Intervinienen: Saz Casado, José Luis - Soro Domingo, José Luis - Romero Rodríguez, Luis Ángel - Ruspira Morraja, Antonio - García Madrigal, Florencio - Torres Millera, Antonio
El señor PRESIDENTE: Pasamos al siguiente punto del orden del día, que es la comparecencia del consejero de Economía y Empleo, por acuerdo de la Junta de Portavoces, a propuesta del Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista, para informar sobre el proceso de fusión de Ibercaja y Caja3, y las consecuencias económicas, laborales y sociales que se derivarán del mismo.
Señor consejero de Economía, tiene la palabra... Perdón, es el consejero de Hacienda —perdón por el error—, por tiempo de diez minutos, el que puede intervenir.
Comparecencia del consejero de Economía y Empleo para informar sobre el proceso de fusión de Ibercaja y Caja 3 y las consecuencias económicas, laborales y sociales que se derivarán del mismo.
El señor consejero de Hacienda y Administración Pública (SAZ CASADO): Señor presidente.
Señorías.
En la comparecencia respecto de este tema, debería haber comparecido el consejero Bono, pero por una cuestión de inhibición por haber sido directivo de Ibercaja, pues, nos parece correcto que lo haga yo, sin ningún demérito por ello.
Vamos a ver, en cuanto al proceso y las consecuencias que se piden respecto a estos procesos de fusión, aunque por otra parte también, el tema que se plantea es anticipado...
La señora vicepresidenta primera (PLANTAGENET WHYTE-PÉREZ): Señorías, ruego que guarden silencio. Subo el volumen para que se le oiga un poco más al consejero. ¿No se oye, señor Sada? No ha habido ninguna modificación previa. Ahora mismo hemos ajustado el volumen.
Gracias, señor Sada.
Señor Saz, puede continuar
El señor consejero de Hacienda y Administración Pública (SAZ CASADO): En este asunto, aunque la comparecencia que había sido solicitada hablaba de un momento anterior, en donde —ahora ya se oye perfectamente— se había iniciado un proceso de fusión de dos cajas aragonesas con determinadas entidades bancarias, pues, el devenir de los hechos ha añadido una más y, por tanto, haré la contestación teniendo en cuenta la situación actual, ¿no?, es más razonable.
Ya nuestro Estatuto de Autonomía, el Estatuto de Autonomía de Aragón establece una competencia en materia de cajas de ahorros, en aquellas cajas de ahorros que tienen domicilio social en Aragón y, por tanto, es un tema al que esta comunidad siempre ha sido sensible y ha mostrado interés. Incluso, ya se aprobó en el año 1991 una Ley de cajas que regulaba el régimen jurídico, el régimen económico, los distintos órganos de gobierno de las cajas y determinados aspectos esenciales y, en general, el marco legal que afectaba a las cajas de ahorros que tenían su sede social en Aragón.
Como consecuencia de la aprobación de un real decreto ley por parte del Gobierno de la nación, el Real Decreto Ley 11/2010, se introducen determinadas modificaciones en el sistema financiero y, como consecuencia de ello, se establece la posibilidad de que las cajas se unan para realizar su gestión de negocio financiero de manera indirecta a través de determinados bancos. Eso es lo que ahí se posibilita. Como consecuencia de esa posibilidad, aquí, en Aragón, en su momento, se inicia un proceso de fusión de nuestras dos cajas y se desarrollan dos grandes grupos, que uno de ellos es el Grupo Banca Caja3 o Banca Grupo Caja3, Sociedad Anónima, que contiene tres cajas: la CAI (Caja de Ahorros de la Inmaculada de Aragón), una segunda, que sería la Caja de Ahorros y Monte de Piedad Círculo Católico de Burgos, y la tercera, que sería la Caja General de Ahorros de Badajoz. Por lo tanto, ese sería el primer grupo. Y el segundo, que es Ibercaja, cuya entidad es sociedad unipersonal, porque el cien por cien de la participación lo tiene la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza y Aragón, llamada Ibercaja. Por lo tanto, esos son los primeros acuerdos, los dos grandes grupos que realizan el negocio financiero de manera indirecta a través de estas entidades bancarias.
Estas dos operaciones de reagrupamiento y de creación de esta banca tienen, por una parte, la autorización del Gobierno de Aragón mediante orden del consejero competente en materia de cajas de ahorros y, además, tienen la autorización del Banco de España, que permite dicha creación. Y esto no implica, la creación de estos grupos bancarios, a través de los cuales las cajas de ahorros gestionen directamente su negocio financiero, no implica la desaparición de las cajas, sin duda alguna, sino que se mantienen como instituciones, siguen existiendo con sus órganos concretos, siguen aplicando el carácter benéfico-social de sus reservas, mantienen sus propios órganos y, en consecuencia, también están sometidas, en cuanto a cajas de ahorros, a la supervisión del Gobierno de Aragón.
En el devenir de los hechos legislativos, sucede que se realiza una nueva modificación, es decir, una nueva incorporación legislativa, que es el Real Decreto Ley 2/2012, del Gobierno de la nación, y que introduce modificaciones sustanciales en ese entramado jurídico de las cajas de ahorros del todo sistema financiero español, y esos cambios sustanciales afectan tanto a sus órganos de Gobierno como, por supuesto, al régimen jurídico de las cajas. En concreto, por ejemplo, pues, se hace la supresión de adhesión al Fondo de Garantía de Depósitos, se les atribuye carácter potestativo a las comisiones de control, en definitiva —muchas más—, se realizan determinados cambios jurídicos que afectan por supuesto a las cajas aragonesas.
Pero trajimos aquí hace un mes que en el proceso de adaptación de las cajas aragonesas a la normativa nacional se suspendía la adaptación a la primera modificación legislativa que hubo para la nación como consecuencia de la premura que exigía, y le dimos un año de carencia, un año de suspensión a la obligación de adaptar sus estatutos, órganos y demás, y por lo tanto, esa aplicación quedó en suspenso, en suspenso, la renovación de los órganos, hasta que transcurra el año o se haya producido el acuerdo de cierre de reorganización correctamente.
En el proceso, que es la comparecencia que se plantea, en todo este proceso, el Gobierno de Aragón o, mejor dicho, la comunidad autónoma carece de competencias, porque las competencias son exclusivamente en materia de cajas de ahorros, y carecemos de competencias para entidades bancarias. Por lo tanto, decir que manifestamos el interés del Gobierno de Aragón, el compromiso del Gobierno de Aragón, el interés y la colaboración con las distintas cajas en desarrollar sus distintos objetivos, pero, obviamente, nosotros, la comunidad autónoma carece de competencias en este proceso de reagrupamiento bancario.
Además, una nueva modificación legislativa, el Real Decreto Ley 18/2012, establece nuevos requisitos sobre saneamiento y venta de activos del sector financiero, y como consecuencia de la aplicación de este real decreto, se acelera ese reagrupamiento y hay una tercera entidad que se reagrupa con las dos entidades bancarias que procedían de nuestras dos cajas fundamentalmente, que es conocida por todos, Liberbank, y como consecuencia de eso, se genera un grupo bancario con tres grandes grupos, ¿verdad?, los dos que ya he mencionado anteriormente y este que se ha incorporado a Liberbank, que se descompone en Cajastur, Caja Extremadura y Caja de Cantabria.
Ibercaja, en este grupo, mantiene el 46,5%, por lo tanto, ese es un buen dato, y, además, CAI mantiene el 3,3%, y el grupo Caja3, el 8% (dentro de ese 8%, está el 3,3% de CAI). Se ha liderado desde Aragón ese reagrupamiento de este nuevo grupo bancario, que es el séptimo grupo bancario de España. Por lo tanto, yo creo que podemos estar orgullosos de lo que es el séptimo grupo bancario, con ciento catorce mil millones por activos, o ciento ochenta y un mil millones por lo que es volumen de negocio, y que, además, si nos fijamos en el grupo de cajas, es el segundo grupo de cajas de España, del sistema financiero español. Por lo tanto, yo creo que hay que estar contentos respecto de cómo se ha gestionado, cómo se ha liderado por parte de nuestras cajas.
Pero, insisto, el proceso es un proceso en el cual nosotros no intervenimos, puesto que no tenemos competencia, más allá del interés, la colaboración y todo aquello que se nos pida.
Y en cuanto a las consecuencias de ese proceso, ¿qué tenemos? Tenemos un grupo bancario muchísimo más solvente de lo que era la situación financiera anterior a ese reagrupamiento; como consecuencia de esa solvencia, que es mayor, lógicamente, va a haber una mayor posibilidad de sostenimiento de los empleos en Aragón, de esas entidades, es decir, se refuerza esa posición, la posibilidad de mantener el empleo; se refuerza la posibilidad —entiendo— de la obra social, porque si hay más beneficios, habrá más destinos a obra social, y, por tanto, también se refuerza la posibilidad de mayor refinanciamiento o financiamiento a particulares y a pymes, y entiendo que tiene que ser así, ¿eh?
Además, considero que el liderazgo desde las cajas aragonesas en este proyecto, en lo que ha resultado ser la séptima entidad bancaria, es un elemento a destacar y que, por lo tanto, yo lo destaco. Y de cualquier forma, la fusión se habría producido, es decir, porque teníamos un minifundismo bancario en España tendente a reagrupamiento. La cuestión no es si reagrupamiento «sí» o «no», puesto que era «sí» o «sí», si no que, tal como se ha producido, yo creo que es satisfactorio.
Por tanto, nada más puedo añadir.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor consejero.
Entiendo que no es necesario suspender la sesión durante un tiempo de treinta minutos, y pasamos, en consecuencia, al Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista, que es el que hizo la propuesta de dicha comparecencia, que tiene, en consecuencia, ocho minutos de tiempo para la defensa de su intervención.
Señor Soro, cuando quiera.
El señor diputado SORO DOMINGO: Muchas gracias, señor presidente.
Es emocionante pedir comparecencias a este Gobierno, porque nunca sabes quién va a comparecer: es como una tómbola, en la que tú pides la comparecencia de la presidenta y comparece un consejero, no sabes cuál, porque hablas del carbón, pero no comparece el consejero competente y nos mandan al de Interior —debe de ser porque el carbón está en el interior—, ahora, yo no sabía quién iba a salir y digo igual sale el señor Aliaga y así tiene la oportunidad de decir algo, porque antes no ha comparecido él y no lo ha hecho, y había pedido la comparecencia del de Economía y comparece el de Hacienda. Yo pensaba que el señor Bono ya estaba desinhibido, pero, en fin, ya nos informarán de cuándo se desinhibe del tema de las cajas y cuando acaba el interregno, ya que vamos hablando tanto del Compromiso de Caspe, a ver cuándo acaba el interregno y tenemos ya un consejero competente en cajas de ahorros, porque ese es un problema, ¿eh?, que en todo este proceso no haya habido un consejero competente que haya podido actuar sin problemas de inhibición en el tema de las cajas, ha sido un auténtico problema.
Yo les tengo que reconocer que veo con cierta simpatía esta forma como asamblearia que tienen ustedes de actuar, y me los imagino en el Pignatelli preguntándose quién comparece, tú no, yo, que te lo cambio, que me viene mal... De verdad que lo veo hasta con cierta simpatía.
Empezaba usted hablando, señor consejero de Hacienda, de la competencia exclusiva en materia de cajas de ahorros. El problema es que le han robado la cartera, o sea, en este proceso de bancarización que se inicio en el año 2008, el único acuerdo entre el PP y el PSOE que hubo en la pasada legislatura, acabar con las cajas de ahorros, es que ha sido todo muy sutil, claro, y en el momento que las cajas de ahorros desaparecen del mapa, en el momento que actúan a través de los bancos, nos quedamos sin competencia, y ese ha sido uno de los problemas, que se han dejado ustedes robar la cartera de la competencia mientras desde Chunta Aragonesista les advertíamos. Estamos iniciando un proceso muy complejo en el que al final no podremos decir nada. El problema es que cuando se podía haber dicho tampoco se hizo nada.
Yo le agradezco, señor consejero, que no se haya ceñido al contenido de la competencia y haya hablado de la situación actual, porque es democráticamente sano que no nos encorsetemos con el reglamento, y a pesar de que no había ninguna comparecencia metida en plazo para hablar del tema, estemos hoy hablando de lo que interesa en la calle, que es Ibercaja-Caja3 y también de Liberbank, así que se lo agradezco.
¿Cuál es el problema? El problema es que este proceso de fusión de estas tres entidades no arranca de una decisión económica, es una decisión política tomada en Madrid, y tampoco es una decisión libre, es una decisión forzada, y ese es el mayor problema de toda esta cuestión, que al final ha sido una imposición, es una imposición a golpe de decreto ley. Fue una imposición en su día que las cajas de ahorros desaparecieran del tráfico financiero y ha sido una imposición también ahora que, finalmente, Ibercaja más Caja3 tengan que juntarse además con Liberbank. Cuando las cosas se hacen forzados no suelen salir bien, y ahí está Bankia, es que lo tenemos tan fácil, ahí está Bankia, cómo ha acabado Bankia, y lo que sienta mal es saber que en Bankia se van a inyectar veinte mil millones de euros de dinero público, lo que sea, barra libre, mientras a cajas que han sido solventes, que han sido de verdad —lo decía usted— de orgullo, pues, sí, un orgullo que en nuestras cajas no hayamos visto este espectáculo bochornoso de otras comunidades autónomas se les trate así y se les obligue a tomar decisiones que yo estoy convencido que si las hubieran podido tomar libremente, no las habrían tomado en absoluto.
Y lo que nos preocupa también mucho en Chunta Aragonesista es que esto es un ejemplo más del proceso de involución autonómica, es un ejemplo más de que lo que quiere el señor De Guindos está muy claro: quiere pocos bancos con domicilio social en Madrid, no quiere que haya poder económico territorial, no quiere que las comunidades autónomas tengan entidades que puedan tener un peso en la toma de decisiones económicas, quiere acabar con ese poder económico territorial que representaban las cajas de ahorros.
Yo, mire, el argumento del mal menor no me consuela, el argumento de que ahora Ibercaja tendrá el 46,5%; CAI, el 3,3%; las cajas aragonesas, un 49,8% en el séptimo banco del Estado español, qué quiere que le diga, no nos consuela porque eso, para el interés de Aragón, claro que había una opción mejor, que era haber tenido un banco aragonés, haber tenido lo que era el inicio de la fusión, un banco aragonés de nuestras cajas de ahorros y con el domicilio social en Aragón, y en ese caso, igual ni estábamos teniendo esta comparecencia en estos términos, pero claro que nos preocupa como aragoneses, como aragonesistas, defendiendo, como todos los que estamos aquí, los intereses de Aragón —se supone—, nos preocupa el futuro para Aragón. ¿Qué es mejor, que te corten la cabeza o una pierna? Mejor, que te corten una pierna, pero tampoco es bueno que te corten una pierna. ¿Habría sido peor que nos obligaran con Unicaja con BMN? Pues, quizás, quizás, sí, pero esto tampoco es bueno para Aragón.
Señor consejero, a mí me interesa más que el proceso, y le agradezco que lo haya contado —repito—, más que el proceso al que ha dedicado ocho minutos, nos interesan las consecuencias, a lo que ha dedicado dos. Luego tiene usted más tiempo y espero que incida más en esta cuestión. Consecuencias, en primer lugar, económicas, y le hago una pregunta muy concreta: ¿qué consecuencias de orden económico, a efectos de ingresos tributarios de la comunidad autónoma, tiene que el domicilio social del banco a través del cual van a ser accionistas Ibercaja y CAI esté en Zaragoza o esté en Madrid? ¿Qué consecuencias de ese orden, de orden tributario, a efectos de ingresos tributarios de la comunidad autónoma, tiene el cambio de domicilio social? ¿Qué consecuencias puede tener también a efectos del desarrollo económico a la hora de que ese banco, en el que no hay una mayoría aragonesa, aborde proyectos estratégicos que el domicilio social no esté en Zaragoza, no esté en Aragón? ¿Qué consecuencias estiman ustedes que puede tener? ¿Qué consecuencias laborales? Esta es una cuestión que entenderá usted que nos preocupe muchísimo, las cuestiones laborales.
Usted dice que como se ha hecho la caja grande, se podrá mantener el empleo. No vaya a Extremadura a contarles eso, pero tampoco venga a Aragón a contárnoslo, porque sabemos que la primera fusión de Ibercaja más Caja3 ya tenía un coste laboral importante, un coste social entre jubilaciones, un coste social incluso en suspensiones de contratos, un coste laboral muy importante e Ibercaja sigue en este proceso, con lo cual va a haber un coste laboral, y ahí estarán los sindicatos, evidentemente, para negociarlo, y aunque no es función nuestra, sí que lo vemos con muchísima preocupación, cómo se va a operar este ajuste de la plantilla, con las personas que tengan que ir a Madrid, a esa sede social de Madrid, y con las personas que se queden aquí, que sigan trabajando, en qué condiciones laborales.
Nos preocupan muchísimo las consecuencias sociales y, en primer lugar, que fluya el crédito, que es lo esencial, porque es que aún no se ha afrontado el problema esencial, que es éste. ¿Beneficia esta fusión para que fluya el crédito a las familias, a las pymes, a los pequeños empresarios? Me gustaría saber su opinión.
Obra social. «Al tener más beneficios, habrá obra social.» Si les deja en paz Guindos, porque si cada viernes obliga a los bancos, a través de los que operan las cajas, a destinar más millones a dotar provisiones, ¿qué beneficio van a tener los bancos?, ¿qué dividendos van a tener las cajas de ahorros para invertir en obra social? Es un problema muy serio el de la obra social, y no por falta de voluntad de las cajas de destinarlo a obra social, no estoy diciendo eso; estoy diciendo que hasta que no haya beneficios, dividendos en los bancos, las cajas de ahorros no van a tener recursos para destinarlos a obra social.
¿Qué va a pasar con la red de oficinas, la red de oficinas no en el medio urbano, sobre todo, en el medio rural? ¿Podemos estar tranquilos con que esta operación garantice el mantenimiento de las oficinas del medio rural? Mire, yo estoy convencido de que desde Ibercaja se ha hecho lo posible para seguir siendo una caja de ahorros aragonesa. Hace poco, estaba yo en Luxemburgo, y el lema de Luxemburgo era algo así como «Queremos seguir siendo lo que somos», y yo estoy convencido de que en Ibercaja era su lema, pero ha habido una operación política y les han obligado a ser otra cosa, y en esa operación política, el Gobierno de Aragón tenía que haber jugado un papel mucho más duro en defensa de las cajas de ahorros en el ejercicio de su competencia, pero les ha ganado la partida el señor De Guindos.
En los ocho segundos que me quedan, señor Saz, estamos de una manera precaria en los órganos de gobierno de las cajas... [corte automático de sonido] ... proyecto de ley para culminar el proceso de renovación. ¿Cuándo vamos a tener el proyecto de ley en estas Cortes de renovación de las cajas de ahorros?
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Soro.
A continuación, por el Grupo Parlamentario de Izquierda Unida de Aragón, el diputado señor Romero puede intervenir por tiempo de cinco minutos.
El señor diputado ROMERO RODRÍGUEZ: Muchas gracias, señor presidente.
En primer lugar, señor Saz, agradecerle el tono de su comparecencia y las explicaciones que ha dado, entre otras cosas, porque detrás de la comparecencia del señor Suárez, usted no ha insultado y, además, no ha llamado a nadie impresentable, con lo cual se lo agradecemos.
Dicho esto, decirle que Izquierda Unida ha sido muy crítica desde hace ya unos cuantos años con respecto a las últimas reformas financieras que hemos tenido en el Estado. El objetivo de cada una de las reformas financieras ha sido intentar acercar el crédito, dar facilidades a las familias, a los autónomos, a las pymes, para que se reactive la economía. Creo que el Gobierno debe de reconocer, evidentemente, primero, en Madrid, y después, aquí, en Aragón, que ese objetivo no se ha cumplido y que por ello, en breve, es probable que se tenga sobre la mesa otra propuesta de reforma financiera, y esta ya será la cuarta.
Pero es curioso, desde hace tiempo, ya decíamos que estas reformas no facilitarán el crédito y que solo servirán para una concentración de entidades financieras, que se hará de forma apresurada y que pondrán en riesgo la economía española. Bueno, eso lo decíamos hace también unos cuantos meses y estalló el caso Bankia. Hoy no toca hablar de Bankia, pero que sepan que hay registrada una proposición no de ley para solicitar una comisión de investigación y decirle que nos ha alegrado ver cómo la Fiscalía Anticorrupción ha abierto diligencias para investigar el caso Bankia, pero de eso hablaremos más adelante.
Lo que sí que es cierto es que el tiempo demuestra que no por ser más grandes las cosas funcionan mejor, y además, el tiempo demuestra —no lo dice Izquierda Unida, sino que lo dice el propio presidente de Ibercaja, el señor Amado Franco— que hubiera sido mejor haber separado las cajas malas de las cajas buenas. En otros términos, también venía a decir que hubiera sido mejor que se hubiera separado la manzana agusanada para que no contamine al cesto de manzanas.
Lo curioso es que todo este proceso de reformas lo que ha conllevado es un hecho que nos preocupe profundamente, y ese hecho es que hay una fusión o una integración de tres grupos financieros no por voluntad propia, sino por imperativo como consecuencia de las reformas financieras, con lo cual, mal presagio que al final las cosas tengan que funcionar así; luego toca pedir comisiones de investigación, toca decir que había entidades que no presentaron bien sus cuentas, etcétera, etcétera. Pero lo que es un hecho es que el Consejo de Administración de Ibercaja hubiera preferido seguir en solitario, que no nos iban mal las cosas, y como proceso de esas reformas, al final, tenemos que tragarnos a ciertas entidades que, como usted sabe, algunas de ellas no están o no han estado en sus mejores momentos y, por lo tanto, son una carga para una caja que había hecho los deberes bien. ¿Qué nos preocupa? Usted no ha hablado de lo que nos preocupa, y lo que nos preocupa es que el Gobierno de Aragón también tendrá que pensar en esos trabajadores que están en esas edades cercanas a los sesenta años y que tenían ya un plan de salida de la entidad financiera y que ahora van a ver mermadas sus retribuciones, que algunos van a tener que prejubilarse forzosamente ahora, que algunos de ellos van a tener que ser despedidos, porque, evidentemente, otra cosa no habremos aprendido, pero hay una regla matemática que no falla: en todas las fusiones de las entidades financieras, al final, los que pierden son los trabajadores, porque al final se cierran evidentemente oficinas y al final se despide a gente, se despide a trabajadores. Por lo tanto, sería bueno que el Gobierno de Aragón, además de hacer seguidismo a la política que hace Madrid, que es lo único que ha hecho hasta la fecha, también pudiera hablar con esos trabajadores, también pudiera comprender los problemas de los representantes de los trabajadores, porque si ya era difícil solamente entre la fusión de Ibercaja con Caja3, ahora, con Liberbank, va a ser mucho más difícil y el empleo que se va a destruir es mayor. Nos preocupa también que perdemos fuentes de financiación: antes, ocho entidades; ahora, solo una. Por lo tanto, las familias y los aragoneses van a perder fuentes de financiación.
Pero mire, termino con una frase, y la frase es la siguiente: «Solo se saldrá de la crisis si los que tienen más se sacrifican y aportan más para mantener el sistema de solidaridad en este país». Es de Amado Franco, una persona que no cuestionamos, una persona con capacidad, con una extraordinaria trayectoria. Háganse eco de esta frase: «Es necesario que los que más tienen aporten más en la situación en la que estamos inmersos en estos momentos».
Gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Romero.
Por el Grupo Parlamentario del Partido Aragonés, el diputado señor Ruspira puede intervenir también por tiempo de cinco minutos.
El señor diputado RUSPIRA MORRAJA: Gracias, presidente.
Buenos días, señor consejero.
Nos toca hablar de una fusión de entidades financieras que desde el Partido Aragonés queremos transmitir en esta tribuna cuál es nuestra opinión y nuestra posición al respecto con total claridad.
La verdad es que si analizamos con detalle quienes forman la fusión de estas tres entidades financieras, nos daremos cuenta de que alrededor de la mesa se van a encontrar seis comunidades autónomas, seis comunidades autónomas y ocho cajas, seis comunidades autónomas, y dentro de ese maremágnum territorial, resulta que nos encontramos con la valoración positiva de que Aragón tiene una posición mayoritaria en el porcentaje del Consejo de Administración, como bien ha apuntado el señor consejero, con el 46,5% a través de Ibercaja y del 3,3% de la Caja Inmaculada, de la CAI, a través de Caja3. Para nosotros, eso es relevante, porque eso tiene que permitir la posibilidad de que Aragón tenga voz y voto importante en ese Consejo de Administración.
El hecho de que el presidente de este entramado financiero sea don Amado Franco también lo valoramos positivamente, porque entendemos que si a la cabeza está un aragonés va a trabajar por y para los aragoneses, a pesar de que va a tener que defender los intereses, como es lógico, de todos los que representan a esas ocho cajas de esas seis comunidades autónomas.
Es que si le vamos a preguntar al presidente de Extremadura o al presidente de Asturias o al presidente de Cantabria, estoy convencido de que no dirían lo mismo que podemos decir desde aquí, desde Aragón, en esa valoración positiva, porque su presencia porcentual es mucho menor.
Había otras opciones, había otras opciones de fusión: Mare Nostrum, estaba Unicaja, y la verdad que de el entramado posible de opciones de agrupación bancaria y financiera, entendemos desde el Partido Aragonés que es la, si me permite el término —lo pongo entre comillas—, «la menos mala». Ante esa circunstancia, el hecho de que la sede se encuentre en Madrid, teniendo seis comunidades autónomas alrededor de la mesa, era inevitable, pero sí que valoramos también muy positivamente el hecho de que la sede operativa se vaya a encontrar en Zaragoza.
Pero lo que sí que queremos remarcar desde el Partido Aragonés de manera muy notable es el hecho de que entendemos que se tiene que hacer un esfuerzo notable desde el Consejo de Administración de la nueva entidad financiera para que la presencia de nuestras cajas aragonesas, a través de la nueva figura, en el territorio y en los proyectos económicos y empresariales de nuestra Comunidad Autónoma de Aragón no se baje la guardia, no baje en porcentaje, no baje la implicación en el territorio, porque para nosotros es vital. El hecho de que sea el séptimo grupo financiero española con ese volumen de activos que ha comentado de ciento catorce mil millones de euros nos da confianza y nos hace ver con optimismo el futuro inmediato.
Pero tenemos que dejar muy claro desde el Gobierno de Aragón —y eso lo quiere subrayar el Partido Aragonés— que se tiene que seguir trabajando por y para el territorio. Somos absolutamente respetuosos desde el Partido Aragonés también, señor consejero, en las decisiones que se adoptan en los consejos de administración, y creo que inmiscuirnos en decisiones empresariales es un error. Se han hecho muchas menciones a palabras que ha dado el señor Amado Franco en muchos temas, que si la manzana agusanada, que si hay que trabajar arrimando el hombro los que más tenemos o los que más tienen en la sociedad. Pero también dijo que «el hecho de las concentraciones y el hecho de la coyuntura económica en la que nos encontramos nos va a obligar a hacer esfuerzos importantes», y estaba en la misma noticia, señor Romero, hay que leerlo todo y creo que hay que subrayarlo.
Es importante, como digo, que desde el Consejo de Administración haya respeto hacia ese Consejo de Administración, porque estamos convencidos de que se van a tomar decisiones en beneficio de los inversores, en beneficio de los empleados y, por supuesto, en beneficio de los aragoneses y de las aragonesas.
Pero quiero dejar también una cosa muy clara, no el cómo, no el quién, sino el porqué. Lo ha dejado usted muy claro, que esto se produce debido a la aprobación de un real decreto ley que afecta al sector financiero. Yo tengo aquí cuatro cifras que son espeluznantes: activos inmobiliarios ligados al crédito promotor, trescientos siete mil millones de euros; cobertura en activos problemáticos, hasta el 54%, un total de cien mil millones de euros, y en activos no problemáticos, treinta y siete mil millones de euros, que es el 30%, que es en la segunda reforma, pasando del 7% al 30%. Es decir, estamos hablando de un total de ciento treinta y siete mil millones de euros de cobertura que se tiene que alcanzar.
Este es el motivo real por el que es «sí» o «sí», como usted comentaba cuando ha hablado de la necesidad de fusionarse las entidades financieras, y ante esta circunstancia, es inevitable.
Para terminar, cuál es la duda, cuál es el interrogante que tiene el Partido Aragonés en este momento y que nos inquieta notablemente para el futuro a medio plazo: ¿va a ser suficiente esta fusión? Esa es la pregunta que le hago. ¿Cree que, a través de este grupo Liberbank, Caja3 e Ibercaja, vamos a tener que pasar por nuevas fusiones en el corto o medio plazo, debido a que la situación es complicada? Vamos a esperar los acontecimientos en los próximos treinta días, las auditorias cómo se cierran, pero tenemos que pensar por y para Aragón, por y para los aragoneses, y entendamos que la posición actual en estos momentos no es mala, pero ojo, porque la espada de Damocles sigue estando sobre el sector financiero de este país.
Nada más.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Ruspira.
Por el Grupo Parlamentario Socialista, el señor García Madrigal puede intervenir por tiempo de cinco minutos.
El señor diputado GARCÍA MADRIGAL: Gracias, señor presidente.
Buenos días, señorías.
Cuando las noticias son oscuras como el carbón o, peor, como las referidas a las ayudas al carbón en Aragón, ustedes, señores del Partido Popular, son el Gobierno de la abstención, a veces, con tintes sacramentales (Dios proveerá), de dejación (mañana será otro día) o de falta de clasificación en sus criterios (no sabe no contesta, como en las encuestas).
Ustedes no son un Gobierno serio, ustedes son desgobierno. Gobernar significa pronunciarse, significa decidir autónomamente, fijar criterio, resolver problemas de los ciudadanos, y ustedes siempre se refugian en la incompetencia, revestida de calificativo legal: no somos competentes, somos incompetentes legalmente.
Ha pasado más de un año de las elecciones en Aragón, y su Gobierno es de marcha atrás, como el cangrejo: Teruel pierde el carbón, Huesca romancea por Aramón y Zaragoza va a pasar al olvido con la fusión. Ustedes con su política de laisser faire, laisser passer, lo único que plantean es dejar hacer, dejar pasar, se inhiben en los recortes en las políticas activas de empleo, se anulan con la defensa del carbón, se subordinan a las orientaciones del ministro de Economía y se caen así del guindo en materia de las fusiones que afectan a entidades financieras, que siempre radicaron en esta tierra y que tienen su histórico en esta tierra y no ya su futuro.
De Guindos se ha pronunciado respecto del proceso de fusión de Ibercaja, Banco Caja3 y Liberbank, indicando que se ha decidido de forma libre e independiente, el mejor síntoma, la mejor seña de que si conoce el proceso, es porque ha coparticipado y ha presionado en él. Es decir, ¿por qué no se ocupa De Guindos de la pésima gestión de su Gobierno en la crisis de Bankia? Es decir, en palabra de algunos representantes aragoneses, como el presidente de la CREA, «las fusiones forzadas no salen bien».
Esto provoca que su Gobierno, con sus políticas y sus valoraciones complacientes sobre procesos de fusión, avanza en dependencia política, económica y en un término clave: en deslocalización de Aragón, de su centralidad, y nuestro criterio sobre el proceso de fusión ha venido siendo planteado por el grupo parlamentario y hemos iniciado algunas iniciativas con los considerandos respecto de este asunto, porque considerábamos que había habido una excelente gestión de Ibercaja, que las medidas adoptadas por el Gobierno de España sobre saneamiento, en principio, afectaban a justos y a pecadores, y entre los justos se encontraba Ibercaja, que tiene que hacer ahora un aprovisionamiento y un provisionamiento de sus créditos sanos, siendo que tenía mayoritariamente créditos sanos. Es decir, entendíamos precisamente la función estratégica de Ibercaja de carácter también identificatorio y de grandes proyectos (nieve, logística, agroalimentación, turismo) y se creaban economías de escala rentables desde el punto de vista económico y desde el punto de vista de la radicación en el territorio. Por eso, aunque nos parece bien que un aragonés presida el nuevo grupo bancario, para nosotros no es suficiente, es una cuestión puntual, es una cuestión que será rotatoria, es una cuestión que será finita.
Nosotros planteábamos obviamente cuestiones estructurales, como que el domicilio social permaneciera en Aragón; lo otro son eufemismos, lo de las centrales operativas, que suponen desfocalización y deslocalización. Desde ese punto de vista, no queríamos la pérdida de entidad aragonesa, queríamos el domicilio social principal en Aragón, queríamos la reversión de su obra social, y nos preocupa también un adecuado planeamiento de las bajas que pudieran producirse, de las recolocaciones y también de las oficinas, que siempre han sido un identificatorio de Aragón, sobre todo cuando traspasabas las lindes y lo que significaba en los pequeños pueblos el hecho de las cajas y de su radicación en el territorio.
En definitiva, estamos por apoyar un sistema financiero aragonés y para ello gozarán con nuestro apoyo.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor García Madrigal.
Por el Grupo Parlamentario Popular, su portavoz señor Torres puede intervenir por tiempo de cinco minutos.
El señor diputado TORRES MILLERA: Gracias, señor presidente.
Señorías.
En nombre del Grupo Popular, para fijar nuestra posición en esta comparecencia.
Yo creo que incluso los que han presentado la iniciativa y algunos de los que han intervenido efectuando críticas —aliviadas, eso sí— al proceso de fusión, seguramente, hoy no la presentarían, pero tampoco se ha retirado, con lo cual hay que debatir sobre ella.
Yo, muy rápidamente, voy a repetir mensajes que ya se han dicho por el consejero, que ya los hemos dicho en diversas ocasiones y que seguimos manteniéndolos, porque, aparte de que son ciertos, están en pleno vigor, señorías.
En primer lugar, es indiscutible el fortalecimiento de la posición aragonesa en el sector financiero con esta fusión, eso es algo evidente y es algo que todo el que habla con el corazón en la mano, con los datos y no teniendo que mandar mensajes que son más eslóganes que mensajes objetivos, está completamente de acuerdo.
Pero, además, hay argumentos objetivos —valga la redundancia— que defienden esta posición: en primer lugar, la sede operativa del grupo resultante se establece en Zaragoza, en Aragón —alguno ha confundido Zaragoza con Aragón en su intervención—, el presidente de la nueva corporación del nuevo grupo bancario es un presidente aragonés y, por tanto, algunos de los temores que había se pueden disipar en ese hecho, y además es indiscutible la fortaleza en el componente accionarial del grupo bancario resultante: si sumamos exclusivamente Ibercaja y CAI, es prácticamente el 50%, el 49,5%; si sumamos Ibercaja con el Grupo Caja3, es el 54,5%. El resultado es el séptimo grupo bancario español en activos, más de ciento catorce mil millones de euros en activos. Y, además, hay otro dato, señorías, que avala esta tesis; consulten ustedes lo que se ha dicho en otras comunidades autónomas cuyas cajas estaban afectadas por la fusión para ver cómo consideran ellos que, seguramente, el sector autonómico más favorecido en esta fusión bancaria ha sido el aragonés.
Pero, además, el resultado es un grupo bancario, un banco, saneado. Aquí se ha dicho por algunos que es la mejor de las opciones; yo, además de decir eso, digo que es una buena opción, son opciones muy complementarias en el negocio bancario por su ubicación territorial, por su implantación territorial y por el modelo de negocio bancario que tiene el grupo resultante de la suma de los tres grupos que se fusionan. Además, me sorprende mucho, señorías —aquí, en la comparecencia anterior, se ha hablado de cómo se cambia el discurso cuando se está en el Gobierno o cuando se está en la oposición—, me sorprende mucho, señorías, como hay grupos que han estado valorando algo en lo que yo coincidía entonces y coincido ahora, la profesionalidad y la despolitización con las que se ha trabajo en las cajas aragonesas. Resulta que eso ha sido bueno antes y parece ser que no es bueno ahora porque ahora se habla de politización, etcétera. Mire, nosotros mantenemos un criterio que algunos han llamado «abstencionista» y no es abstencionista, es de respeto a la profesionalidad, de respeto al trabajo bien hecho, de dejar que cada uno se dedique a su negocio y sean los profesionales los que lleven a cabo su negocio. Lo manteníamos cuando estábamos en la oposición y lo mantenemos estando en el Gobierno. Vamos a seguir siendo prudentes, vamos a seguir siendo discretos y vamos a respetar la profesionalidad.
Lo que sí que es cierto, señorías, es que lo importante en asuntos que estamos debatiendo en la sesión de hoy y también en las fusiones bancarias es que tenemos que ser grandes en nuestros planteamientos, tenemos que mirar el bien del interés general, tenemos que trabajar todos juntos por la lucha por el interés general, y, en este caso, el interés general es aprobar, apoyar y trabajar desde la discreción y desde el respeto a la profesionalidad esta fusión porque es buena para el conjunto resultante y, por tanto, buena para los aragoneses.
Con respecto a temas concretos que se han planteado aquí, esta fusión tiene una escasísima, por no decir nula, repercusión impositiva porque, como todo el mundo sabe o todo el mundo debería de saber, el impuesto de sociedades es un impuesto que el 100% lo cobra el Estado; en segundo lugar, algo que ya se sabe o que se debería de saber al menos, que la obra social de las cajas hace años que está territorializada y que el reparto por comunidades autónomas se hace en función de la implantación territorial. Y la pregunta sobre las repercusiones laborales es muy sencilla: seguramente, las repercusiones laborales serían muchísimo mayores si no se hubiera hecho esta fusión. Y, desde luego, los problemas laborales no son de esta fusión, sino, en todo caso, de la anterior, pero, en cualquier caso, muchísimos más si no hubiera fusión.
Esa es la realidad y, por tanto, para el Grupo Popular, era un grupo de los más fuertes de España formado en su gran mayoría por aragoneses y con fortaleza aragonesa… [corte automático del sonido]
El señor PRESIDENTE: Señor Torres.
El señor diputado TORRES MILLERA: … es algo muy interesante para el conjunto de los aragoneses.
Muchas gracias. [Aplausos.]
El señor PRESIDENTE: Para terminar el debate, el consejero de Hacienda, el señor Saz, puede intervenir por tiempo de cinco minutos.
El señor consejero de Hacienda y Administración Pública (SAZ CASADO): Muchas gracias, señor presidente.
Yo creo que este es un tema muy sensible y que no debería practicarse la demagogia en él precisamente por eso, sino posturas realmente serias, y lo digo con convencimiento.
El proceso se ha hecho desde el Gobierno de Aragón con el interés máximo, el respeto máximo, la colaboración en todo lo que ha hecho falta, la vigilancia, por supuesto, y, desde luego, insisto, en el respeto máximo porque no es bueno, como hemos visto, un modelo de excesiva intervención política en las cajas y, por tanto, si de lo que debemos de presumir es de que tenemos unas cajas que no han estado politizadas y que no han estado sometidas a escándalos políticos, es precisamente porque el modelo no es el de que hay que estar interviniendo permanentemente y dirigirlas en sus actuaciones. Por lo tanto, yo creo que se ha hecho bien y ahora se ha visto.
Mire usted, hemos tenido en España cuarenta y siete cajas, ha habido un proceso de refundición, de reagrupamiento, de compras, de liquidaciones de cajas; de esas cuarenta y siete cajas que afectaban a diecisiete comunidades autónomas, al final solo cuatro comunidades autónomas han mantenido un sistema, es decir, con relevancia en cajas. Y Aragón es una de esas cuatro comunidades autónomas y, por tanto, eso lo tenemos que valorar, es una de las cuatro (Cataluña, País Vasco, Andalucía y Aragón). Luego eso es algo que se ha hecho bien, es un buen resultado y, además, bien conseguido.
Somos el segundo grupo de cajas, somos la séptima entidad bancaria, somos la quinta entidad en negocio fuera de balance (fondos, seguros…), ¿qué más podemos pedir? Yo creo que se ha hecho una buena operación. Y no solo eso, sino que se ha hecho por buenos gestores, porque en eso parece ser que estamos mayoritariamente de acuerdo, es decir, podemos presumir de buenos gestores en las cajas que hemos tenido en Aragón; Ibercaja, especialmente, es un caja que no ha acudido a ayudas, que no ha necesitado de lo que otras cajas sí que han necesitado y que, por tanto, yo creo que hay que aplaudir, y vamos a aprovecharnos de esa gestión. Creemos en esa forma de gestionar y, por tanto, respetamos su forma de gestionar.
En cuanto al empleo, es decir, en cuanto a la posibilidad de que pudiera afectar al empleo, no va a afectar más esta tercera fusión, esta incorporación del tercer grupo, de lo que pudieran haber afectado ya en su momento los acuerdos entre el grupo Ibercaja y el grupo CAI, Grupo3, porque no había concurrencia competitiva en el territorio, es decir, donde desarrollaban el negocio era en Extremadura, en Asturias, en Cantabria, por lo tanto, con nosotros, en nuestro territorio, prácticamente no hay concurrencia y no nos va a afectar.
Sí es cierto que la sede está en Madrid, pero es que, como ciertamente se ha dicho, es muy difícil que no hubiera estado fuera de Madrid, ¿por qué? Pues porque eran ocho cajas que afectaban a seis comunidades autónomas y el pacto es en Madrid, que es un lugar neutro, que es un centro corporativo, o sea, no va a haber un gran volumen de trabajadores, sino únicamente corporativo. Pero lo importante no es eso, yo sí creo que lo importante son los centros operativos porque, nuestro gran edificio de Ibercaja va a seguir estando lleno de trabajadores de Ibercaja trabajando para este nuevo grupo bancario y van a desarrollar desde ahí las operaciones, el negocio financiero, yo quiero ah el negocio financiero.
Tenemos el 49,80% de esta entidad, el presidente de esta entidad es el señor Amado Franco, presidente a su vez de Ibercaja, podemos sentirnos orgullosos. Resulta que, de los diez consejeros no independientes, hay cinco que corresponden a Ibercaja, la mitad, el 50%, y, además, hay un tercero que corresponde a Caja3. De los seis miembros de la comisión ejecutiva, hay tres que van a corresponder a Ibercaja, 50%, ¿qué más queremos? El presidente de la comisión de inversiones va a ser un señor de Ibercaja, ¿qué más queremos? Es decir, yo creo que la relevancia de la caja de Aragón en este nuevo grupo, como no podía ser de otra forma, como marca el porcentaje de participación, es algo digno de resaltar y, por lo tanto, yo creo que en ese sentido podemos estar orgullosos.
En resumen, es cierto que se ha hecho bien, podía en alguna forma haberse premiado más a aquellas cajas que lo han hecho bien…, bueno, trayecto tenemos, ya veremos. Hay que resaltar el liderazgo de Ibercaja, en ese sentido ha liderado de forma que permite que en Aragón seamos una de las cuatro comunidades autónomas que tenemos presencia de las antiguas cajas y, por lo tanto, mantenemos presencia territorial. Y yo creo que hay que creerse el compromiso manifestado públicamente de que ellos apuestan por el sostenimiento de las inversiones en el territorio y por la presencia en Aragón, y, por tanto, yo así también lo creo. Desde el Gobierno de Aragón colaboramos y colaboraremos y toda esta actuación la vamos a desarrollar, como la hemos desarrollado, con el máximo respeto a la autonomía de esas entidades.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señor consejero.