se corresponden estrictamente con el Consejero.
Mire, Consejero -y sabe que también le aprecio personalmente y hasta diría yo que admiro algunas de sus virtudes como persona, y de eso no le cabe a usted la menor duda-, hay algo que, desde luego, permítanos que no lo hagamos la oposición, porque eso usted lo hace y con creces, y es el darse autobombo de la gestión que realiza día a día, y no sólo de la que realiza, sino la que está por realizar, y esto es lo que le pierde en algunos momentos determinados. Eso es lo que nos lleva a una crítica mordaz, porque es nuestra obligación -y entiéndalo así-, a la hora de criticar, a la hora de debatir en este parlamento. La suya es una filosofía que entendemos, que respetamos, pero que tiene sus costos, y sus costos son los que luego nos propician a nosotros responder en algún momento.
Mire, hay un tema que, desde luego, es insalvable: el interventor de la Diputación General de Aragón no puede ser un instrumento que se constituya en muro de lamentaciones para no dejar hacer, pero del que tampoco se tenga, al menos, la garantía de la rigurosidad de la gestión de la Comunidad Autónoma. Si el señor interventor, quizás, lo hace muy sencillamente cuando nos facilita los datos a los miembros de la oposición, la verdad es que es un problema del señor interventor; si lo hiciera con mayor complejidad a lo mejor nos entenderíamos menos y entraríamos en vericuetos. La verdad es que están bastante claros; nosotros los respetamos porque..., y sin necesidad de la pizarra, la verdad es que hace poco tiempo que he asumido la responsabilidad en esta área y no conocía el método de la pizarra anterior. Pero, ¡hombre!, yo, desde luego, no es por nada -y permítaseme la presunción en este momento-, algo entiendo de los presupuestos; de otras cosas no: de carreteras posiblemente no sepa si están bien hechas, bien compactadas o no; pero, desde luego, el entender lo que nos ha facilitado el señor interventor de la Diputación General de Aragón es de cajón, y lo entiende hasta cualquier chico pequeño de la escuela: lo que está hecho y lo que está sin hacer. Lo que está hecho está ahí recogido; lo que está sin hacer está también recogido, y también está lo que está sin comprometer porque estamos ya en el año siguiente al del presupuesto que se aprobó con anterioridad, y son datos que cantan y que nosotros, desde luego, tenemos en cuenta, y permítasenos que así sea; no necesitamos, desde luego, cursillos.
Hay carreteras que no están terminadas y que, efectivamente, hay métodos legales para certificar acopios de materiales y demás. ¡Hombre!, a mí lo que me preocuparía, en cuanto a que no se paguen las carreteras hasta el final de su ejecución, es que en ese transcurso de ejecución -permítaseme la redundancia- pudieran sufrir y padecer modificaciones no siempre entendidas de incrementos de costes, de actualizaciones de precios o de modificaciones de proyectos; entonces, a lo mejor es que, claro, si estamos pagando puntualmente con certificaciones sobre obra realizada, una vez salvado el tema de los acopios de materiales (que sí que puede ser una triquiñuela economicista y de nivel presupuestario que pueden utilizar determinadas Administraciones, pero perfectamente legal), luego, al final, el resultado final es lo que vale y lo que sirve. Para nosotros la realidad es lo que hay, y yo le he dicho anteriormente que no era tanto lo que me preocupaba el tema de la inversión -no saque usted las cosas de contexto-, sino otros capítulos que no son los puramente inversores, pero que son de gestión del Departamento.
Ya le decía anteriormente que el problema muchas veces está en anunciar intenciones, anunciar que se van a pagar, que se va a hacer un plan de depuraciones de catorce mil millones de pesetas antes de contar con los interlocutores -y lo ha dicho alguno de los parlamentarios que me han precedido en el uso de la palabra-, y luego tener que encontrase uno, y hay que reconocerlo, con sólo siete mil. Mire: si el año pasado hubieran aceptado la enmienda del Grupo Socialista, este año ni siete mil: habrían sido menos posiblemente, o habrían tenido más a la hora de sentarse a la mesa, pero nos rechazaron la enmienda que nosotros proponíamos, porque creíamos que era interesante, basándonos, única y exclusivamente, en ese anuncio que usted hizo, quizás adelantándose en el tiempo, de las necesidades que tenía esta Comunidad Autónoma para el tema de depuración de aguas residuales.
Entonces, podemos estar de acuerdo -ya ve que le doy la razón-, estamos de acuerdo en que se incluyan siete mil millones de pesetas, pero siete mil millones de pesetas que no van a ninguna parte si no hay otras administraciones comprometidas, pero no las comprometa usted antes de que se puedan comprometer ellas, no se anticipe, es que usted ejerce de otras administraciones, quizá en su buena fe de intentar querer hacer todo cuanto antes.
Hay algunas cuestiones de orden menor. Mire, lo del capítulo I casi ni lo voy a citar, lo he dicho para no decirlo. Claro, en este juego de palabras, desde luego, políticamente se tienen que utilizar algunos datos de incrementos, y usted empieza a mezclar por ahí a otras administraciones. Nadie dice que estemos hablando de otras administraciones, cuando usted dice que se convierte en diputación provincial, es porque al final, me parece, tiene una vocación fustrada, y es la de haber sido presidente de la Diputación Provincial de Huesca, quizás, antes de llegar aquí. Mire, le hablo yo, que estoy ya con el mono superado de haber sido ocho años presidente de la diputación de una provincia de esta Comunidad Autónoma, y lo digo con toda tranquilidad, y le digo que usted, en momentos determinados, coge referencias que no corresponde debatirlas ni utilizarlas en este Departamento.
Allí habrá grupos que podrán en todo momento defender, criticar, como me imagino que habrá en el Parlamento español, a los representantes. Claro, ustedes tienen tan pocos, que no pueden debatir mucho, pero el Grupo Popular en el Parlamento español ya hará una fiscalización de las empresas públicas que el Gobierno pueda... Y si no lo hacen es que no están cumpliendo con su obligación de fiscalización. Pero, dieciséis millones para gratificaciones yo creo que son muchos; por menos, por la mitad, a algunos nos hicieron una huelga impresionante por un tema de gratificaciones, señor Consejero.
Yo creo que se tiene que tener en cuenta que la Dirección General de Carreteras y otras direcciones generales se van a ver en este momento subsumidas en sus funciones, fundamentalmente -y usted lo ha dicho-por la empresa pública; si lo han hecho tan bien como nos ha dicho en la primera parte de su exposición, sólo para adjudicar no vale la pena el que se monte semejante tinglado.
Una tranquilidad nos ha dado, y es la de decir, a la hora de citar quiénes van a componer los consejos de administración de esas empresas públicas que se van a constituir, que se corresponden con los propios directores generales; nos ha dado la tranquilidad de que no va a haber dualidad en ningún momento de gastos, ni de dietas, ni de nada. Bueno, pues, entonces, es algo que debe constar en las actas de este parlamento, porque ya nos disipa una duda, y, posiblemente, si usted nos va contando cosas de éstas, podamos disiparlas todas a lo largo del tiempo.
Porque hay una experiencia que no se tiene por qué utilizar. Usted empieza a hablar aquí del Gobierno de la nación, de que tiene la tira de empresas, del librito ese que nos ha enseñado... Hombre, pero el Gobierno de la nación, primero, gobierna para treinta millones de españoles, o cuarenta, o cincuenta. Entonces, usted lo que no puede es compararnos con los habitantes que tenemos en la Comunidad Autónoma. Pero no es ésa la razón de nuestra preocupación, la razón es que hacer empresa pública, algo que desde el siglo XIX..., y ahí le quiero tocar yo lo de la socialdemocracia; porque, además, es que algunas veces es imaginativo, pero otras veces es reiterativo, ya que, repasando su intervención del año pasado, ya en este Departamento aludía, a su vez, a mi compañero Antonio Sierra y a su cita del año anterior. Hombre, no vayamos a estar siempre... La socialdemocracia evoluciona también, pero, además, la socialdemocracia lo que dice es que se debe actuar en temas de interés general y no en temas de interés particular. El tema de interés general debe ser mantenido por la propia Administración Pública, como se dice ya desde la primera ley de carreteras; y en temas de empresas pequeñas que se han tenido que intervenir para mantenerlas abiertas, yo no le quiero decir aquí las que desde el Instituto Aragonés de Fomento están participadas por parte de la Comunidad Autónoma y que no figuran en el libro ese que nos ha entregado...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Señor Esteban, le ruego que vaya terminando, porque ha rebasado su tiempo y queda todavía trámite en la Comisión.

El señor Diputado ESTEBAN IZQUIERDO: Voy terminando.
Entonces, estas fórmulas no nos las ponga de ejemplo porque no sirven: no es lo mismo hacer galletas para mantener unos puestos de trabajo que se dedican a las galletas que hacer carreteras, que, si también las hace la Administración autonómica, por lo que usted nos ha dicho, no es necesario que solamente para adjudicar se cree y se monte una empresa. Ahí están nuestros recelos, pero algunos, evidentemente, se disipan.
Y en el tema del Pacto del Agua, un minuto. Mire, señor Consejero, yo lo único que digo es que hay que tener también memoria parlamentaria. Usted dijo aquí en esta tribuna en el mes de junio, a finales del mes de junio, que, por una vez -y se lo aplaudimos todos los Grupos, al menos el Grupo Socialista, que había sido uno de los que tenía la idea muy clara tiempos atrás-, usted dijo aquí que ya, de una vez por todas, aquí habíamos llegado a un acuerdo de no hablar del gran canal de la margen derecha porque era inviable, porque unos estudios que usted había encargado así lo decían. Y, sin embargo, curiosamente, unos meses más tarde una alegación de don Emilio Eiroa García, Presidente del Gobierno de Aragón, al plan hidrológico nacional recoge otra vez, una vez más, como una de sus alegaciones, el canal de la margen derecha del Ebro, por eso le he dicho yo que no se puede estar pidiendo una cantidad y luego pedir otra; hay que ser coherente. Y respeto y acepto algunas de las indicaciones o alguno de los argumentos que usted ha manifestado aquí en esta tribuna respecto al tema del Pacto del Agua; pero, desde luego, estos temas no son de recibo, y nosotros los utilizamos porque los tenemos que denunciar, porque está escrito, y ésta es copia con la firma del señor Presidente de la Comunidad Autónoma, y recuerdo muy bien lo que usted dijo, y creo que con valentía y con seriedad y rigor, aquí, en esta tribuna.
Nada más, señor Presidente. Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Esteban. Por el Partido Aragonés, ¿alguna intervención?

El señor Diputado CALVO LOU: No, muchas gracias. Simplemente, en aras de la brevedad, no intervendremos.
Gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Calvo.
Por el Partido Popular, señor Pintado, tiene la palabra.

El señor Diputado PINTADO BARBANOJ: Muchas gracias, señor Presidente.
Unicamente reiterar nuestra felicitación al señor Consejero por la exposición que ha hecho de los presupuestos de su Departamento, y decir que para nuestro Grupo Parlamentario quedan claras todas aquellas cuestiones que anteriormente hemos planteado, por la relación tan exhaustiva que el señor Consejero ha manifestado ante esta Comisión.
Gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Pintado.
Por Izquierda Unida, señor Maestro, tiene la palabra.

El señor Diputado MAESTRO TEJADA: Gracias, señor Presidente.
Para evitar el tiempo del paseillo...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Le ruego simplemente que usted y yo tengamos el mismo concepto del tiempo.

El señor Diputado MAESTRO TEJADA: Gracias, señor Presidente.
Yo quería solamente recordarle algo al señor Consejero respecto al sector público, y, por lo menos, lo que nosotros entendemos y apoyamos como sector público, y apoyaremos siempre. Desde luego, nosotros ya hemos dicho en otras comparecencias que estamos por un sector público que dinamice la economía y, sobre todo, que resuelva problemas a los sectores en crisis, a los sectores más afectados, y que sirva de motor en determinadas zonas y para determinados sectores.
Una cuestión que se me ha olvidado antes decirle. Yo no sé, imagino que lo habrá observado también, pero la política que ha aplicado en su Departamento con estas empresas públicas supone, de momento, que el capítulo I, de personal, haya crecido porcentualmente con respecto al Departamento y se ponga en un 17,73%, superior en porcentaje, aunque sea menos cantidad de dinero, en porcentaje, respecto al dinero que va a manejar el Departamento; ha crecido. Es un parámetro que otros años no se ha puesto en el debate de presupuestos sobre la mesa, y se rebajaba el porcentaje respecto al volumen total del Departamento. Por lo tanto, primera reacción: el Capítulo I de personal se incrementa porcentualmente, como digo, a este 17,73%. Y, además, otro hecho importante: ¿adónde nos conduce -que ya creo que se ha comentado antes-, precisamente hasta dónde se va a llegar y qué funciones van a quedar luego realmente en el Departamento para este personal?, y si se renuncia, por lo que parece ser, a hacer una Administración ágil, eficaz, moderna, etcétera, que parece que son las cuestiones que tienen de positivo estas otras empresas que se crean. Parece ser que en la Administración nunca se va a poder ser ágil; ustedes renuncian a esa modernización de la Administración, y tendrán que explicar hasta dónde piensan llevar eso.
Hay un tema importante en el eje norte-sur, del que se ha hablado poco hoy aquí porque parece que ya habíamos hablado suficientemente del tramo Villanueva-Nueno en otras ocasiones. Le vuelvo a recordar el compromiso de su partido, su partido coaligado, en el tema del ferrocarril: la reapertura del Canfranc, papel que debe jugar el ferrocarril en esta Comunidad, y el paso internacional, para el cual seguimos sin siquiera contar con un mínimo presupuesto que proporcione por lo menos un proyecto definitivo para esta Comunidad sobre esta cuestión. No he oído nada al señor Consejero, y ya el año pasado prometió algo ante esta misma crítica de este mismo Diputado.
Y, simplemente, dos datos puntuales, dos cuestiones puntuales, y acabo. Una: ha nombrado dos veces las obras hidráulicas del barranco de Sía; no sé en qué sentido, puesto que en los presupuestos del COMENA también aparece una subvención de sesenta millones para este mismo barranco. Entonces, yo no sé si también la Dirección General de Obras Hidráulicas de su Departamento va a meter dinero en ese barranco, del que se va a beneficiar el campo de golf de Biescas. Lo que sí es cierto es que hay un presupuesto comprometido con el COMENA de doscientos cuarenta millones en cuatro años, para el cual este año ya van sesenta. Y en lo del convenio de su Departamento con el Ayuntamiento de Zaragoza respecto al tema de los residuos o no, quisiera que nos aclarase, si es un convenio verbal -porque yo lo he solicitado por escrito al Ayuntamiento, y me parece que a su Departamento también-, el contenido de ese acuerdo, qué alcance tienen los compromisos que habían adquirido el Ayuntamiento de Zaragoza y su consejería, pues, por lo que me han informado hasta el momento, no existe un acuerdo por escrito, sino un acuerdo verbal entre el Alcalde de Zaragoza y usted. Entonces, exactamente, qué es ese convenio, qué supone y adónde nos lleva.
Nada más. Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Maestro.
Para el turno de dúplica... ¡Ah!, perdón, perdón, por el Grupo Mixto, ¿alguna intervención?

El señor Diputado GOMARIZ GARCIA: No; el Grupo Mixto es tan poca cosa, que muchos no lo ven; no tiene mayor importancia, señor Presidente.
Gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Ruego a su señoría perdone a esta Presidencia el lapsus que acaba de tener.
Muchas gracias.

El señor Diputado GOMARIZ GARCIA: Está perdonada.
El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Por el turno de dúplica, el Consejero tiene la palabra, con el ruego también de la limitación del tiempo que utilice.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Sí, señor Presidente.
No voy a tratar de reabrir ningún debate, porque me siento, por lo menos, satisfecho, para mí, de las explicaciones que he dado a estas nuevas intervenciones de los distintos parlamentarios de los distintos grupo políticos.
Hombre, aclararle un momentito simplemente al señor Esteban que una cosa es pedir agua para el canal de la margen derecha y otra cosa es para la margen derecha. A veces hemos dicho que no vamos a regar, y mantengo mi postura -no valiente: racional- de cuando estuve aquí, de tres millones por hectárea, porque es inamortizable entonces pensar que si puede haber agua para reforestar o para otras cosas, o para una cosita, una actuación más pequeña. Tampoco querría rizar el rizo de estas cosas en este momento.
Yo creo que nada más, lo he dicho todo, y no me ha reabierto usted a mí ningún debate para que yo le pueda contestar, de lo cual me siento satisfecho.
Señor Maestro, usted, finamente, como antes Isidoro Esteban, realmente dice que sube el capítulo de personal porque bajan las inversiones, porque van a las empresas públicas. ¿Por qué no hace una cosa objetivamente y de verdad -he dicho que vamos a emplear a ese personal, que es validísimo, complementariamente a las cuatro o cinco personas que contratemos de las empresas públicas-: por qué no suma las inversiones del Departamento de ordenación del territorio más el programa de inversiones de las empresas públicas y le resta el porcentaje de personal, y verá cómo, entonces, nos quedamos en un 3% o un 4%?, ¿por qué no lo hace al revés? Si siempre con las cifras podemos jugar como nos interese, hágalo usted así: son dos brazos ejecutores con los mismos directores generales y conmigo como presidente de las sociedades; háganlo así usted, ustedes, y todos.
Con respecto a Sía, sí, ya es público hace tiempo: en el barranco de Sía estamos al 60% nosotros, como Departamento de ordenación del territorio, y al 40% el Departamento de Agricultura, no es nada extraño: el convenio lo firmaron los dos Consejeros con el Alcalde de Biescas, en su momento, en la localidad. El Canfranc no es incompatible, en absoluto, con el Somport, aunque algunos pretendan hacerlo más prioritario que el Somport, y le puedo decir, no obstante, ya que usted no lo ha dicho -yo hoy no lo quería citar por no hacer más citas, como dice el señor Esteban, pero en política o tiras de hemeroteca o tienes memoria, y es bueno tener memoria para, en el momento oportuno, volverse a acordar otra vez, y hoy era procedente, bajo mi punto de vista, acordarme, porque venía muy bien el debate ideológico de la socialdemocracia y el interés general, bajo mi punto de vista-...
Señor Maestro, el único político, de las muchas francesas que hubo, y unas muchas más, casi iguales, españolas, que reivindicó en su intervención el Canfranc en Pau, fui yo, porque usted sabe que hoy es más un problema del Gobierno central francés que del Gobierno español, y ahí estaremos. Pero, claro, ¿qué más podemos hacer? Le diría ahora que hemos encargado un estudio, que lo hemos encargado para algo relacionado con el Canfranc, pero no le quiero decir qué hemos encargado hasta que esté, para que usted no me diga dentro de un mes si está hecho el estudio, pero estará dentro de poco algo muy interesante con respecto al Canfranc, para dotarnos de razones en su reivindicación, pero eso lo quiere también el Gobierno central. Que yo sepa, ahora es un problema del Gobierno francés, y hay que ser objetivo cuando se critica.
Y con respecto a los residuos y al Ayuntamiento de Zaragoza, indudablemente, es un acuerdo político, y todavía sigue primando en la política para algunas personas la palabra; luego, cada administración toma el acuerdo correspondiente administrativo del Consejo de Gobierno o del pleno del Ayuntamiento, y para esto solamente falta que el pleno del Ayuntamiento lo convalide o le dé la licencia municipal.
Nada más, y muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
Vamos a dar paso al turno de preguntas que sus señorías quieran formular.
Por el Grupo Socialista, señor Bernad, tiene la palabra.

El señor Diputado BERNAD ROYO: Muy brevemente.
Aunque a mí me gustaría hablar de la socialdemocracia, quiero decir que el ejemplo de la creación de esas empresas públicas, desde luego, no es un ejemplo en absoluto de lo que es una actuación socialdemócrata. Pero, bueno, voy a ceñirme solamente a las preguntas escuetamente.
Señor Consejero, ¿cuáles son las intenciones del Gobierno respecto a la revisión del plan de carreteras, que, si no tengo mal entendido, es algo que obliga para este año, para este curso? Es que tengo la voz un poco tomada...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): El micrófono, más cerca.

El señor Diputado BERNAD ROYO: Segunda pregunta: ¿entra también en sus previsiones continuar con este tipo de gastos que, en los trámites para construcción de carreteras, suponen las asistencias técnicas?
Nos ha dicho en un momento de su intervención que si ustedes, decía, repasaran las inversiones que van a realizar estas empresas públicas... Tengo que decir que las inversiones de Instra en aquella carretera es imposible seguirlas, puesto que no sabemos cuáles van a ser. Ha sido tradicional enviar en los presupuestos de la Comunidad Autónoma cada año las carreteras sobre las que se iba a actuar en ese curso; usted, desde luego, no lo ha hecho. La pregunta sería: ¿es que es incompatible con la existencia del Instra el que usted pueda remitir en los presupuestos a estas Cortes las carreteras en las que se piensa actuar? Ni siquiera, fíjese usted, especifican en aquellos mil novecientos cincuenta millones de programas las obras a realizar y con contrato vigente. Es verdad que usted las ha mencionado ahí; bueno, pues haga como todos los años anteriores: especifíquelas en los presupuestos. Pero me interesa mucho la pregunta anterior respecto a lo que van a hacer, sus objetivos.
Y yo voy a terminar ya, señor Presidente, con otra pregunta, y es si va a ser propio de la actividad del Instra los programas que anteriormente desarrollaba la Diputación General de Aragón y que aparecen especificados en los presupuestos anteriores, referentes al mantenimiento y la conservación de carreteras, a la seguridad vial y a las travesías. Si no, si esto no va a depender del Instra, han desaparecido los programas en los presupuestos, por lo menos yo no los he visto.
Esas eran las preguntas. Nada más.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Bernad.
El señor Consejero tiene la palabra para las respuestas.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Señor Presidente, señorías.
Yo no sé si usted ha estado aquí en toda mi comparecencia, y con la guerra de cifras a lo mejor no ha visto el apartado cuando he hablado de carreteras y he explicado los mil novecientos cincuenta millones y los programas para seguridad vial, para travesías... Bueno, lo voy a buscar, pero lo pone en el presupuesto; quiero decir que eso, aunque tiene la última pregunta por responder, lo he explicado antes, ¿eh? Lo tengo aquí, si me permite un minutito sólo... No, no; lo cojo de aquí, tengo una chuleta mucho más sencilla y así se aclara todo ya sin ningún tipo de problemas.
Le he dicho que para firmes deslizantes había noventa; para seguridad vial, doscientos quince; para expropiaciones, noventa; para programa de estudios, proyectos y apoyo técnico, ochenta y cinco; para travesías, noventa, y luego los mil novecientos cincuenta millones de pesetas que he explicado para la travesía de Graus, Villalengua, Puente la Reina, Lascuarre, Puente Coromina, variante de Albelda, etcétera; lo he dicho antes. Bien, entonces queda respondida su pregunta en el sentido de que se seguirá ocupando, lógicamente, la Dirección General de Carreteras de este tipo de cosas.
Me ha preguntado que sobre la remisión del plan general de carreteras qué opinaba; pero hoy por lo tarde tengo una comparecencia precisamente para hablar de eso, de la revisión del plan general de carreteras; la tengo pedida. Si no le importa, me extenderé más ampliamente allí. Si no, aquí, ahora sería larguísimo.
Por otra parte, asistencias técnicas para hacer proyectos en carreteras, pues siempre que sea necesario... No, no, si es mejor ser sinceros: si los proyectos dentro del Departamento se pueden realizar por técnicos del Departamento y hay tiempo suficiente por delante para ir con el proyecto hecho y realizado por los técnicos, antes de la ejecución; perfecto. Pero, si no, utilizaremos a los que realmente pueden hacerlo, y muy bien, y nos complementan, y no pasa nada. Haga, en todo caso, esa pregunta también a su Gobierno; me refiero al Gobierno central. Me refiero a que pregunten por lo que es una práctica normal, dentro de un orden, en todas las administraciones.
Las carreteras. Yo he conseguido pasar este debate curiosamente hasta que usted me acaba de preguntar por segunda vez, sin citar el nombre y apellidos. ¿Para qué, hombre-?, ¿para animar el debate del viernes? En el debate de totalidad habrá nombres y apellidos de las carreteras. Todas las carreteras de Instra, con los trece mil millones de pesetas, estarán numeradas una por una. Prioritariamente -insisto-: seis mil millones en la provincia de Teruel, mejora de comunicaciones en la franja oriental, mejora de comunicaciones en la medida en que podamos actuar con otras comunidades autónomas. Sí le puedo dar tres nombres y apellidos, porque los he venido diciendo estos días: inauguración del eje del Vero, que es Barbastro, Alquézar, Bárcabo -me parece que es la provincia de Huesca-; Huesca, Sariñena, en principio, y continuaremos con el tramo de Chalamera-Fraga, por citarle unas cuantas de la provincia de Huesca. Para las otras permítame que animemos un poco el Pleno del viernes diciendo los nombres de las carreteras, porque también le diré una cosa: antes le decía que esto no debe ser nunca municipalizado ni partidista; sin embargo, yo les diría a ustedes que ha habido un Diputado muy representativo de su Grupo que me ha dicho: "Si me haces la carretera de mi pueblo, no te haré ninguna crítica". ¡Qué gracioso!

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Gracias, señor Consejero.
Señor Bernad, ¿desea intervenir? Brevemente, por favor.

El señor Diputado BERNAD ROYO: ¿Por qué es incompatible con la existencia del Instra el que queden reflejadas en los presupuestos las carreteras en las que se piensa actuar? Por favor, para otros presupuestos haga propósito de enmienda en este sentido.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Señor Consejero.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Mire, normalmente, con mil novecientos cincuenta millones de pesetas, a usted, que es un buen seguidor de este Departamento y le encantan las carreteras, también le puedo anticipar, para que se lo lleve como sorpresa, que la variante de Sabiñán, sobre la que usted me interpeló, está prevista -ya puede llamar a quien corresponda para decirlo-, está prevista.
Pero es que es normal cuando hay que ejecutar trece mil millones en carreteras, y hay cien mil millones que invertir del año noventa y dos. ¿Usted no cree que tenemos que apurar sobre todo para ver qué proyectos redactados existen y a ver si hacemos algo que no tenga, precisamente, color político pero que sea necesario dentro de las inversiones de infraestructura de la Comunidad Autónoma? Bueno, pues los mil novecientos cincuenta millones en realidad no vienen reflejados con nombres y apellidos porque son proyectos que ahora extraemos del año anterior y que vamos a terminar este año. Como prácticamente es continuación de obras iniciadas, por eso se han dejado de poner, no por otra razón. Si usted coge el tocho del año pasado, de la sección 13, ahí verá, prácticamente, los nombres y apellidos de las carreteras, así de sencillo. ¿Que podríamos haberlos puesto? Yo no las confecciono, pero óigame, mi Departamento, dicho sea de paso, dicen los parlamentarios que es de los que mejor explicados tiene, con nombres y apellidos, cada proyecto, dicen, y yo respeto lo de los demás.
Y con respecto a Instra lo que le estoy diciendo es que el viernes diremos nombres, apellidos y hasta incluso una comunicación formal, un folio para que ustedes puedan debatir; pero lo que también les estoy diciendo ya, ya me anticipo, es que no les daremos gusto a todos; es normal.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
¿Alguna otra pregunta?
Señor Pina, tiene la palabra para la formulación de la pregunta.

El señor Diputado (PINA CUENCA): Gracias, señor Presidente.
Don Luis Acín, usted que tiene toda la información. Pónganos algún ejemplo de empresas públicas de la Administración central del Estado que se dediquen a hacer carreteras y viviendas al nivel que lo va a hacer el Instra y las empresas de infraestructura que usted va a crear.
Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Pina.
Señor Consejero, tiene la palabra para responder.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): La pregunta del millón. En Ausa, en autopistas, empresa pública del Estado, que depende del patrimonio, en general, del Estado, y su secretaría de economía, de la Secretaría de Estado para Hacienda. Precisamente, ya que usted me ha preguntado, yo quería incordiar. ¿Sabe usted por qué se retrasa el convenio de la firma de la autovía del eje norte-sur?, ¿lo sabe? Porque no contaron con el Subsecretario de Economía, del cual dependen Ausa, a la hora de firmmar el convenio el señor Borrell, el señor Zabalza y el señor Eiroa. Y está picado, fíjese lo que le digo: sí, sí, ésa es la única cuestión -yo pensaba que era una represalia-, está picado; una es Ausa y la otra es el SEPES famoso, que se dedica a suelo y vivienda. O sea, que no me pregunte qué es lo que van a hacer, que si encima le digo el capital, las reservas, las ventas y el número de trabajadores, para qué. Aún tengo más datos...

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
Señor Pina, brevemente, por favor.

El señor Diputado (PINA CUENCA):
¿Quiere usted decirme que el equivalente del SEPES no es el ISVA en la Comunidad Autónoma de Aragón? ¿Quiere usted decirme que se va a dedicar ahora a hacer autopistas de titularidad privada, o va a hacer las carreteras del plan regional de carreteras?
Muchas gracias.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Pina.
Señor Consejero.

El señor Consejero de Ordenación Territorial, Obras Públicas y Transportes (ACIN BONED): Mire, usted es como yo, casi nos han parido igual, y aquí estaríamos con jotas de picadillo hasta pasado mañana. Yo estoy convencido de que le diga lo que le diga usted no está dispuesto a autoconvencerse; pero le voy a rematar mi intervención de la siguiente manera: el señor Borrell dijo que había tres fórmulas para seguir haciendo infraestructuras: subir los impuestos, pagar peaje o endeudarse. ¿Por qué fórmula optan ustedes: por subir impuestos, por pagar peaje o por endeudarse? Nosotros adoptamos, por sentido común, endeudarnos.

El señor Presidente (MAGGIONI CASADEVALL): Muchas gracias, señor Consejero.
¿Alguna pregunta por el Grupo del Partido Aragonés? ¿Por el Grupo Popular? ¿Izquierda Unida? Ninguna.

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