El señor vicepresidente segundo (PALAZÓN ESPAÑOL): Muchas gracias, señora consejera.
Pasamos a la interpelación número 32/02, relativa a la política y actuaciones del Gobierno de Aragón en el ámbito de reforma de menores, formulada al consejero de Salud, Consumo y Servicios Sociales por la diputada del Grupo Parlamentario Chunta Aragonesista señora Echeverría Gorospe.
Señora Echeverría, puede usted formular la exposición de la interpelación.
Interpelación núm. 32/02, relativa a la política y actuaciones del Gobierno de Aragón en el ámbito de reforma de menores.
La señora diputada ECHEVERRÍA GOROSPE: Gracias, señor presidente.
Señor consejero, en mayo del año 2000 le interpelé por las actuaciones que estaba llevando a cabo el Gobierno de Aragón en materia de menores en general porque habían pasado diez meses de la legislatura y ustedes en este tema no habían hecho absolutamente nada. Posteriormente encargaron una auditoría interna y otra externa para saber todo ese caos que existía en el tema e incluso renovaron al director gerente del IASS, del que dependía el tema de menores.
Estamos en este momento en un tris de que acabe la legislatura y la reforma de menores sigue tal y como la dejamos al comienzo de la legislatura. Y seguimos pensando que las intervenciones en este campo han sido insuficientes. Usted me está diciendo que no, usted no es consciente de ello pero sí que debe ser el Grupo Parlamentario Socialista, que ha presentado una iniciativa, una proposición no de ley pidiendo más recursos para cumplir la ley penal. Casualmente ha sido su grupo, le ha puesto en evidencia, y su partido, su mismo partido, está diciendo y esta pidiendo lo mismo. Con lo cual, algo está fallando, lo reconocemos todos, incluido su partido.
El fiscal de menores, en declaraciones hechas a medios de comunicación hace una semana, el fin de semana pasado, hablaba de la necesidad de más centros y también de más recursos humanos especializados para atender los problemas de la delincuencia en menores. Y la memoria de menores realizada por la policía judicial recogía que Zaragoza era la sexta ciudad del Estado con mayor índice de delincuencia juvenil; hablaba de que el pasado año registro cerca del 4% de los arrestos entre catorce y diecisiete años en todo el Estado.
Y la verdad es que yo creo que la situación carencial en la que continuamos no es consecuencia de esa ley penal, no es consecuencia de la ley 5/2000, porque en la reforma del Código penal ya se preveía que los menores de dieciocho años pudiesen estar en centros de internamiento y no en la cárcel, lo que ocurre es que no se ha llevado a la práctica. La ley penal 5/2000 prevé además una serie de medidas que se recogen explícitamente, entre otras la libertad vigilada, implica un aumento tanto en recursos de calidad como de cantidad, implica a diferentes centros para aplicarlos para que se ciñan a ese amplio abanico que trae la norma, e implica también potenciar las conciliaciones.
Posteriormente, después de la ley penal se aprueba en estas Cortes la Ley de la infancia y la adolescencia. O sea, que leyes, haberlas haylas muchísimas pero nada se ha hecho hasta el momento para que se apliquen esas leyes y para adecuar unas instituciones, y también unos servicios que en este momento pensamos que han quedado totalmente obsoletos.
A falta de ponerse en marcha todavía ese plan integral de la infancia y de la adolescencia, a falta de ponerse en marcha un nuevo modelo de intervención con la infancia, nosotros pensábamos que cuando compareció el nuevo director gerente iba a hablar de este tema, pero pasó de puntillas por el tema de menores y nada dijo sobre la reforma de menores. Ustedes se han limitado a hacer un organigrama, que me lo dio ayer, que le agradezco, pero ese organigrama no se ha llevado a la práctica.
Es un tema que nos ha preocupado siempre y también sabe que nuestra apuesta ha sido siempre la prevención: prevención desde la familia, prevención desde la escuela, prevención desde la calle para evitar situaciones de deterioro que al final conducen muchas veces a la marginación y también a la delincuencia.
Sabemos que la reforma es la última fase, es la última fase del proceso de deterioro del menor tras haber fallado todos los sistemas previos. Sin embargo, pensamos que es urgente esa atención a esos menores internados. Y en este momento el único recurso que existe en Aragón de este tipo es el centro de internamiento San Jorge, que está destinado a la ejecución de esas medidas de internamiento.
La gestión se externaliza –así lo llaman ustedes– y se concede a diferentes asociaciones. En marzo del año 2000 se rescinde el convenio que existía con la Asociación Educare, se rescinde como se rescinde, y lo normal es que un convenio se pueda rescindir cuando se quiera pero no tuvieron en cuenta que en este caso afectaba a menores y no a sacos de patatas, a menores afectaba en condiciones especiales, y ustedes tuvieron precipitación. Desmantelaron el servicio de protección del Gobierno de Aragón y mandaron a los educadores al centro de San Jorge. Esto pasa en marzo, cuando se rescinde el contrato con Educare.
En diciembre del año 2000 se adjudica la gestión educativa a través de un concurso a la empresa Diagrama Intervención Psicosocial, que contrata a trabajadores que –se ha visto, tenías la página de Internet– no tenían la titulación adecuada, daba igual, muchos de ellos sin experiencia, también daba igual, y se les exigía el carné de conducir y que hubiesen tenido algún contacto con chavales. Durante este periodo, además, Diagrama recibe varias denuncias en otras comunidades autónomas por problemas de malos tratos.
En junio del año 2001 usted ya rescinde el contrato con Diagrama y se adjudica la gestión a Arquitempo, Sociedad Limitada. Y, por cierto, en este tema tanto la Ley 5/2000 como la Ley de la infancia y la dolescencia otorgan a la Administración autonómica esa posibilidad de conveniar, de hacer convenios de colaboración con entidades públicas locales o también privadas sin ánimo de lucro. Y yo le pregunto si esa Arquitempo es una sociedad privada sin ánimo de lucro o es una sociedad limitada con ánimo de lucro, me gustaría que me contestase a la pregunta.
Además de estas tres entidades que han pasado en poquísimo tiempo por el San Jorge, con lo que supone de trastorno tanto funcional como administrativo, paralelamente a este cambio se ha producido también un constante trasiego de educadores, que son responsables directos de los procesos educativos de los menores. La verdad es que la importancia del educador es esencial para conseguir esa estabilidad que el menor necesita para reinsertarse, y para eso es necesario un personal cualificado, un personal que se mantenga durante tiempo y no al albur de lo que ocurra en cada momento dependiendo de las asociaciones con las que usted pueda conveniar.
Desde noviembre de 2000 hasta julio de 2001 han pasado por el San Jorge, aproximadamente, cien educadores diferentes, cuando la plantilla, según el pliego de condiciones, se sitúa entre treinta y uno y cuarenta y dos educadores. Con la nueva gestión de Arquitempo, en julio de 2001 desaparecen aproximadamente el 50% de esos educadores de la plantilla anterior. Desde el 28 de diciembre de 2001 hasta el 31 de marzo de 2002 causan baja el 35% de los educadores. En este momento el 90% de la plantilla está buscando otro trabajo. Hemos calculado la media de duración de los educadores en el centro y está en torno a los seis meses, que es, señor consejero, menos de un curso escolar, seis meses, que es lo que permanecen de media.
Dicho esto, yo le recuerdo, consejero, que el objetivo de un centro de internamiento es proporcionar condiciones adecuadas para que estos menores tengan un desarrollo psicológico normal, y eso es obligación del Gobierno de Aragón. El Gobierno de Aragón debería tener como objetivo el interés del menor, el interés general del menor, y actuar en este sentido significa proporcionar estabilidad, estabilidad que todavía no se ha conseguido proporcionar en el centro de reforma San Jorge. Estas circunstancias y que el menor carezca de referentes que le aporten seguridad, que le aporten afectividad, originan muchísimas veces actitudes de desobediencia, desequilibrios emocionales y también problemas de adaptación al medio de esos chavales, y, lejos de conseguirse actitudes favorables positivas para que se inserten en la sociedad, se consigue lo contrario de lo que se pretende. En los dos últimos años se han sucedido destrozos materiales, fugas y también agresiones a educadores y motines como nunca habían ocurrido.
Me gustaría saber qué es lo que tiene que decir el Gobierno de Aragón, conocer su opinión acerca de este constante trasiego de empresas gestoras y de educadores, que esto redunda y repercute de una forma negativa en los menores. ¿A usted le parece normal? Estas tres entidades (Educare, Diagrama, Arquitempo) han pasado en poquísimo tiempo, han pasado en dos años por el San Jorge y paralelamente ha habido cambios constantes en estos educadores.
Por otro lado, usted decía el año pasado que tenía el centro de San Jorge un proyecto socioeducativo que estaba basado en la resocialización, la normalización, la individualización y también la compensación, y por último hablaba de flexibilidad. Debe ser que a usted le cuadra todo por aquello de que termina en «ón», pero, bueno, a mí no me cuadra. En lo único que estoy de acuerdo es en lo de la flexibilidad si entendemos como flexibilidad lo cambiante, que no es así, es decir, por lo que cambian de asociaciones y de educadores.
También decía que se llevaban a cabo proyectos de capacitación laboral, y me gustaría que me enumerase esos proyectos de capacitación laboral que se están llevando en este momento en el San Jorge. Me gustaría también que me hablase del proyecto educativo que tiene Arquitempo porque cuando se convenia una gestión también se debería conveniar ese proyecto educativo.
También quiero saber qué proyectos de inserción laboral se están realizando con los mayores de dieciséis años que están permaneciendo en este momento en régimen cerrado. Yo creo que existe una doble inestabilidad, una inestabilidad tanto en el proyecto educativo como también de referentes de confianza, que son los educadores, que son estas personas que están con el menor. Y el objetivo de un centro no es el castigo en sí mismo, sino que es la educación, es la reinserción tanto familiar como social, y esto se consigue con programas que sean prioritariamente educativos.
Habrá que tener en cuenta, además,...
El señor vicepresidente segundo (PALAZÓN ESPAÑOL): Señora Echeverría, por favor, vaya concluyendo.
La señora diputada ECHEVERRÍA GOROSPE: ... –acabo, presidente, acabo enseguida– que estas actuaciones se están llevando a cabo además en un contexto especial, en un contexto de ejecución penal, y la respuesta a la infracción debe ayudar a esos chavales a sentirse responsables de sus propios actos y de las consecuencias que esos actos tienen sobre los demás. Y esto no se consigue encerrándolos ni olvidándolos hasta nueva orden, sino con formación y también con coordinación con otras entidades de iniciativa social, que en este momento tampoco se está haciendo.
Nada más.
El señor vicepresidente segundo (PALAZÓN ESPAÑOL): Muchas gracias, señora Echeverría.
Señor consejero, puede usted responder.
El señor consejero de Salud, Consumo y Servicios Sociales (LARRAZ VILETA): Gracias, presidente. Señorías.
Me pregunta qué directrices y actuaciones está desarrollando el Gobierno de Aragón en el ámbito de la reforma de menores. Los menores y los jóvenes que acuden o que se derivan a los servicios de protección y reforma de la Comunidad Autónoma de Aragón presentan a los profesionales que les atienden situaciones que son difíciles, complejas tanto en la comprensión del problema como en la selección que deben hacer de las actuaciones y de la asistencia que es la más pertinente para ellos. Esta complejidad, que es intrínseca a los problemas o a las situaciones que se atienden, puede verse agravada por no disponer de un método de asistencia o de una guía profesional que establezca la tipología de los menores que acuden, o los criterios de actuación, además de las intervenciones que se deben realizar o desarrollar.
Hago esta introducción en consonancia con mi intervención, a la que usted se ha referido, de meses anteriores por el hecho de que hay dos formas de abordar los cambios en problemas y métodos complejos: una es mejorar la imagen, que es un propósito fácil de conseguir mediante actuaciones que solo afecten a la estructura de la organización o a la creación de infraestructuras, y otra que modifica la base y el núcleo de las organizaciones y que tiene que ver con adecuar el proceso profesional para conseguir una mayor efectividad, unos mejores resultados y cotas más altas en la calidad de los servicios que se vienen prestando, en este caso en menores.
Ahora bien, en mi comparecencia anterior dedicada a la política de menores en la comunidad autónoma destaqué como debilidades también en este ámbito el que se necesitaba una nueva definición de las políticas para hacer congruente todo el marco normativo con la planificación y con la cartera de servicios que tiene cada uno de los dispositivos del Gobierno de Aragón. También hablé de la necesidad de desarrollar una adecuada reingeniería de procesos porque había una falta de itinerario y con una visión global de lo que estábamos haciendo. También hablé de deficientes sistemas de información, de disfuncionalidad en la detección y en la atención incluso de algunas áreas y problemas también en la actuación en los centros.
Esta situación, la que puse de manifiesto en aquel momento, exigía un trabajo serio en relación con los profesionales del sector y con otros agentes, como pueden ser la familia, la escuela, el ayuntamiento o colectivos presentes en el contexto social del menor, que permitiera responder a estas debilidades que nosotros estábamos expresando.
De ahí que los cambios que se están produciendo, que se están produciendo, que se están produciendo –y me viene muy bien que me haga usted esta interpelación para que no solamente el Grupo Socialista, sino todos los grupos conozcan la reforma a la que está siendo sometida el área de menores–, estos cambios, como digo, que se están produciendo en los servicios de protección y reforma de menores opten claramente por la colaboración con los profesionales y la adecuación de sus actuaciones y métodos de trabajo a las situaciones y a los problemas que presentan los menores, frente a otras intervenciones más –digamos– vistosas pero de menos calado y sobre todo de menor incidencia en la mejora de la detección, la atención e itinerario socioeducativo de los menores en protección y en reforma.
Esta apuesta, como digo, responde a principios que han informado nuestro trabajo en este ámbito desde el inicio, el considerar a los niños y a las niñas, a los adolescentes, y adultos a veces por la nueva ley penal del menor, como protagonistas de los proyectos a los que debe facilitarse la participación en las intervenciones y en las decisiones que se hagan.
Hay que tener en cuenta que las diferentes caras de una misma realidad (el barrio, como decía, la calle, la familia, la escuela o el tiempo libre) deben confluir e incidir de forma complementaria e integral y no fragmentaria en una misma persona, que es a la que va dirigida el programa; que las intervenciones y las actuaciones educativas preventivas deben poner la mirada en las posibilidades más que en las carencias, y que la relación educativa es un proceso en el que los resultados no son inmediatos, sino que son siempre a medio y largo plazo. Es en este marco en el que se contempla la organización y gestión de los servicios especializados de protección y reforma de la Diputación General de Aragón, y que responden a cuatro líneas estratégicas fundamentales.
La primera línea estratégica ha sido priorizar las actuaciones de los profesionales. En este sentido, la primera actuación con participación de los profesionales y de las distintas entidades ha consistido en definir de forma completa la guía profesional para la atención a los menores en situación de desprotección o con comportamientos asociales o delictivos. La guía profesional recoge por primera vez de forma clara y práctica los programas de actuación, estableciendo de forma concreta los criterios de inclusión, las normas de actuación, las altas e indicadores de la evaluación de varios programas: el primer programa es el programa de preservación familiar, que no me voy a extender en explicarlo por no aburrir a su señoría, porque yo creo que lo conoce; el segundo, el de separación provisional y reunificación familiar; el tercero, que es el programa de separación definitiva; y el cuarto, que es el programa de emancipación.
Además de la guía profesional, se ha consensuado la tipología de casos, que significa definir la población a la que van dirigidos los servicios y jerarquizarla según el tipo y la gravedad para definir cuál es el proveedor más adecuado y las actuaciones que hay que realizar, una tipología que, respetando el ejercicio profesional de años anteriores, nos permita comparar coberturas y resultados con otras comunidades autónomas y otros países europeos. Además, y debido a la gran dificultad para definir la frontera entre el maltrato y los factores de riesgo, se ha realizado una relación longitudinal entre factores de riesgo subsidiarios de actuaciones preventivas, maltrato y nivel de gravedad. Esta decisión permite valorar el proceso desde su comienzo y hasta su resolución e introduce un lenguaje común y objetivo entre todos los agentes y todas las instituciones responsables.
Y, por último, en consonancia con los criterios establecidos en la guía profesional se ha dotado a los servicios de menores de una organización que facilite la continuidad de los seguimientos y asegure la calidad y la máxima especialización de los profesionales. La organización actual en funcionamiento, de la que le estoy hablando, ya lleva seis meses funcionando y abarca la gestión longitudinal del caso, con el nombramiento de coordinadores de caso y la gestión de la complejidad de la calidad de los servicios, con equipo de coordinadores de caso y equipos técnicos.
La segunda línea en la que hemos trabajado ha sido en favorecer las actuaciones preventivas con el objetivo, que es lo que al parecer más le interesa a su señoría, de potenciar las actuaciones de promoción y prevención en cualquiera que sea el nivel y el tipo de acción profesional. Se ha intentado mejorar la correcta recepción de casos y la unificación de criterios con otros servicios y departamentos, y para ello se ha elaborado la Guía de detección de maltrato infantil, se han establecido sistemas unificados de remisión de menores y de relación de los distintos agentes socioeducativos con el servicio de menores del Gobierno de Aragón, y se ha trabajado también con el educadores de las entidades agrupadas en la Coordinadora ciudadana de la infancia de cara a mejorar la detección precoz de situaciones de riesgo para los menores y el diagnóstico de estos. Se han mantenido reuniones y se han consensuado criterios para la atención a menores en situación de desprotección con el Departamento de Educación y Ciencia, con los servicios sociales del Ayuntamiento de Zaragoza, con los equipos de orientación educativa de Zaragoza, Huesca y Teruel y con la unidad de salud escolar del Servicio Aragonés de Salud.
Y respecto a la tercera línea estratégica (descentralizar los servicios y actuaciones), especial dedicación y esfuerzo se ha dedicado a la coordinación con los profesionales de los servicios sociales de base, y se han hecho cursos de formación con cuarenta y cinco servicios sociales de base de toda la comunidad autónoma. Además, en este mismo sentido, hemos ampliado el número de educadores en una, dos, tres, cuatro, cinco comarcas, que son aquellas en las que más incidencia había, digo que se ha reforzado el número de educadores en estos cinco servicios, y también se han priorizado las actuaciones preventivas en relación con las entidades sin ánimo de lucro, y caben destacar en este apartado los convenios que hemos establecido con entidades asociadas a la Coordinadora ciudadana de la infancia y con Adunare.
Y respecto a la cuarta línea estratégica, el área de reforma, que para su señoría parece ser lo más crítico, la parte más complicada, en el área de reforma, respecto al nuevo centro de reforma, que se ubicará en Juslibol una vez solucionados los problemas de urbanismo relacionados con la parcela... Sabe usted que hemos estado parados con este aspecto por la ubicación de la Expo y las diferentes posibilidades que usted conoce perfectamente, se ha solicitado la licencia de obras al Ayuntamiento de Zaragoza desde hace –yo creo– más de un mes, estamos pendientes de ella, y se está tramitando ya la publicación de concurso para adjudicar la construcción del centro.
En el actual centro de San Jorge se han realizado actuaciones para adecuarse, naturalmente, a la nueva demanda, nueva demanda que ha necesitado la creación de dos nuevas secciones: la de observación, con capacidad para ocho menores, y otra para el cerrado de pequeños menores de dieciséis años con ocho plazas, de pequeños de edad, de tamaño no es así.
El 11 de marzo de 2002 se creó el equipo de atención educativa a menores de catorce años. Está integrado por dos educadores que al día de la fecha han atendido a cincuenta y cuatro menores de catorce años, que han cometido hechos delictivos o faltas, y que con alguna frecuencia lo vemos incluso en los medios de comunicación. A finales de noviembre de 2001 se incrementó el personal del equipo educativo de medio abierto con cuatro educadores más, siendo en la actualidad de once educadores y un auxiliar administrativo la plantilla total del equipo, y de enero a mayo de 2002 este equipo educativo de medio abierto ha atendido a cuatrocientos nueve menores, que han cometido hechos delictivos o faltas.
Como consecuencia de estas y otras actuaciones, el presupuesto dedicado a menores durante el año 2002 es de más de mil ochocientos millones de pesetas, lo que supone un incremento de más del 50% respecto al ejercicio del año noventa y ocho. El que desde el Grupo Socialista se haya propuesto una iniciativa para que el Gobierno central o se haya indicado que el Gobierno central aporte más dinero para lo que están costando los menores en esta comunidad no responde a que no se haya gastado el dinero, sino que responde a que se ha gastado el dinero y se va a gastar en el centro nuevo que vamos a hacer y queremos que el Gobierno central lo reponga para que la nueva ley penal del menor no se convierta en una transferencia encubierta a la comunidad autónoma y que no se aporte dinero.
Nada más. Gracias.
Gracias, presidente.
El señor vicepresidente segundo (PALAZÓN ESPAÑOL): Muchas gracias, señor consejero.
Señora Echeverría, su turno de réplica.
La señora diputada ECHEVERRÍA GOROSPE: Gracias, señor presidente.
Siempre me sorprende, consejero, una capacidad de sorpresa... En fin, ¿de dónde vienes? Manzanas traigo. ¿A cuánto? Coloradas. Le he preguntado una cosa y me ha contestado otra cosa que nadie tiene que ver. Yo le preguntaba por la política de reforma de menores y usted me habla de eso maravilloso que tienen y que dentro de no sé cuanto van a desarrollar un organigrama en el que hablan de mejorar la imagen; que San Jorge sí tiene que mejorar la imagen, la forma y también el fondo. Yo le estaba hablando de la política de reforma y para esta política en este momento solamente hay un centro en Aragón, que es el centro de San Jorge.
También le he preguntado una serie de cosas a las que no me ha contestado: le he preguntado si es Arquitempo una sociedad privada sin ánimo de lucro o es una sociedad limitada con ánimo de lucro.
Le he preguntado qué tiene que decir, qué le parece que en dos años hayan pasado tres entidades gestoras y también montones de educadores, que esto está repercutiendo negativamente en los menores. ¿Le parece a usted normal, consejero? También le he preguntado eso, a lo que no me ha respondido.
También le he dicho que me enumerase esos programas laborales, esos programas de capacitación laboral que tienen, que están realizando, del proyecto educativo de Arquitempo, si es que lo tiene, de esos proyectos de inserción laboral con mayores de dieciséis años en régimen cerrado. Le estaba preguntando por todo eso.
También le he preguntado qué piensa usted de los educadores que van, que vienen, por qué será. Mire usted, hay una resolución, la 45.113, de 14 de diciembre de 1990, que habla lo siguiente en cuanto al personal de los centros de reforma, dice: «La Administración deberá seleccionar y contratar cuidadosamente al personal de toda clase y categorías por cuanto la buena marcha de los centros de detención depende de su integridad, actitud humanitaria, capacidad y competencia profesional». Dice: «Para alcanzar estos objetivos deberán destinarse funcionarios profesionales con una remuneración suficiente para atraer y retener a hombres y mujeres capaces. El personal deberá recibir formación que le permita desempeñar eficazmente sus funciones». Eso es lo que dice, y por eso le preguntaba por qué cree que estos educadores y esta gente van y vienen, esos vaivenes de educadores, de personal.
No es nuestra intención para nada juzgar la política personal que en este momento tiene Arquitempo pero sí tenemos que hablar de ella por las consecuencias negativas que esta política tiene sobre los menores, por una política de precariedad laboral, por una política de contratos basura, que es la de Arquitempo y la de otras entidades gestoras que también han pasado y que se dedican a estos servicios que dependen de menores, servicios que además requieren unas condiciones materiales y humanas que sean suficientes para que se pueda cumplir ese objetivo de reinsertar.
Se hará una idea de por qué desde noviembre de 2000 hasta junio de 2001 pasaron aproximadamente cien educadores diferentes, por qué en julio de 2001 desaparece el 50% de la plantilla, por qué desde diciembre hasta finales de marzo de este año causan baja creo que el 35% de los educadores y por qué el 90% de ese personal en este momento están buscando otro trabajo. Están cobrando en este momento los educadores noventa y cinco mil pesetas de salario base por cuarenta horas; no es un trabajo normal, es un trabajo que exige esfuerzo físico y mental. Cuarenta horas de trabajo directo, y digo directo porque tampoco disponen de tiempo de trabajo interno para programar y evaluar las intervenciones educativas que tienen que hacer. Las condiciones salariales son precarias y se ven subsanadas porque la media de edad está de veinticuatro a veinticinco años, estamos hablando de gente joven y eso significa que es el primer trabajo, el primer empleo, acaban de terminar la carrera.
Además, curiosamente, el presupuesto de licitación del centro aumentó en más de cincuenta y ocho millones de pesetas pero la empresa adjudicataria, en este caso Arquitempo, lo rebajó en veintinueve millones, y esos veintinueve millones, evidentemente, no los va a perder la empresa, sino que los va a reducir ¿de dónde? Pues de los salarios y de la Seguridad Social. Los educadores cobran ese salario de noventa y cinco mil pesetas, el neto son ciento sesenta, la diferencia está en los pluses que no cotizan a la Seguridad Social. El turno de noche es de nueve horas, cuando lo normal es ocho. Los contratos son en prácticas. Desde enero de 2002, con la puesta en marcha de ese nuevo pliego de condiciones, existe una disminución del personal, porque antes el número de educadores estaba en función de los menores internos y ahora el número de educadores es fijo. Las bajas tampoco se cubren. Esto sí que influye, ya sé que usted no les paga, que les paga Arquitempo, pero sí que se debería preocupar de las condiciones de estos trabajadores porque sí que influyen en los menores.
Ha supuesto que no se haya consolidado un equipo educativo, una intervención educativa que sea real, porque esta gente está desmotivada por largas jornadas de trabajo, por los bajos salarios, por la falta de personal, por esas bajas que no se cubren y que suponen la interrupción de esos procesos educativos.
En el San Jorge tampoco existen en este momento talleres productivos ni de inserción para mayores de dieciséis años, y yo creo que la ociosidad es lo peor que puede soportar esta gente que está encerrada, y algunos para mucho tiempo. En el cerrado con gente mayor de dieciséis años no entran los maestros, aparte de que no hay maestros suficientes, y los maestros, además, han solicitado apoyo que aún están esperando recibir; creo que hablaron con el director gerente del IASS diciendo que había poco personal.
No existe un seguimiento posterior de estos chavales cuando abandonan el centro, no se realiza ningún programa para insertarse. Nosotros pensamos que el personal que trabaja debería estar especializado y formado, y hasta el momento la formación recibida ha sido la charla de un psicólogo y de un abogado y, además, un curso que hicieron en Santiago de Compostela organizado por el Ministerio de Asuntos Sociales, creo que acudieron tres educadores. Hace falta formación, hace falta también experiencia y hace falta estabilidad laboral y estabilidad del personal. Puede que ustedes –no sé que harán, esperemos que no– sigan externalizando la gestión. Arquitempo u otra gestora van a seguir ahí sin crear problemas al Gobierno de Aragón, sin crear demasiados problemas, ganando beneficios porque para eso son empresa, pero en el San Jorge se van a seguir sucediendo bajas y vaivenes y cambios constantes de educadores porque no se permite un trabajo serio y continuado en sus condiciones con los menores.
Sigan ustedes haciendo la vista gorda ante estos hechos, diciendo que están en todo, que han hecho un organigrama muy bonito, que van a cambiar la imagen, porque la imagen es lo principal, sigan haciendo eso, sigan manteniendo a los menores en un espacio cerrado mientras dura su condena, y yo creo que estos chavales cuando salgan seguirán siendo carne de cañón y, desde luego, ustedes tendrán su parte de responsabilidad.
Nada más y muchas gracias.
El señor vicepresidente segundo (PALAZÓN ESPAÑOL): Muchas gracias, señora Echeverría.
Señor consejero, su turno de dúplica.
El señor consejero de Salud, Consumo y Servicios Sociales (LARRAZ VILETA): Señor presidente.
Gracias, señoría.
Los problemas se pueden ver siempre desde muchos puntos de vista y a mí no me cabe la menor duda de que su señoría los ve desde el punto de vista más oscuro y más negro. Yo le puede decir que la atención que se da en el centro San Jorge quizá no sea la más perfecta del mundo pero sí que en estos dos últimos años ha mejorado con mucho. Y en el centro existe programa educativo y la empresa que lo lleva es similar a otras empresas que han llevado este centro. Y este centro no está exclusivamente en manos de la empresa que está trabajando allí, sino que, además, el propio Gobierno de Aragón tiene subdirector y subdirector del centro, que son los que lo dirigen. Y naturalmente que existe programa educativo, que hay programas de inserción. Eso de que no hay ningún programa de inserción no es cierto, podrá usted decir que no existen en el número adecuado, que faltará algún tipo de programa, pero desde luego que sí que existe.
Y hay que tener en cuenta también la infraestructura del centro. El centro es obsoleto, como ya he puesto de manifiesto en muchas ocasiones, es necesario hacer un centro nuevo, espero que nos dejen entre todos hacerlo porque llevamos un retraso desde luego no imputable al departamento, y nos han tenido entretenidos más de año y medio por diversas cuestiones no achacables a nadie en concreto pero sí a situaciones que son ajenas por supuesto al departamento. Nos gustaría tener ya iniciado el centro, yo espero que en poco tiempo empiecen las obras y allí sí que tengamos infraestructuras para trabajar programas mejores que los que ahora tenemos.
Fugas hemos tenido siempre, siempre, no hay más fugas en la actualidad o más problemas que los que había antiguamente. Y hay fugas ¿por qué? Pues porque el área de semiabierto, que es donde se producen fundamentalmente, no está hecha para que no se puedan fugar, aquello no es una cárcel, las cárceles son otra cosa, y allí, si alguien tiene intenciones de escaparse, termina saltando la valla porque, como digo, no es una cárcel, es un centro de reorientación, educativo y que no tiene nada que ver con ningún modelo carcelario.
¿Que cambian mucho los educadores? Pues sí, ese es el trabajo más duro que hay para los educadores, y, naturalmente, la mayoría de ellos quieren estar un tiempo allí y marcharse a realizar otras cosas.
Y me habla usted de lo que pagan y de las horas que tienen que hacer. Mire usted, yo no soy un sindicato, los sindicatos son los que pactan con la patronal los convenios y son los que ponen el dinero que se paga y las horas. Si no se cumplen es otra cuestión, sí que tendría yo que estar al cuidado de que se cumpla, en eso sí que no habría ningún inconveniente.
Y sí le debo decir que hasta llegar al proceso de reforma estamos trabajando en muchas medidas previas como a ustedes les gusta, la prevención y la promoción, como a nosotros también nos gusta y nos encanta. Y sí que le debo decir que se está trabajando muy profundamente en menores, muy profundamente en menores.
Para empezar, todos los trabajos y todos los programas que estamos haciendo en asuntos previos llegarán al final a permeabilizar toda el área de reforma, que es la más complicada de todas. Sabe usted perfectamente que estamos trabajando en la desinstitucionalización de los menores. Cuando nosotros recibimos estas competencias, al principio de la legislatura, el jardín de infancia tenía un número medio de treinta y cinco niños, en la actualidad hay trece, estamos reduciendo drásticamente los niños que tenemos, los menores que tenemos en nuestros centros, y, sin embargo, los acogimientos se han triplicado. Este año, por ejemplo, en problemas tan complicados, hemos hecho siete acogimientos con niños con graves problemas de salud, cosa que es bastante dificultosa, diecisiete acogimientos de dos hermanos, o uno de tres, o un acogimiento de cuatro hermanos, o acogimientos de madre e hijo, cosas bastante complicadas en otra época y que nos solventan que todos estos chicos que están en centros terminen en una situación complicada como suele ser la de reforma. Mire usted, todos los programas de reforma de todos los países del mundo no tienen nunca los resultados que tienen otros programas anteriores que son más sencillos y más fáciles. Cuando se llega a reforma las cosas son bastante complicadas de trato, como usted conoce perfectamente.
Estamos implantando sistemas de calidad nuevos y esperamos sobre todo que cuando tengamos el nuevo centro podamos desarrollar algunos programas que en el centro actual nos resulta bastante difícil poder hacer.
Nada más y muchas gracias.